19.06.2013 Views

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

templo de turquesa y habló con el Sumo Sacerdote. Aunque <strong>en</strong> Celephais<br />

se adora sobre todo a Nath-Horthath, <strong>en</strong> las oraciones diarias se cita a todos<br />

los Grandes Dioses, y el sacerdote conocía bastante bi<strong>en</strong> el talante y las<br />

costumbres de éstos. Como hiciera Atal <strong>en</strong> la lejana Ulthar, le aconsejó<br />

fervi<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te que no int<strong>en</strong>tara verlos, afirmando que son irascibles y<br />

caprichosos, y que se hallan bajo la extraña protección de los desalmados<br />

Dioses Otros del Exterior, cuyo espíritu y m<strong>en</strong>sajero es Nyarlathotep, el<br />

caos reptante. El celo con que ocultaban la maravillosa ciudad del sol<br />

poni<strong>en</strong>te ponía claram<strong>en</strong>te de relieve su deseo de que Carter no llegara a<br />

ella, y no se sabía cómo mirarían a un forastero cuyo propósito era llegar<br />

hasta ellos para hacerles un ruego. Ningún hombre había <strong>en</strong>contrado jamás<br />

la ciudad de Kadath <strong>en</strong> el pasado, y muy bi<strong>en</strong> pudiera ser que tampoco la<br />

<strong>en</strong>contrara nadie <strong>en</strong> el futuro. Además, los rumores que corrían acerca del<br />

castillo de ónice de los Grandes Dioses no eran tranquilizadores mi<br />

muchísimo m<strong>en</strong>os.<br />

Después de dar las gracias al Sumo Sacerdote coronado de<br />

orquídeas, Carter salió del templo, <strong>en</strong> busca de cierta carnicería donde se<br />

v<strong>en</strong>día carne de oveja, pues allí vivía lustroso y cont<strong>en</strong>to el viejo jefe de los<br />

gatos. Aquel felino digno y gris se hallaba t<strong>en</strong>dido gozosam<strong>en</strong>te al sol <strong>en</strong> el<br />

pavim<strong>en</strong>to de ónice, y al acercarse el visitante le saludó con gesto lánguido.<br />

Pero cuando Carter se pres<strong>en</strong>tó y repitió la contraseña que le había<br />

facilitado el viejo g<strong>en</strong>eral de Ulthar, el lustroso patriarca se volvió muy<br />

cordial y <strong>com</strong>unicativo, y le contó muchos secretos que sab<strong>en</strong> los gatos de<br />

la costa de Ooth-Nargai. Y lo que fue aún más interesante, le contó también<br />

varios detalles que los gatos del puerto de Celephais le habían <strong>com</strong>unicado,<br />

no sin cierto recelo, sobre los hombres de Inquanok, <strong>en</strong> cuyos t<strong>en</strong>ebrosos<br />

barcos no quiere navegar ningún gato.<br />

Al parecer, estos hombres están <strong>en</strong>vueltos <strong>en</strong> un aura extraterrestre,<br />

aunque no es ésta la razón por la que los gatos no quier<strong>en</strong> navegar <strong>en</strong> sus<br />

559

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!