05.06.2013 Views

SAL EN LA HERIDA

SAL EN LA HERIDA

SAL EN LA HERIDA

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

incidente a fin de identificar e interrogar a los que presuntamente habían intervenido<br />

en las agresiones, pero en el momento de redactarse este informe no<br />

habían logrado que se reabriera el caso.<br />

El reiterado archivo del caso y la ausencia de una investigación pronta,<br />

exhaustiva e imparcial por parte del juez de instrucción ha desembocado<br />

en el archivo del caso sin llegar a juicio. El único recurso que les queda a<br />

los denunciantes es apelar ante el Tribunal Constitucional alegando denegación<br />

del proceso debido, un procedimiento largo y costoso que Javier S<br />

afirma no poder emprender por motivos económicos. Los denunciantes<br />

continúan sintiendo una gran rabia y frustración por lo que consideran un<br />

doble fallo de la policía y del sistema judicial. Con el apoyo de una ONG<br />

local, el Frente de Liberación Gay de Cataluña (Front d’Alliberament Gai<br />

de Catalunya), Javier S ha seguido buscando justicia por otros cauces,<br />

incluido el representante del gobierno estatal en Cataluña (Delegado del<br />

Gobierno) y el Defensor del Pueblo catalán (Síndic de Greuges), y en<br />

ambos casos le han asegurado que se abriría una investigación. Sin<br />

embargo, hasta la fecha no ha recibido más información de ninguno de<br />

los dos.<br />

El caso de Daniel Díaz Gallego es un ejemplo de cómo el juzgado de instrucción<br />

y el tribunal de segunda instancia han concedido más credibilidad al<br />

testimonio de la policía que a otras formas de prueba.<br />

EL CASO DE DANIEL DÍAZ GALLEGO Y OTROS<br />

En el caso de Daniel Díaz Gallego, Manuel Matilla Parrilla, Israel Sánchez<br />

Jiménez y Marcos V (véase supra), las presuntas víctimas de tortura y otros<br />

malos tratos fueron condenadas por atentado contra agente público. El 3 de<br />

octubre de 2005, Manuel Matilla y Daniel Díaz fueron condenados a tres<br />

años y seis meses de prisión por desórdenes públicos, delito de lesiones y<br />

delito de atentado (contra un agente público), lesiones y desórdenes públicos.<br />

Israel Sánchez fue condenado a 18 meses de prisión por desórdenes<br />

públicos y atentado contra agente público. Marcos V fue condenado a seis<br />

meses de prisión por atentado contra agente público. Otro hombre, detenido<br />

al mismo tiempo que los demás y por los mismos cargos, fue absuelto al no<br />

haber sido identificado como sospechoso por los agentes de policía que testificaron<br />

ante el tribunal. Según la información de que dispone Amnistía Internacional,<br />

fue el único de los acusados que no había presentado denuncia por<br />

malos tratos.<br />

La Audiencia Provincial de Madrid confirmó las condenas en segunda instancia<br />

el 25 de abril de 2007. En su fallo, el tribunal afirmaba que «la condena<br />

del acusado [...] se basa exclusivamente en la declaración testifical de los<br />

demás policías [presentes en el lugar de la detención] [...] sin tener en cuenta<br />

52 | ESPAÑA: <strong>SAL</strong> <strong>EN</strong> <strong>LA</strong> <strong>HERIDA</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!