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II Encuentro – Enero 2008
I Encuentro – Agosto
Diego Miguel-Urzanqui
2007
Director
CONCIERTOS
CONCIERTOS
Sabiñanigo, 4 de enero a las 20:30 h en el Auditorio La Colina
Boltaña, 5 de enero a las 22:00 h en el Palacio de Congresos
Monzón, 6 de enero a las 19:00 h en el Auditorio San Francisco

II Encuentro – Enero 2008
Iª Parte
Gioacchino Rossini
Pesaro, 1792 – Paris, 1868
Obertura de L’Italiana in Algeri
Claude-Achille Debussy
Saint-Germain-en-Laye, 1862 – Paris, 1918
Petite Suite
En Bateau
Cortége
Menuet
Ballet
IIª Parte
Ludwig van Beethoven
Bonn, 1770 – Viena, 1827
Sinfonía en Do Mayor, nº 1 Op.21
Adagio molto - Allegro con brio
Andante cantabile con moto
Menuetto (Allegro molto e vivace)
Adagio - Allegro molto e vivace

Diego Miguel-Urzanqui
Director Artístico
Nacido en 1978 en Calahorra (La Rioja), inicia los estudios de
música en el Conservatorio de su ciudad natal. Realiza los estudios de
violín con la profesora Isabel Vilà en Burgos y Salamanca, obteniendo
la Titulación Superior de violín en el Conservatorio Superior “Jesús
Guridi” de Vitoria.
Así mismo, estudia dirección de orquesta y fenomenología musical
con Jordi Mora en Barcelona y participa en numerosos cursos, ensayos
y clases magistrales realizadas por el citado maestro tanto en España
como en Europa, destacando los cursos celebrados en Alemania y
Suiza.
Cursa estudios de dirección de orquesta y de dirección de coro
en la Escuela Superior de Música de Cataluña, recibiendo clases de
profesores de reconocido prestigio internacional como Salvador
Brotons y Mireia Barrera. También participa en cursos de dirección
de orquesta con maestros como Antoni Ros-Marbà y Xavier Casademunt, y de fenomenología musical
con la pianista Elizabeth Sombart en la Foundation Résonnance (Suiza).
Desde el 1998, año en el que es nombrado director de la Orquesta Filarmónica “Maestro Arroyo”,
ha realizado una intensa trayectoria musical, a nivel nacional, que le ha llevado a ser director titular de
la Orquesta de Cámara de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona y de la Orquesta Sinfónica de
Monzón. Desde sus inicios, ha sido invitado a dirigir diferentes orquestas y agrupaciones de cámara
como, el Conjunto Instrumental de la Universidad Pompeu Fabra, la Banda Municipal de San Asensio
(La Rioja) o el conjunto de Metales “Huesca Brass” de Monzón (Huesca), entre otros, y ha sido director
asistente de las orquestas de grado medio del Conservatorio “Jesús Guridi” de Vitoria, de las Setenes
orquestrades de Catalunya (Barcelona) y del Cebreros Festival of Strings, (Ávila).
Centros musicales como la Gene Nastri Community School of the Arts, (EE.UU.) y el Conservatorio
Profesional de Música “Miguel Fleta” de Monzón, entre otros, también han contado con su colaboración
para impartir cursos como profesor de práctica orquestal y de música de cámara, ampliando así su
labor pedagógica.
Paralelamente, sigue desarrollando su labor como violinista formando parte de la Orquesta de
Cámara de Vic, la Orquesta Sinfónica Segle XXI y la Bruckner Akademie Orchester (Munich).
Diego Miguel-Urzanqui

Gioacchino Rossini
L’Italiana in algeri. Obertura
Desde su infancia, Rossini manifestó unas
cualidades musicales extraordinarias que le
permitían inventar melodías con una facilidad
que rozaba lo increíble. Tales dotes convivían
con una pereza algo particular, según manifiesta
la siguiente anécdota: “cierto día que Rossini
estaba componiendo en la cama, como tenía
por costumbre, se le cayó de pronto una página
al suelo. El compositor decidió que, antes que
molestarse en recoger la partitura, era preferible
componer otra nueva aria”. Como buen amante
del bell canto decidió, en su juventud, que sus
esfuerzos se iban a dirigir principalmente a
escribir óperas y, ciertamente, consiguió sus
propósitos, porque fue tal el éxito en vida de
este compositor que, durante una buena época,
Rossini fue el ídolo de Europa. Sus viajes por
el continente fueron semejantes a marchas
triunfales, ya que en todas partes lo esperaban
masas jubilosas, festejos y delirantes honras de
los fanáticos de la ópera. El estreno del “drama
jocoso” L’Italiana in algeri, tuvo lugar en
Venecia en 1813, sólo unos meses más tarde del
Tancredi. Ambas obras representan la maestría
del compositor en los géneros bufo y serio,
respectivamente, aunque El barbero de Sevilla,
escrito en 1816, consagraría definitivamente
a Rossini. La obertura, música que se escucha
con una sonrisa, crea una atmósfera sensual y
de gran comicidad. Es una muestra del vitalista
y desenfadado espíritu rossiniano, que iluminó,
como fuegos artificiales, aquellos atormentados
años del siglo diecinueve.
Gioacchino Rossini

Claude-Achille Debussy
Claude-Achille Debussy
Petite Suite
“No existe la teoría, sólo es necesario
escuchar porque la ley es el placer”. Con estas
palabras se defendía el joven estudiante Debussy
ante las continuas críticas de sus profesores de
composición, ya que eran incapaces de entender la
creatividad y genialidad de sus obras. Alrededor
de 1887, Debussy comenzó a frecuentar las
reuniones de los poetas simbolistas, entre los
cuales se encontraban Baudelaire, Verlaine,
Rimbaud y Mallarmé. Éstos declaraban que el
arte debía dirigirse a los sentidos y a la intuición
antes que al intelecto. Debussy fue el poeta
musical de este arte utilizando un lenguaje
totalmente único y revolucionario. La Petite Suite,
obra de juventud, fue publicada originalmente
para piano a cuatro manos en 1889 y orquestada
por Henri Büsser en 1907 con la revisión y
aprobación del compositor. La versión orquestal
refleja la amplia gama de colores que Debussy
sabía imprimir a su música y, al igual que la obra
de cuatro manos, tuvo muy buena acogida desde
su estreno. Los cuatro números de Petite Suite,
que al parecer se inspiran en poemas escogidos
de Fêtes Galantes de Verlaine, evocan diversas
atmósferas. Despierta nuestros sentidos la
armonía plácida de En Bateau, el juego seductor
del Cortége, el arcaico lirismo del Menuet y el
brillo desinhibido del Ballet.

Ludwig van Beethoven
Sinfonía en Do Mayor nº 1, Op. 21
En 1822, Rossini visitó a Beethoven en Viena, donde éste vivía sólo
y pobre. Rossini veneraba al maestro, pero a Beethoven no le gustaba la
ópera italiana. Ello, añadido a la diferencia de idiomas y a la sordera casi
total de éste último, dificultó enormemente el diálogo. Al despedirse y como
agradecimiento por su visita, el genio alemán, conocedor de la fama que
El barbero de Sevilla había otorgado a Rossini, le dijo: “te deseo que sigas
componiendo muchos Barberos”. Sin duda, el estilo y las aspiraciones de
ambos compositores habían estado siempre muy distanciadas. Mientras la
inspiración musical de Rossini estaba vinculada al clasicismo dieciochesco
de aires frescos y placenteros, Beethoven volcaba todo su genio y audacia en plasmar las convulsiones de la
época que le tocó vivir. Una época revolucionaria en la que se sucedieron muchos cambios a nivel político,
social, filosófico y cultural. La primera sinfonía, que data de 1799, fue estrenada en Viena bajo la dirección
del compositor el 2 de abril de 1800, cuando éste contaba treinta años. En realidad, la sinfonía no pasó
inadvertida y sorprendió su simbiosis entre tradición e innovación. Por una parte, Beethoven había recibido
una gran herencia de Mozart y de su maestro Haydn. Las obras de ambos supusieron un modelo fundamental
para aprender aspectos musicales como el tratamiento de la forma sonata, los procesos armónicos, el poder
emocional del contraste o las formas de lograr la unidad dentro de la variedad, pero, por otra parte, Beethoven
estaba dotado de un talento único para descubrir nuevas sendas que dieran rienda suelta a todas las emociones,
inquietudes, deseos y angustias que ardían en su interior. Haydn había dicho de él, al escuchar sus primeras
obras: “Tiene usted mucho talento y progresará más en el futuro. Posee una gran inspiración y no sacrificará
jamás un bello pensamiento a una regla tiránica, lo cual me parece razonable; pero sacrificará las reglas a sus
fantasías, pues me parece que es usted un hombre que tiene varias cabezas, varios corazones, varias almas.
Creo que se descubrirá siempre en sus obras algo inesperado, insólito, sombrío, porque usted mismo es un
poco extraño y sombrío, y el estilo del músico revela siempre al hombre”. La sinfonía se inicia con un Adagio
molto que introduce armonías un tanto desconcertantes, sobre todo para oídos habituados a una concepción
clásica, que desembocan en un Allegro con brio cargado de vitalidad. El segundo movimiento, Andante cantabile
con moto, esencialmente lírico, nos lleva a un Menuetto, allegro molto e vivace, que a pesar de ser denominado
siguiendo la nomenclatura tradicional, es un scherzo beethoveniano. El movimiento final empieza con un Adagio
que nos muestra el lado más divertido del compositor. Después de un acorde a cargo de toda la orquesta, los
primeros violines inician una broma musical tocando una escala fragmentada: primero tres notas, una nota,
luego cuatro, cinco, seis, siete hasta llegar a la octava e iniciar así el Allegro molto e vivace.
La primera de Beethoven supuso el inicio de un itinerario sinfónico que se extendió durante el resto de
la vida del compositor y que culminó con la creación de la novena sinfonía. Las nueve Sinfonías constituyen
una obra gigantesca, grandiosa en sus proporciones y en su espíritu. En ella está toda la vida del hombre y
de su destino; y no sólo en lo terrenal y transitorio sino también en su interpretación de lo incognoscible,
frente al misterio de lo infinito.
Ludwig van Beethoven

La es una agrupación orquestal constituida y promovida por Sergio Guarné (Profesor de trompeta y Director del
Conservatorio Profesional de Música “Miguel Fleta) a finales del año 2006.
Tiene como fin proporcionar un cauce de formación musical a jóvenes instrumentistas, ser la referencia cultural de los
melómanos y del público en general en su zona geográfica y generar un gran estímulo para la evolución de la música en la comunidad
aragonesa.
En su II Encuentro, y a causa del repertorio seleccionado, presenta una plantilla de aproximadamente 65 miembros, aunque
la está compuesta por más 80 músicos procedentes de toda la geografía aragonesa, Navarra, País Vasco, Cataluña, La
Rioja, Castilla la Mancha,… haciendo de esta orquesta una plataforma ideal para obtener un enriquecimiento musical y artístico
relevante.
En la actualidad la Asociación Musical está patrocinada por las empresas privadas Griñó Trans, Bricolux, Hormigones
del Pirineo y el Ayuntamiento de Monzón, además de contar con múltiples colaboraciones. Gracias a estos apoyos la
puede fomentar la música como actividad cultural de una forma estable.
Violines I
Irene Huete**
Ivan Peirón
Maria Carrasco
Alvaro Marco
Ana Martínez
Beatriz Carbonell
Laura Royo
Víctor Palacín
Alicia Jiménez
María Alcalá
Sandra Yago
Violines II
Tamara González*
Héctor García
Mª Jesús Castell
Antonio Mendez
Isabel Gallego
Patricia Abad
Sara Périz
Helena Lanuza
Antonio Ferraz
Alba Cardil
Alejandro Pascual
Violas
Sandra García*
Elena Boj
Ricardo Gil
Cristina Adillón
Claudia Cantero
Silvia García
Cellos
María Rodríguez*
Cristina Civera
Juan Mª Raso
Leire Antoñanzas
Alberto Barrado
Jesús Moles
Contrabajos
Martí Sanmartí*
Olaya González
Elena Bosque
Pedro Tomás
Integrantes
Flautas
Ana Cristina Mainer
Raquel Martinez
Jorge Jimenez
Oboes
Adrea Bellosta
Meritxell Pradel
Raúl Riosalido
Clarinetes
Maria Grasa
Daniel Ubau
Fagots
Carmen Mainer
Javier López
Trompas
Begoña Zazo
Beatriz Martínez
Trompetas
Sergio Guarné
Gabriel Tripiana
Trombones
Adrián Castro
Alejo Ciria
Percusión
Manuel Cintora
Eduardo Hinojosa
Luis Fernando
David Miguel
Arpa
Ester Pinyol
**concertino
*solista

www.sergioguarne.com
www.educa.aragob.es/cpmmonzo/
ORGANIZA. Asociación Musical OSMO
PATROCINAN:
COLABORAN:
Conservatorio de Monzón
Banda de Música “Ciudad de Barbastro”
Excmo. Ayuntamiento de Sabiñanigo
Excmo. Ayuntamiento de Boltaña