1er. semestre - Año XXV - aespat

1er. semestre - Año XXV - aespat 1er. semestre - Año XXV - aespat

19.05.2013 Views

128 Lenn Snyder UN CASO CLÍNICO Dorotea tiene treinta y seis años y tres hijos. Trabaja a tiempo parcial como consejera por teléfono en un centro de ayuda a personas en crisis. Hace cinco semanas que participa en el grupo cuando cumplimenta la tabla. Su esquema de caricias es característico de las mujeres cuyo guión es del tipo “La madre con delantal” (Wyckoff, 1971): distribuye caricias positivas, condicionales e incondicionales a su familia, amigos próximos y a sus colegas. En el trabajo recibe caricias positivas condicionales por lo que hace y por el cuidado que da a los otros. En su casa, su familia le da principalmente caricias negativas condicionales o rechazos. Es normal que una madre trabaje y se ocupe de los demás. Por consiguiente, no pide ni recibe caricias positivas, pero recibe o se fabrica (Erskine y Bruce, 1974, pp. 18- 19) caricias negativas si no responde a exigencias reales o imaginarias. Terapeuta: “¿Qué sientes cuando constatas que no recibes más que caricias negativas condicionales de tu marido?”. Dorotea: “¡Es horrible! Continuamente le apoyo y le doy caricias positivas sin recibir nada a cambio”. Terapeuta: “Según tu tabla, tú deseas recibir el tipo de caricias que das”. Dorotea: “Es justo” (repasa el esquema). Terapeuta: “¿Hay algo nuevo para ti?”. Dorotea: “Sí, jamás me di cuenta de que pasara esto”. Terapeuta: “¿Desde cuando actúas así?”. Dorotea: “Desde siempre. Mi madre hacía lo que papá quería. Ella iba donde él quería y no tenía otros amigos que los suyos”. Terapeuta: “¿Ocurre lo mismo contigo?”. Dorotea: “¡Diablos, sí!” (tanto su cara como su voz manifiestan cólera). En su ejercicio con sillas múltiples, Dorotea ha liberado una cólera reprimida durante largo tiempo. Después de esto, concluye contratos específicos de cambios comportamentales para pedir caricias positivas, obtener reconocimiento por sus sentimientos, y para no ser más la Salvadora de su marido o de su familia. CONCLUSIÓN Revista de Análisis Transaccional y Psicología Humanista, Nº 56, Año 2007 Las personas dan el tipo de caricias que desean recibir pero frecuentemente ven frustrado este deseo. Creo que son imposibles cambios duraderos e importantes en tanto en cuanto el cliente no sea consciente de sus esquemas de caricias. REFERENCIAS Berne, E. (1964). Games People Play. Nueva York: Grove Press. Traducción española: (2007). Juegos en que participamos. Barcelona: RBA. English, F. (1972). “Rackets and Real Feelings”, Part II. T.A.J., II, 1. Traducción española: (2007). “Rackets y sentimientos reales. Parte II”. En M. G. Friedlander, Artículos seleccionados de Análisis Transaccional (1971-1980), pp.107-110. Madrid: Editorial CCS. Erskine, R. & Bruce, T. (1974). “Counterfeit Strokes”. T.A.J., IV, 2, 18-19. Steiner, C. (1971). “The Stroke Economy”. T.A.J., I, 3, 9-15. Traducción española: (2007). “La economía de caricias”. En M. G. Friedlander, Artículos seleccionados de Análisis Transaccional (1971-1980), pp. 77-83. Madrid: Editorial CCS. Wyckoff, H. (1971). “The Stroke Economy in Women`s Scripts”. T.A.J., I, 3.

Las caricias extorsionadas: identificación y cura 129 LAS CARICIAS EXTORSIONADAS: IDENTIFICACIÓN Y CURA Entre los clientes de los terapeutas, muchos no han aprendido a pedir caricias. Éstas están prácticamente ausentes de su vida. Su problema es, a menudo, la apatía, la falta de interés y de productividad en lo que hacen; en uno u otro caso, el síntoma psicosomático es la depresión. Numerosos analistas transaccionales se han centrado en los Permisos y en los ejercicios de caricias para enseñar a estas personas a satisfacer su necesidad en este campo. Otro grupo de personas lo forman los que intercambian activamente caricias con RESUMEN RICHARD G. ERSKINE* “Extorsionar” una caricia es una manera de obtener la atención de otra persona, quiera o no. Los adictos a este comportamiento son rechazados frecuentemente por los demás. El tratamiento explica el concepto, aborda el comportamiento y completa emocionalmente las situaciones inacabadas en las que los deseos de caricias no han sido satisfechos. Palabras clave: Extorsionar caricias, rechazo, tratamiento, situaciones incompletes, deseos no satisfechos ABSTRACT Stroke-Ripoff is a way of getting attention from another person, like it or not. This behaviour addicts are rejected by other ones frequently. Treatment explains the concept, approaches behaviour and completes emotionally incomplete situations in which whishing for strokes are not satisfied. Key words: Stroke-Ripoff, rejection, treatment, incomplete situations, wishing not satisfied. * Erskine, R. G. (1980). Identification and Cure of Stroke Ripoff. T.A.J, X, 1. Traducción: Casto-Martín. Revisión: Equipo de www.bernecomunicacion.net los otros y, sin embargo, tienen problemas semejantes. Muy a menudo se lamentan, además, de conflictos menores continuos en el trabajo o con sus conocidos, de una falta de amigos “disponibles” con los que repartir actividades comunes, y, para los solteros, de la dificultad de atraer a sus compañeros o de permanecer en relación con ellos. Es probable que obtengan sus caricias “extorsionándolas”. Para aquellos que están ávidos de caricias y que, sin embargo, mantienen difícilmente relaciones interpersonales, la reparación y la cura de Revista de Análisis Transaccional y Psicología Humanista, Nº 56, Año 2007

128 Lenn Snyder<br />

UN CASO CLÍNICO<br />

Dorotea tiene treinta y seis años y tres<br />

hijos. Trabaja a tiempo parcial como consejera<br />

por teléfono en un centro de ayuda a<br />

personas en crisis. Hace cinco semanas<br />

que participa en el grupo cuando cumplimenta<br />

la tabla.<br />

Su esquema de caricias es característico<br />

de las mujeres cuyo guión es del tipo “La<br />

madre con delantal” (Wyckoff, 1971): distribuye<br />

caricias positivas, condicionales e incondicionales<br />

a su familia, amigos próximos<br />

y a sus colegas. En el trabajo recibe<br />

caricias positivas condicionales por lo que<br />

hace y por el cuidado que da a los otros.<br />

En su casa, su familia le da principalmente<br />

caricias negativas condicionales o rechazos.<br />

Es normal que una madre trabaje y se<br />

ocupe de los demás. Por consiguiente, no<br />

pide ni recibe caricias positivas, pero recibe<br />

o se fabrica (Erskine y Bruce, 1974, pp. 18-<br />

19) caricias negativas si no responde a exigencias<br />

reales o imaginarias.<br />

Terapeuta: “¿Qué sientes cuando constatas<br />

que no recibes más que caricias negativas<br />

condicionales de tu marido?”.<br />

Dorotea: “¡Es horrible! Continuamente le<br />

apoyo y le doy caricias positivas sin recibir<br />

nada a cambio”.<br />

Terapeuta: “Según tu tabla, tú deseas<br />

recibir el tipo de caricias que das”.<br />

Dorotea: “Es justo” (repasa el esquema).<br />

Terapeuta: “¿Hay algo nuevo para ti?”.<br />

Dorotea: “Sí, jamás me di cuenta de que<br />

pasara esto”.<br />

Terapeuta: “¿Desde cuando actúas así?”.<br />

Dorotea: “Desde siempre. Mi madre hacía<br />

lo que papá quería. Ella iba donde él quería y<br />

no tenía otros amigos que los suyos”.<br />

Terapeuta: “¿Ocurre lo mismo contigo?”.<br />

Dorotea: “¡Diablos, sí!” (tanto su cara<br />

como su voz manifiestan cólera).<br />

En su ejercicio con sillas múltiples, Dorotea<br />

ha liberado una cólera reprimida durante<br />

largo tiempo. Después de esto, concluye<br />

contratos específicos de cambios comportamentales<br />

para pedir caricias positivas,<br />

obtener reconocimiento por sus sentimientos,<br />

y para no ser más la Salvadora de su<br />

marido o de su familia.<br />

CONCLUSIÓN<br />

Revista de Análisis Transaccional y Psicología Humanista, Nº 56, <strong>Año</strong> 2007<br />

Las personas dan el tipo de caricias que<br />

desean recibir pero frecuentemente ven<br />

frustrado este deseo. Creo que son imposibles<br />

cambios duraderos e importantes en<br />

tanto en cuanto el cliente no sea consciente<br />

de sus esquemas de caricias.<br />

REFERENCIAS<br />

Berne, E. (1964). Games People Play.<br />

Nueva York: Grove Press. Traducción<br />

española: (2007). Juegos en que participamos.<br />

Barcelona: RBA.<br />

English, F. (1972). “Rackets and Real Feelings”,<br />

Part II. T.A.J., II, 1. Traducción<br />

española: (2007). “Rackets y sentimientos<br />

reales. Parte II”. En M. G. Friedlander,<br />

Artículos seleccionados de Análisis<br />

Transaccional (1971-1980), pp.107-110.<br />

Madrid: Editorial CCS.<br />

Erskine, R. & Bruce, T. (1974). “Counterfeit<br />

Strokes”. T.A.J., IV, 2, 18-19.<br />

Steiner, C. (1971). “The Stroke Economy”.<br />

T.A.J., I, 3, 9-15. Traducción española:<br />

(2007). “La economía de caricias”.<br />

En M. G. Friedlander, Artículos seleccionados<br />

de Análisis Transaccional<br />

(1971-1980), pp. 77-83. Madrid: Editorial<br />

CCS.<br />

Wyckoff, H. (1971). “The Stroke Economy<br />

in Women`s Scripts”. T.A.J., I, 3.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!