Las coquinas de San Rafael - Sociedad Española para la Defensa ...

Primer Simposio Ibérico sobre Geología, Patrimonio y Sociedad, Tarazona (Aragón), 2000, 12, pp. 105-108
LAS COQUINAS DE SAN RAFAEL DEL SUR
INTRODUCCIÓN
Angelica Muñoz Guerrero
CIEGO-UNAN. Managua
La Coquina es la materia prima en la producción del cemento industrial y
de cal artesanal. Su explotación se inicia en el tiempo de las colonias con los
llamados “pequeños productores de cal”, y trasmitiéndose de generación en
generación. Hoy en día, es la actividad de subsistencia para muchos nativos de
San Rafael del Sur y comarcas aledañas.
“Las coquinas” son rocas sedimentarias del grupo de las calizas. Estas
rocas se forman por la deposición de grandes cantidades de diferentes tipos de
fósiles carbonatados (conchas y otras especies) de origen marino, sometidos a
procesos de litificación y cristalización. Su origen prehistórico se remonta a la era
Geológica Terciaria del Plioceno, que data entre 5,3 a 1,6 millones de años;
geológicamente, pertenecen a la “Formación El Salto”.
Estas calizas están localizadas en la Costa Pacífica y se extienden en una
faja angosta alargada con rumbo NW-SE, desde la localidad del Norte de San
José del Carmen, pasando por los Gutiérrez, El Salto, hasta el Sur de la comarca
San Pablo, en un área aproximada de 37,5 km 2 , y en el Municipio de San Rafael
del Sur. Gran parte de este recurso no metálico es explorado y explotado para la
producción de cemento y cal.
ESTUDIOS GEOLÓGICOS Y PALEONTOLÓGICOS
Las Coquinas han sido objeto de varias investigaciones, relacionadas
directamente por su rica fauna y por su alto contenido calcáreo, útil para la
industria del cemento. Según datos históricos, los primeros estudios científicos
realizados en las coquinas se atribuyen a W. P. Woodring en 1925, que realizó
estudios paleontológicos para determinar la edad geológica de los fósiles. Le
siguió G.L. Green, en 1930. estudiando la topografía del lugar; luego, en 1941,
Faggirner Auer clasificó la fauna del área en micro y macro fósiles.
Entre la microfauna estudiada recogida por W.F. Auer se encuentran:
Ephidium, Globigerina, Nonionella, Nonio, Orbulina, Ostracoda, Valvulineria. En la
megafauna están: Anonja, Arca, Barbatia, Lima, Malea, Ostrea gigante, Ostrea sp.
Pectec (vanas especies), entre otras.

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En 1942, T.C. Wilson propuso el nombre de “Formación El Salto” para
estas coquinas; el nombre lo obtiene de la Comarca El Salto, ubicada a 4
kilómetros de San Rafael del Sur, donde se presentan abundantes afloramientos
de coquinas. L. Zoppis Bracci y Del Giudice publicaron estos acontecimientos
científicos en 1958. Posteriormente, de 1968 a 1972 se realizaron varias
investigaciones geológicas acerca de las reservas de los horizontes útiles de la
formación El Salto. Esta formación se divide en tres miembros. Un miembro
superior compuesto por depósitos clásticos – detríticos, un miembro medio
compuesto por Coquina recristalizada (nivel económico) y el miembro inferior
arcilla carbonatada.
ORIGEN DE LAS COQUINAS
Observaciones por Zoppis B, 1968, admite tina trasgresión marina, en el
Pioceno; o sea sumersión bajo el mar de una parte del continente como resultado
de una elevación del nivel del mar; lo que cubrió un área anteriormente levantada
y erosionada. J. Kuang 1972, señala que sobre la superficie anteriormente
levantada y erosionada, las condiciones ambientales favorecieron la formación de
pequeños arrecifes - coquinas que no presentan uniformidad en su espesor.
La acumulación de grandes espesores de arena fina limosa con marcas
de oleaje, representa una facies litoral, localizado 1 NE de la Mina La California,
en la cabecera del Río El Carmen; indicando que la costa se encontraba en esta
zona durante la deposición de las coquinas. La deposición estratigráfica
transgresiva coincide con una fase nerítica; es decir, el ámbito marino hasta los
200 metros de profundidad, donde pueden vivir estos organismos carbonatados.
La facies nerítica costera no favoreció a la formación de grandes arrecifes
y solamente al final de la primera trasgresión en la fase nerítica profunda, en un
ambiente más calmo pudo haber deposición de CO3 Ca, en solución que
juntamente con la recristalización se reformó el horizonte útil, cuyo desarrollo no
duró por mucho tiempo, disminuyendo a medida que se acercaba a la costa
LISO Y NIVEL DE PRODUCCIÓN
Esta caliza es utilizada en la industria de la construcción, azucarera,
fabricación de bebidas gaseosas, tratamiento de agua potable, minería, agrícola y
ganadera, avícola: no obstante, la utilización de este recurso mineral tiene su
cuota de participación en el deterioro ambiental en las áreas sometidas a esta
actividad, consideran expertos.
En los años 1940 y 1950 se funda Cemento Canal; fábrica que
actualmente avanza con la explotación de este recurso natural. La Administración
de Recursos Geológicos (Adgeo), del MIFIC, revela que entre 1986 a 1995 la

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industria de cemento canal extrajo aproximadamente 3.56 millones de toneladas
de material “coquinas” y 1.42 millones de toneladas de margas. Las estimaciones
de extracción de coquinas para 1999 fueron de 282,281 toneladas de sus tres
minas en explotación: Santo Domingo, San Pedro y la California.
Con relación al potencial de esta materia prima, no se tiene un estudio que
indique las reservas existentes de este recurso natural no renovable. En 1986,
INMINE estimó el área de reservas de margas y coquinas en 22.931. ,827
toneladas métricas. La marga es el material que posee aluminosilicato, segundo
elemento químico necesario para darle consistencia y calidad al cemento. El
proceso de elaboración del cemento se completa con una 60% de marga, 80% de
Klinker o coquina procesada, 5% de yeso y 1 % % de toba.
EXPLOTACIÓN DE CAL
Estudios del MIFIC, señalan que en 1997 los caleros tenían 22 hornos los
cuales procesaron 2.079 metros cúbicos de calizas (coquinas) para una
producción de 49,500 quintales de carbonato de calcio. Cada horno produjo 1,500
quintales al mes y necesitaron 1,904 árboles en una quema para procesar la cal.
En reforestación esto significa el despale de dos hectáreas cada 15 días en época
de verano; esto evidencia el despale en que ha estado expuesto las áreas de los
yacimientos y los pobladores aledaños a las minas.
Actualmente, existen unos 40 propietarios o caleros artesanos que tienen
43 hornos activos, indica un estudio piloto de reforestación iniciado en 1999 por
PROLEÑA, cuyo fin es mejorar el equilibrio ecológico en el área de las minas. El
objetivo del programa de reforestación de este organismo es tratar de ayudar a
recuperar la madera que consumen los hornos donde los caleros procesan la cal y
así conservar el recurso bosque que protejan las áreas de extracción de la materia
prima.
Para la actividad artesanal, no existe planificación en cuanto a las áreas
sujeta a explotación simplemente se elige al azahar y dependiendo de la
proximidad del sitio. Generalmente estos son terrenos pertenecientes a los caleros
o pobladores del lugar; lo que indica que no hay asistencia técnica en la
planificación para la extracción de estas coquinas en la producción artesanal.
SOSTENIMIENTO AMBIENTAL
No se conoce hasta ahora ningún rnonhtoreo y control ambiental que
hallan realizado instituciones del estado u organismos que atienden temas
ecológicos, para intentar controlar o regular adecuadamente los residuos tóxicos
que emanan o desprende la fábrica del cemento, así como el uso de la lefia en las

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quemas de los hornos en el proceso artesanal de producir cal, por lo que no hay
una sostenibilidad ecológica en los bosques; afirman especialistas.
Por su parte, la industria de Cemento Canal ha implementado algunas
tareas para tratar de mantener la sostenibilidad ecológica en áreas donde ya se ha
explotado el recurso de las “coquinas”. La misión de reforestación inició hace 14
años; entre las plantaciones están especies como eucalipto, flor de llano, aceituno,
pochote y caoba.
Ante esta situación de proteger el medio ambiente en la región, algunos
especialistas recomiendan que las instituciones u organismos relacionadas con el
tema, realicen una evaluación ambiental, en busca de posibles soluciones al
impacto generado por esta actividad minera; que indudablemente beneficiaria el
uso sostenible de estos recursos naturales. También es importante desarrollar un
programa de reforestación para tratar de recuperar la madera que consumen los
hornos en el proceso de elaboración de la cal.
Estas acciones deberán ser encaminados a la conservación de estos
importantes sitios geológicos, que nuestro planeta Tierra nos ha heredado, y de
los que durante muchos años ha sido la materia prima de diversas industrias.