Historia Republicana - Ministerio del Poder Popular para la Educación

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07.06.2013 Views

118 UN BUEN DÍA: 23 DE ENERO DE 1958 La unión cívico-militar se hizo presente en las calles con un mismo objetivo: derrocar a la tiranía La construcción de obras públicas había sido un recurso para producir ganancias sustanciosas a funcionarios corruptos y a una parte de la burguesía nacional que se ocupaba de empresas constructoras, finanzas, materiales de construcción, importaciones y servicios. Este sector de la burguesía no expresó durante mucho tiempo insatisfacción con el régimen; en cambio, la burguesía industrial manufacturera empezó a tomar posiciones antigubernamentales más o menos desde 1956, por los perjuicios que le ocasionaba la política oficial a esa rama de la industria. En 1957, la situación económica se hizo complicada. Las obras suntuarias y las de verdadera utilidad pública eran ambiciosas y muy costosas, porque mientras más caras fueran, mayor porcentaje de ganancias obtenían los gobernantes y los contratistas allegados. Tan altos fueron los compromisos de pago, que el Gobierno empezó a tener dificultades para cumplirlos, a pesar del elevado ingreso de la nación: gran parte de la burguesía vinculada a las negociaciones del gobierno sintió los efectos del retraso en el pago de sus productos, empréstitos y servicios; entonces empezó a distanciarse del Gobierno y, poco a poco, creció su insatisfacción. Por otra parte, el Gobierno estadounidense no veía con buenos ojos algunas políticas soberanas que había tomado Pérez Jiménez en los últimos tiempos en materia petrolera y financiera, explicadas en el tema anterior. Así surgieron las condiciones para que diferentes sectores de la sociedad se decidieran a apoyar la lucha contra la dictadura que, durante diez años, había mantenido el grupo de oposición. Tiene la palabra un historiador Rodríguez Campos analiza ese proceso así: “A nes de 1957, una gran parte de la burguesía nacional tenía una posición antigubernamental, igual ocurría con el clero y grupos de militares jóvenes, por lo que en el momento dado, apoyaron planes de opositores del régimen para derrocar al dictador. De ese modo surgieron las condiciones internas para que prosperara el movimiento cívico-militar que derrocó Fuente: www.bicentenario.gob.ve

a Pérez Jiménez el 23 de enero de 1958 (…) El 19 de abril de 1957 el arzobispo de Caracas envió a todas las iglesias una pastoral que fue leída a la feligresía, donde se denunciaba la miseria que padecía el pueblo como consecuencia del despilfarro y de la desigual distribución de la riqueza. Decía la pastoral de Monseñor Arias: “Nuestro país se va enriqueciendo con impresionante rapidez. Según un estudio económico de las Naciones Unidas, la producción per cápita en Venezuela ha subido al índice de 540 dólares… Ahora bien, nadie osará armar que esa riqueza se distribuye de manera que llegue a todos los venezolanos, ya que la inmensa mayoría de nuestro pueblo está viviendo en condiciones que no se pueden calicar humanas”(…)La iglesia había asumido ya su posición pública, los partidos políticos movilizaban sus cuadros y buscaban una fórmula unitaria que les permitiera realizar una oposición vigorosa capaz de enfrentar la dictadura y vencerla. El Partido Comunista había llamado desde febrero a constituir un frente político (…) que debía estructurarse sobre tres puntos básicos: 1. La lucha por la amnistía política para todos los secuestrados, desterrados y perseguidos. 2. La elaboración de un estatuto electoral que permitiera, mediante el voto directo, universal y secreto (del presidente de la República). 3 Retornar a Venezuela un gobierno constitucional respetuoso de los derechos ciudadanos y las libertades democráticas (…) Esa fue la idea inicial, a cuyas resultas fueron celebradas consultas con otros partidos, de las cuales surgió la Junta Patriótica…” (Manuel Rodríguez Campos: Venezuela 1948-1958, Caracas, pp. 241-243). Surgimiento de la Junta Patriótica En junio de 1957 se fundó la Junta Patriótica para “luchar por la celebración de elecciones y por el establecimiento de un gobierno democrático”. Sus miembros fundadores fueron: Guillermo García Ponce del Partido Comunista de Venezuela y tres urredistas: Fabricio Ojeda, Amílcar Gómez y José Vicente Rangel. Posteriormente, se incorporaron Silvestre Ortiz, Bucarán y Moisés Gamero por Acción Democrática; Pedro Pablo Aguilar y Enrique Aristiguieta Gramko por Copei y Héctor Rodríguez Bauza del PCV, quien sirvió de enlace entre la Junta y un Comité Cívico-Militar. La Junta Patriótica fue presidida por Amílcar Gómez y luego por el periodista Fabricio Ojeda. Amílcar Gómez y Pedro Pablo Aguilar habían sido detenidos, pero la acción de ese organismo lejos de cesar, se intensificó. Conjuntamente, actuaron la Junta Patriótica Femenina coordinada por Argelia Laya, del PCV, y Rosa RattoCiarlo, de URD; un frente estudiantil y varios núcleos obreros. Trabajó tan clandestinamente, que quienes respaldaron sus planes y se incorporaron a las acciones solo conocieron esos nombres cuando el 23 de enero se anunció la caída del régimen. Guillermo García Ponce Desde su fundación hubo en todo el país una constante actividad. Imprentas y multígrafos imprimían a escondidas los mensajes que se distribuían al pueblo a través de curiosos medios: caían desde techos de los edificios y de los campanarios de las iglesias; se distribuían a la salida de cines, fábricas, liceos, en las paradas de autobuses, en mercados y hospitales; se enviaban por correo. La gente los leía ávidamente y atendía sus orientaciones. 119

a Pérez Jiménez el 23 de enero de 1958 (…) El 19 de<br />

abril de 1957 el arzobispo de Caracas envió a todas<br />

<strong>la</strong>s iglesias una pastoral que fue leída a <strong>la</strong> feligresía,<br />

donde se denunciaba <strong>la</strong> miseria que padecía el<br />

pueblo como consecuencia <strong>del</strong> despilfarro y de <strong>la</strong><br />

desigual distribución de <strong>la</strong> riqueza. Decía <strong>la</strong> pastoral<br />

de Monseñor Arias: “Nuestro país se va enriqueciendo<br />

con impresionante rapidez. Según un estudio<br />

económico de <strong>la</strong>s Naciones Unidas, <strong>la</strong> producción<br />

per cápita en Venezue<strong>la</strong> ha subido al índice de 540<br />

dó<strong>la</strong>res… Ahora bien, nadie osará armar que<br />

esa riqueza se distribuye de manera que llegue a<br />

todos los venezo<strong>la</strong>nos, ya que <strong>la</strong> inmensa mayoría<br />

de nuestro pueblo está viviendo en condiciones<br />

que no se pueden calicar humanas”(…)La iglesia<br />

había asumido ya su posición pública, los partidos<br />

políticos movilizaban sus cuadros y buscaban una<br />

fórmu<strong>la</strong> unitaria que les permitiera realizar una<br />

oposición vigorosa capaz de enfrentar <strong>la</strong> dictadura y<br />

vencer<strong>la</strong>. El Partido Comunista había l<strong>la</strong>mado desde<br />

febrero a constituir un frente político (…) que debía<br />

estructurarse sobre tres puntos básicos: 1. La lucha<br />

por <strong>la</strong> amnistía política <strong>para</strong> todos los secuestrados,<br />

desterrados y perseguidos. 2. La e<strong>la</strong>boración de<br />

un estatuto electoral que permitiera, mediante<br />

el voto directo, universal y secreto (<strong>del</strong> presidente<br />

de <strong>la</strong> República). 3 Retornar a Venezue<strong>la</strong> un<br />

gobierno constitucional respetuoso de los derechos<br />

ciudadanos y <strong>la</strong>s libertades democráticas (…) Esa<br />

fue <strong>la</strong> idea inicial, a cuyas resultas fueron celebradas<br />

consultas con otros partidos, de <strong>la</strong>s cuales surgió <strong>la</strong><br />

Junta Patriótica…”<br />

(Manuel Rodríguez Campos: Venezue<strong>la</strong> 1948-1958, Caracas, pp.<br />

241-243).<br />

Surgimiento de <strong>la</strong> Junta Patriótica<br />

En junio de 1957 se fundó <strong>la</strong> Junta Patriótica <strong>para</strong><br />

“luchar por <strong>la</strong> celebración de elecciones y por el<br />

establecimiento de un gobierno democrático”. Sus<br />

miembros fundadores fueron: Guillermo García Ponce<br />

<strong>del</strong> Partido Comunista de Venezue<strong>la</strong> y tres urredistas:<br />

Fabricio Ojeda, Amílcar Gómez y José Vicente Rangel.<br />

Posteriormente, se incorporaron Silvestre Ortiz,<br />

Bucarán y Moisés Gamero por Acción Democrática;<br />

Pedro Pablo Agui<strong>la</strong>r y Enrique Aristiguieta Gramko por<br />

Copei y Héctor Rodríguez Bauza <strong>del</strong> PCV, quien sirvió<br />

de en<strong>la</strong>ce entre <strong>la</strong> Junta y un Comité Cívico-Militar.<br />

La Junta Patriótica fue presidida por Amílcar<br />

Gómez y luego por el periodista Fabricio Ojeda.<br />

Amílcar Gómez y Pedro Pablo Agui<strong>la</strong>r habían sido<br />

detenidos, pero <strong>la</strong> acción de ese organismo lejos<br />

de cesar, se intensificó. Conjuntamente, actuaron <strong>la</strong><br />

Junta Patriótica Femenina coordinada por Argelia<br />

Laya, <strong>del</strong> PCV, y Rosa RattoCiarlo, de URD; un<br />

frente estudiantil y varios núcleos obreros. Trabajó<br />

tan c<strong>la</strong>ndestinamente, que quienes respaldaron<br />

sus p<strong>la</strong>nes y se incorporaron a <strong>la</strong>s acciones solo<br />

conocieron esos nombres cuando el 23 de enero se<br />

anunció <strong>la</strong> caída <strong>del</strong> régimen.<br />

Guillermo García Ponce<br />

Desde su fundación hubo en todo el país una<br />

constante actividad. Imprentas y multígrafos<br />

imprimían a escondidas los mensajes que se<br />

distribuían al pueblo a través de curiosos medios: caían<br />

desde techos de los edificios y de los campanarios de<br />

<strong>la</strong>s iglesias; se distribuían a <strong>la</strong> salida de cines, fábricas,<br />

liceos, en <strong>la</strong>s <strong>para</strong>das de autobuses, en mercados y<br />

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ávidamente y atendía sus orientaciones.<br />

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