18.05.2013 Views

LA DOCTRINA SECRETA - Instituto Cultural Quetzalcoatl

LA DOCTRINA SECRETA - Instituto Cultural Quetzalcoatl

LA DOCTRINA SECRETA - Instituto Cultural Quetzalcoatl

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

La Doctrina Secreta Tomo I Helena Petronila Blavatski<br />

son ahora, los cuerpos compuestos que conoce la Ciencia. Ni el Agua, ni el Aire, ni la Tierra<br />

(sinónimo para los sólidos en general) existían en su forma presente, representando los tres<br />

estados de la materia que únicamente reconoce la Ciencia; pues todos éstos, hasta el mismo<br />

Fuego, son producciones ya recombinadas por las atmósferas de globos completamente<br />

formados, de modo que en los primeros períodos de la formación de la tierra, eran algo por<br />

completo sui géneris. Ahora que las condiciones y leyes de nuestro Sistema Solar están<br />

completamente desarrolladas, y que la atmósfera de nuestra tierra, lo mismo que las de<br />

todos los demás globos, se han convertido, por decirlo así, en crisoles propios, la Ciencia<br />

Oculta enseña que en el espacio tiene lugar un cambio perpetuo de moléculas, o más bien<br />

de átomos, correlacionándolo y cambiando así sobre cada planeta sus equivalentes de<br />

combinación. Algunos hombres de ciencia de entre los físicos y químicos más eminentes,<br />

comienzan a sospechar este hecho, el cual es conocido, épocas ha, por los ocultistas. El<br />

espectroscopio hace ver únicamente la probable semejanza (fundada en la evidencia<br />

externa) de la substancia terrestre y de la sideral; es incapaz de pasar más allá, o de hacer<br />

ver si los átomos gravitan o no uno hacia otro del mismo modo y en las mismas condiciones,<br />

en que se supone lo verifican física y químicamente en nuestro planeta. La escala de<br />

temperatura, desde el grado más elevado hasta el más inferior que puedan concebirse,<br />

puede suponerse que es la misma y una en el Universo entero; sin embargo, sus<br />

propiedades, fuera de las de disociación y de reasociación, difieren en cada planeta; y así<br />

entran los átomos en nuevas formas de existencia, no soñadas por la ciencia física, e<br />

incognoscibles para ella. Como ya se ha dicho en Five Years of Theosophy, pág. 242, la<br />

esencia de la materia cometaria, por ejemplo, "es por completo diferente de cualquiera de las<br />

características que conocen los más grandes químicos y físicos de la tierra". Y aun esta<br />

materia, durante su rápido paso al través de nuestra atmósfera, experimenta cierto cambio<br />

en su naturaleza.<br />

Así, no sólo los elementos de nuestro planeta, sino hasta los de todos sus hermanos en el<br />

Sistema Solar, difieren tanto unos de otros en sus combinaciones, como de los elementos<br />

cósmicos de más allá de nuestros límites solares. Esto es nuevamente corroborado por el<br />

mismo hombre de ciencia en el discurso ya citado, el que cita a Clerk Maxwell, diciendo "que<br />

los elementos no son absolutamente homogéneos". Dice así:<br />

Es difícil concebir la selección y la eliminación de variedades intermedias; porque,<br />

¿adonde pueden haber ido estas moléculas eliminadas, si, como tenemos razones para<br />

creer, el hidrógeno, etcétera, de las estrellas fijas, está compuesto de moléculas idénticas en<br />

todos sus aspectos a las nuestras?... En primer lugar podemos poner en tela de juicio esta<br />

identidad molecular absoluta, desde el momento en que hasta la fecha no hemos tenido<br />

medio alguno para llegar a una conclusión, salvo los que nos proporciona el espectroscopio;<br />

mientras que por otro lado se admite que, para poder comparar y discernir con precisión los<br />

espectros de dos cuerpos, deben ser examinados bajo idénticos estados de temperatura, de<br />

presión y todas las demás condiciones físicas. Ciertamente, nosotros hemos visto en el<br />

espectro del sol, raros que no hemos podido identificar.<br />

Por lo tanto, los elementos de nuestro planeta no pueden ser tomados como modelo para<br />

servir de comparación con los de otros mundos. De hecho, cada mundo posee su Fohat, que<br />

es omnipresente en su propia esfera de acción. Pero existen tantos Fohats como mundos,<br />

cada uno de los cuales varía en poder y en grado de manifestación. Los Fohats individuales<br />

constituyen un Fohat universal, Fohat colectivo (el aspecto–entidad de la única y absoluta<br />

No–Entidad, que es la absoluta Seidad [Be–ness], Sat). "Millones y billones de mundos son<br />

producidos en cada Manvantara", se dice. Por lo tanto, debe de haber muchos Fohats, a<br />

quienes nosotros consideramos como Fuerzas conscientes e inteligentes. Esto, sin duda, con<br />

<strong>Instituto</strong> <strong>Cultural</strong> <strong>Quetzalcoatl</strong> www.samaelgnosis.net Página No. 155

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!