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Pavel Gusev:
La religión en la prensa poscomunista
Pavel Gusev, Director del Moscovsky Komsomlets reconoce que la cobertura informativa de
la religión es algo relativamente nuevo en Rusia. Antes de 1985, el periodismo religioso
especializado no existía siquiera, dado el ateísmo oficial de la URSS. Uno podía ser
encarcelado por escribir artículos de tendencia religiosa. “Se puede decir que este tipo de
periodismo nació dos años más tarde, cuando Rusia cumplió sus 100 años de existencia,”
explicó Gusev.
La herencia del comunismo
Tras la caída de la cortina de hierro, la Iglesia Ortodoxa rusa tuvo un período de amorío con la
prensa. Los valores de la iglesia parecen haber sufrido bajo el régimen comunista, por lo cual
la institución disfrutó de su calidad de víctima en un primer período después de la
disgregación de la URSS. Pero esta época de oro duró poco.
“No tardó en saberse que la iglesia había estado colaborando con el servicio secreto de la
KGB durante años,” dijo Gusev. En lugar de responder a las acusaciones, las autoridades
eclesiásticas adoptaron una táctica de silencio, creyendo así situarse por encima de la
polémica. Pero lo único que lograron fue un recrudecimiento de los ataques de la prensa. “En
poco tiempo, se creó una suerte de hostilidad entre la prensa y la iglesia,” recordó Gusev.
A diferencia de las organizaciones religiosas en otras países, la Iglesia Ortodoxa rusa optó por
no crear sus propias publicaciones tras la caída del comunismo, dando a entender que creía
innecesario disponer de medios informativos propios. Por otra parte, los contactos con los
otros medios se mantuvieron muy reducidos. Algunos sacerdotes ortodoxos estaban
dispuestos a hablar con los medios informativos, pero las autoridades no tardaron en
desaprobar estas iniciativas. Si alguien actualmente infringe esta disposición, se lo mira con
malos ojos.
La Iglesia Ortodoxa rusa hoy en día
La Iglesia Ortodoxa se considera ahora tan corrupta como el resto de la sociedad, dijo Gusev.
“Tienen fama de participar en el tráfico de vodka y se cuentan historias de desapariciones
inexplicables de fondos.” La iglesia se ha vuelto a la vez más integrista en sus enseñanzas y
menos transparente en sus manejos financieros. Ha habido también una serie de escándalos
revelados por la prensa, incluyendo el caso de un sacerdote pedófilo.
“Esto ha hecho que los jóvenes se desinteresen por la Iglesia Ortodoxa, aun cuando estén
buscando una orientación religiosa,” dijo Gusev. “Tienden a volcarse más bien hacia el
catolicismo u otras religiones.” Esencialmente, la Iglesia Ortodoxa ha perdido su lugar como
guía espiritual de la nación rusa.
Otras religiones
Cuando cayó el comunismo, una serie de sectas evangélicas protestantes se establecieron en
Rusia. Disponían de presupuestos importantes y tenían un objetivo claro: convertir a los rusos.
Sus métodos eran novedosos para muchos rusos y atrajeron a un cierto número de adeptos.
Muchos de estos grupos tenían tanto poder financiero que podían pagarse espacios en la