14.06.2013 Views

corazón de tinta - bibliotecaelroble

corazón de tinta - bibliotecaelroble

corazón de tinta - bibliotecaelroble

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

podría haberme disfrazado <strong>de</strong> hombre.<br />

Ellos no habían sabido respon<strong>de</strong>rle.<br />

--Elinor, por favor, necesitamos a alguien que se que<strong>de</strong> junto a<br />

nuestras cosas.<br />

--¿Nuestras cosas? ¿Te refieres a esta mugrienta mochila <strong>de</strong><br />

Dedo Polvoriento? -le soltó una patada <strong>de</strong> rabia.<br />

¡Qué listos se creían! Pero su mascarada había sido inútil. ¿Quién<br />

los habría reconocido? ¿Basta, Nariz Chata, el cojo?<br />

--Regresaremos al amanecer, Elinor. Con Meggie.<br />

¡Mentiroso! Ella percibió en su voz que ni él mismo se lo creía.<br />

Elinor tropezó con la raíz <strong>de</strong> un árbol, agarró con las manos algo<br />

espinoso y se <strong>de</strong>jó caer <strong>de</strong> rodillas sollozando. Asesinos. Asesinos e<br />

incendiarios. ¿Qué iba a hacer ella con semejante gentuza? Ojalá lo<br />

hubiera sabido cuando Mortimer se presentó <strong>de</strong> improviso ante su<br />

puerta pidiéndole que escondiera el libro. ¿Por qué no se negó? ¿No<br />

había pensado en el acto que el comecerillas les causaría problemas?<br />

Pero el libro... Claro, el libro. Como es natural, había sido una<br />

tentación irresistible...<br />

«¡Se han llevado a esa marta apestosa! -pensó mientras se<br />

incorporaba-. Pero a mí no. Y ahora están muertos.»<br />

«Acudamos a la policía.» ¡Cuántas veces lo había repetido! Pero<br />

la respuesta <strong>de</strong> Mortimer había sido siempre la misma. «No, Elinor,<br />

Capricornio haría <strong>de</strong>saparecer a Meggie en cuanto el primer policía<br />

pusiera el pie en el pueblo. Y la navaja <strong>de</strong> Basta es más rápida que<br />

todos los policías <strong>de</strong>l mundo entero, te lo aseguro.» Y mientras<br />

hablaba en su entrecejo se formó aquella arruguita vertical. Conocía lo<br />

suficiente a Mortimer para saber su significado.<br />

¿Qué iba a hacer ahora? Estaba tan sola...<br />

«¡No seas tan quejica, Elinor! -se reprochó-. Tú siempre has<br />

estado sola, ¿lo has olvidado? Pon tu mente a trabajar. Tienes que<br />

ayudar a la niña, al margen <strong>de</strong> lo que le haya sucedido a su padre.<br />

Tienes que sacarla <strong>de</strong> ese pueblo tres veces maldito; ya nadie pue<strong>de</strong><br />

hacerlo salvo tú. ¿O es que quieres que acabe convertida en una <strong>de</strong><br />

esas criadas acoquinadas que apenas se atreven a levantar la cabeza<br />

y se limitan a fregar y a cocinar para sus finos señores? A lo mejor <strong>de</strong><br />

vez en cuando podría leerle algo en voz alta a Capricornio, siempre<br />

que a éste le apeteciera, y <strong>de</strong>spués, con el paso <strong>de</strong>l tiempo... se<br />

convertiría en una mujercita preciosa y...»<br />

Elinor se sintió mal.<br />

--Necesito una escopeta -susurró-, o un cuchillo, un cuchillo

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!