19.06.2013 Views

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

H. P. Lovecraft = Lovecraftiana 3 - cuentos en ... - GutenScape.com

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

lo t<strong>en</strong>ía delante de sí - había sido incapaz hasta el mom<strong>en</strong>to de reconocerlo<br />

e interpretarlo.<br />

Llevaba m<strong>en</strong>os de media hora tumbado, cuando oyó, más fuerte que<br />

el coro de las ranas y de las chotacabras, un chapoteo que prov<strong>en</strong>ía del<br />

Miskatonic. El ruido se acercaba, <strong>com</strong>o si una gran ola barriese las orillas.<br />

Se s<strong>en</strong>tó para escuchar mejor. Pero el ruido también cambió, y éste,<br />

desgraciadam<strong>en</strong>te, sí podía id<strong>en</strong>tificarlo: algui<strong>en</strong> int<strong>en</strong>taba trepar por la<br />

rueda del molino.<br />

Se levantó y salió del cuarto.<br />

De la habitación cerrada prov<strong>en</strong>ía el ruido de un cuerpo pesado que<br />

se arrastraba y caía. Luego se oyó un curioso y <strong>en</strong>trecortado quejido,<br />

parecido al de un niño llamando desde lejos, y finalm<strong>en</strong>te se restableció la<br />

calma y el sil<strong>en</strong>cio. Incluso el croar de las ranas pareció desvanecerse y<br />

morir.<br />

Volvió a la cocina y <strong>en</strong>c<strong>en</strong>dió la lámpara.<br />

Proyectando la luz amarill<strong>en</strong>ta de la lámpara hacia delante, Abner<br />

se dirigió l<strong>en</strong>tam<strong>en</strong>te escalera arriba, <strong>en</strong> dirección a la habitación cerrada.<br />

Andaba suavem<strong>en</strong>te, despacio, sin hacer ruido.<br />

Al llegar a la puerta, escuchó. Al principio no oyó nada, pero al<br />

poco rato un susurro llegó a sus oídos.<br />

¡Algo <strong>en</strong> aquella habitación respiraba!<br />

Luchando contra el miedo, Abner puso la llave <strong>en</strong> la puerta. Abrió y<br />

levantó la lámpara.<br />

El asombro y el terror le paralizaron.<br />

Allí, agazapado <strong>en</strong> medio de la cama deshecha y tanto tiempo<br />

abandonada, se s<strong>en</strong>taba un monstruo, una criatura de piel dura, que no era<br />

ni hombre ni rana, ahíta de <strong>com</strong>ida, con unos hilos de sangre que caían aún<br />

de sus mandíbulas batracias y goteaban <strong>en</strong>tre sus dedos palmípedos. Era<br />

una cosa monstruosa que t<strong>en</strong>ía unos brazos largos y fuertes, que salían de<br />

171

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!