19.05.2013 Views

Encuentro con la Palabra - Ciudad Redonda

Encuentro con la Palabra - Ciudad Redonda

Encuentro con la Palabra - Ciudad Redonda

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Oración<br />

de <strong>la</strong> mañana<br />

“Mirad, mi siervo tendrá éxito, subirá y crecerá mucho. Como<br />

muchos se espantaron de él, porque desfigurado no parecía hombre,<br />

ni tenía aspecto humano, así asombrará a muchos pueblos,<br />

ante él los reyes cerrarán <strong>la</strong> boca, al ver algo inenarrable, y <strong>con</strong>temp<strong>la</strong>r<br />

algo inaudito”. Is.22.<br />

Desde <strong>la</strong>s primeras horas de este día, se nos invita<br />

a “ mirar” . Lo hemos visto muchas veces. Pero es<br />

posible, que no siempre lo hayamos “ mirado” . Toda<br />

mirada verdadera implica “ encuentro” . Hay que pasar<br />

<strong>la</strong> barrera de los sentidos, y en<strong>con</strong>trarnos <strong>con</strong> <strong>la</strong> profundidad<br />

de <strong>la</strong> persona, <strong>con</strong> toda el<strong>la</strong>. Y siempre nos<br />

en<strong>con</strong>tramos <strong>con</strong> algo “ inenarrable” , <strong>con</strong> algo “ inaudito”<br />

: un Dios Hombre, tan desfigurado, tan machacado<br />

por <strong>la</strong>s torturas sufridas, que ha quedado como<br />

una piltrafa de hombre.<br />

Pero en el trasfondo de todo, nos en<strong>con</strong>tramos <strong>con</strong><br />

un amor tan elocuente, que nos hab<strong>la</strong> desde su sangre<br />

de-rramada. Miremos a Cristo muerto.<br />

En<strong>con</strong>trémonos <strong>con</strong> su amor.<br />

Oración<br />

de <strong>la</strong> tarde<br />

VIERNES SANTO<br />

“Cristo padeció por nosotros, dejándonos un ejemplo para que<br />

sigamos sus huel<strong>la</strong>s. El no cometió pecado, ni en<strong>con</strong>traron engaño<br />

en su boca. Cuando lo insultaban, no devolvía el insulto. En su<br />

pasión no profería amenazas, al <strong>con</strong>trario, se ponía en manos del<br />

que juzga justamente. Cargado <strong>con</strong> nuestros pecados, subió al<br />

leño, para que muertos al pecado, vivamos para <strong>la</strong> justicia. Sus<br />

heridas nos han curado”. 1P.2.<br />

Ahí le tenemos. “ Sus heridas nos han curado” .<br />

Todo lo ha hecho ya, por nosotros. “ Subió al leño” ,<br />

llevándonos a nosotros <strong>con</strong> él, para que su muerte<br />

sea nuestra muerte, y su “ justicia” sea nuestra justicia.<br />

En sí mismo destruyó todo pecado, para que ya<br />

no tenga sentido en nuestra vida.<br />

Hemos sido comprados <strong>con</strong> sangre divina, para que<br />

<strong>la</strong> Vida de Dios, sea nuestra vida. Somos el precio de<br />

<strong>la</strong> sangre de Dios hecho Hombre. Un Dios hecho<br />

Hombre, crucificado, es nuestro precio. “ Sigamos <strong>la</strong>s<br />

huel<strong>la</strong>s de Cristo” , dejémosle que viva en nosotros su<br />

120

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!