“Era un pibe callado, no parecía chorro” - Diario Hoy

La Plata, viernes 21 de marzo de 2008
EL CRIMEN DE LA CAJERA
Uno es menor y el otro no mostró la cara
Reconocimientos complicados
Para que el supuesto asesino sea sometido a una rueda de presos, los fiscales deben aguardar la autorización del juzgado. El que sí es mayor sería el
que mantuvo el rostro siempre cubierto. Pero los procedimientos se harán y también está pendiente la identificación de los elementos secuestrados
“Pitín” (18) y “Pancho” (17), los
principales (y únicos) sospechosos
del crimen de la cajera María Soledad
Acosta (32) continúan presos.
Hoy se cumple una semana de aquella
locura. Y los investigadores apuran
algunos procedimientos que
quedan pendientes para confirmar -o
no- la participación de estos dos pibes
en el homicidio ocurrido en el
Vea de 525 entre 8 y 9. ¿Cuáles son
esas medidas de prueba?
El dato
Responsabilidades
compartidas
Aunque uno de los dos delincuentes
que asaltaron el Vea no
tiró del gatillo, enfrenta cargos
por el mismo delito que el cómplice
que sí lo hizo. Los fiscales
les imputaron “robo calificado y
homicidio calificado por críminis
causa”. Es decir, que mataron
para perpetrar el hecho o garantizar
su impunidad. Esta calificación
prevé una prisión perpetua.
Y el más chico de los acusados,
ya es menor imputable.
“Reconocimientos en ruedas de
presos y de los elementos secuestrados
en los allanamientos”, explicó
una alta fuente policial, aunque los
primeros se enfrentan con dos obstáculos:
que uno de los implicados tiene
17 años, por lo que los fiscales
Leyla Aguilar y Juan Condomí Alcorta
no pueden disponer que se lo
coloque en una rueda sin que antes
no lo autorice la jueza de Menores
María Inés Maceroni. El segundo
inconveniente es que al otro delincuente
-supuestamente Pitín- no se
le vio la cara, por lo que los testigos
podrían identificarlo por su altura, o
su contextura, pero no por su rostro.
No obstante, los pesquisas están
convencidos de que los testigos reconocerán
fácilmente los elementos
secuestrados en los allanamientos
del miércoles como aquellos que
usaban los dos ladrones que irrumpieron
en el supermercado.
“Los pantalones y las zapatillas son
muy característicos -dijo el mismo
vocero - y se ven claramente en la filmación”
de las cámaras de seguridad.
Otra cosa que se les mostrará
es una moto Beta 110 cc. que fue hallada
en el domicilio del menor -en la
favela- similar a la que usaron los criminales
para darse a la fuga. Y hay
algo más: un bolso incautado de la
casa de “Pitín”, en 162, 63 y 64, como
el que llevaba el más robusto de
los dos.
Mientras tanto, “Pancho” sigue
alojado en el instituto de Menores
Almafuerte y “Pitín” en la comisaría
Décima, de City Bell, donde comparte
el pabellón con otros nueve detenidos.
Hasta ayer no había recibido a
nadie, pero el día de visitas es el sábado,
según informaron fuentes de esa
seccional. “Lo ideal sería que pronto
lo deriven a una unidad penitenciaria”,
admitió un jefe policial, no sin
aclarar que -hasta ahora-, “no ha generado
problemas”.
Salidas laborales
“Pitín” tiene antecedentes por robo
en la justicia de Menores, por los que
ahora -ya cumplidos los 18- purgaba
un arresto domiciliario con salidas
laborales. Trabajaba para la empresa
Vadelux, encargada de la limpieza de
los locales Vea y Disco, y su madre es
empleada de la firma que tiene asignada
la seguridad privada en esa cadena.
Una fuente con acceso a la causa
aclaró que la mujer “no tiene nada
que ver con todo esto, es una trabajadora
que trató de alejar a su hijo de la
Favela mudándose a Los Hornos, pero
él (por “Pitín”) siempre volvía”. Al
ser indagado por Aguilar, el joven negó
haber participado del crimen. Sin
embargo, los policías que lo detuvieron
en la madrugada del miércoles
dicen que en el traslado “reconoció
que estuvo en el local, aunque culpó
del asesinato al menor”.
Suplemento de Justicia, Seguridad y Policiales
“Pitín”: franquero en un Disco y en el Vea de 19 y 530
“Mirá, mucho no lo conocía, pero
era muy callado y no tenía facha
de delincuente. Sí era un poco
vago”, comentó a Trama Urbana
un empleado de la empresa de
limpieza Vadelux, para la que trabajaba
“Pitín”, el mayor de los
detenidos por el caso Acosta.
Un supervisor de la firma aportó
a Trama Urbana datos muy interesantes,
bajo reserva de identidad.
Dijo que el acusado había sido contratado
a principios de este año
“para cubrir francos y vacaciones”,
junto con otros cinco hombres.
“Estuvo en la sucursal de Disco de
Trama URBANA 5
calle 30 y después en el Vea de 19,
530 y 531, hasta que el 6 de marzo
se les venció el contrato y no se les
renovó”, explicó. En su indagatoria
el joven dijo que el 14 de marzo
(día del crimen) estuvo en su casa.
Algo es seguro: “Nunca trabajó en
el Vea del homicidio”.
Los últimos siete días. Mataron a Soledad, hubo marchas pidiendo justicia y llegaron las detenciones