Discurso de todos los diablos, o infierno emendado - Ataun
Discurso de todos los diablos, o infierno emendado - Ataun
Discurso de todos los diablos, o infierno emendado - Ataun
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
estaba limpiándose unas babas, muy aterido,<br />
con gran melancolía, dijo:<br />
—Algo <strong>de</strong> la lición se verifica en mí.<br />
Estábame yo, cuando se ardía el mundo, con<br />
tanto flema como <strong>de</strong>voción sacrificando a <strong>los</strong><br />
dioses, y Othón saqueando a Roma y<br />
usurpándome el imperio; yo asistía a la religión<br />
para ser emperador: él al robo vino por el atajo<br />
y siguió la verdad <strong>de</strong>l oficio; y yo acabé, como<br />
se ha leído, con más <strong>de</strong>sprecio que sentimiento;<br />
él se quedó monarca y yo babera.<br />
Hízole callar Domiciano, que traía<br />
arrastrando por una pierna al miserable<br />
Suetonio Tranquilo, y a gran<strong>de</strong>s voces <strong>de</strong>cía:<br />
—¡Cuánto peores son estos infames<br />
historiadores y coronistas, que aguardaban<br />
<strong>de</strong>trás <strong>de</strong> la vida <strong>de</strong> un emperador, y con su<br />
<strong>de</strong>shonra hacen lisonja a sus <strong>de</strong>scendientes!<br />
—Ahí se ve quién sois vosotros —<strong>de</strong>cía<br />
Suetonio con sollozos mal formados—, que os<br />
es sabrosa la ignominia <strong>de</strong> vuestros