programa para dejar de fumar
programa para dejar de fumar
programa para dejar de fumar
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
ver a hacerlo, no <strong>de</strong>be aceptar cigarrillos, ni <strong>de</strong>be encen<strong>de</strong>r ninguno. Sin embarg o ,<br />
por motivos múltiples, se pue<strong>de</strong> dar el caso en alguna situación en que la pre s i ó n<br />
social, u otros motivos que analizaremos en la siguiente Unidad, lleven al fumador a<br />
p robar un cigarrillo. Algunos ejemplos pue<strong>de</strong>n ser el día <strong>de</strong> Nochebuena, el día <strong>de</strong><br />
una boda, el día <strong>de</strong> una fiesta muy importante, un problema grave, etc.<br />
¿Qué hacer cuando se produce una caída? Pues sencillamente centrarse en las<br />
sensaciones que produce <strong>fumar</strong> ese cigarrillo. Estas serán <strong>de</strong> malestar o quizás<br />
se sienta usted algo mareado y con muy mal sabor <strong>de</strong> boca. Si se diese el caso,<br />
tendría que centrarse en esas sensaciones. Verá que ni siquiera llega a <strong>fumar</strong> un<br />
cigarrillo entero. ¡Si lo hiciese se sentiría mal, quizás se marease!<br />
¿Qué <strong>de</strong>be hacer <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> producirse esa caída? Pues sencillamente volver a<br />
cero cigarrillos. Cuando un cigarrillo sabe mal, lo que hay que hacer es <strong><strong>de</strong>jar</strong> <strong>de</strong><br />
<strong>fumar</strong> y no pasar al siguiente. Así ese cigarrillo queda como una simple caída, no<br />
como una recaída.<br />
Las personas que no conocen este proceso, cuando prueban un cigarrillo pue<strong>de</strong><br />
saberles mal, tener náuseas e incluso marearse. Como este hecho va en contra<br />
<strong>de</strong> su sistema <strong>de</strong> creencias achacan este mal sabor a que el tabaco está húme-<br />
do, que ya no está habituado, que está débil, etc., y vuelven a probar un segundo,<br />
y quizás un tercer cigarrillo. Al día siguiente prueban otros más y así van comen-<br />
zando otra vez la ca<strong>de</strong>na <strong>de</strong> hacerse fumadores. Al cabo <strong>de</strong> varios días se habrá<br />
producido el proceso <strong>de</strong> recaída, aunque <strong>de</strong> hecho uno crea que ya ha recaído<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el comienzo <strong>de</strong>l proceso, con lo cual no se ha puesto ningún medio <strong>para</strong><br />
evitar pasar <strong>de</strong>l primer cigarrillo a los siguientes.<br />
Por su experiencia sabe que usted ha ido bajando el consumo y se ha ido sintien-<br />
do cada vez mejor. ¿Se imagina ahora duplicar o triplicar <strong>de</strong> golpe el consumo?<br />
Se sentiría fatal. Eso es lo que ocurre en el caso anterior. Por ello reflexione sobre<br />
lo que le acabamos <strong>de</strong> <strong>de</strong>cir y piense que una vez que <strong>de</strong>je <strong>de</strong> <strong>fumar</strong> esperamos<br />
que no vuelva a probar un cigarrillo. Pero, <strong>de</strong> darse tal caso, el modo <strong>de</strong> bajar a<br />
cero es sencillo, introduciendo <strong>de</strong> nuevo las reglas que a lo largo <strong>de</strong> este PRO-<br />
GRAMA viene aplicando. A<strong>de</strong>más, bajar <strong>de</strong> un cigarrillo a cero no cuesta ningún<br />
esfuerzo, ¿no le parece?