14.06.2013 Views

corazón de tinta - bibliotecaelroble

corazón de tinta - bibliotecaelroble

corazón de tinta - bibliotecaelroble

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Mo se volvió hacia su hija.<br />

--Meggie... -empezó a <strong>de</strong>cir en un tono que conocía más que <strong>de</strong><br />

sobra: «Meggie, no seas tonta». «Venga, Meggie...»<br />

La niña abrió la puerta <strong>de</strong>l autobús y saltó fuera.<br />

--¡Meggie, maldita sea! Vuelve a subir. ¡Tenemos que irnos!<br />

--Subiré cuando me lo hayas contado.<br />

Mo se dirigió hacia ella, pero Meggie se le escapó <strong>de</strong> entre las<br />

manos, cruzó el portón y salió corriendo a la carretera.<br />

--¿Por qué no me lo dices? -gritó.<br />

La carretera estaba tan solitaria como si fueran los únicos<br />

habitantes <strong>de</strong>l mundo. Se había levantado un viento suave que<br />

acarició el rostro <strong>de</strong> Meggie e hizo susurrar las hojas <strong>de</strong>l tilo que se<br />

erguía junto a la carretera. El cielo continuaba lívido y gris,<br />

sencillamente se negaba a aclararse.<br />

--¡Quiero saber qué ocurre! -gritó Meggie-. Quiero saber por qué<br />

hemos tenido que levantarnos a las cinco <strong>de</strong> la mañana y por qué no<br />

tengo que ir al colegio. ¡Quiero saber si volveremos y quién es ese tal<br />

Capricornio!<br />

Al pronunciar ese nombre, Mo miró a su alre<strong>de</strong>dor como si ese<br />

<strong>de</strong>sconocido al que tanto temían ambos hombres estuviera a punto <strong>de</strong><br />

salir <strong>de</strong>l granero vacío, tan <strong>de</strong> improviso como había surgido Dedo<br />

Polvoriento <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>de</strong>trás <strong>de</strong>l muro. Pero el patio estaba vacío y<br />

Meggie se sentía <strong>de</strong>masiado furiosa como para temer a alguien <strong>de</strong><br />

quien sólo conocía el nombre.<br />

--¡Tú siempre me lo has contado todo! -le gritó a su padre-.<br />

Siempre.<br />

Pero Mo callaba.<br />

--Todo el mundo guarda un par <strong>de</strong> secretos, Meggie -dijo al fin-. Y<br />

ahora, sube <strong>de</strong> una vez. Tenemos que irnos.<br />

Dedo Polvoriento le escudriñó primero a él y luego a la niña con<br />

expresión incrédula.<br />

--¿Que no le has contado nada? -le oyó preguntar Meggie en voz<br />

baja.<br />

Mo negó con la cabeza.<br />

--¡Pero algo tienes que <strong>de</strong>cirle! Es peligroso que no sepa nada. Al<br />

fin y al cabo ya no es una niña.<br />

--También es peligroso que lo sepa -replicó Mo-. Y no cambiaría<br />

nada.<br />

Meggie seguía en la carretera.<br />

--¡He escuchado todas vuestras palabras! -gritó-. ¿Qué es

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!