Episodios Nacionales - Mendizábal.pdf - Ataun
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y aproveche la ocasión... La ocasión llegó, y hace tres meses fue adquirida, por cuenta mía, la famosa prenda por la mitad de lo que le costó al adorador de Mademoiselle Mars... -De lo que usted nos ha contado, por cierto muy bien -dijo Calpena, que había oído con deleite-, se saca la consecuencia de que hay objetos inanimados, cuya historia es más interesante que la de muchas personas. -Eso, admitiendo que sean verdad todas esas traídas y llevadas del abanico -observó la Zahón, escéptica, desdeñosa, pues no le gustaba que su colega supiese más que ella en tales materias-. No se fíe, D. Fernando, que este Maturana le compone su historia a cada pieza que vende, forma especial suya de hacer el artículo. -En esto -dijo Maturana riendo-, me ganaba su marido de usted, Jacoba. Recuerdo que tuvo una pareja de diamantes, que había sido del Tamerlán, después de Antonio Pérez, y últi-
mamente de Godoy... Ya se sabe: todas las joyas de precio que han salido a la venta del año 8 acá, se le han colgado al pobre D. Manuel. -Pues ese abanico -afirmó la Zahón displicente y maligna, entornando los ojos- no se vende en España, tal como están hoy las cosas, aunque lo adornen con más historias que tiene el Cid. -Este abanico -replicó Maturana, acariciando la joya-, lo vendo yo en España, y al precio que me dé la gana, señora Doña Jacoba, aunque usted no quiera... ¿Cree usted que voy a ofrecérselo a esos pelagatos del Estatuto, o a las señoras de los patriotas, que apenas tienen para poner un cocido? -Pues a la Grandeza la verá usted completamente acoquinada con estas revoluciones y estas guerras malditas. ¿Dinero? Poco hay, o es que no quieren gastarlo. ¿Gusto? Ya sabe usted que aquí no privan más que las apariencias
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muy bien -dijo Calpena, que había oído con<br />
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-Eso, admitiendo que sean verdad todas esas<br />
traídas y llevadas del abanico -observó la<br />
Zahón, escéptica, desdeñosa, pues no le gustaba<br />
que su colega supiese más que ella en tales<br />
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-En esto -dijo Maturana riendo-, me ganaba<br />
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