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AMONE STACI ON.
ftìouftruo de dcfvario^cncmigo deIlinagehumano,fcria tenido Juftamentc ci
rey o principe,que porque ay muchos que vfan mal del pá, del agua,del vina,
del fuego,de la luz,v de las otras cofas neceííarias à la vida humana, o las prohibieífe
del rodo,o hizieíTe tal eftáco deellas que no fe dieíFen fi no muy caras,
y con grande efcaífeza.La palabra de Dios tiene todos eílos títulos,porque ra
Bien tiene los mifmos efFeftos para el anima,miren pues los principes del mü^
do, en que opinion quieren fer tenidos haziendola paífar por tan iniqua condició.
Finalmére como quiera que fea,es menefter que fe rcfueluan,Quc ni la§
difputas importunas, ni las defenfas violen tas,ni los pretextos cauteiofos,ní
el fuego,ni las armas, ni toda lapotencia del mudo junta podrá ya refiftir,qu«
la Palabra de Dios no corra por todo tan libr emente como el Sol por el cielo,
como ya lo vamos todos prouando por experiencia: y feriaprudencia no poca
aprender de lo experimentado para lo por venir,y tomar otros confejos.Ni
nos dexemos engañar mas con los pretextos dichos ,porq no fe en cubre mu-»
cho loque el diablo pretende c6 ellos, auque losqlos han pueílo tengan quato
buena intención quiliercn. por lo menos ello es meneiter que efté fuera de
de difputa,Que auiendo dado Dios fu palabra à los hombrcs,y queriendo que
fea entendida y puefta en eíFefto de todos, ningún buen fin puede pretender
el'quela prohibiere en qualqnicr lengua que fea.
El dccrcto Tenemos ya bien materia de q hazer gracias à Dios en efta parte,que ha da^
del Condì, do luz àlos padres del cócilio Tridétino, paraq aduirtiendo mejor à efta cau^
Tnrf. accrcx fa,ayan puello algu remedio en eílo có fu Decreto, elqual pufimos luego en eí
dcU pcmif principio de efte libro ala buelca de la primera hoja, paraque aquellos à cuyas
pon dcUBi manos viniere,quite del todo el efcrupulo deleerlo,q alaverdadjCoelindulto
hlU en Un- y aü mádamieto q tiene dcDios à fer eítudiofos de fu palabra,podriá auer qui^
¿uu vulgar, tado.Porno auerfeexceptado en el dicho Decreto ninguna nació,cntédemos
que la Efpañola fera tabien cóprehcndida,poq no es de creer que la querrá ha^
zer mas apocada y vil q las o tras todas a quié fe cócede vn tan gribié:y anfi recibirá
en feruicio efte nueftro trabajo de darle atiepo la diuina Efcriptura ert
fu legua vulgar,parad defde luego pueda gozar de la facultad quepor el Decr«
ro dicho le es cócedida. Quato à loque toca al autor de la Translacio,fi Catholieo
es,el q fiel y fenzillamete cree y profeíTa loq la fanfta Madre Iglefia ChriftianaCatholica
crec,tienc,y máticnc,decerminadoporEfpiritu.Sáfto,porlo^
Cánones déla Diuina Efcriptura^en los Sáftos Cócilios, y en los Symbolos y
fummas comunes de la F9, que llama comunmete el de los Apoltoles, el de el
Concilio Niceno, y elde Athanafio, Catholico es, y injuria manifiella le hará
quien no lo tuuiere por tal:y como tal mngun bueno,pio,fanélo y íano juyzìo
rccufa,no folo de la Iglefia Chriftiana, à laqual reconoce todo refpeílo de verdadero
y biuo miembro,mas aun de qualquierparticular que con charidad lo
corrigiere, fi en vna obra tan larga y tan trabajofa fehallareauererrado como
hombre.
Refta que en loque à la yerfion toca demos razón de algunas cofas, anfi
raque à la Iglefia del Señor confte de nueftra razón en codo loque cóuiene,co>
Ldl^erfton moparaque elpioleiflor,entendido nueftro intento, fe pueda mejor aprouecomún
fctt- ehar de nueftras diligencias. Primeramete declaramos no auer feguido en efta
Translacio en todo y por todo la vieja Translacio Latina,que eftá en el co-»
mun vfo : porq^ueanq^iie fu autoridad porla antigüedad fea grande, ni lo vno
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