19.06.2013 Views

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

durante mucho tiempo - y sé que uno de ustedes sí lo ha estado-, que<br />

calcule lo que le tuvo que emocionar la visión de las ondulantes colinas de<br />

Nueva Inglaterra, de los grandes olmos y los huertos de árboles nudosos y<br />

viejos cercados de piedra.<br />

»Al despuntar el día, tomó tierra <strong>en</strong> el prado exti<strong>en</strong>de más abajo de<br />

la antigua propiedad de los Carter, y se alegró de poderlo hacer <strong>en</strong> el<br />

sil<strong>en</strong>cio y la soledad. Era otoño, lo mismo que cuando partió, y el perfume<br />

de las colinas fue <strong>com</strong>o un bálsamo para su espíritu. Se las arregló para<br />

subir la <strong>en</strong>voltura por la ladera, hasta el bosque, y ocultarla <strong>en</strong> la Caverna<br />

de las Serpi<strong>en</strong>tes; pero no consiguió hacerla pasar por la grieta hasta la<br />

cueva interior. Allí mismo cubrió su cuerpo extraño con las ropas humanas<br />

y la máscara de cera. La <strong>en</strong>voltura quedó <strong>en</strong> aquel lugar durante un año,<br />

hasta que ciertas circunstancias le obligaron a buscarle otro escondite.<br />

»Se fue andando a Arkham, lo cual le sirvió para acostumbrarse a<br />

manejar su cuerpo <strong>en</strong> posturas humanas y <strong>en</strong> las condiciones ambi<strong>en</strong>tales<br />

de la Tierra, y <strong>en</strong>tró <strong>en</strong> un banco para cambiar el oro por dinero. Hizo<br />

también ciertas indagaciones haciéndose pasar por un extranjero que<br />

ignoraba el inglés, y descubrió que estaba <strong>en</strong> mil noveci<strong>en</strong>tos treinta, sólo<br />

dos años después de la época a la que había pret<strong>en</strong>dido llegar.<br />

»Naturalm<strong>en</strong>te, su situación era horrible. Le era imposible dar a<br />

conocer su id<strong>en</strong>tidad, estaba forzado a vivir <strong>en</strong> guardia <strong>en</strong> todo mom<strong>en</strong>to,<br />

t<strong>en</strong>ía ciertas dificultades respecto a la alim<strong>en</strong>tación, y necesitaba disponer<br />

de su droga extraña para mant<strong>en</strong>er aletargado el fragm<strong>en</strong>to Zkauba. Por<br />

todo ello se daba cu<strong>en</strong>ta de que debía actuar con la mayor rapidez posible.<br />

Marchó a Boston y tomó una habitación <strong>en</strong> el ruinoso barrio de West End,<br />

donde pudo vivir sin grandes gastos y <strong>en</strong> el más oscuro anonimato, y<br />

<strong>com</strong><strong>en</strong>zó inmediatam<strong>en</strong>te a hacer indagaciones sobre los bi<strong>en</strong>es y efectos<br />

de Randolph Carter. Fue <strong>en</strong>tonces cuando se <strong>en</strong>teró de lo ansioso que<br />

estaba el señor Aspinwall, aquí pres<strong>en</strong>te, por efectuar el reparto de la<br />

228

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!