Copyrish.t by Ramon Magrans 1981

Esta canoita es muy inestable, Carlito; esta
piedra es para hacerla calar un poco mas en el agua y
que no se vire con la gente.
Soltaron la canoa y la llevaron rie abaje per el
remanso del cual ya hablamos. Carlito prepare su an-
zuelo y lo lanzo al agua. Estaba de pie, en el medio
de la canoa, con la vara en la mano y los ojos fijos
en el rio. Detras de el, Quirino, sentade en la popa,
manejaba el remo. Quien los viese entences, habria de
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netar el extreme antagenismo que habia en las expresie-
nes de aquellas dos fisionomias. Carlite, con el mirar
tranquilo que revelaba la placidez de su alma tan serena
como la corriente mansa que resbalaba, tenia la atencion
presa en los movimientes de la linea de su anzuelo, y
una media sonrisa come de satisfaccion intima le pasaba
por les labios. Quirine, con les ejes terves y espanta­
dos, miraba con inquietud para una orilla, a veces para
la otra; a veces palpaba la daga y fijo una mirada sinies­
tra y desvarada sebre el adelescente que estaba delante de
Si, a veces dejaba per unes instantes caer la frente sobre
el pecho en un abatimiento profundo y sembrie. Su espiri­
tu se. debatia entre les estertenes de la lucha-mas violen­
ta y angustiada.
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IAquel mecite tan joven, tan esbelto y garbese, con el