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desarrollar la circulación de ideas dentro del grupo Bonnier. Acogemos todas las ideas, las
discutimos, las comentamos, y tratamos de desarrollarlas. No somos una unidad comercial
con poder de decisión. Lo que hacemos es cerciorarnos de que todas las ideas se expongan
dentro del marco de nuestro saber y experiencia colectivos, lo cual constituye una garantía de
que la compañía está atenta a lo que pasa.”
La Universidad de Medios Bonnier
En los últimos dos años, el departamento de capacitación interna del grupo ha organizado
cursillos de gestión, seminarios y otros eventos para más de 900 personas. Hay cursos para
ejecutivos jóvenes, responsables experimentados y editores. “Hay que postular con un año de
antelación para conseguir una plaza en el programa, y sabemos que hay gente muy capaz que
se ha quedado en la empresa solamente para poder participar en él,” dijo Wiklund. El
programa para editores consta de cinco sesiones a lo largo de un año e incluyen un viaje de
estudios en los Estados Unidos de una semana de duración.
Comité consultivo de ejecutivos jóvenes
Bonnier selecciona cada año a 16 empleados jóvenes, todos ellos situados profesionalmente a
nivel gerencial. Actúan como “auténticos embajadores dentro de la organización”, examinan
ciertos temas determinados específicamente a lo largo del año, y se dan cita entre cuatro y seis
veces por año con ejecutivos superiores para discutir sobre ideas y propuestas. “Una de las
primeras sugerencias fue, por ejemplo, la creación del comité de ideas, cosa que llevamos a
cabo.”
Comité de tecnología de información
“Todas nuestras empresas se ven afectadas, por supuesto, por el auge de la tecnología de
información, y por más descentralizados que estemos, queremos evitar la reiteración de
errores o la creación de plataformas que no nos permitan trabajar conjuntamente en el futuro,”
dijo Wiklund. “Esto implica dos tareas importantes para el comité: mantenerse enterado de las
actualidades tecnológicas, con estudios de las prácticas más eficaces, y permitir una
coordinación y un apoyo cuando se trata de tomar decisiones estratégicas determinantes.”
Comité de atención a la clientela
Este grupo se concentró en las necesidades y comportamientos de los más de cinco millones
de clientes que usan los productos de Bonnier en Suecia solamente. “Son éstas las relaciones
más importantes: es gracias a ellas que cobramos nuestros sueldos, y sin ellas no estaría yo
aquí hablando. Queremos reforzar esos vínculos y llevarlos más lejos.”
Seguro de competencia
Los empleados de Bonnier pueden destinar hasta el 5% de sus salarios mensuales a su
desarrollo personal, con un aporte equivalente por parte de la empresa. “El fondo crece
rápidamente y todos pueden usarlo para mejorar sus capacidades profesionales, ya sea
ampliándolas en otras esferas o bien profundizando un campo especializado. No se trata de un
sustituto para la capacitación tradicional, sino de una preparación para el futuro con una
óptica más personal.” Los empleados deciden junto con sus superiores sobre la manera más
propicia de invertir el dinero. Son más de 600 los empleados que se han inscrito; las
disciplinas más solicitadas son las lenguas extranjeras y la informática.
Bonnier y las mujeres
El 40% de los gerentes de Bonnier son mujeres, pero la compañía estima que necesita a más
mujeres en los altos cargos ejecutivos. Fue por ello que este año se lanzó un programa de tres