Una cristiana.pdf - Ataun
Una cristiana.pdf - Ataun Una cristiana.pdf - Ataun
- Déjame a mí. Cada loco con su tema - le respondí sonriendo -. Mi gloria consiste en una quimera, ya lo sé, y quimera muy rara... ¿Pues qué mal hago? A mí me basta, y a los demás no les importa. Estoy satisfecho con que medie cierto paralelismo de sentimientos entre la mujer fuerte y yo. Si a mí me inspira repugnancia una persona, repugnancia le inspira a ella; lo que yo odio, ella lo odia: podrá no quererme a mí, pero nadie quita que sus afectos van al compás de los míos. Tú dices que mi tía es una mujer de otros tiempos, y que el espíritu cristiano y la religiosidad profunda que dictan sus acciones la hacen incompatible conmigo, que soy racionalista. Pues mira: podremos entender de diferente modo, pero sentimos igual. No lo dudes. A cualquier camueso que no conciba estas honduras y delicadezas, se le figurará que mi tío, el marido, su dueño, es el obstáculo que hay entre nosotros... ¡Memo quien tal crea! Mi tío es el lazo que nos une. No creas que yo le quiero mal porque esté casado con ella. ¡Qué
disparate! Ya sabes que mi tío me es antipático desde hace ene años... desde que nací; y que ahora mi repulsión se ha convertido en aversión... porque ella le detesta también. No hay más. Mi amigo no contestó al pronto. Después exclamó, mirándome compadecido: - Vámonos a casa. Tienes calentura. - No, no creas que estoy trastornado. -¡Si no digo trastornado! Pero tienes fiebre. Echas chispas por los ojos. Embózate... y a casita. Cuando ya habíamos pasado más allá del monumento colombino, Portal me dijo en el tono con que se da una mala noticia: -¿No sabes quién está, en mi concepto, cien veces más malo que estuviste tú? ¿Pero sentenciadito? -¿Quién? - El empollón de Dolfos. Así llamábamos en nuestra jerga amistosa y escolar a un pobre muchacho zamorano, muy
- Page 361 and 362: qué a Carmiña, y sentándome a su
- Page 363 and 364: - Mientras esté irritado, no... po
- Page 365 and 366: Pero la esposa no dejó salir nada
- Page 367 and 368: frac y pantalón nuevos brillaban c
- Page 369 and 370: maestoso está en El Barco Fantasma
- Page 371 and 372: Yo buscaba el pañuelo para amparar
- Page 373 and 374: egiones más hermosas para mí cuan
- Page 375 and 376: SEGUNDA PARTE La prueba - I - No s
- Page 377 and 378: doble, o con otro de los infinitos
- Page 379 and 380: Abrí la válvula. ¡Necesitaba tan
- Page 381 and 382: me disponía nuestro paisano el doc
- Page 383 and 384: orgullo, lo mismo que si dijesen:
- Page 385 and 386: en mis trece... Pero de ahí a cerr
- Page 387 and 388: lámina de Romeo subiendo por el ba
- Page 389 and 390: -¡Inocente! - exclamé gozándome
- Page 391 and 392: ita Mó, ni si cuenta con padre, ma
- Page 393 and 394: - Todavía no - respondió mi amigo
- Page 395 and 396: muy mal en tocar siquiera la conver
- Page 397 and 398: de la aristocracia en sus orígenes
- Page 399 and 400: Una cosa me cohibía, aguándome el
- Page 401 and 402: Buenos Aires. Con lo que sé ya me
- Page 403 and 404: - Verás - contesté, apoyándome e
- Page 405 and 406: - También a mí - contesté - me h
- Page 407 and 408: os, que tendrá dieciséis o diecis
- Page 409 and 410: tiendo. Nadie me quita de la cabeza
- Page 411: a toda costa... Pero a medida que p
- Page 415 and 416: o! como meter... se mete, mazo y es
- Page 417 and 418: - III - Escribí a mamá una carta
- Page 419 and 420: confundir y barajar las cosas más
- Page 421 and 422: quería ocultarme a mí mismo, por
- Page 423 and 424: etroceso que realizamos ante la mue
- Page 425 and 426: expones? Ea, hoy sales a dar una vu
- Page 427 and 428: nas» cierto periódico muy autoriz
- Page 429 and 430: llez de los Roeles de Porcuna, nobl
- Page 431 and 432: to es que Pepita profesaba al seño
- Page 433 and 434: No pisé su casa sin religiosa emoc
- Page 435 and 436: su faz de rey mago, que parecía de
- Page 437 and 438: sin inflexiones, una voz blanca, y
- Page 439 and 440: prestarse, porque, según decía,
- Page 441 and 442: ladaré lo que decía de mi carrera
- Page 443 and 444: ven ustedes atarugados. Se les pide
- Page 445 and 446: que sería mucho mayor si no estuvi
- Page 447 and 448: quién entraba y salía en casa de
- Page 449 and 450: le la baba: «¡Cómo están tan un
- Page 451 and 452: íos, amigos de cháchara, pero má
- Page 453 and 454: gado por otro orden de sentimientos
- Page 455 and 456: Cada día se patentizaba mejor que
- Page 457 and 458: El segundo indicio, puramente moral
- Page 459 and 460: La satisfacción de tití se revela
- Page 461 and 462: páginas con ataques a mi tío y a
disparate! Ya sabes que mi tío me es antipático<br />
desde hace ene años... desde que nací; y que<br />
ahora mi repulsión se ha convertido en aversión...<br />
porque ella le detesta también. No hay<br />
más.<br />
Mi amigo no contestó al pronto. Después exclamó,<br />
mirándome compadecido:<br />
- Vámonos a casa. Tienes calentura.<br />
- No, no creas que estoy trastornado.<br />
-¡Si no digo trastornado! Pero tienes fiebre.<br />
Echas chispas por los ojos. Embózate... y a casita.<br />
Cuando ya habíamos pasado más allá del<br />
monumento colombino, Portal me dijo en el<br />
tono con que se da una mala noticia:<br />
-¿No sabes quién está, en mi concepto, cien<br />
veces más malo que estuviste tú? ¿Pero sentenciadito?<br />
-¿Quién?<br />
- El empollón de Dolfos.<br />
Así llamábamos en nuestra jerga amistosa y<br />
escolar a un pobre muchacho zamorano, muy