Los Rios. 238 - Misiones Diocesanas Vascas

Berriro
ere argi
geratu da
koordinazio
hauek
emankorrak
direla gure
eginkizunerako.
6
ECUADOR
algunas de ellas solicitadas desde las procuras,
y nos vimos forzados a dejar el jueves
para ello. El asunto de los jóvenes y la renovación
de nuestras comunidades parece una
inversión de futuro que nos tiene sobre alerta,
así que parece casi seguro también que este
tema se hará presente en encuentros futuros.
Revisión honesta
Tras largas reuniones de toma de decisiones
acerca del funcionamiento interno a lo largo
del jueves, ya sólo nos quedaba el viernes,
nuestro día para pasear, disfrutar de la compañía
y de la belleza de este país. Retrasamos
un poco el paseo por una entrañable y
enriquecedora conversa con el Padre Jesús
Tamayo y con María Elena, responsable de la
casa, acerca de su reciente viaje por tierras
vascas, y sobre su implicación en el confl icto
de Sucumbíos, pero sin duda mereció la pena
ese retraso. Visitamos algunas cascadas
bajo un sol de justicia, y regresamos a la casa
para almorzar todo un banquete de sabrosos
cuyes. Tuvimos que adelantar nuestro regreso
debido a la celebración en Babahoyo ese
mismo fi n de semana del encuentro nacional
de comunidades eclesiales de base y nuestra
apuesta por participar en el mismo, el cual
ya os adelanto que fue todo un éxito con la
participación de alrededor de cuatrocientas
personas de once provincias diferentes.
Por lo demás, la semana de Baños ha contado
con lo habitual de este tipo de encuentros,
con las oraciones emotivas de quien hace
una revisión honesta de sus actitudes frente
a la tarea y las personas, con el sabor de
despedida de nuestro compañero Josu López
Villalba que ya leerá este artículo desde tierras
bizkaitarras, con las tensiones de unos
campeonatos de mus y de parchís de nivel
casi interplanetario, pero sobre todo con la
afabilidad de la familia que se reúne en torno
a una mesa para compartir vida y mantener
un compromiso de unión y camino compartido.
Pues eso somos y aspiramos a seguir siendo:
familia misionera llegada de Euskal Herria
con la ambición y emoción de compartir la
construcción del reino de Dios por la única vía
posible, la senda de los empobrecidos. Baños
ha sido una vez más esa humilde posada
donde los viajeros hemos recargado nuestras
energías, y que así sea por muchos años.
El grupo misionero vasco reunido en Baños en octubre de 2011, a los pies del Tungurahua.