19.06.2013 Views

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

unión con la soñada balaustrada.<br />

Tan sólo el estar próximo al estupor le impidió gritar. Aquella<br />

fusión de sueño y realidad resultaba imposible de soportar. Aturdido, tomó<br />

el objeto bajó tambaleándose a la habitación de Dombrowski, el casero. Las<br />

doli<strong>en</strong>tes plegarias del supersticioso Mazurewicz se oían todavía <strong>en</strong> los<br />

humedos pasillos, pero a Gilman ya le t<strong>en</strong>ían sin cuidado. Dombrowski<br />

estaba <strong>en</strong> casa y le acogió amablem<strong>en</strong>te. No. no había visto nunca aquel<br />

objeto y nada sabía acerca de ello. Pero su mujer le había dicho que había<br />

<strong>en</strong>contrado una cosa rara de latón <strong>en</strong> una de las camas cuando limpiaba a<br />

mediodía, y tal vez fuera aquello. Dombrowski llamó a su mujer y ella<br />

<strong>en</strong>tró contoneándose <strong>com</strong>o un pato. Sí, era aquello. Lo había <strong>en</strong>contrado <strong>en</strong><br />

la cama del señor, <strong>en</strong> la parte más cercana a la pared. Le había parecido<br />

raro, pero, claro, el señor t<strong>en</strong>ía tantas cosas raras <strong>en</strong> la habitación, libros,<br />

objetos curiosos, cuadros... Desde luego, ella no sabía nada acerca de<br />

aquella figura.<br />

De modo que Gilman volvió a subir las escaleras más<br />

desconcertado que nunca, conv<strong>en</strong>cido de que estaba todavía soñando o de<br />

que su sonambulismo le había llevado a extremos inconcebibles y a robar<br />

<strong>en</strong> lugares desconocidos. ¿En dónde habría cogido aquel extraño objeto?<br />

No recordaba haberío visto <strong>en</strong> ningún museo de Arkham. Claro que de<br />

algún sitio había t<strong>en</strong>ido que salir; y el verlo mi<strong>en</strong>tras lo cogía <strong>en</strong> sueños<br />

debía haber provocado la esc<strong>en</strong>a de la terraza con la balaustrada. Al día<br />

sigui<strong>en</strong>te haría algunas cautelosas indagaciones, e iría a consultar al<br />

especialista <strong>en</strong> <strong>en</strong>fermedades nerviosas.<br />

En tanto, trataría de vigilar su sonambulismo. Al subir al piso de<br />

arriba y cruzar el pasillo de la buhardilla, esparció <strong>en</strong> el suelo algo de<br />

harina que había pedido prestada al casero después de explicarle<br />

francam<strong>en</strong>te para qué la quería. Entró <strong>en</strong> su cuarto, puso el aguzado objeto<br />

sobre la mesa .se echó <strong>en</strong> la cama, <strong>com</strong>pletam<strong>en</strong>te agotado m<strong>en</strong>tal v<br />

413

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!