Sabías qué...?

¿Sabías qué...?
Textos de motivación para el Concurso sobre la vida de José Engling
Juventud Masculina Ciudad del Este, Paraguay
Fragmentos de textos sobre la vida de José Engling elaborados por la Juventud
Masculina y transmitidos a la Familia de Schoenstatt vía email, durante noviembre de
2003, como parte de las actividades de preparación e la bendición de la Pira de José
Engling y del Concurso sobre su vida a ser realizados el próximo 06.12.03.
1 ¿Sabías qué...?
José Engling estando en la guerra, a pesar de lo cansador que resultaba la vida de soldado, mantenía
un horario espiritual con 17 puntos, hacía su examen de conciencia por escrito, mandaba su informe
al director espiritual (Padre Kentenich) una vez por semana y siempre se ofrecía de voluntario en las
misiones de alto riesgo que nadie quería ir.
Sabías que el Padre Kentenich lo definió a él como "El acta de fundación vivida"
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Participá del concurso de la vida de José Engling
2 ¿Sabías qué...?
Las hojas de su examen particular y horario espiritual todavía son conservadas. Muchas
tienen las marcas de sus dedos sucios de tierra y gotas de cera, mostrando las difíciles situaciones en
las que tenía que escribir: en las trincheras, de noche a la luz de una vela. En el proceso de su
beatificación, los jueces quedaron admirados al ver aquellos escritos. Algunos de ellos habían sido
soldados y, por eso mismo, creían prácticamente imposible que alguien en el “front” fuese capaz de
llevar una vida interior tan intensa, con horario espiritual y examen particular controlados
diariamente y con rendición de cuentas quincenal al confesor. Este era un programa para ser
cumplido en la quietud de un convento.
También algunos sacerdotes, que siendo jóvenes, combatieron en Verdum, confesaron:
”Nosotros a lo máximo hacíamos la señal de la cruz, tal era el cansancio y la excitación de la
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guerra”. Y concl uían: ”Sin gracias especiales de oración no se puede explicar la actitud de José
Engling”.
2 003 AÑO DE LA
C ONQUISTA DE LA PIRA DE
E NGLING
Juventud M asculina
3. ¿Sabías qué...?
Después de años de lucha en la guerra, José Engling cae mortalmente herido por una
granada el 4 de octubre de 1918 en Cambrai, Francia exactamente un día antes de que Alemania
pidiera el armisticio y la guerra terminara. Tenía 20 años de edad.
En el lugar de su muerte se hizo un monumento a él, donde se puede ver un altar con una
gran cruz entre otras cosas; en el centro del monumento a José Engling se puso: “un globo posado
sobre una gran patena de acero inoxidable, donde se levantan llamas, símbolo del holocausto de
José Engling, que aquí se consumió, y de la decisión de los peregrinos de seguir su ejemplo”. O
sea, la Pira de José Engling.
4. ¿Sabías qué...?
Cuales de estas características definen mejor físicamente a José Engling:
a) Problemas en pronunciar algunas letras difíciles, especialmente la R.
b) hombros encorvados
c) demasiado alto, tenía mas o menos 1,68 metros a los 14 años.
d) ninguna de las anteriores
e) todas las anteriores
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Respuesta correcta: e) todas son correctas
"Un principio de poliomielitis, contraído en su infancia, hacía que sus hombros aparecieran un poco
encorvados y caminaba algo inclinado; además, tenía algunas dificultades para hablar, ya que le
costaba pronunciar las letras difíciles del abecedario, especialmente la R. Pero esto no impidió que
creciera fuerte y robusto".
5. ¿Sabías qué...?
En cierto tiempo en la guerra José Engling fue asignado a varias tareas, una detrás de otra
(hacer guardia, cavar trincheras, guiar a una compañía, etc.); fueron tantos los trabajos que le
exigían que hacía tres noches que no dormía. Estaba realmente cansado y deseaba profundamente
que esa noche pudiese dormir.
Mientras estaba pensando en eso, llega una orden del comandante, determinando que se
hiciesen dos grupos, uno de 24 hombres, para transportar material de resistencia y otro de 16 para
cavar refugios. José fue incluido en el segundo. Se dio cuenta que esa noche no tendría mucho
tiempo para dormir. Pensó: ¿y si le pidiese que me dispense por esa noche? Ya no aguantaba más.
Ninguno de sus superiores le hubiera negado el pedido, porque lo conocían muy bien. Pero, en ese
caso, “otro tendría que sustituirme”.
El oficial marcó el lugar donde debían cavar y dijo: “el que termina puede retirarse”. El
trabajo era difícil porque sus materiales, además de escasos, no eran los adecuados para ese tipo de
trabajo; además el lugar tenía fama de ser muy peligroso.
El enemigo se dio cuenta de que había gente por esa zona y empezó a hacer funcionar sus
metralletas. Terminado el ataque enemigo, el trabajo continuó. Mientras iban terminando, iban
saliendo. José también terminó y se disponía a ir a descansar cuando vio que un camarada de edad
avanzada estaba recién empezando. A pesar del peligro y del enorme cansancio que sentía fue al
lado del camarada y empezó a cavar hasta que terminaron.
No es de extrañar que su ideal personal haya sido:
“Ser todo para todos y entera propiedad de María”
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6. ¿Sabías qué...?
frase.
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José Engling sella su Alianza de Amor el 11 de
abril de 1915.
En el rito de Alianza el Padre Kentenich explicó
en una conferencia, el sentido de la Congregación
(futuro Movimiento Apostólico de Schoenstatt) a la
Madre de Dios. En la oración que en esta Alianza se
rezaba habían dos frases que llamaban la atención:
“Hoy te elijo por mi Señora, Abogada y Madre mía;
protege ahora a tu siervo, tu protegido y tu hijo”. Esta
era la breve fórmula con la cual se cerró la Alianza de
Amor entre los Congregantes y la Madre de Dios.
Los candidatos rezaron la oración de
consagración, lo que produjo en los Congregantes una
profunda emoción. Entonces se acercaban a la bandera
de la Congregación y colocando sobre ella su mano
derecha, dijo cada uno: “Esta es la bandera que he
escogido, no la abandonaré jamás, lo prometo por
María”. Más de alguno pronunció estas palabras con el
corazón palpitante y la voz temblorosa. Otros, estaban
tan conmovidos, que apenas les brotaban las palabras
de sus gargantas, o casi no podían pronunciar bien la
Algunos de ellos sellaron con su propia sangre en el campo de batalla la promesa de lealtad,
entre ellos, José Engling, Hans Wormer y Max Brunner, a los que se les conoce como, cruces
negras.
P.E: después de muchos años de finalizada la guerra se hicieron expediciones en busca de los
cuerpos de los congregantes héroes. Los cuerpos de Brunner y Wormer fueron encontrados y
enterrados atrás del santuario original. El cuerpo de Engling nunca se encontró por lo que se puso
un memorial con la inscripción:”Guardamos vuestra herencia”, este memorial es la Piedra de
Engling (no confundir con Pira).
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Concurso sobre la vida de José Engling – 6 de diciembre
Juventud Masculina
Engling tu fuego, nuestra misión
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