04.06.2013 Views

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

NORA ROBERTS AURORA BOREAL<br />

¡Vaya silencio!, fue su primer pensamiento. ¿Cómo podía trabajar sin música<br />

aquel hombre? Dejó en el suelo la mochila y se disponía a llamarle cuando él<br />

apareció en la puerta.<br />

De no haber estado atenta, Meg no se habría fijado en que la mano <strong>de</strong> Nate<br />

estaba apoyada en la culata <strong>de</strong>l revólver enfundado, ni tampoco en cómo la apartaba<br />

al sonreírle.<br />

—Huelo a comida... y a mujer. Lo que <strong>de</strong>spierta mis instintos <strong>de</strong> hombre <strong>de</strong> las<br />

cavernas.<br />

—Pizza <strong>de</strong> salchichón. Pensaba que te apetecería algo caliente, en lo que me<br />

incluyo.<br />

—Pues aceptaré ambas cosas. ¿Por qué llevas la mochila?<br />

No se había fijado en que él la había visto.<br />

—Me fugo. ¿Te apuntas?<br />

—¿Pelea con Charlene?<br />

—Sí, pero no es por eso. En realidad, casi hemos hecho las paces. Tenía que<br />

largarme como fuera, Burke. Demasiada gente, <strong>de</strong>masiado tiempo seguido. Me pone<br />

<strong>de</strong> los nervios. He pensado que una pizza y un polvo en casa me calmarían; así ya no<br />

agrediría a nadie y tú no tendrías que <strong>de</strong>tenerme.<br />

—No está mal el plan.<br />

—Mi i<strong>de</strong>a era salir zumbando, pero no lo he hecho. Supongo que se me tendrá<br />

en cuenta.<br />

—Anotadísimo. Y ahora, ¿por qué no <strong>de</strong>jas la pizza por ahí? Encontraré algo<br />

para regarla.<br />

—Tengo esto. —Meg metió la mano en la bolsa y sacó una botella <strong>de</strong> vino<br />

tinto—. Expropiada <strong>de</strong>l bar <strong>de</strong>l Lodge. Tendremos que terminarla para hacer<br />

<strong>de</strong>saparecer todas las pruebas.<br />

Le dio la botella <strong>de</strong> camino hacia el <strong>de</strong>spacho; <strong>de</strong>jó la pizza en su escritorio.<br />

Tras oír la puerta, Nate había cerrado sus archivos, apagado la impresora y el<br />

or<strong>de</strong>nador y colocado la tela encima <strong>de</strong>l tablero.<br />

—¿Servilletas? —preguntó Meg.<br />

No era por falta <strong>de</strong> caballerosidad, pero no podía <strong>de</strong>jarla sola en el <strong>de</strong>spacho.<br />

—Debajo <strong>de</strong>l mostrador <strong>de</strong> Peach. —Sacó su navaja suiza para quitarle el tapón<br />

a la botella—. En realidad, es la primera vez que la uso. Un trabajo <strong>de</strong>l copón, pero...<br />

¡eh! —Le mostró el corcho que acababa <strong>de</strong> sacar—. ¡Lo conseguí!<br />

Meg puso las servilletas y sacó dos tazas <strong>de</strong> <strong>de</strong>trás <strong>de</strong> la cafetera.<br />

—¿Y esto qué es? —Levantó un extremo <strong>de</strong> la tela con un <strong>de</strong>do.<br />

—No. —Al ver la cara <strong>de</strong> sorpresa <strong>de</strong> Meg, movió la cabeza—. Déjalo. Vamos a<br />

comer.<br />

Se sentaron y compartieron el vino y la pizza.<br />

—¿Por qué trabajas hasta tan tar<strong>de</strong>, y solo? ¿Estabas matando el tiempo<br />

esperando que acabara mi turno <strong>de</strong> noche?<br />

—En parte, sí. Pero cuéntame, ¿por qué os habéis peleado tú y Charlene?<br />

—Estás cambiando <strong>de</strong> tema.<br />

—Pues sí.<br />

- 243 -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!