- Page 1 and 2: Obra reproducida sin responsabilida
- Page 3 and 4: OBRAS COMPLETAS (LEYENDAS Y CARTAS)
- Page 5 and 6: herir el corazón de todos con el l
- Page 7: esto a encastillarse en la forma de
- Page 11 and 12: cantidad inesperada, por lo magníf
- Page 13 and 14: pudo escribir la introducción con
- Page 15 and 16: servir al Estado en la Dirección d
- Page 17 and 18: tir en el palacio de los señores m
- Page 19 and 20: eunirse y a vivir con él, como en
- Page 21 and 22: Herida sin cura aquel alma fuerte,
- Page 23 and 24: hermano fue a visitarle, ocurrioles
- Page 25 and 26: que era expresión de cualquier art
- Page 27 and 28: cuarto poder, comedia. -Los hermano
- Page 29 and 30: sos, mujeres ideales, guerreros, tu
- Page 31 and 32: Sorprende a veces su semejanza con
- Page 33 and 34: cas que sean, por muy imaginarias q
- Page 35 and 36: Otra de las particularidades de Gus
- Page 37 and 38: eligión que le animaba y el amor q
- Page 39 and 40: todas las concepciones de su inteli
- Page 41 and 42: las veces triunfos compatibles con
- Page 43 and 44: apegados aún a la admiración de t
- Page 45 and 46: Alemania donde todos los grandes po
- Page 47 and 48: me mezco entre los árboles en la a
- Page 49 and 50: ya al punto en que se pierde toda e
- Page 51 and 52: Introducción Por los tenebrosos ri
- Page 53 and 54: vivero, pugnan por dilatar su fant
- Page 55 and 56: Si morir es dormir, quiero dormir e
- Page 57 and 58: en fin, puede compararse a una larg
- Page 59 and 60:
Los gandharvas, o cantores celestes
- Page 61 and 62:
inmateriales e intangibles, pasione
- Page 63 and 64:
combinación habían de resultar la
- Page 65 and 66:
los, y al fin terminaron por no dej
- Page 67 and 68:
eció un mundo. Un mundo deforme, r
- Page 69 and 70:
que las manos de los chiquillos: en
- Page 71 and 72:
-No ha vuelto a parecer desde que c
- Page 73 and 74:
que los Paternóster. -Mirad, Mirad
- Page 75 and 76:
se Pérez proposiciones magníficas
- Page 77 and 78:
panderos, las sonajas y las zambomb
- Page 79 and 80:
cia; los caballeros cambiaban entre
- Page 81 and 82:
Sus deseos se habían cumplido; los
- Page 83 and 84:
unos cerca, otros lejos, éstos bri
- Page 85 and 86:
-Buenas noches, mi señora doña Ba
- Page 87 and 88:
Cuando llegue el momento de poner l
- Page 89 and 90:
de cristal; se elevaron las diáfan
- Page 91 and 92:
-Porque... -añadió el organista,
- Page 93 and 94:
desierto esta vez, y después de to
- Page 95 and 96:
había mirado.., digo mal, no me ha
- Page 97 and 98:
Los ojos verdes Hace mucho tiempo q
- Page 99 and 100:
Y la cabalgata se detuvo, y enmudec
- Page 101 and 102:
-Señores, vosotros lo habéis vist
- Page 103 and 104:
El montero, sin desplegar los labio
- Page 105 and 106:
mirada que se clavó en la mía; un
- Page 107 and 108:
exclamó con acento sombrío: -¡C
- Page 109 and 110:
-Fernando -dijo la hermosa entonces
- Page 111 and 112:
La ajorca de oro I Ella era hermosa
- Page 113 and 114:
azul, y sólo el monótono ruido de
- Page 115 and 116:
dormir; no pude... Pasó la noche,
- Page 117 and 118:
¡La catedral de Toledo! Figuraos u
- Page 119 and 120:
La fiesta religiosa había traído
- Page 121 and 122:
perdidas entre las sombras, oscilar
- Page 123 and 124:
mundo de reptiles y alimañas de gr
- Page 125 and 126:
himno a la Divinidad levanta la Cre
- Page 127 and 128:
Pulo percibe el rumor de sus pasos;
- Page 129 and 130:
Corramos un velo sobre los crímene
- Page 131 and 132:
Canto segundo I -¿De qué me sirve
- Page 133 and 134:
sale de palacio en traje de un simp
- Page 135 and 136:
El sol toca a la mitad de su viaje,
- Page 137 and 138:
e, suspendida de las ramas de una p
- Page 139 and 140:
-Ahora bien, pues conoces mi delito
- Page 141 and 142:
ataviada, sale por una de las puert
- Page 143 and 144:
Cuarenta lunas han nacido después
- Page 145 and 146:
al arrullo de una tórtola. Al agra
- Page 147 and 148:
delirio, que nos llaman al pasar y
- Page 149 and 150:
golfo y la luz comience a palidecer
- Page 151 and 152:
LA VUELTA DEL COMBATE I «El combat
- Page 153 and 154:
Canto cuarto I -Hijo mío -dice Sch
- Page 155 and 156:
ansiedad, de esos que ciñen la gar
- Page 157 and 158:
Un brahmín, al atravesar en tal no
- Page 159 and 160:
Pulo hunde una y cien veces su puñ
- Page 161 and 162:
XVII El temible reptil crece con un
- Page 163 and 164:
limpias aguas de su manantial, si l
- Page 165 and 166:
En aquel punto el sueño tiende las
- Page 167 and 168:
en él hasta los mortales, y sus vi
- Page 169 and 170:
Pulo se ha sentado sobre una de las
- Page 171 and 172:
agitar sus alas por tres veces, dic
- Page 173 and 174:
no puede exterminar o vencer; si al
- Page 175 and 176:
endereza como la víbora para morde
- Page 177 and 178:
Los defensores de Vichenú expiran
- Page 179 and 180:
Esos son los espíritus de los vali
- Page 181 and 182:
Un genio de mal guía sus pasos a t
- Page 183 and 184:
himnos del luto y el clamor de las
- Page 185 and 186:
altar en que está colocado el dios
- Page 187 and 188:
El rayo de luna Yo no sé si esto e
- Page 189 and 190:
Creía que entre las rojas ascuas d
- Page 191 and 192:
En la época a que nos referimos, l
- Page 193 and 194:
-¡Una mujer desconocida!... ¡En e
- Page 195 and 196:
Llegó a la cima, desde la que se d
- Page 197 and 198:
última esquina de un callejón des
- Page 199 and 200:
señor el rey, que herido en la gue
- Page 201 and 202:
da; azules deben de ser, azules son
- Page 203 and 204:
Manrique llegó al claustro, tendi
- Page 205 and 206:
-¿Queréis que os diga una cantiga
- Page 207 and 208:
que han abatido su vuelo para apaga
- Page 209 and 210:
sigo y cubrir mi cabeza con el fiel
- Page 211 and 212:
oquia llamaban lentamente a la orac
- Page 213 and 214:
Devanábase noche y día los sesos
- Page 215 and 216:
Renuncio a describir el efecto de e
- Page 217 and 218:
zas, cuando he aquí que algunos al
- Page 219 and 220:
una dosis de miedo más que regular
- Page 221 and 222:
la creencia general, los vasos sagr
- Page 223 and 224:
Con este objeto señalamos esta com
- Page 225 and 226:
en nuestras manos, como cuando los
- Page 227 and 228:
armas para aprehenderlo que de una
- Page 229 and 230:
del pueblo, que se abrían con difi
- Page 231 and 232:
-En el de los condes soberanos. Ni
- Page 233 and 234:
corporación y con toda la solemnid
- Page 235 and 236:
Una noche, por último, aguijoneado
- Page 237 and 238:
En tan angustiosa situación, los v
- Page 239 and 240:
de Mayo ramilletes de lirios, ni lo
- Page 241 and 242:
no pueden cogerse en las manos sin
- Page 243 and 244:
en un paredón grieteado, y un mira
- Page 245 and 246:
Una tarde sin embargo, al pasar fre
- Page 247 and 248:
hojas del agreste y abandonado jard
- Page 249 and 250:
Así dejé transcurrir en largos y
- Page 251 and 252:
sol, fingían todo un cielo de estr
- Page 253 and 254:
Si yo pudiera pegar aquí con oblea
- Page 255 and 256:
nuevo, añadiéndole otros rasgos a
- Page 257 and 258:
las ideas que de improviso me habí
- Page 259 and 260:
ensueños de la noche y de mis deli
- Page 261 and 262:
comenzado a caer en gotas menudas u
- Page 263 and 264:
-Una toma de hábito -me contestó
- Page 265 and 266:
pocos. La ceremonia había comenzad
- Page 267 and 268:
dose del fondo tenebroso del coro,
- Page 269 and 270:
suelo desplomada como un cadáver.
- Page 271 and 272:
de incienso, el órgano arrojó un
- Page 273 and 274:
perdida en la penumbra de un claust
- Page 275 and 276:
La noche del sarao, el alcázar de
- Page 277 and 278:
puño, y rostrillos de blancos enca
- Page 279 and 280:
En los torneos del Zocodover, en lo
- Page 281 and 282:
isa de vanidad satisfecha asomó a
- Page 283 and 284:
próxima a desmayarse, exclamó, pr
- Page 285 and 286:
enmarañado laberinto de calles osc
- Page 287 and 288:
curidad de la noche era tan profund
- Page 289 and 290:
nerse en guardia y previniendo con
- Page 291 and 292:
Pasados algunos minutos, durante lo
- Page 293 and 294:
cerraron con violencia, y todo volv
- Page 295 and 296:
La corza blanca I En un pequeño lu
- Page 297 and 298:
-¡Friolera! -añadió el montero e
- Page 299 and 300:
nario interés por conocer los deta
- Page 301 and 302:
ada la misa del domingo solía reun
- Page 303 and 304:
vez, habiéndome colocado en otro e
- Page 305 and 306:
tadas pupilas en la hija risueña d
- Page 307 and 308:
Garcés tenía poco más o menos la
- Page 309 and 310:
origen de Constanza, pues acompañ
- Page 311 and 312:
llo. Acto continuo dispusiéronle u
- Page 313 and 314:
-¿Y si al dispararle te saluda con
- Page 315 and 316:
zaba a remontarse con lentitud por
- Page 317 and 318:
agua, el penetrante aroma de las fl
- Page 319 and 320:
El pastor que aguarda el día consu
- Page 321 and 322:
encontraba. Una vez acomodado en su
- Page 323 and 324:
y flotantes hojas de una planta acu
- Page 325 and 326:
después de coronar su frente, se d
- Page 327 and 328:
suyo la vista, no vio ni oyó más
- Page 329 and 330:
La rosa de pasión Una tarde de ver
- Page 331 and 332:
Inútilmente los muchachos, para de
- Page 333 and 334:
escapaban de su boca esos suspiros
- Page 335 and 336:
piensa arrebatármela un perro cris
- Page 337 and 338:
calles, cuando el dueño de un barq
- Page 339 and 340:
tia había cubierto de un sudor gla
- Page 341 and 342:
estaba allí y parecía multiplicar
- Page 343 and 344:
hecho traición hasta el punto de r
- Page 345 and 346:
Verde, y la flor, que hoy se ha hec
- Page 347 and 348:
Pastores que seguís con lento paso
- Page 349 and 350:
Cuando sus servidores llegaron pres
- Page 351 and 352:
cumplirte lo que te he prometido; p
- Page 353 and 354:
Así corrió muchas horas, atraves
- Page 355 and 356:
El caballo relinchó con una fuerza
- Page 357 and 358:
Creed, pues, lo que he dicho, y cre
- Page 359 and 360:
su foco a los ígneos espíritus qu
- Page 361 and 362:
llegó a un punto donde creyó perc
- Page 363 and 364:
zado al vacío como la piedra cande
- Page 365 and 366:
lentamente una campana; frente al a
- Page 367 and 368:
La promesa I Margarita lloraba con
- Page 369 and 370:
Al llegar a este punto, Margarita l
- Page 371 and 372:
II Apenas rayaba en el cielo la pri
- Page 373 and 374:
oírse un rumor sordo, acompasado y
- Page 375 and 376:
lecho, os miro allí luchar con alg
- Page 377 and 378:
las cortinas, desapareciendo despu
- Page 379 and 380:
to distintas enseñas con escudos p
- Page 381 and 382:
en el sepulcro de Santiago; cédula
- Page 383 and 384:
El conde con la mesnada de su casti
- Page 385 and 386:
-¿De qué tierra eres? -De tierra
- Page 387 and 388:
El beso I Cuando una parte del ejé
- Page 389 and 390:
-En fin -exclamó el oficial despu
- Page 391 and 392:
sepulcrales llenas de timbres; escu
- Page 393 and 394:
apreciar los tesoros del arte que e
- Page 395 and 396:
largo y tendido sobre las novedades
- Page 397 and 398:
que los canónigos de Toledo han co
- Page 399 and 400:
dijiste nada? ¿No te explicó su p
- Page 401 and 402:
-Celoso -se apresuró a decir el ca
- Page 403 and 404:
otellas, que con el deseo de conoce
- Page 405 and 406:
El capitán, que hacía los honores
- Page 407 and 408:
objeto de la reunión, procedieron
- Page 409 and 410:
io, te admiro como un marido pacien
- Page 411 and 412:
-¡Oh!, sí, seguramente -dijo uno
- Page 413 and 414:
El Monte de las Ánimas La noche de
- Page 415 and 416:
es, el rey los hizo venir de lejana
- Page 417 and 418:
condes de Alcudiel despedía un viv
- Page 419 and 420:
El acento helado con que Beatriz pr
- Page 421 and 422:
de los cazadores. No habiendo aún
- Page 423 and 424:
mor que se debilitaba, que se perd
- Page 425 and 426:
Oía mil ruidos diversos; se pasaba
- Page 427 and 428:
lecho, desencajados los ojos, entre
- Page 429 and 430:
niente al estado de mi salud, ya ar
- Page 431 and 432:
Cuando, por último, la conversaci
- Page 433 and 434:
Durante su cautiverio logró ver a
- Page 435 and 436:
Algunas horas después comenzó el
- Page 437 and 438:
soldados moros, que una vez rendida
- Page 439 and 440:
El gnomo I Las muchachas del lugar
- Page 441 and 442:
oportuna como os lo puede dar el t
- Page 443 and 444:
que bajan rodando desde los altos p
- Page 445 and 446:
sólo se percibían a intervalos un
- Page 447 and 448:
Al llegar aquí el anciano se detuv
- Page 449 and 450:
despedirse del tío Gregorio, que l
- Page 451 and 452:
sólo por el vínculo de la sangre,
- Page 453 and 454:
el cariño se parecía a esa vaga y
- Page 455 and 456:
La noche siguiente a la tarde del e
- Page 457 and 458:
menzó a agitar las copas de los á
- Page 459 and 460:
Mi rumor adormece y despierta: desp
- Page 461 and 462:
mejor, Magdalena se iba instintivam
- Page 463 and 464:
Callaron el viento y el agua, y apa
- Page 465 and 466:
El miserere Hace algunos meses que
- Page 467 and 468:
Hace ya muchos años, en una noche
- Page 469 and 470:
formaban círculo alrededor del hog
- Page 471 and 472:
que, después de estrellarse de pe
- Page 473 and 474:
Y esto, diciendo, desapareció de l
- Page 475 and 476:
sentado sobre la mutilada estatua d
- Page 477 and 478:
voces lejanas y graves, que parecí
- Page 479 and 480:
de su espíritu. Sus nervios saltar
- Page 481 and 482:
-¿Oísteis al cabo el Miserere? -l
- Page 483 and 484:
¿Quién sabe sí no serán una loc
- Page 485 and 486:
ejemplos de estas elevadas máximas
- Page 487 and 488:
grabado con sus caracteres indelebl
- Page 489 and 490:
vanizado del Imperio, eslabón que
- Page 491 and 492:
Los fustes de las columnas que sost
- Page 493 and 494:
estudiado en la Alhambra y en el al
- Page 495 and 496:
en épocas posteriores, como en San
- Page 497 and 498:
¡Es raro! Tomábamos el té en cas
- Page 499 and 500:
Ya joven, se lanzó al mundo. Sin q
- Page 501 and 502:
Al otro día salió Andrés de la c
- Page 503 and 504:
aquellos animales habían sido jóv
- Page 505 and 506:
Del perro no digamos nada: llegó a
- Page 507 and 508:
pensión de tres reales por todo re
- Page 509 and 510:
Al pasar por el patio para dirigirs
- Page 511 and 512:
de nuevo al camino, ve las señales
- Page 513 and 514:
para que prosiguiesen su camino con
- Page 515 and 516:
-Y a usted, ¿qué le parece? -le p
- Page 517 and 518:
Yo me hallaba en uno de estos últi
- Page 519 and 520:
des a contarse los secretos de ese
- Page 521 and 522:
-¡Nunca se borrará ese recuerdo d
- Page 523 and 524:
vi, solo, enlutado y sombrío, cont
- Page 525 and 526:
Esta pronunciada afición degenera
- Page 527 and 528:
de un pasadizo cubierto, que a mane
- Page 529 and 530:
las molduras. Una por una admiré l
- Page 531 and 532:
se levantaba una figura de mujer es
- Page 533 and 534:
confusa claridad de las estrellas,
- Page 535 and 536:
de la falda, podía asegurarse, y a
- Page 537 and 538:
plo? No podía ser. Yo había visto
- Page 539 and 540:
episa, nunca veía claro, nunca me
- Page 541 and 542:
montes que lo cierran como un valla
- Page 543 and 544:
Madrid. Sobre aquella tabla, cubier
- Page 545 and 546:
monstruosa partió arrastrándose p
- Page 547 and 548:
de touriste; nada más curioso que
- Page 549 and 550:
cosas diferentes y todas a cual de
- Page 551 and 552:
conciencia de su posición. El aya
- Page 553 and 554:
experiencia me ha enseñado un poco
- Page 555 and 556:
la mesa y el servicio estaban limpi
- Page 557 and 558:
al que acompañaba una ama o dueña
- Page 559 and 560:
el vino; el mayoral, dejando el cui
- Page 561 and 562:
ñar, cubre de hojas verdes, transp
- Page 563 and 564:
do en una mula como en los buenos t
- Page 565 and 566:
Moncayo, que levantaba sus aéreas
- Page 567 and 568:
ca, hasta que, por último, vencido
- Page 569 and 570:
de la correspondencia que me trae l
- Page 571 and 572:
lancos que van y vienen silenciosos
- Page 573 and 574:
sin hacer más caso de las poética
- Page 575 and 576:
nuar leyendo. Aún se ven por una p
- Page 577 and 578:
cubos de muralla, altos, negros e i
- Page 579 and 580:
das por el batiente oscuro del luci
- Page 581 and 582:
cuenta mi especial posición para t
- Page 583 and 584:
de hoja de lata que gira en lo alto
- Page 585 and 586:
fosas profundas que parecen aguarda
- Page 587 and 588:
inodoras que llaman de los muertos,
- Page 589 and 590:
Con el destino que darían a mi cue
- Page 591 and 592:
tranquila del poeta que irradia con
- Page 593 and 594:
a la mañana, las gotas del rocío
- Page 595 and 596:
nombre resonase unido, y como perso
- Page 597 and 598:
dar entre los huecos del arco, vivi
- Page 599 and 600:
manto de raíces, y, por último, u
- Page 601 and 602:
Carta cuarta Queridos amigos: El ti
- Page 603 and 604:
mercio de la inteligencia, estrecha
- Page 605 and 606:
cuanto con ellas le relaciona con a
- Page 607 and 608:
invade nuestro país, van desaparec
- Page 609 and 610:
mo dejamos a nuestras mujeres o a n
- Page 611 and 612:
les, hoy que en su gran mayoría es
- Page 613 and 614:
pensionados aprenden relativo a otr
- Page 615 and 616:
original y que desconfío de poder
- Page 617 and 618:
tos accidentes ni aun merced a la c
- Page 619 and 620:
comedia se agitarán en un escenari
- Page 621 and 622:
detallada de un objeto cualquiera.
- Page 623 and 624:
tiene su asiento, y que su ocupaci
- Page 625 and 626:
zos tejados de las casas que se agr
- Page 627 and 628:
que constituye la gracia, con esa l
- Page 629 and 630:
donde recibe por su trabajo materia
- Page 631 and 632:
Carta sexta Queridos amigos: Hará
- Page 633 and 634:
como Dios me daba a entender, por e
- Page 635 and 636:
endiablada raza de hechiceras os he
- Page 637 and 638:
destacaba oscura e imponente sobre
- Page 639 and 640:
donadme, tened compasión de mí! -
- Page 641 and 642:
lantan mudos y con lentitud, como u
- Page 643 and 644:
tan hipocritona hasta aquel punto,
- Page 645 and 646:
vez allí, la bruja permaneció un
- Page 647 and 648:
siones extrañas, no puedo menos de
- Page 649 and 650:
de ellas, aunque sea al oído y en
- Page 651 and 652:
-¡Toma, toma! Mataron a una; pero
- Page 653 and 654:
Carta séptima Queridos amigos: Pro
- Page 655 and 656:
-Tomad esa moneda para que compréi
- Page 657 and 658:
te, y concluida esta operación, co
- Page 659 and 660:
Los pastores, de cada vez más asom
- Page 661 and 662:
Acompañando estas palabras, dichas
- Page 663 and 664:
de tomo y lomo, no satisfecho con h
- Page 665 and 666:
primera operación, volvió a la in
- Page 667 and 668:
impulsadas de una fuerza oculta e i
- Page 669 and 670:
yunques, en donde los gnomos trabaj
- Page 671 and 672:
pero después ha salido el Sol, la
- Page 673 and 674:
-Pero ¿no es fábula lo del castil
- Page 675 and 676:
Carta octava Queridos amigos: En un
- Page 677 and 678:
tos del reino venían a reunirse ci
- Page 679 and 680:
que en Dorotea predominaba exclusiv
- Page 681 and 682:
En este estado las cosas, una tarde
- Page 683 and 684:
procurando dulcificar todo lo posib
- Page 685 and 686:
costa puedes conseguirlo. Tú eres
- Page 687 and 688:
a a sus amigos a tales horas y entr
- Page 689 and 690:
Dorotea, aunque temblando, hizo pun
- Page 691 and 692:
das de chispas de mil colores, se l
- Page 693 and 694:
pana de la iglesia dejaba oír el t
- Page 695 and 696:
nos de recordar, oyendo el continuo
- Page 697 and 698:
yo las escribo para usted, para ust
- Page 699 and 700:
quiera que de los pueblecillos que
- Page 701 and 702:
gados en la furia de su carrera tra
- Page 703 and 704:
Sevilla; uno de esos colosales lien
- Page 705 and 706:
A esta sazón, aquellos de sus serv
- Page 707 and 708:
iosa escultura, objeto de ardiente
- Page 709 and 710:
da, señala el humilde lugar en que
- Page 711:
mano, me infundió más hondo respe