Descargar - Nodo 50

pero me han hecho aislarme y volverme una persona algo
solitaria, extraña y un poco extravagante. Sin embargo, no pierdo
la esperanza de que algún día pueda sentirme uno más, pues más
difícil que vivir lejos de tu tierra es no poder participar de la
vida que pasa a gran velocidad ante ti.
Y finalmente unas palabras para navegantes. Soy una
persona pacífica, que ha optado por el vegetarianismo 5 y la
convivencia. No me gustan las revoluciones. No me gusta
demasiado cómo se están desarrollando los acontecimientos en el
mundo, en España o aquí en Levante y, aunque soy optimista y
tengo esperanzas, no creo en cataclismos que pongan patas
arriba el mundo existente. O al menos no debido a una
sublevación, una toma del poder o algo parecido. Que no me
busquen los apóstoles de la Revolución. Por encima de las ideas
sitúo a las personas y me importa más tener amigos sinceros,
sean de derechas, de izquierdas, del centro, de arriba, de abajo
o lo que les de la gana, que tener que odiar a los que no son o
piensan como yo.
A pesar de que me considero anarquista no creo que haya
que hacer una especie de limpieza racial y de la noche a la mañana
masacrar terratenientes, iglesias, ricos y otra fauna capitalista.
Prefiero crecer como persona y tratar de comprender qué es lo
que mueve a la gente a actuar, que les motiva a seguir vivas. Creo
en la evolución y en el cambio, en la educación interior y exterior,
pero también en la tolerancia y el respeto, y me considero
también cristiano, budista, individualista, amante de la cultura –a
pesar de todo-, poseo una educación que no puedo tirar a la
basura de la noche a la mañana y disfruto, no sólo con la lectura
de buenos textos anarquistas, sino también con un canto
gregoriano, con la contemplación de un iglesia románica, una
espectáculo místico, una conversación con alguien que me fascine
o me aporte algo –sea de la clase social que sea- y tengo
inclinaciones místicas y religiosas que no voy a reprimir por el
5 Alimentación o filosofía de vida que puede encontrarse en el hinduismo, en el
budismo, o en comunidades como los esenios, los maniqueos o los cátaros, entre
otras.