ALEJANDRINA LAGO D Z_LIRIS MUNERA C_Cartagena_08.pdf
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niño decida su lenguaje, su comportamiento, donde manifieste sus sueños e<br />
ilusiones y sus desacuerdos.<br />
El lenguaje es un desencadenante del pensamiento, desde la percepción,<br />
imagen, reflexión, las respuestas, es el lenguaje el que permite tener un<br />
aprendizaje significativo que posibilite modificar o adquirir una nueva forma de<br />
hacer, que transforme el ser.<br />
Las relaciones que se establecen con el semejante y el entorno están<br />
determinados por el saber, el hacer y modifican el ser; en este sentido Maturana<br />
(2002) afirma que “Al niño debemos orientarlo, desde el hacer, y los cambios se<br />
producen en el ser”.<br />
La intervención del educador infantil debe estar orientada al desarrollo cognitivo<br />
que implica atención, percepción, análisis, síntesis, solución de problemas en<br />
construcción de conceptos y método, siempre con la visión de las practicas<br />
pedagógicas con vigencia cultural en la intervención del educador infantil.<br />
El desarrollo cognoscitivo le permite al niño adquirir las herramientas para realizar<br />
aprendizajes permanentes que es una de la metas de la adquisición de<br />
autonomía; estas herramientas son lecturas, escritura, expresión oral, solución de<br />
problemas, aprendizajes de conocimientos teóricos y prácticos con un matiz ético<br />
y moral, esto implica una transformación del enfoque pedagógico y del peso y<br />
posición de los componentes curriculares en cuanto a porcentajes de crédito y<br />
contenidos del mismo.<br />
No solo el desarrollo cognoscitivo es el que debe promover el currículo de<br />
formación del educador infantil, se considera una necesidad insalvable el<br />
compromiso curricular con la formación moral del niño, el manejo de autoridad que<br />
favorezca la intervención del educador infantil para promover la concertación,<br />
cooperación… y de esta manera ir fundamentando la construcción de autonomía<br />
en los niños.<br />
El comportamiento de los niños en grupo es un espacio de formación de la<br />
autonomía que el educador debe potenciar en las relaciones, pues permite<br />
observar entre ellos diferentes esquemas de dominación, siempre hay líderes,<br />
unos se imponen para dominar a los más débiles. La intervención del educador<br />
infantil debe orientarse a crear condiciones para que los niños con aptitudes de<br />
liderazgo ejerzan sin manipular ni coaccionar a los demás niños, que sean estos<br />
quienes entren a decidir autónomamente de acuerdo con sus principios, deseos y<br />
fines que se proponen, sin dejarse manipular ni seguir ciegamente a los lideres,<br />
para esto, hay que incentivar al niño para que antes de actuar reflexione. Una<br />
estrategia es la participación en trabajo cooperativo aprovechando la singularidad<br />
y recursos de todo orden de cada niño posibilitando hacer cosas mejores en poco<br />
tiempo.<br />
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