17.05.2013 Views

El blanco y el negro - Ataun

El blanco y el negro - Ataun

El blanco y el negro - Ataun

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Rustán—. ¡Dios sea loado! ¡<strong>El</strong> Ci<strong>el</strong>o sea bendito!<br />

No quiere que vu<strong>el</strong>va a mi tierra, en la que no<br />

hubiese sido más que un simple gentilhombre;<br />

quiere que me case con mi amada. Seré<br />

príncipe de Cachemira; y así, al poseer a mi<br />

amada, no poseeré mi pequeño marquesado de<br />

Candahar. Seré Rustán y no lo seré, puesto que<br />

me convertiré en un gran príncipe; ya está<br />

explicado claramente y en mi favor una gran<br />

parte d<strong>el</strong> oráculo, <strong>el</strong> resto se explicará<br />

semejantemente; soy supremamente f<strong>el</strong>iz. Pero<br />

¿por qué Ebano no está junto a mí? Le echo de<br />

menos mil veces más que a Topacio.<br />

Recorrió unas cuantas parasangas más con<br />

la mayor alegría; pero, a la caída de la tarde,<br />

una cadena de montañas más empinadas que<br />

una contraescarpa y más altas de lo que<br />

hubiera sido la torre de Bab<strong>el</strong> en caso de<br />

terminarse, cerró por completo <strong>el</strong> paso a la<br />

caravana, dominada por <strong>el</strong> temor.<br />

Todo <strong>el</strong> mundo exclamó:

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!