VOLVER A INVENTAR LA COMPAÑIA PERIODÍSTICA ...

“Entre tres y cinco personas mueren aquí a causa de la tortura no cada año, sino cada día,”
escribió.
El propio Nayouf tiene quemaduras de cigarrillo en todo el cuerpo. Ha sido sometido a los
más abominables suplicios, incluyendo descargas eléctricas, crucifixiones invertidas y
repetidas golpizas con caños de hierro y cables de acero. Las torturas que le han infligido lo
han dejado parcialmente paralizado de la cintura para abajo, casi ciego y medio sordo. Padece
de cáncer linfático y de una enfermedad hepática, pero se le ha negado tratamiento médico
adecuado.
El objetivo de todas estas atrocidades es quebrar el espíritu de Nayouf.
“Nizar Nayouf tiene entre sus manos el poder de salvarse físicamente,” dijo de Aquino.
“Bastaría con firmar un documento admitiendo que hizo falsas declaraciones sobre la
situación de los derechos humanos en el país para que lo dejaran en libertad y pudiera obtener
los cuidados médicos que necesita para tratar las enfermedades y lesiones profundas que tanto
sufrimiento le provocan.
“Pero el Sr. Nayouf se ha negado desde siempre a firmar tal documento.”
En su mensaje, Nayouf desmintió ciertos comunicados oficiales que daban parte de su
liberación. Según él, estos comunicados tenían por objeto preparar el terreno para su
“desaparición”, y añadió que “no tenía ninguna esperanza” de poder vivir alguna vez en
libertad.
Sin embargo, de Aquino puso de relieve el hecho de que los sufrimientos de Nayouf debían
incitar a periodistas en todo el mundo a redoblar sus esfuerzos por lograr su liberación, así
como la de los no menos de 80 periodistas encarcelados en un mínimo de 18 países. Acaso la
muerte reciente de Hafez al-Assad, el líder sirio desde hace largos años, represente un rayo de
esperanza.
“Resulta simplemente inadmisible que tantos gobiernos a través del mundo respondan a las
críticas y denuncias encarcelando, cuando no eliminando, a los disidentes,” dijo de Aquino.
“Esperemos que al menos uno de estos gobiernos – el de Siria – empiece finalmente a
comprender, gracias a este premio, que la represión brutal de ideas, opiniones e información
lo convertirá en un paria de la comunidad internacional.
“Ojalá nuestras voces sean escuchadas por el sucesor de Hafez al-Assad, quien tiene ahora
una oportunidad histórica única de convertirse en libertador del pueblo sirio.”