Untitled - citaREA

Untitled - citaREA Untitled - citaREA

citarea.cita.aragon.es
from citarea.cita.aragon.es More from this publisher
16.05.2013 Views

D. CAYETANO SOCÍAS Y BAS,<br />

SECRETARIO PRIMERO DE LA REAL SOCIEDAD ECONÓMICA MALLORQUÍNA DE<br />

AMIGOS DEL PAÍS.<br />

CERTIFICO: Que de las actas y documentos que obran en esta Secre­<br />

taría de mi cargo resulta: que abierto concurso por esta Corporación,<br />

para premiar los escritos en que se tratasen con mayor acierto los extre­<br />

mos propuestos en el edicto de convocatoria publicado en 19 de No­<br />

viembre del año próximo pasado, se presentaron cinco opúsculos, acom­<br />

pañados de los correspondientes pliegos cerrados, con los respectivos<br />

lemas de<br />

«La Agricultura es la madre de todas las ciencias.»<br />

« Vade-mecum filoxérico, dedicado por la Real Sociedad Económica Mallorquína<br />

de Amigos del País á los viticultores baleares, escrito por (sin lema)»<br />

paña.»<br />

«Si Mallorca se preserva de la filoxera, será la comarca más floreciente de Es­<br />

«Memoria sobre el origen de-la filoxera y medios prácticos para combatirla, por<br />

un aficionado á la Agricultura.»<br />

«Audaces fortuna adjuvat.»<br />

Procedió la Sociedad á la elección de las personas que habían de<br />

componer la Comisión calificadora de dichos escritos, constituyéndola<br />

con los Sres. D. Sebastian Barceló, D. Paulino Verniére, D. Nicolas<br />

Ramon, D. Francisco Satorras y D. Pablo Gralla, en cuya ilustración<br />

y rectitud reconoció la Sociedad toda la competencia necesaria para<br />

obtener el justo fallo que deseaba; y dedicados al desempeño de su come­<br />

tido, pusieron en conocimiento de la misma, luego de terminado, la<br />

calificación que habían merecido de ellos los trabajos presentados al<br />

concurso.<br />

La Sociedad, en junta celebrada dia 16 de Marzo de este año, quedó<br />

enterada del dictamen de la Comisión calificadora, y en su vista adju­<br />

dicó el premio ofrecido, consistente en Medalla de oro, el título de<br />

Socio de mérito de esta Corporación, y la impresión del escrito pre­<br />

miado, al autor del que tiene por lema<br />

«AUDACES FORTUNA ADJUVAT;»<br />

Y el accésit, que consiste en igual título de Socio de mérito, al autor<br />

del que lleva el rótulo<br />

« Vade-mecum filoxérico dedicado por la Real Sociedad Económica<br />

Mallorquína de Amigos del País á los viticultores baleares, escrito<br />

por (sin lema).-»


Y en sesión celebrada, á tenor de lo anunciado, en el inmediato dia<br />

festivo, que fué el 21 del mismo mes de Marzo, se abrieron los pliegos<br />

en cuyas cubiertas se leían respectivamente los dos lemas que se acaban<br />

de transcribir, y resultaron ser autores:<br />

Del escrito que había merecido el premio, el Sr. D. Luis Pou y<br />

Bonet, Catedrático de Historia natural y de Agricultura de este Insti­<br />

tuto provincial;<br />

Y del escrito premiado con el accésit el Sr. D. José Muñoz del Cas­<br />

tillo, Catedrático de Agricultura del Instituto provincial de Logroño.<br />

Y en cumplimiento de lo acordado por la Sociedad libro la presente<br />

en Palma á 2 de Abril de 1880.<br />

CAYETANO SOCÍAS.


ADVERTENCIA.<br />

ALL publicar este trabajo, ninguna pretensión tengo á la<br />

novedad, pues, no contando con observaciones propias en<br />

la materia de que se trata, he debido limitarme á resumir<br />

las principales opiniones y los más sabios consejos formulados<br />

por los primeros naturalistas y agrónomos de Europa<br />

y América.<br />

Lo que ha sido verdaderamente difícil para mí, es<br />

poner un asunto puramente científico al alcance de los<br />

menos familiarizados con la ciencia; no podía presentar<br />

un escrito conciso y rigurosamente técnico, porque nada<br />

hay más desabrido é ininteligible para la generalidad;<br />

tampoco podía prescindir en absoluto de lo que constituye<br />

la verdadera esencia del punto en cuestión. He<br />

debido pues conciliar con la rigidez y severidad de la<br />

ciencia el estilo y la forma que me han parecido más<br />

apropósito para atraer y fijar la atención de los agricultores.<br />

Para mejor conseguir mi objeto, he colocado al<br />

final de la obra un pequeño Vocabulario Entomológico,<br />

en el que van explicadas más ó menos extensamente, según<br />

su importancia, todas las voces técnicas de que con<br />

más frecuencia he debido hacer uso.<br />

Réstame ahora manifestar cuan grande ha sido mi<br />

satisfacción al ver este trabajo premiad'j por la Real Sociedad<br />

Económica Mallorquína; y bien que esta satisfacción<br />

sea exclusivamente mía, siento la necesidad de hacer<br />

pública mi gratitud y mi más distinguida consideración á<br />

los Amigos del País, protestándoles, al mismo tiempo, mi<br />

propósito de consagrarme á nuevas tareas que me hagan<br />

más digno de la señalada honra que les he merecido.<br />

Abril de 1880.<br />

Ijuis SPOU.


A LA REAL SOCIEDAD<br />

MALLORQUÍNA DE AMIGOS DEL PAIS.<br />

Of. 2". Sr.<br />

EL trabajo que tengo la honra de someter al juicio de<br />

V. S., está escrito á vuela pluma, que otra cosa no permitían<br />

mi salud quebrantada ni el breve plazo por V. S.<br />

señalado, del cual mis ocupaciones solo me han permitido<br />

utilizar el último tercio. ( :<br />

)<br />

Atendidas estas razones, la prudencia me hubiera aconsejado<br />

abstenerme de tomar parte en el importante concurso<br />

abierto por V. S.; pero cuando una Corporación<br />

como la Real Sociedad Económica Mallorquína de Amigos<br />

del País, que, para mí tiene toda la autoridad que prestan<br />

las luces, la experiencia y el desinterés, hace tan patriótico<br />

llamamiento, creo que cuantos puedan, deben corresponder,<br />

mayormente, cuando el trabajo que se exige no<br />

puede ser más modesto.<br />

Yo por mi parte declaro que creería faltar, no sólo al<br />

patriotismo, sino á la más vulgar cortesía, no acudiendo<br />

presuroso á tan solemne como útil convocatoria, y protesto<br />

sinceramente que, aun cuando el premio honorífico<br />

ofrecido por V. S., había de alhagar mi amor propio,<br />

nunca aspiré á más recompensa, en remuneración de mis<br />

trabajos, que á la gloria de poder algún día inscribir mi<br />

nombre al lado de los que desean ante todo ser útiles á<br />

su patria.<br />

(') He podido concluir este trabajo en diez dias, porque es solo un extracto<br />

de nueve conferencias que tuve la honra de esplicar en Palma y en los principales<br />

distritos vitícolas.


DOS PALABRAS<br />

A LOS AGRICULTORES DE LAS BALEARES.<br />

PARA vosotros, que trabajáis y sufrís, escribo este folleto,<br />

secundando las nobles aspiraciones de la Real Sociedad<br />

Económica Mallorquína de Amigos del País, que se ha<br />

propuesto, muy oportunamente, vulgarizar los conocimientos<br />

más importantes sobre la plaga que destruye todos los<br />

viñedos de Europa, y hacer que estos conocimientos lleguen<br />

hasta el corazón de los pueblos vitícolas de esta Provincia,<br />

para que todos comprendan el grave peligro de que<br />

están amenazados, y sepan el puesto que les corresponde<br />

en la gran batalla que para defensa propia tendremos sin<br />

duda que librar.<br />

Deseando yo aportar mi cooperación á obra tan bienhechora,<br />

escribo en estilo liso y llano, procurando poner


— 10 —<br />

al alcance de los que no están familiarizados con la ciencia<br />

cuanto hay de más interesante para dar á conocer<br />

toda la gravedad del mal que tan de cerca nos amenaza, y<br />

ver si hay medios de conjurarlo.<br />

Antes de dar principio á este trabajo, permitidme dirigiros<br />

el más amigable y cordial saludo diciéndoos con<br />

toda la efusión de mi alma: ¡Salve pueblo agrícola balear!<br />

Yo saludo en tí al pueblo varonil que jamás retrocede<br />

ante el trabajo; por tus virtudes y afanes, puedes erigirte<br />

en modelo digno de ser imitado por los demás pueblos de<br />

la madre Patria; guiado en tu constante lucha sobre la<br />

tierra por el espíritu de progreso, has conseguido despertar<br />

el genio rural que yacía adormecido, y la fecundidad<br />

ha brotado por todas las venas de la tierra, y el<br />

bienestar ha penetrado en tus comarcas, y los campos se<br />

han fertilizado, y los propietarios han aumentado en renta<br />

y en número, y el salario de los obreros ha seguido igual<br />

proporción; al bienestar presente has añadido grandes<br />

prendas de garantía para el porvenir.<br />

Si tus ascendientes, incorporándose en la tumba, asomaran<br />

un momento la cabeza, desconocerían á su patria.<br />

Al ver sus modestos albergues transformados en suntuosos<br />

edificios, y sus desiertos campos convertidos en vasto<br />

y amenísimo jardín en donde la higuera de Asia, el almendro<br />

de África, el chumbo de América, la acacia de<br />

Levante, el azufaifo de Oriente, el plátano de Occidente,<br />

la naranja y la morera de la China, el albérchigo y el<br />

nogal, nacidos en Persia, el melocotón de Etiopía, el ciruelo<br />

de Grecia, el albaricoque de Armenia, el limón de Siria<br />

y Palestina, la granada de los campos de Cartago, la<br />

cereza importada por Lúculo á Roma, el membrillo dedicado<br />

á Venus y que decoraba el templo de Chipre, el<br />

cedrato, de los jardines de Babilonia, y muchos otros árboles,<br />

ostentan fértiles y elegantes copas, á cuyos pies, se<br />

corona Céres de gruesas espigas, ó el Dios de las vendimias<br />

extiende todos los años nueva alfombra de verdeantes<br />

pámpanos; no lo dudéis, vuestros mayores se


creerían transportados á una nueva tierra de promisión ó<br />

á una moderna Babilonia.<br />

Sí, baleares, la Patria os será siempre deudora de<br />

tantos beneficios creados sin el menor concurso extraño,<br />

sin protección de ningún género. Yo me asocio de todo<br />

corazón á vuestros progresos, pero, cuanto más considero<br />

la altura que, sólo á fuerza de virtudes y trabajo habéis<br />

dado al edificio de vuestra prosperidad, más siento en el<br />

alma verme precisado á rasgar el velo que os oculta un<br />

gravísimo y próximo peligro; más siento tener que colocar<br />

ante vuestras pupilas el prisma del desengaño, y mostraros<br />

en perspectiva la imagen espantosa de la miseria,<br />

que después de su marcha triunfal por todas las naciones<br />

vitícolas de Europa, en las que ha dejado por huellas la<br />

desolación y la ruina, se dirige á paso de gigante hacia<br />

nuestras playas, pretendiendo fundar una de sus destructoras<br />

colonias.<br />

Sí, baleares, toda la grandeza y magnificencia que<br />

ostentan vuestros campos, puede en un momento disiparse<br />

cual humo, desaparecer, como un palacio encantado.<br />

Sí, el suntuoso edificio de vuestra prosperidad cruje<br />

en sus cuatro ángulos, y la tierra amenaza abrirse hasta<br />

los abismos, para sepultar en ellos vuestra riqueza y<br />

vuestras más risueñas esperanzas, fruto de medio siglo de<br />

trabajo y afán incesantes.<br />

¿Queréis saber cuál es el peligro tan grave de que<br />

estáis amenazados? No es otro que la pérdida de vuestros<br />

ricos viñedos, y, el que amenaza destruirlos, es un insecto<br />

tan pequeño, tan sumamente diminuto, que no se<br />

descubre á simple vista, pero su número inconmensurable<br />

lo hace superior á los titanes; la naturaleza ha suplido su<br />

falta de fuerza individual por la invencible de una colectividad<br />

sin límite. Este insecto es el que se conoce con el<br />

nombre de PHYLOXERA VASTATRIX, es el que ha puesto en<br />

espectativa y en consternación al mundo, y del cual voy<br />

á referir sucintamente vida y milagros.<br />

Antes deseo que sepáis que la Agricultura ha sido y


será siempre el objeto predilecto de mi solicitud, porque<br />

conozco toda su importancia moral y social, y estoy dispuesto<br />

siempre á prestar todos mis servicios en vuestro<br />

obsequio, no pidiendo en cambio más que vuestra atención<br />

á mis fraternales consejos, y que leáis detenidamente<br />

estas breves páginas escritas sólo para vuestro provecho.


— i3 —<br />

LA PHYLLOXERA VASTATRIX.<br />

Aunque los detalles de la Historia Natural son extraños<br />

á la gran mayoría de agricultores para quienes<br />

escribo, y que no es lo más interesante para ellos el<br />

conocer los caracteres minuciosos del insecto, sino los<br />

desastres que ocasiona y los medios que pudieran evitarlos,<br />

y aunque nos propongamos ser muy parcos en detalles<br />

puramente técnicos, no podemos prescindir de ellos<br />

por completo.<br />

La Filoxera Vastatrix, ( :<br />

) es un insecto perteneciente<br />

al orden de los Hemípteros, suborden Homópteros, familia<br />

Phyllóxéridos, género Phylloxera, especie Vastatrix.<br />

El orden de los Hemípteros, cuyas especies son de las<br />

que más daño causan á la Agricultura, tiene sus caracteres<br />

más importantes sacados de los órganos bucales, que<br />

están dispuestos para la succión, por lo cual se llaman<br />

Chupadores; tienen el pico constituido por varios artejos<br />

articulados, formados por el labio, y en su interior tienen<br />

cuatro cerditas que representan las mandíbulas y maxilas,<br />

teniendo casi siempre el labro bien desarrollado, carece"n<br />

de palpos, y sus metamorfosis son incompletas.<br />

Los Hemípteros poseen cuatro alas, unas veces la base<br />

de las superiores coriácea, da á estas la apariencia de los<br />

élitros de los coleópteros, y por su punta se asemejan<br />

á las de los himenópteros, circunstancia á que deben el<br />

(') Siguiendo lo acordado por el Congreso Filoxérico de Madrid en su cuestión<br />

previa escribiré Filoxera siempre que no se trate en punto exclusivamente científico,<br />

en cuyo caso pondré Phylloxera.


nombre de Hemípteros, que significa, semi-alados; aunque<br />

muchos carezcan de alas, no por esto, dejan de pertenecer<br />

á este orden, cuyos caracteres, según dejamos indicado,<br />

se deducen más de la conformación de la boca.<br />

No todos presentan estas diferencias en las alas superiores,<br />

pues los hay que las tienen todas membranosas ó<br />

todas coriáceas, siendo este carácter el que sirve para dividirlos<br />

en dos secciones, que se conocen con el nombre<br />

de Homópteros y Heterúpteros.<br />

Unos y otros cuentan entre sus especies individuos<br />

muy perjudiciales, entre los Heterúpteros está la chinche,<br />

parásito del'hombre y que tantas molestias le causa; y los<br />

Homúpteros tienen los pulgones, parásitos de las plantas,<br />

á las que hacen enfermar y con sobrada frecuencia perecer.<br />

Los Phylloxéridos se consideran un intermedio entre<br />

los cúccidos y los afídidos, pero tienen mucha más analogía<br />

con los últimos; sólo bajo la forma galleóla ó sea cuando<br />

se colocan en agallas, tienen algo de común con los<br />

primeros; pero, la circunstancia de que el género Coccus<br />

presenta los machos sin órganos de manducación aparentes,<br />

no es suficiente, porque, en la Filoxera sexuada, ambos<br />

sexos son alados y en el género Coccus las hembras<br />

son siempre ápteras; además las especies de este género<br />

nunca se ven en las raíces, mientras que en los afídidos<br />

los hay que se fijan en ellas, lo mismo que en las hojas y<br />

en todas las partes del vegetal.<br />

Los afídidos, cuyo nombre sacó Latreille de Aphis que<br />

significa pulgón, tienen todos los caracteres de los pulgones,<br />

y sobre todo la generación partenogenésica ó generación<br />

doncella.<br />

Phylloxera, esta palabra que por su etimología significa<br />

seca-hojas, fué inventada por Mr. Royer de Fonscolombe<br />

entomólogo francés para designar un insecto que ataca algunas<br />

especies forestales de Francia, cuyas hojas marchita<br />

y seca. Se conocen varias especies de Filoxeras en Europa,<br />

pero ninguna de ellas produce en las plantas sobre que<br />

vive más que manchas en las hojas, acabando éstas por


— i5 —<br />

secarse; pero la especie Vastatrix, cuyo nombre se debe á<br />

Mr. Planehon de Montpelier, es verdaderamente devastadora,<br />

como su nombre indica.<br />

La Filoxera vastatrix es un insecto poliforme, es decir,<br />

que afecta varias formas, puesto que unas veces se<br />

presenta áptera, ó sea sin alas, y más tarde aparece alada,<br />

asemejándose á un mosquito de alas muy largas y elegante<br />

forma. Siempre es un insecto diminuto, que no puede<br />

verse bien sin el auxilio del microscopio; su forma es<br />

ovoidea, más delgado en la base que en la cabeza, su<br />

color es amarillento ó parduzco, sus antenas están formadas<br />

de tres artejos desiguales, siendo los dos primeros<br />

cortos y gruesos, y el último largo y delgado terminando<br />

en maza, pero asimismo bífido en su extremidad. En dichas<br />

antenas tienen su asiento los ojos que están formados<br />

ó compuestos de varias facetas, y se cree que en las referidas<br />

antenas tienen también los rudimentos de otros sentidos,<br />

sobre todo el del tacto, del que se valen para buscar<br />

las raicillas de la vid. Como los demás homópteros tienen<br />

la trompa formada por los mismos órganos bucales que<br />

poseen los mascadores, pero modificados de tal modo que<br />

forma tres picos, el medio, vertical, y los otros dos laterales<br />

divergentes.<br />

La Filoxera, como todos los insectos, está formada de<br />

tres anillos, que son: cabeza, tórax y abdomen, este último<br />

extraordinariamente desarrollado, es por sí solo mucho<br />

mayor que la cabeza y tórax reunidos; presentando<br />

dos pequeños agujeros en su parte inferior, que comunican<br />

con dos tubos, los cuales dan salida á un líquido<br />

viscoso con el que cubren los huevos durante la postura,<br />

los adhieren con bastante fuerza á los objetos sobre que<br />

los depositan, y el cual constituye también el primer alimento<br />

de la larva enseguida que sale del huevo.<br />

El insecto alado es más amarillo que el áptero, posee<br />

cuatro alas membranosas, finas y trasparentes como la<br />

gasa, y que rebasan notablemente la longitud de su cuerpo,<br />

mayor también que bajo la forma áptera. Todas las


filoxeras que hemos descrito son hembras ponedoras y<br />

fecundas, pero existe finalmente otra generación alada que<br />

tiene machos y carecen de órganos digestivos, por lo mismo<br />

es más diminuta que la antes citada.<br />

La Filoxera áptera es hipogeo., es decir, vive bajo de<br />

la tierra, y la alada, tanto la primera generación como la<br />

que tiene machos, es epigea, es decir, que vive sobre la<br />

tierra.<br />

Unas veces se halla en las raicillas, en cuyo caso se<br />

llama radicícola, otras, se la encuentra libre sobre los<br />

pámpanos y se llama, folícola, y finalmente, se la vé dentro<br />

de agallas, recibiendo en tal caso el nombre de gaíícola.<br />

Se vé, pues, que la Filoxera se presenta bajo varias<br />

formas y estados durante su vida, siendo la áptera la más<br />

común y duradera, la que forma las colonias radicícolas,<br />

y por esta razón la verdaderamente devastadora.<br />

A la circunstancia de no tener más que un alimento<br />

único debe el ser calificada de monófaga y siendo este<br />

alimento el jugo de la vid, recibe también el nombre de<br />

ampelófaga.<br />

Vamos á examinar á la ligera las fases que recorre el<br />

voraz pulgón que nos ocupa: nace del llamado huevo de<br />

invierno, y el individuo que de él sale es una larva que<br />

á los pocos días se transforma en hembra áptera, que por<br />

su instinto se dirige bajo la tierra, y por medio de sus<br />

antenas vá buscando el sitio más apropiado para establecerse,<br />

que le proporcionan las raicillas más finas de las<br />

cepas; allí se desarrolla, muda tres veces la piel para poder<br />

efectuar su crecimiento, y en el espacio de quince á<br />

veinte días ha llegado á su apogeo, y empieza la reproducción;<br />

pone los huevos, á cuyo fin arquea hacia arriba<br />

la extremidad del abdomen, y los deposita y pega alrededor<br />

del sitio en que se encuentra.<br />

El número de huevos puestos es de veinticinco á<br />

treinta, y no falta quien lo eleve á noventa; los huevos<br />

presentan un color amarillo de limón, y son, como debe<br />

suponerse, de unas dimensiones infinitamente pequeñas,


— 17 —<br />

unos pocos cienmilímetros de largo, y á corta diferencia<br />

la mitad de ancho. Estos huevos se avivan en pocos días,<br />

y el número de estos varía según el clima, estación, etc.;<br />

al nacer, ó sea al efectuarse la eclosión, salen de estos<br />

huevos hembras ápteras, que solo difieren de las primeras<br />

por la magnitud, falta de tubos abdominales, y en que<br />

los órganos de reproducción no son más que rudimentarios;<br />

pero con las mudas de piel, que experimentan<br />

cada cinco ó menos días, en unos quince ó veinte, según<br />

las circunstancias, se hallan ya dispuestas y aptas para<br />

reproducirse.<br />

Hay algunas larvas, que, bien sea porque se nutren<br />

mejor que las otras, ó porque tal es su destino en la naturaleza,<br />

mudan un par de veces más la piel, adquieren<br />

mayor desarrollo, se transforman en ninfa ó crisálida, y<br />

después se presentan bajo la forma de insecto alado. Las<br />

larvas sólo se diferencian de las ninfas ó crisálidas, en<br />

que éstas tienen rudimentos de alas.<br />

Apenas tiene la forma de insecto perfecto y alado, se<br />

hace epigeo, es decir, abandona su mansión subterránea,<br />

en la que las alas sólo le servirían de estorbo, y pasa á<br />

vivir sobre la tierra, para desempeñar las nuevas é importantes<br />

funciones que le están encomendadas, cuales<br />

son, asegurar la perpetuidad de la especie y extenderla<br />

todo lo posible.<br />

Estos individuos, aunque encargados de perpetuar la<br />

especie, son todos hembras, pero que llevan en sí el germen<br />

de otra generación sexuada, consistente en unos<br />

pequeños cuerpos que Lichtestein llama crisálidas.<br />

Estas hembras aladas depositan sobre las partes tiernas<br />

de la planta vinífera algunos fetos ó pupas, ó llámenseles<br />

huevos, algo mayores que los de las hembras ápteras,<br />

pero desiguales en volumen: de los mayores nacen hembras<br />

aladas, pero sin trompa ni aparato digestivo, y de<br />

los más pequeños salen machos que carecen también de<br />

aparato digestivo, pero que tienen el sexo masculino bien<br />

desarrollado. Esta última generación ningún daño pro-


— 18 —<br />

duce directamente, su misión es puramente amorosa; se<br />

une el macho con la hembra, y ésta pone el llamado<br />

huevo de invierno, del cual sale, como llevamos indicado,<br />

una hembra áptera, ponedora y fecundada que es la madre<br />

de todas las generaciones que hemos descrito.


— ig —<br />

MULTIPLICACIÓN ASOMBROSA<br />

DE LA FILOXERA.<br />

El estudio de la reproducción de los pulgones ha sido<br />

siempre objeto de investigación de los principales naturalistas,<br />

así por la asombrosa fecundidad que demuestran,<br />

por la partenogénesis, como por verse especies cuyas hembras<br />

son vivíparas en primavera y en verano, y ovíparas<br />

en otoño.<br />

Para probar su prodigiosa fecundidad sólo diremos que<br />

Reamur ha visto á una sola hembra producir 90 individuos<br />

de su mismo sexo, calculando que la quinta generación<br />

daría por resultado una descendencia de 5,904.900,000.<br />

El aphis laníger es tan fecundo que Mr. Tougart entomólogo<br />

notable que ha hecho estudios sobre este pulgón,<br />

afirma que cada hembra da á luz por. término medio 100<br />

individuos de su sexo, de modo que á la quinta generación<br />

daría 100.000,000 de individuos hijos de una sola<br />

madre, y á la décima se eleva á la cifra fabulosa de un<br />

quintillon.<br />

Si los antiguos hubieran conocido este prodigioso<br />

modo de reproducirse los pulgones, á buen seguro que<br />

Cátulo, Horacio y otros poetas eróticos de la antigua<br />

Roma hubieran entonado himnos á un acto de cópula<br />

que da por resultado un número de descendientes infinitamente<br />

mayor que el de los seres humanos que pueblan<br />

nuestro globo.<br />

Por la reproducción partenogenésica una hembra es<br />

fecundada para muchas generaciones sucesivas. Lyonnet,<br />

que ha cogido varios ejemplares en el momento mismo de


— 20 —<br />

salir del vientre de la madre, criándolos con cuidado en<br />

el aislamiento, les ha visto producir las nuevas generaciones.<br />

En algunas se observa que en primavera y en verano<br />

dan á luz hijos vivos, y en otoño ponen huevos, que<br />

dejan pegados a las cortezas de los árboles donde pasan<br />

todo el invierno para nacer en la primavera próxima.<br />

Casi todos los pulgones viven en sociedad, y se alimentan<br />

de la savia de las plantas, que chupan por medio<br />

de su pico.<br />

Cada hembra de la Filoxera, según dejamos indicado,<br />

produce unos 25 ó 3o huevos, sucediéndose las generaciones<br />

desde Abril á Octubre, ó en más extenso período<br />

cuando el clima favorece; el número de generaciones se<br />

calcula de 8 á io, de modo que tenemos.<br />

Para la i 25<br />

» 2. a<br />

625<br />

» 3. a<br />

i5,625<br />

» 4. a<br />

390,625<br />

» 5. a<br />

9.744,625<br />

» 6. a<br />

243.345,625<br />

El número de generaciones es mucho mayor del que<br />

presentamos en este cálculo (que nada tiene de exagerado),<br />

pues hay quien eleva la postura de cada hembra á go<br />

huevos, y sólo hemos considerado 25; según se ve arroja<br />

ya la cifra de 200.000,000. Esto prueba la reproducción<br />

asombrosa de estos insectos, y se demuestra por ella que<br />

la urna de la generación se halla siempre dispuesta á derramar<br />

nuevas existencias en número infinito.<br />

Después de poner el huevo de invierno, perecen los<br />

microscópicos y fecundísimos cónyuges, dando por resultado<br />

de un sólo acto de cópula, una familia postuma de<br />

millares de millones de descendientes.


BREVE RESEÑA HISTÓRICA<br />

DE LA FILOXERA.<br />

Este insecto hace poco más de 40 años que se ha descubierto,<br />

pero sin conocerse sus efectos; en el año 1834<br />

el botánico suizo Berlandier, en sus excursiones por los<br />

Estados-Unidos, observó en los pámpanos de algunas vides<br />

silvestres unas, pequeñas agallas llenas de un pulgón<br />

que no se ocupó en estudiar.<br />

Es preciso llegar al año 1854 para tener alguna noticia<br />

especial de dicho pulgón, pues el célebre entomólogo americano<br />

Fitch, haciendo estudios por orden del gobierno<br />

sobre los insectos útiles y perjudiciales á la agricultura,<br />

observó algunas agallas en los pámpanos de varias cepas,<br />

como lo había observado Berlandier, pero éste estudió<br />

también los pulgones que en ellas estaban contenidos, y<br />

designó al insecto con el nombre de pémphigus vitijolice,<br />

por la analogía que observó con otros pémphigos.<br />

Shymer, que lo estudió también y descubrió el insecto<br />

alado, lo denominó dactylosphera vitifolia, separándolo de<br />

este modo de los pémphigos.<br />

Benjamín Wals y Carlos Rylei ya conocieron sus propiedades<br />

destructoras, y le señalaron un puesto preferente<br />

entre los insectos dañinos.<br />

En 1863 parece que el insecto abandonó por vez primera<br />

su patria y fué importado á algunas estufas de<br />

Inglaterra y Alemania, desde cuyos puntos el comercio de<br />

plantas lo ha extendido por toda la Europa. En América<br />

sólo se observaba el insecto sobre las hojas, pero Westwod<br />

de Oxford lo observó ya en las raíces, y Mr. Planehon de<br />

3


Mompeller es el primero que lo ha estudiado con más<br />

detención, lo ha clasificado y le ha dado el nombre muy<br />

apropiado de Phylloxera vastatrix.<br />

Desde esta época pueden seguírsele todavía los pasos,<br />

y conocer por su orden los puntos que han sido invadidos,<br />

pero no creemos necesario descender á tanto detalle,<br />

y sí sólo consignar que los países invadidos, en tan brevísimo<br />

plazo, se ven marcados en unas cartas filoxéricas<br />

que ha publicado el Dr. Fatio; según estas cartas están<br />

atacadas de la plaga, Alemania, Austria, Hungría, Suiza,<br />

Francia, Portugal y España.<br />

La Filoxera procede pues de los Estados-Unidos, siendo<br />

su patria la parte oriental, separada de la occidental<br />

por la cordillera de montañas peñascosas que va desde<br />

Tejas al Canadá; así lo ha comprendido y declarado el<br />

sabio Congreso internacional de Laussana, del que formó<br />

parte el eminente naturalista español Sr. Graells. De allí<br />

ha sido importada á las naciones de Europa que van indicadas,<br />

y en las que se extiende en todas direcciones con<br />

desconsoladora rapidez.<br />

No faltan personas que pretenden, pero sin fundamento,<br />

que la plaga es europea; si así fuese, como dice<br />

muy bien el citado Graells, se habría de admitir el absurdo<br />

de que desde su creación hasta nuestros días ha vivido<br />

oculta, pues ni se han conocido sus estragos, ni los catálogos<br />

entomológicos registran semejante insecto. No puede<br />

dudarse pues de que procede de los Estados-Unidos, que<br />

la región oriental de aquella parte de América es su patria<br />

verdadera, y que de allí ha sido importada á Europa.


MODO DE PROPAGARSE<br />

LA FILOXERA.<br />

Con una facultad reproductiva tan asombrosa, era menester<br />

que el insecto dispusiese de medios para extenderse<br />

por todas las regiones en que la vid crece cultivada<br />

ó espontánea.<br />

Todos los hemípteros, por su organización frágil, parecen<br />

poco á propósito para emprender viajes, sin embargo<br />

Mr. Morren ha observado que el pulgón del melocotonero,<br />

lo mismo que el laníger, que destruye los manzanos,,<br />

prueban evidentemente que varios pulgones pueden pasar<br />

de un país á otro. En una sabia memoria sobre este punto<br />

señala la marcha de una columna del pulgón del melocotonero,<br />

que en 1834 invadió la Bélgica, y se propagó<br />

en una vasta extensión de su territorio; dice que en algunos<br />

puntos las innumerables legiones eran tan extraordinarias<br />

que oscurecían la luz del sol, y con dificultad<br />

dejaban distinguir los muros de los edificios; hasta las<br />

personas, añade, se veían obligadas á cubrirse la cara con<br />

pañuelos, para preservar los ojos de su contacto.<br />

El aphis laniger, que se considera oriundo de la América<br />

Septentrional, fué importado á Inglaterra, en donde<br />

fué conocido por primera vez en 1777, y hasta 1812 no se<br />

decidió á pasar el canal de la mancha, dejándose ver en<br />

Normandía, desde donde se extendió por el interior.<br />

El temible pulgón filoxérico, que por tanto tiempo<br />

había permanecido inmóvil en su cuna, invade rápidamente<br />

todas las naciones vitícolas: hoy día en Francia no<br />

se cuenta ya por hectáreas el terreno invadido, se cuenta


— 2 4 —<br />

por departamentos, y á pesar de los esfuerzos heroicos que<br />

se hacen para detenerle, sigue imperturbable su marcha<br />

invasora con una velocidad de 85,ooo hectáreas por año.<br />

En España todo induce á creer que será aún más rápida<br />

la propagación: el foco único, que se conocía el año pasado<br />

en la Indiana de Málaga, y que comprendía un reducidísimo<br />

número de hectáreas, se ha extendido con espantosa<br />

rapidez, habiéndose presentado innumerables focos<br />

aun á mayor distancia de lo que había previsto la ciencia.<br />

El modo fulminante con que se ha presentado en la provincia<br />

de Gerona es un nuevo motivo para no dudar, que,<br />

en la próxima canícula, desgraciadamente habrá alcanzado<br />

en España todas las proporciones de una horrible<br />

calamidad.<br />

A nada puede compararse la potencia invasora del<br />

voraz hemíptero, como á la invasión de la barbarie, á<br />

esos torrentes de bárbaros que de ignotas regiones vomitaban<br />

aquellas terribles avalanchas á cuya violencia sucumbió<br />

el mundo romano. ¿Cómo una civilización tan<br />

floreciente y tan rica, herencia de muchas generaciones,<br />

no pudo resistir á esa fuerza, impetuosa sí, pero inculta?<br />

La barbarie aparece como un punto negro, digno apenas<br />

de llamar la atención del pueblo rey, pero muy pronto todo<br />

lo invade y domina sin obstáculo.<br />

La Filoxera lanza también á borbotones miríadas de<br />

individuos, que de lejanas tierras se arrojan sobre los pueblos<br />

más cultos de Europa, y destruyen en poco tiempo su<br />

principal riqueza. La Filoxera aparece también como un<br />

punto negro, apenas digno de llamar la atención de los<br />

pueblos ilustrados, pero bien pronto todo lo invade, todo<br />

lo destruye, y triunfa por completo.<br />

¿Cómo, preguntamos también, un insecto microscópico<br />

ha podido triunfar de la inteligencia y actividad del hombre<br />

y obtener sobre él una completa victoria en toda la línea?<br />

Este microscópico animal ha vencido y humillado el orgullo<br />

del hombre, que era el rey de la naturaleza, y todo<br />

lo avasallaba hasta despóticamente; del hombre, que en


— 25 —<br />

donde ponía su planta, allí imprimía su poder, allí escri-,<br />

bía su gloria con caracteres indelebles.<br />

La Filoxera pues, ha abatido tanta soberbia, ha dicho<br />

al hombre NON PLUS ULTRA. TU inteligencia y tu trabajo<br />

son dos fuerzas poderosas en el mundo, pero no son omnipotentes;<br />

por ellas has dominado á todos los animales, has<br />

podido rodearte de los más perfectos y útiles, y alejar de<br />

tu morada los que te eran nocivos. El buey te abre los<br />

surcos para cultivar el trigo, el caballo te trasporta con<br />

ligereza, el perro te consagra su fidelidad y su valor, la<br />

cabra te proporciona su leche, y la oveja su vellón. Tú has<br />

desterrado á los desiertos aquellos animales que por su<br />

ferocidad eran indomables; en lo más elevado de las nubes,<br />

tus armas han herido al águila orgullosa, y los abismos<br />

del Occéano no han librado de tus golpes á los colosos de<br />

los mares. Tú has dominado las fuerzas más extraordinarias<br />

y se han mostrado dóciles á tu voz; el vapor te ha<br />

trasportado por tierra y por mar, con más velocidad que<br />

los caballos y que el viento, á todos los puntos del globo;<br />

hasta el rayo, que troncha las más corpulentas encinas y<br />

quebranta las rocas más duras, sumiso á tu poder inmenso,<br />

te sirve de estafeta; y aun por debajo de las olas, más rápido<br />

que el pensamiento, trasmite tus despachos del uno al otro<br />

confín. Creías por esto estar en completa posesión del globo,<br />

con todo el esplendor de un poder sin límite. ¿Quién había<br />

de decirte que un insecto, para mayor ignominia tan diminuto,<br />

fuese el destinado á abatir tanto orgullo, y desde<br />

su mansión subterránea, mientras destruye tu principal riqueza,<br />

no sólo te recordara continuamente el terrible, NON<br />

PLUS ULTRA, sino que se burlase de tí cantando por el diapasón<br />

normal la siguiente estrofa del Duque de Rivas:<br />

Y se hundieron magníficos trofeos<br />

Y se hundieron hazañas inmortales<br />

Y lo que no pudieron los titanes<br />

Lo lograron ¡oh mengua! los pigmeos.


Analicemos ahora los medios que tiene el insecto para<br />

propagarse con la asombrosa rapidez que hemos indicado.<br />

La Filoxera se propaga por los medios naturales y por<br />

la vía comercial: para propagarse naturalmente la Filoxera<br />

áptera, lo hace marchando de una á. otra cepa, sea por bajo<br />

de tierra, sea por sobre la superficie. Fácilmente se comprenderá<br />

que por este medio no le es posible adelantar<br />

mucho: la poca ligereza de sus movimientos, y las dificultades<br />

del terreno hacen que no pueda adelantar en un<br />

año más de doce ó quince metros, y aun con dificultad.<br />

Se ve con esto, que si no tuviera otro medio, la marcha<br />

invasora del insecto no sería tan veloz, y se podría atacar<br />

y detener fácilmente.<br />

Pero si la Filoxera áptera tiene tantas dificultades en<br />

su progresión, en cambio los individuos alados pueden<br />

extenderla con mayor facilidad. Si bien su vuelo es de<br />

poca potencia, como el insecto es tan ligero y sus alas proporcionalmente<br />

muy grandes, al levantarse del suelo, se entrega<br />

á la acción del aire, cuyo más suave soplo trasporta<br />

á grandes distancias á estos pequeños aeronautas. Pueden<br />

considerarse como otro de tantos corpúsculos que el aire<br />

tiene en suspensión, y con él son arrastrados hacia todas<br />

partes.<br />

Por este medio el pulgón puede propagarse mucho más<br />

que por la tierra, calculándose que en un año, puede llegar<br />

á producir nuevos focos hasta unos 20 ó 3o kilómetros del<br />

punto de partida. Por el vuelo, se ve que es ya muy fácil<br />

la extensión del mal, atendida la potencia reproductora<br />

del insecto, del que basta un solo huevo, según llevamos<br />

indicado, para producir millares de millones de descendientes;<br />

sin embargo, no es suficiente para explicar la rapidez<br />

con que se ha extendido por todas las naciones vitícolas<br />

de Europa.<br />

Pero la Filoxera, además de los medios indicados,<br />

cuenta con otro más poderoso, cual es, la vía comercial;<br />

el hombre, unas veces por su voluntad, otras inconscientemente,<br />

y otras á pesar suyo, importa gérmenes de ani-


— 2 7<br />

males útiles y perjudiciales, lo mismo que de enfermedades<br />

epidémicas.<br />

Es un contratiempo que la ley de las compensaciones<br />

ha impuesto á las grandes ventajas que el comercio proporciona,<br />

haciendo penetrar las producciones de todos los<br />

países á todos los pueblos, los que cambian sus frutos y<br />

se instruyen á un mismo tiempo, porque cambian también<br />

las ideas, obteniendo por este medio innumerables beneficios.<br />

Do quiera vaya el hombre, tiene entre los animales<br />

auxiliares poderosos dispuestos á ayudarle en la satisfacción<br />

de sus necesidades y hasta de sus caprichos; ejemplo<br />

son de esto, el caballo, y sobre todo el perro, que es el<br />

compañero más fiel así del hombre civilizado como del<br />

salvaje más miserable. Estas dos especies se han ligado<br />

al hombre con más intimidad porque ha desaparecido el<br />

tronco de que proceden, pues los individuos de esta especie<br />

que se encuentran en el estado salvaje son descendientes<br />

de las razas domésticas. Los caballos de Tartaria y los<br />

cimarrones de América provienen de individuos abandonados<br />

á si mismos, que se han multiplicado en completa<br />

libertad, lo mismo que esas bandadas innumerables de<br />

perros que en los Pampas del Brasil y del Paraguay persiguen<br />

los rebaños de las varias especies de ganado que<br />

el hombre también importó.<br />

Pero si el hombre se hace seguir de todos los animales<br />

útiles, le acompañan también á su pesar todos los parásitos<br />

que viven á sus expensas, y de los cuales no puede<br />

desembarazarse por más esfuerzos que emplee. Las ratas<br />

pululan en las bodegas de todos nuestros buques, y des-,<br />

embarcan en cualquier punto en que el hombre establece<br />

una colonia.<br />

Los insectos se transportan de mil modos diferentes,<br />

así en el estado de huevo, de larva ó de ninfa, como en<br />

el de insecto perfecto. En Paris se han encontrado los insectos<br />

del Senegal, y hoy se encuentra en España la Filoxera<br />

del Norte de América, así como nuestras abejas im-<br />


portadas á aquella región se han hecho salvajes, y se han<br />

multiplicado y extendido de una manera sorprendente,<br />

tanto que en 1797, según afirma Wardin, no existían en la<br />

parte Oeste del Missisipí, y en 1811 habian franqueado la<br />

barrera, remontando este rio, lo mismo que el Missouri, á<br />

una distancia de 200 leguas, de modo que ganaban 14 al<br />

año, siendo hoy tan comunes en todos aquellos bosques,<br />

que la recolección de miel silvestre constituye una industria<br />

muy importante.<br />

Y si en el espacio de 14 años han ganado tanto terreno<br />

nuestras abejas en la América del Norte, en menos tiempo<br />

aún, sus Filoxeras ydoríphoras han invadido toda la<br />

Europa, ¡Triste cambio! nosotros hemos trasportado allí<br />

uno de los insectos más útiles, y de allí nos han venido<br />

las plagas más desastrosas que se pueden imaginar.


OBSTÁCULOS QUE SE OPONEN<br />

A LA PROPAGACIÓN DE LOS ANIMALES.<br />

Como éste es uno de los puntos que consideramos más<br />

importantes no tenemos reparo en tratarlo con alguna extensión,<br />

exponiendo los principios de la Geografía zoológica<br />

á que se halla sometido.<br />

Esta cuestión envuelve la tan célebre promovida por<br />

la prensa tarraconense, cual es si la Filoxera podia ó novivir<br />

en España, cuestión contestada victoriosamente pollos<br />

Sres. Graells y Miret en el terreno de la teoría; y en<br />

el de los hechos, por el insecto mismo que, mientras se<br />

discutía este punto, fundaba tranquilamente sus colonias<br />

en Andalucía y en Cataluña; propagándose de tal modo,<br />

que prueba la opinión del Dr. Fatio, quien siempre consideró<br />

que si era invadida la España, lo seria de un modo<br />

fulminante.<br />

Nos proponemos pues tratar esta cuestión con arreglo<br />

á los principios de Geografía zoológica, y por lo que ésta<br />

enseña, debemos creer que la Filoxera no sólo puede<br />

prosperar en España, sino que, particularmente en sus<br />

provincias meridionales, ha de alcanzar un mayor grado<br />

de perfección; no queremos significar una tendencia al<br />

desarrollo y aumento de volumen, sino una maj^or cantidad<br />

de acción, porque las condiciones de existencia le<br />

proporcionan más facultades órganogenésicas.<br />

No escribiendo sólo para las personas científicas, consideramos<br />

oportuno explicar lo que debe entenderse por<br />

condiciones de existencia. Estas no son otra cosa que una<br />

serie de armonías orgánicas, cuyo concurso permite ó no<br />

4


la vida de un animal, ó la perpetuidad de su especie, según<br />

este concurso, que se prestan las varias funciones y<br />

los varios sistemas de órganos, baste ó no, para conservar<br />

la vida individual, y alcance ó no, á producir gérmenes<br />

susceptibles de desarrollo, pues no deja de haber animales<br />

que pueden vivir en una región, si son trasportados á<br />

ella siendo adultos, pero, no pueden reproducirse. Hay<br />

climas que limitan, ó destruyen por completa la facultan<br />

de reproducción de algunas especies.<br />

Estas armonías orgánicas son numerosas y comprenden<br />

todas las circunstancias de la vida del animal, resultantes<br />

del medio en que vive, de la habitación, del clima,<br />

de las especies animales ó vegetales á que está asociado,<br />

de la mayor ó menor multiplicación de su especie etc.<br />

Para que un animal cualquiera pueda habitar un punto<br />

determinado, es preciso que tenga en él todas las condiciones<br />

de existencia, que tenga el libre ejercicio de todas<br />

sus funciones de nutrición y de relación; y para que la<br />

especie pueda perpetuarse es menester que tenga también<br />

el ejercicio de las de reproducción.<br />

Por lo que toca á la nutrición, que es una de las condiciones<br />

que más influyen en la distribución de los animales<br />

sobre el globo, es sabido que unos exigen para alimentarse<br />

sustancias animales, otros las requieren vegetales,<br />

y para otros es indispensables el concurso de ambos<br />

reinos. Cada especie tiene su alimento particular señalado<br />

de antemano, y con esto, se vé á toda luz la dependencia<br />

recíproca de todo los seres unos con otros. La existencia<br />

de especies carnívoras supone la preexistencia de las herbívoras,<br />

como ésta la de las plantas. Las primeras eligen<br />

su habitación en donde existen las segundas, y éstas para<br />

elegir la suya, es menester que lo hagan en aquellas regiones<br />

en donde crecen abundantemente las especies vegetales<br />

apropiadas á su régimen.<br />

La distribución de los vegetales depende á su vez de<br />

otras circunstancias relativas al clima y al suelo, lo cual<br />

demuestra que hasta el reino mineral ejerce influencia in-


— 3l —<br />

directa en la distribución de los animales sobre nuestro<br />

globo.<br />

Por lo que respeta á la nutrición, la Filoxera puede<br />

tener muy bien su habitación en estas Islas, donde los ricos<br />

viñedos le ofrecen pasto abundante para satisfacer su<br />

voracidad.<br />

Los agentes exteriores ejercen también marcada influencia:<br />

el aire, como medio respirable tiene suma importancia,<br />

pero infinitamente menor en los animales de<br />

vida subterránea, como la Filoxera, á la que no pueden<br />

inspirar grandes inquietudes ni cuidados los vientos, la<br />

mayor ó menor densidad, etc. Pero puede también influir<br />

la mezcla de cuerpos extraños con el medio respirable;<br />

estos cuerpos extraños, unas veces les son necesarios y<br />

otras imposibilitan su existencia. La humedad, por ejemplo,<br />

un aire atmosférico desprovisto de toda humedad, es<br />

irrespirable para muchísimos animales, y varias especies<br />

reclaman de ella un grado muy diferente; la cima de una<br />

montaña árida ó el borde de un charco en un sitio bajo<br />

ofrecen estaciones muy diferentes, y cada una de ellas<br />

apropiada para diversas especies. La Filoxera resiste un<br />

aire muy seco, y lo resiste muy húmedo, prefiriendo el<br />

primero.<br />

Los cuerpos extraños que tenga el aire en suspensión,<br />

pueden ser substancias tóxicas; en este caso se comprende'<br />

que no es posible la vida de los animales, y de aquí el<br />

uso de estas sustancias como insecticidas, que son muy<br />

difíciles de aplicar debajo de la tierra donde mora el pueblo<br />

filoxérico.<br />

Los agentes imponderables calor, luz, electrieidad y<br />

magnetismo, son también modificadores importantes para<br />

la distribución de los animales sobre el globo. Por lo que<br />

respeta al calor, es sabido que la viña no prospera más<br />

que en una región determinada, á la que ella dá nombre;<br />

esta región, pues, es la más apropiada para la Filoxera,<br />

que, sin embargo, resiste fríos muy intensos, lo mismo que<br />

grandes temperaturas, como se ha demostrado experimental<br />

mente.


La luz, este agente poderoso que tanto influye en los<br />

animales, que los hay diurnos, crepusculares, y nocturnos,<br />

parece indiferente para la Filoxera, que lo mismo<br />

vive á todo sol que en el seno de la tierra. Se ven animales<br />

cuyas funciones no pueden ejercerse sin la influencia<br />

de este agente, hay infusorios cuya nutrición está directamente<br />

bajo la dependencia de la luz, y hasta es proporcional<br />

á su intensidad. Así vemos animales que buscan<br />

el sol, otros que sólo viven en la oscuridad, buscando las<br />

cavidades subterráneas de nuestro globo, pero la Filoxera<br />

lo pasa bien de todos modos, mientras tenga cepas que<br />

destruir.<br />

La electricidad de la atmósfera, que con frecuencia<br />

basta para matar á muchísimos insectos, nada importa á<br />

la Filoxera, pues vive debajo de la tierra, que es el receptáculo<br />

común, y nunca se carga de este fluido como la<br />

atmósfera.<br />

La región de un animal es tanto más reducida cuanto<br />

más numerosas son sus condiciones de existencia; así se<br />

A r<br />

en algunos como el Pimmelodes Cyclopum, de cuya especie<br />

no se pesca más que rarísima vez y siempre de noche<br />

algún individuo descarriado en los riachuelos que se hallan<br />

inmediatos al Cotopaxi; es sin embargo vomitado<br />

por millares, en medio de un fango arcilloso, cuando este<br />

volcan está en erupción. Los Canguroós y otros marsupiales<br />

parece que han reemplazado en Nueva Holanda<br />

una porción de especies.<br />

La región de estos animales es reducidísima en razón<br />

á las muchas condiciones de existencia que exigen, pero<br />

en cambio la Filoxera, por lo poco exigente en dichas<br />

condiciones, puede considerarse como esporádica en todas<br />

las regiones en donde existe la viña, lo mismo que<br />

muchos animales que acompañan al hombre á donde<br />

quiera que vaya.<br />

Cuando un animal reúne todas las condiciones de<br />

existencia necesarias para vivir en un punto, toda la dificultad<br />

estriba en llegar á él. Examinemos pues como


— 33 —<br />

puede venir la Filoxera, si es muy fácil que esto suceda,<br />

ó si hay dificultades que á ello se opongan.<br />

El medio en que vive un animal facilita ó dificulta<br />

mucho su traslación de un punto á otro; si este medio es<br />

el agua, es muy fácil: así, un tiburón sigue nuestras embarcaciones<br />

más veleras, y aun los vapores, desde América<br />

hasta los puertos del Mediterráneo, y allí se instala<br />

si le acomoda. El año pasado se cogió en Sóller un enorme<br />

cachalote impropio de nuestros mares. El aire favorece<br />

también la traslación de los animales, pero, no tanto<br />

como el agua; si el medio es la superficie de la tierra, es<br />

más difícil, y si es el subsuelo, mayores dificultades ofrece<br />

aun. La Filoxera vive bajo de tierra, por lo mismo<br />

aun cuando tenga todas las condiciones de existencia, no<br />

puede llegar á nuestras viñas.<br />

La mayor ó menor facilidad que tiene un animal en<br />

su locomoción, es otra circunstancia favorable ó contraria<br />

para trasladarse de un punto á otro. Las aves muy<br />

voladoras atraviesan distancias inmensas, y aun cruzando<br />

los mares vienen anualmente de apartadas regiones á cantarnos<br />

sus amorosas querellas. La Filoxera puede moverse<br />

poco por los insterticios de la tierra, por cuyo medio<br />

hemos visto que adelanta pocos metros en un año, aun<br />

siendo el terreno favorable. El insecto alado adelanta algo<br />

más, sobre todo auxiliado por el aire; calculándose en<br />

unos 3o kilómetros el espacio que en un año puede avanzar.<br />

Estas Islas están separadas de todo foco filoxérico<br />

por una distancia mucho mayor, luego tampoco por este<br />

medio llegará hasta nosotros.<br />

La Geografía zoológica nos enseña también que son<br />

obstáculos muy grandes, para la distribución de los animales,<br />

las cordilleras de montañas, los vastos arenales,<br />

y sobre todo los mares. Estamos separados del continente<br />

por 40 leguas de mar, luego nos hallamos en condiciones<br />

muy favorables para librarnos del azote, y hasta podemos<br />

tener seguridad deque no vendrá por los medios naturales.<br />

El medio en que vive la Filoxera, las dificulta-


- 3 4 -<br />

des que tiene para su locomoción, el ser imposible su llegada<br />

por medio del vuelo, y la zona de mar que nos separa<br />

de todo foco filoxérico, forman un conjunto de circunstancias<br />

que hacen imposible que venga esta plaga.<br />

Si el insecto no puede venir, en cambio lo pueden<br />

traer, y es fácil que así suceda. En iguales circunstancias<br />

se hallaban otras plagas, que han llegado hasta nosotros<br />

muy buenas y sanas, las hemos admitido á libre plática,<br />

y aquí campan por su respeto, causando perjuicios considerables,<br />

pues ponen á contribución varios frutos de la<br />

tierra.<br />

¿No llegó por ventura el Oidium procedente también<br />

de los Estados-Unidos, que debió por consiguiente cruzar<br />

el Atlántico y luego el Mediterráneo? ¿Cómo ha llegado á<br />

Europa la Filoxera misma? De muchas plagas se ignora,<br />

pero de otras especialmente las citadas Oidium y Filoxera,<br />

se conoce perfectamente cómo han sido importadas, y se<br />

les han podido seguir los pasos hasta cierto punto.<br />

El Oidium, se.sabe que en 1845 apareció por primera<br />

vez en las estufas de Morgate, desde donde pasó á otra estufa<br />

de la familia Rostchild, cuya finca está en las inmediaciones<br />

del Sena, y de allí se extendió por todas partes.<br />

El célebre químico Mr. Dumas, que era entonces ministro<br />

de agricultura, conoció toda la gravedad del mal, y propuso<br />

al Gobierno, una medida muy radical, pero salvadora;<br />

(la gangrena no se cura con paños calientes). Propuso<br />

la destrucción completa de todas las vides de las estufas<br />

atacadas: conocía perfectamente, que aquella era una<br />

verdadera plaga, un azote tan terrible que iba á extenderse<br />

por todas partes y á destruir todos los viñedos de<br />

Europa.<br />

El Gobierno no se decidió á tomar una medida tan<br />

radical, porque le parecía extrema, y, eran muchas las dificultades<br />

con que había de tropezar para llevarla á cabo.<br />

El ilustre químico hizo constar su proposición, y pocos<br />

años después se confirmaban en todas partes sus terribles<br />

vaticinios. Estos datos pueden verse más detalladamente


— 35 —<br />

en el luminoso escrito que sobre la Filoxera ha publicado<br />

el Sr. Miret.<br />

La Filoxera, según todas las probabilidades, vino de los<br />

Estados-Unidos en los barbados que se trajeron para algunas<br />

estufas de Inglaterra y en algunos sarmientos que<br />

se trajeron también á Avignon; una vez atravesado el<br />

Occéano, teniendo tan asombrosa reproducción, se explica<br />

fácilmente cómo ha podido extenderse por todas partes.


ESTRAGOS QUE PRODUCE<br />

LA FILOXERA.<br />

Este insecto tan diminuto es ya bien conocido de todo<br />

el mundo vitícola; apesar de su pequenez, los estragos que<br />

causa lo hacen tan temible que su nombre ha adquirido<br />

en pocos años una reputación europea, y es pronunciado<br />

con horror por todos los viticultores.<br />

Cuando la Filoxera invade una comarca, todos los propietarios<br />

se alarman, los sabios se reúnen en congresos,<br />

las autoridades dictan prudentes medidas, los viticultores<br />

se agitan, hay una reacción completa, pero todo es en vano,<br />

el pulgón sigue tranquilo su marcha invasora, continúa<br />

imperturbable su obra de destrucción, ataca, aniquila y<br />

mata la viña, el arbusto más precioso de cuantos posee la<br />

agricultura.<br />

La importancia de la viña es tal, y tan antiguamente<br />

reconocida, que, como dice muy bien Guyot, el Libro Sagrado<br />

nos la presenta ya contemporánea á Noé, al hombre<br />

escogido y regenerado por Dios; Jesucristo convierte el<br />

agua en vino en las bodas de Cana, transforma el vino en<br />

la sangre del hombre-Dios en la suprema Cena; y el catolicismo,<br />

que extiende á la humanidad entera sus dogmas<br />

inspirados, no puede celebrar su rito fundamental sin la<br />

existencia de la viña y del jugo purísimo y fermentado de<br />

sus frutos.<br />

La viña es por tanto un arbusto importantísimo, su<br />

extensión á todos los países donde puede vegetar y madurar<br />

sus frutos es una de las más preciosas conquistas de la<br />

humanidad, y es un deber de todos los buenos el procurar


- 3/ -<br />

su conservación, no sólo para aprovechar los inmensos<br />

beneficios que produce, sino para evitar, á más de la miseria<br />

general, gravísimas cuestiones sociales.<br />

Este preciosísimo arbusto ofrece en Europa á la Filoxera<br />

un alimento más grato que las plantas americanas<br />

de la misma especie. En las cepas europeas, la Filoxera<br />

vive en las raíces más finas, de las que va chupando el<br />

jugo hasta aniquilar la planta; en las americanas, vive<br />

sobre las hojas, no siendo tan desastrosos los efectos que<br />

en ellas produce.<br />

En las raíces más finas se acumulan legiones innumerables<br />

de filoxeras, que producen en el órgano una verdadera<br />

hipertrofia, de color amarillento al principio, pero<br />

que después, cuando la raíz ya degenera, toma un color<br />

negruzco, se arruga y se seca.<br />

Cuando la Filoxera ataca las hojas, los daños que causa<br />

no pueden ser tan considerables, porque los pámpanos<br />

son muchos, y pueden asimismo ejercer sus funciones<br />

respiratorias, en las que son auxiliados por todas las<br />

partes verdes de la planta. Cuando son las raíces las que<br />

están atacadas, sus funciones no pueden ser suplidas por<br />

otros órganos, y la planta experimenta todas las consecuencias<br />

de una falta de nutrición. En un principio, cuando<br />

no existe aún gran número de Filoxeras, sólo se ve una<br />

ligera hinchazón en las barbillas más finas, pero luego se<br />

va extendiendo á mayor longitud de las mismas; son invadidas<br />

otras raíces de orden superior, y las hinchazones<br />

abundan tanto que la cabellera puede á veces compararse<br />

á un verdadero racimo.<br />

Cuando empieza la invasión no se demuestra en la<br />

planta por signos exteriores, la vegetación es vigorosa, y<br />

nada induce á creer que la planta pueda estar atacada de<br />

la enfermedad, como no se observen agallas en las hojas,<br />

lo cual demuestra que no es el primer año de la invasión,<br />

ó á lo menos, que ya se ha formado la generación alada.<br />

A medida que aumenta el número de insectos que<br />

ataca las raíces, la planta languidece y muere; la enfer-<br />

5


— 38 —<br />

medad se manifiesta por una vegetación pobre, los sarmientos<br />

son cortos, y los pámpanos pequeños como si la<br />

planta hubiera estado sugeta á una prolongada sequía; los<br />

racimos, á su vez, son más diminutos, maduran con dificultad,<br />

y, si el mal está adelantado, abortan y se secan en<br />

embrión.<br />

La consecuencia de la invasión filoxérica es morir la<br />

viña en un plazo más ó menos largo, que depende de<br />

varias circunstancias; una viña raquítica de sí, descuidada,<br />

y en un mal terreno, perecerá mucho más pronto<br />

que otra joven, vigorosa, que vegeta en buen suelo; ésta,<br />

lucha con la enfermedad, y si la cabellera de la raíz ha<br />

sido destruida, barbilla de nuevo, aunque no con tanto<br />

vigor, vuelven á destruirse las barbillas recien formadas,<br />

y poco á poco se encuentra en el caso de la viña pobre.<br />

La duración es de tres, cuatro ó cinco años, terminando<br />

siempre por la muerte, como no pueda librarse de<br />

la Filoxera; pero cuando se la ataca con vigor, puede<br />

durar algunos años más, como sucede especialmente en<br />

Francia, donde la Compañía de ferro-carriles Paris-Lyon-<br />

Mediterranée gasta anualmente sumas fabulosas, ya que no<br />

para acabar con el insecto, á lo menos para minorar sus<br />

estragos, y ha conseguido, valiéndose de los medios de<br />

que nos ocuparemos al tratar del plan curativo, que las<br />

viñas que estaban condenadas á una muerta segura á los<br />

dos ó tres años, alcancen una vida de seis ó siete, y tal<br />

vez más, sigan fructificando, aunque en menor escala,<br />

y sólo á beneficio de gastos y afanes extraordinarios.


IMPORTANCIA DE LA PRODUCCIÓN<br />

QUE ATACA LA FILOXERA.<br />

Los ramos de riqueza pública y particular son la Agricultura,<br />

la Industria y el Comercio; éstas son las tres ramas,<br />

y éste es su orden gerárquico. La primera es la<br />

Agricultura, cuyos productos brutos difíciles de trasportar<br />

á distancias, y de poca aplicación, son modificados por la<br />

Industria, que les proporciona nueva y más fácil salida, y<br />

no sólo produce el bienestar de los industriales, sino de<br />

todos, y hasta aumenta la fertilidad del suelo.<br />

Pero la industria no puede extenderse sin los adelantos<br />

de la agricultura, que' es la que debe proporcionarle las<br />

primeras materias; la industria y la agricultura han de<br />

progresar la una al lado de la otra, y los adelantos en la<br />

primera dan también por resultado la prosperidad de la<br />

segunda.<br />

La industria y la agricultura están íntimamente ligadas<br />

con el comercio, tanto, que no puede haber agricultura ni<br />

industria prósperas, si los cambios no abren grande y fácil<br />

salida á los productos, que, siendo diferentes en las varías<br />

regiones del globo, se cambian en todos los pueblos civilizados,<br />

viniendo á aumentar de este modo la riqueza<br />

pública.<br />

El Comercio emancipa á los hombres activos de la<br />

dependencia de un suelo infértil, da salida al excedente<br />

de sus productos, procura nuevas y abundantes subsistencias<br />

y hace brotar la riqueza, aun en aquellas comar-


— 40 —<br />

cas que sin él se verían condenadas á una miseria y<br />

soledad eternas.<br />

Se ve pues que las tres ramas de riqueza están enlazadas<br />

por una estrecha solidaridad de intereses, que dependen<br />

recíprocamnnte la una de la otra, no pudiendo<br />

faltar el equilibrio sin que se resientan todas.<br />

La Filoxera ha de causar daños inmensos á dichos<br />

tres ramos de riqueza; y aunque la Agricultura es la que<br />

más directamente recibe los perjuicios, porque la hiere en<br />

su principal producción, sin embargo estos perjuicios refluyen<br />

luego á la Industria y al Comercio.<br />

La muerte de la viña es la ruina, es la miseria de un<br />

país vitícola, es, no sólo la decadencia, sino un obstáculo<br />

á la prosperidad durante un larguísimo periodo.<br />

Por poco que reflexionemos sobre la importancia de<br />

la viña, observaremos que sus frutos, al propio tiempo<br />

que son estimados y ocupan un lugar preferente en las<br />

regaladas y fastuosas mesas de los Príncipes, se sirven<br />

abundantemente en la frugal comida de los pobres, y aun<br />

en donde se cultiva la viña se halla su precioso fruto á<br />

merced de cualquiera, pues no hay viticultor que se oponga<br />

á que un transeúnte coja algún racimo de sus cepas para<br />

apagar la sed-<br />

Este mismo fruto desecado y preparado convenientemente<br />

forma la deliciosa uva pasa que no sólo es un postre<br />

exquisito, sino que constituye un elemento importante del<br />

arte culinario y de la repostería; se conserva sin alteración<br />

durante años y se trasporta á las más apartadas regiones.<br />

Los vinos, espíritus, y alcoholes se destinan á muchísimos<br />

usos en las artes, en las ciencias, en la medicina,<br />

en la industria, en el comercio y en el consumo, y cuando<br />

el mosto ha experimentado la fermentación acética constituyendo<br />

el vinagre bueno, á más de los usos á que se<br />

le destina en la economía doméstica, tiene infinitas aplicaciones<br />

en muchísimas industrias.<br />

El fruto de la viña bajo todas y cada una de sus for-


— 4i —<br />

mas da siempre vida y animación á los pueblos vitícolas,<br />

á los que proporciona trabajo y da el vino, que es la sangre<br />

de los pobres, el calor de su corazón, el sosten de su<br />

vida, y después de tener este alimento asegurado, se entrega<br />

una parte del sobrante á la industria, que abre un<br />

nuevo y vasto mercado á los productores, excita su inteligencia,<br />

su actividad y su economía, produciendo un incremento<br />

rápido en la riqueza, en el bienestar y en la<br />

fertilidad de las tierras; la división del trabajo se establece<br />

de este modo entre los miembros de la sociedad, se ponen<br />

en acción todas las actividades, todas las inteligencias, y<br />

por medio de esfuerzos, siempre más hábiles, se obtienen<br />

siempre mayores riquezas.<br />

Tanto los productos primitivos como los elaborados<br />

de varios modos por la industria, tienen el comercio dispuesto<br />

siempre á abrir nuevos y vastísimos mercados al<br />

excedente de los productos, favoreciendo también la división<br />

del trabajo, y, mientras estimula la vida y la expansión<br />

fuera, procura nuevos medios de subsistencia, multiplica<br />

la población, fomenta notablemente la agricultura,<br />

la industria, las ciencias, las artes, y hace brotar la riqueza<br />

en las comarcas más miserables.<br />

Todos estos beneficios tan importantes los destruye<br />

por completo la Filoxera, y como en España uno de los<br />

principales productos se debe á la viticultura es también<br />

uno de los puntos en donde se han de experimentar más<br />

sus funestas consecuencias.<br />

El Sr. Miret en su erudito libro sóbrela Filoxera, después<br />

de manifestar que la viña es abundante en Europa<br />

y que sólo están desheredadas de tan importante cultivo<br />

Inglaterra, Escocia, Irlanda, Suecia, Noruega, Dinamarca<br />

Bélgica y Holanda, da un estado de las restantes<br />

naciones, estado que toma del Moniteur Vinicole, y en él<br />

figura España por 20 millones de hectolitros, dato que dista<br />

ser exagerado, pues, según el referido Miret, el Doctor<br />

Fátio le señala 3o millones y una superficie de 1.000,400<br />

hectáreas.


Como nos proponemos escribir con especialidad para<br />

esta provincia no nos extenderemos sobre el particular,<br />

sino que, en capítulo aparte, pasaremos á considerar la<br />

importancia de la viticultura de las Baleares y por consiguiente<br />

los efectos que en ella produciría la Filoxera.


IMPORTANCIA<br />

DE LA VITICULTURA BALEAR.<br />

Por poco que reflexionemos sobre los medios de prosperidad<br />

de estas Islas nos hemos de convencer de que la<br />

viña ocupa el primer rango en la escala de riqueza territorial,<br />

no tanto por su producto neto, como por la mano<br />

de obra que exige su cultivo, y porque aprovecha muchos<br />

terrenos que no servirían absolutamente para otra cosa.<br />

Es la viña, á no dudarlo, el primer elemento de la riqueza<br />

balear, sostiene infinidad de braceros que le deben<br />

exclusivamente la subsistencia, pone en movimiento grandes<br />

capitales por medio de las industrias accesorias, que<br />

proporcionan también trabajo, dá el vino, tan necesario<br />

como alimento, y ofrece al comercio productos importantes,<br />

de los que se exportan grandes cantidades al extranjero<br />

y América, exportándose también mucho fruto<br />

maduro para varios puntos de la Península.<br />

Fácilmente se comprende la inmensa importancia de<br />

este fruto que bajo sus multiplicadas formas es el que dá<br />

vida al país. El trabajo que proporciona, el vino que se<br />

consume y que se exporta, constituyen, al mismo tiempo<br />

que la riqueza de los propietarios, la sangre de los obreros.<br />

Vamos á ocuparnos con algún disgusto de la extensión<br />

que tiene el cultivo de la vid en esta provincia, y decimos<br />

con disgusto, porque nos lo causa el ver siempre en<br />

los agricultores, ó mejor, en los ayuntamientos la tendencia<br />

á ocultar la verdad disminuyendo la riqueza; esta<br />

costumbre erigida en sistema, es causa de muchos males<br />

que vienen á pesar sobre los pequeños y medianos propietarios.


— 44 —<br />

Según la última estadística existían en Mallorca i8,5oo<br />

hectáreas de viña, es cierto que no se aumentó la cifra,<br />

al contrario es muy probable que se disminuyera por no<br />

perder la costumbre. Desde aquella fecha se han plantado<br />

seguramente muchos millares de hectáreas ¿quién había<br />

de creer que hoy no existieran en toda la provincia más<br />

que unas 14,000? Es una desgracia muy grande que á<br />

medida que se vá plantando viña disminuya la extensión<br />

destinada á su cultivo, esto es una especie de milagro,<br />

pero un milagro fatal.<br />

No dudamos que en la provincia el día en que se haga<br />

una estadística verdad, resultarán más de 25.000 hectáreas<br />

de viña, de ésta hay más de la mifad, casi toda la<br />

plantada de larga fecha, que ocupa un terreno que con<br />

mucha dificultad puede destinarse á otro cultivo que no<br />

sea ruinoso.<br />

Entre los varios árboles y arbustos que fructifican en<br />

esta provincia, la vid es, á no dudarlo, el que mejor se<br />

cultiva, especialmente en algunos pueblos.<br />

Me complazco en citar á Felanitx en primer término,<br />

y consignar aquí, que si bien no ha llegado á la perfección,<br />

marcha y no despacio hacia ella. Este progreso es<br />

debido en gran parte al Ateneo de esa bella población,<br />

que no está destinado, como la generalidad de casinos,<br />

al juego y á la bebida, sino al estudio de las cosas más<br />

útiles.<br />

Su digno presidente no es uno de aquellos tipos pedantescos<br />

que creen imponer admiración al mundo; es<br />

todo lo contrario, un hombre modesto, dedicado al estudio<br />

y cultivo de las ciencias, que se ha constituido en<br />

iniciador de los adelantos de su pueblo y, con un celo,<br />

una inteligencia y una perseverancia infatigables, alcanza<br />

cada día nuevos triunfos.<br />

Merced á su útil propaganda la generalidad de los viticultores<br />

está familiarizada con el uso del gleucómetro,<br />

todos saben aquilatar sus mostos, todos conocen la cantidad<br />

de azúcar que les dá tal ó cual variedad de cepa..


_ 45 -<br />

Los compradores y vendedores de vino destinado á la fabricación<br />

de aguardiente se valen también del alambique<br />

Salieron para saber de antemano la cantidad de alcohol<br />

que compran ó venden.<br />

La calefacción del vino por el sistema Pasteur ha sido<br />

objeto de numerosos pero muy concienzudos ensayos 3^ el<br />

ceno-termo funciona ya en muchas bodegas.<br />

Sería prolijo enumerar los adelantos por él introducidos<br />

en la viticultura y vinificación, pero, si no citamos<br />

otras mejoras técnicas no podemos prescindir de mencionar<br />

algunas de otro género.<br />

Partiendo de la misma iniciativa, se ha establecido una<br />

Caja de ahorros, que, según nuestros informes, cuenta ya<br />

con un capital importante, y se acaricia el proyecto de<br />

asociarse con otros pueblos, para convertir esta Caja en<br />

un pequeño Banco agrícola, que tan buenos resultados<br />

había de dar, y cuyo establecimiento puede considerarse<br />

hoy casi de necesidad.<br />

Se ha formado una Compañía, que desean elevar á la<br />

categoría de Sociedad anónima, con el objeto único de<br />

explotar y al mismo tiempo acreditar sus caldos, huyendo<br />

de ese mercantilismo execrable y soez que todo lo invade<br />

y todo lo adultera, que no es el verdadero comercio que<br />

se contenta con una prudente remuneración por su trabajo<br />

y capital, sino que tiene por única divisa dinero á<br />

todo trance, no reparando, para atesorarlo, ni en el descrédito<br />

de su país, ni en su propia deshonra.<br />

Sentimos habernos ocupado tanto de una persona<br />

cuya modestia pudiera ofenderse, y le suplicamos nos lo<br />

dispense; nuestro lenguaje es muy sincero, y más que á<br />

un elogio estéril, tiende á excitar á las personas idóneas<br />

de los demás pueblos á que sean sus imitadores.<br />

En fin, Felanitx empieza á secundar ese gran movimiento<br />

cosmopolita, que arrastra todas las inteligencias,<br />

todas las fuerzas, todas las actividades, y no deja fuera de<br />

su órbita más que á los pueblos débiles y refractarios á<br />

toda idea de progreso.<br />

6


_ 46 -<br />

No debemos terminar esta parte referente á la importancia<br />

de la viticultura balear, sin consagrar algunas líneas<br />

á la menor y casi desconocida de las islas habitadas de<br />

nuestro archipiélago.<br />

Formentera, insignificante hoy, pero importante por su<br />

historia, lo es también por su porvenir, que deberá á la<br />

viticultura -<br />

, esta isla ha entrado ya en la vía del progreso,<br />

gracias á la inteligencia y actividad de una persona, que<br />

habiendo adquirido en ella propiedades, ha hecho ensayos<br />

fructuosos con la plantación de la vid, y ha obtenido resultados<br />

inmejorables. Este año se contará tal vez por<br />

centenares el número de hectáreas de viñedo, que sin ningún<br />

género de duda colonizarán la isla, introducirán en<br />

ella el bienestar, lá vida, la animación y la riqueza.<br />

En Formentera la maduración de las uvas es muy precoz,<br />

el clima muy templado, el terreno caliente por su<br />

composición; y su color claro proporciona á los racimos,<br />

además del calor difuso que reciben de la atmósfera, una<br />

gran cantidad por la reverberación, tanto, que la maduración<br />

del fruto se adelanta nada menos que un mes á la<br />

de Mallorca, de modo que plantando variedades precoces<br />

de las que se destinan para la mesa, casi en la primavera<br />

se podrían exportar grandes cantidades de fruto sazonado,<br />

y plantándose variedades escogidas para la uva pasa podrían<br />

arreglarse puramente soleadas, porque la estación<br />

lo permitiría muy bien, y no habría necesidad del escaldado<br />

que siempre hace desmerecer el producto.


¿QUE EFECTOS PRODUCIRÍA<br />

EN ESTA PROVINCIA<br />

UNA INVASION FILOXÉRICA?<br />

Si desgraciadamente por abandono, ó por imprudencia,<br />

penetrara el voraz huésped en nuestros viñedos la Provincia<br />

se vería en un conflicto gravísimo y de las más trascendentales<br />

consecuencias. Serían inevitablemente destruidos<br />

todos los viñedos, lo cual importa una suma fabulosa,<br />

sin embargo, esta pérdida no es aún la de más importancia,<br />

por ella, los propietarios de viñas sufrirían un quebranto<br />

grande en sus fortunas, pero no por esto quedarían arruinados;<br />

sufrirían también gran detrimento los capitales que<br />

el cultivo de la vid pone en movimiento por medio de varias<br />

industrias laterales, como son fabricaciones de aguardiente<br />

y espíritu, las que necesitan á su vez el concurso de<br />

muchas otras, tales como la fabricación de toneles, industrias<br />

botellera, taponera, etc.<br />

Grandes pérdidas sufriría también el comercio en general,<br />

pero muy especialmente el destinado á este ramo de<br />

la producción agrícola que hoy es de los más activos, tanto,<br />

que es el principal género que circula por nuestra vía férrea:<br />

la Empresa, si por desgracia nos invadiera la plaga,<br />

es una de las que más sufrirían directa é indirectamente.<br />

Todo es muy importante y muy digno de llamar la atención<br />

de gobernantes y gobernados, pero por grandes que<br />

sean estos perjuicios, se eclipsan al pensar en la falta de<br />

trabajo para millares de infelices braceros que viven exclu-


- 4§ -<br />

sivamente del cultivo de la vid, de este precioso arbusto<br />

cuyo poder, eminentemente colonizador, ya nadie pone en<br />

duda; él proporciona trabajo á los dos sexos, á todas las<br />

edades, y en todas las épocas del año.<br />

Este poder colonizador se ha. demostrado muy bien en<br />

esta Isla por el aumento que ha experimentado el censo de<br />

población en todos los pueblos vitícolas; á la extensión de<br />

la viña debe Manacor el haber duplicado el suyo en 3o<br />

ó 40 años.<br />

Donde no se cultiva la viña, una sequía es de consecuencias<br />

espantosas. En los pueblos vitícolas no falta trabajo<br />

para los braceros, y éstos ganan un jornal remunerador;<br />

donde no hay viñas, se ha visto la miseria más completa,<br />

el hambre y la emigración. De un solo pueblo de<br />

esta Isla, pueblo que tiene muy buenos terrenos pero que<br />

carece de viñas y casi de arbolado, se han visto este año<br />

obligadas á emigrar al extrangero más de treinta familias<br />

de braceros.<br />

Los obreros pues, esta parte trabajadora la más numerosa<br />

de la sociedad y la que le dá vida, esta clase tan<br />

desheredada y que es mirada con indiferencia por ciertas<br />

gentes, es la que merece nuestra predilección.<br />

Esta clase importantísima, cuyas generaciones se suceden<br />

unas á otras dejando tras sí la riqueza y la fecundidad<br />

salida de sus brazos, esta clase que multiplica diariamente<br />

sus conquistas sobre la naturaleza, domándola con valor<br />

infatigable, hace florecer el mismo desierto, lo viste de espléndidos<br />

cultivos, lo cubre de lujo y magnificencia, y con<br />

su asiduo trabajo recoge el alimento para todos, manifestándose<br />

muy satisfecha cuando puede aprovechar algunos<br />

desperdicios; bien merece una mirada compasiva de los<br />

que de ella reciben tanto beneficio.<br />

El porvenir de esta clase tan benemérita es el que nos<br />

preocupa ¿queréis saber cuál es este porvenir en el caso<br />

de que nuestros viñedos sean invadidos por la plaga filoxérica?<br />

Os lo diremos: la miseria más espantosa, la emigración,<br />

el hambre y la inanición con todas sus conse-


— 49 —<br />

cuencias, y hasta el crimen, que de la miseria á él, es muy<br />

corta la distancia.<br />

Estos infelices obreros, pues, poblarán las playas extranjeras,<br />

las casas de beneficencia, los cementerios y<br />

también los presidios; ¡qué pavoroso porvenir para esta<br />

útil é inocente clase, que parece condenada á una servidumbre<br />

sin descanso y á una miseria sin esperanza!<br />

¡pobres carneros de Casti! ¡Encorvados siempre hacia la<br />

tierra, dejan en este camino su carne y su sangre, y por<br />

huellas la fertilidad salida de sus brazos, y la riqueza<br />

para aquellos que desconocen sus beneficios!<br />

Esta no es una opinión nuestra, hija de la ardiente<br />

imaginación exaltada por el interés que siempre nos han<br />

inspirado las clases desvalidas, es la opinión de todos los<br />

sabios y pensadores de Europa, que así lo han manifestado;<br />

es, en fin, una funesta realidad. En prueba de ello,<br />

veamos cuál es la opinión del Congreso filoxérico de<br />

Madrid: por lo que toca á este punto, oigamos cómo se<br />

explica esta sapientísima Asamblea al contestar á la cuestión<br />

4. A<br />

del interrogatorio:<br />

«La destrucción total de todos los viñedos y la supresión<br />

del vino como parte del alimento general y en la esfera<br />

económica moral y social, la ruina, la miseria y la emigración<br />

en las comarcas vinícolas de España, y como consecuencia<br />

de la falta de vino, el embrutecimiento por el uso<br />

de los alcoholes de industria, con todas sus funestas consecuencias;<br />

y finalmente un quebranto inmenso en la hacienda<br />

de la Nación y el riesgo inminente de la subversión del orden<br />

público y social. y><br />

Así se expresa el Congreso filoxérico de Madrid que,<br />

lo decimos con satisfacción, estuvo á la altura de los principales<br />

Congresos extrangeros: se explica en pocas palabras,<br />

pero cada frase, como dirían los retóricos, encierra todo<br />

un poema.<br />

No son más consoladoras las afirmaciones del gran<br />

Congreso internacional de Laussana compuesto de las<br />

principales notabilidades científicas de las varias naciones


— 5o —<br />

vitícolas de Europa, y en el que tan dignamente figuró<br />

el naturalista español Sr. Graells. Queremos también ceder<br />

la palabra á esta ilustre Asamblea para que se conozca<br />

cuál fué su opinión al contestar á la pregunta i5.° del<br />

cuestionario.<br />

«-El resultado, dice, será la ruina y la miseria en todas<br />

partes, la emigración ó la desmoralización en ciertos puntos,<br />

en fin, muy probablemente en otros el embrutecimiento por<br />

medio de los alcoholes de industria, y por lo tanto la degeneración<br />

de la especie.»<br />

El que no se asusta y tiembla de espanto ante tan sombríos<br />

horóscopos, el que dice no tengo viñas, poco puede<br />

importarme, el que oye con sangre fría tan funestos vaticinios,<br />

es verdaderamente una filoxera social.<br />

La falta de vino, que constituye una parte del alimento<br />

general, es una cuestión, aunque en apariencia insignificante,<br />

de un interés de primer orden; siempre, como es de suponer,<br />

sus fatales consecuencias han de pesar más sobre<br />

las clases numerosas que viven de un trabajo que tiene<br />

por base las fuerzas musculares, y que carece de un alimento<br />

suficientemente reparador.<br />

Estas clases con un pedazo de pan y un vaso de vino<br />

que les suple el alimento respiratorio ó carbonado, trabajan<br />

y viven perfectamente. En el día, no sólo por la Filoxera<br />

sino por el impuesto de consumos, el vino alcanza un<br />

precio superior á los recursos de las clases proletarias, y<br />

los sofisticadores de oficio, los que todo lo adulteran, esos<br />

especuladores de mal género, ejercen su abominable tráfico<br />

á expensas de la salud y de la robustez de los pueblos. (*)<br />

Las tristes revelaciones de los hechos nos dicen terminantemente<br />

que el impuesto de consumos produce una<br />

depauperación en la sangre de las clases trabajadoras, y<br />

(') Hoy ha llegado á tal estremo la escasez de vino, que en algunos pueblos de<br />

los más vitícolas de la Provincia las principales tabernas se hallan de todo punto<br />

desprovistas, pues los cosecheros han preferido la esportacion, que les ofrece pingües<br />

beneficios.


— 5i —<br />

ésto debe atribuirse principalmente á la falta de vino puro,<br />

y por lo mismo de alimento bastante carbonado.<br />

No hay duda que el vino puede suplirse por una alimentación<br />

más rica en principios azoados y carbonados,<br />

pero el precio de estos alimentos es muy elevado; los de<br />

primera necesidad van encareciendo siempre, y el cebo de<br />

la ganancia excita á la adulteración, dando por resultado<br />

que el fraude se sirve como plato obligado en todas las<br />

mesas.<br />

No es fácil esperar por ahora una baja en los artículos<br />

de primera necesidad, porque en Europa hace ya tiempo<br />

que se nota un desnivel entre la producción y el consumo,<br />

siendo los pueblos de Occidente los que más experimentan<br />

sus efectos; por esta razón las clases proletarias no<br />

están bien alimentadas. Entre las clases obreras de la industria<br />

francesa, que según, las estadísticas, son las que se<br />

nutren mejor, no consume cada familia tantas substancias<br />

animales y grasas como una semi-salvaje de las estepas<br />

de Oremburgo.<br />

Quisiéramos que esta cuestión, hasta cierto punto incidental<br />

en este escrito, se examinara detenidamente y sin<br />

prevenciones, sobre todo políticas, y no dudamos que nuestros<br />

hombres de Estado descubrirían muy pronto una de<br />

esas crisis solemnes que se preparan en nuestro porvenir,<br />

y no buscarían remedios vulgares, conocidos y desacreditados<br />

para una situación sin ejemplo; sino que apelando<br />

á medios acertados, tendríamos la satisfacción de ver que<br />

el suelo de nuestra patria en un día no lejano sería el<br />

puerto de salvación á donde vendrían á buscar la subsistencia<br />

y primeras materias muchas naciones hoy día más<br />

poderosas.<br />

No hay solución: ó bien nuestra agricultura ha de adelantar<br />

y producir más barato, ó tendremos que abastecernos<br />

en los mercados extrangeros, á lo cual se opone<br />

también la gente de moda amasada con levadura proteccionista.<br />

Pero esta es una moda que por fortuna decae y<br />

renace, y en las oscilaciones siempre se adelanta algo. El


progreso en su marcha imperturbable se encuentra siempre<br />

en su camino, y en cada etapa, las mismas protestas, las<br />

mismas profecías, ó mejor, las mismas calumnias, pero<br />

impotentes para detener su majestuosa y eterna ascensión.<br />

Se vé pues que la falta de vino, como alimento, ha de<br />

producir irremisiblemente una depauperación en la sangre<br />

de las clases productoras, por consecuencia una degeneración<br />

en la especie, según afirma el Congreso de Laussana,<br />

y por añadidura tendremos los efectos del espíritu de industria,<br />

que son el embrutecimiento, como asegura también<br />

el Congreso de Madrid.


¿LOS PUEBLOS VITÍCOLAS<br />

DE LA PROVINCIA<br />

PODRÁN FÁCIL Y ECONÓMICAMENTE REEMPLAZAR LA VINA<br />

POR OTRO CULTIVO REMUNERADOR?<br />

La grande extensión de terreno destinada al cultivo de<br />

la vid, y que produce los beneficios que hemos indicado,<br />

es en su mayor parte de tales condiciones que no sirve<br />

absolutamente para otra cosa. Sería casi todo terreno perdido,<br />

y aun valiera más así que destinarlo, como probablemente<br />

sucedería, al cultivo de cereales, que, si en todo<br />

caso es esquilmador, en las tierras que no son verdaderamente<br />

de pan llevar, es decir, que no han llegado al<br />

período cereal, es eminentemente ruinoso, y por él sufre<br />

muchísimos perjuicios la isla de Mallorca.<br />

Entre un cultivo como el de la vid, que es bien remunerador<br />

y proporciona mucho trabajo, y el cultivo de cereales,<br />

que con frecuencia es ruinoso y siempre proporciona<br />

poco trabajo, hay toda la diferencia de saldar la<br />

cuenta por ganancia á saldarla por grandes pérdidas, hay<br />

la diferencia de sacar á un pueblo de la miseria ó sumirlo<br />

en ella.<br />

Si las viñas desaparecieran ¿qué seria de las poblaciones<br />

que hoy están casi exclusivamente sostenidas por su<br />

cultivo? qué sería de Binisalem, Felanitx, y otras que hoy<br />

pueden considerarse como ricas? Pronto, muy pronto la


_ 5 4 -<br />

densa población que sostienen habría desaparecido, y con<br />

ella la riqueza y el bienestar de los restantes.<br />

La densidad de una población agrícola es la expresión<br />

de su riqueza; la cifra de población que mantiene en estado<br />

de prosperidad, indica las buenas condiciones del suelo ó<br />

el adelanto del cultivo.<br />

Dicen algunos que la viña se suplirá por el arbolado;<br />

según en que puntos es difícil que puedan prosperar á lo<br />

menos ciertos árboles, pues que á ello se opone el clima<br />

cálido de estas Islas y su propensión á las sequías.<br />

Además, se necesita un capital grande para atender á la<br />

plantación y cuidados sucesivos, y exige una larga serie de<br />

años para que los árboles estén en disposición de producir;<br />

estas son causas que hacen difícil y costoso el reemplazar<br />

las cepas por otros árboles. La viña no necesita<br />

encomiadores, porque la circunstancia de llegar en pocos<br />

años á su apogeo es una gran recomendación; los propietarios<br />

calculan que ellos mismos obtendrán los productos,<br />

y plantando ciertos árboles, es menester que se resignen<br />

á identificar sus beneficios con los intereses de su segunda<br />

ó tercera generación; y desgraciadamente éstos no son aficionados<br />

á operaciones á tan largo plazo, en su egoísmo<br />

repiten como eterno refrán «.Los plantarán los que vengan<br />

después.»<br />

Pero dado caso de que la vid pueda ser reemplazada<br />

por otros cultivos arborescentes, es menester prepararse<br />

para ello con tiempo, hacer plantíos y viveros para no<br />

tener que importar los árboles de fuera, lo cual supone un<br />

aumento grande en el gasto y una pérdida para el país.<br />

Los árboles que nuestros agricultores hayan de plantar<br />

para sustituir á las cepas varían según infinidad de circunstancias<br />

que vamos á examinar sucintamente.<br />

El olivo, este árbol predilecto de Minerva, que crece<br />

expontáneamente en el Oriente, en las partes más meridionales<br />

de Europa y en el centro de África, fué importado á<br />

estas islas por los Cartagineses que las habitaban 480 años<br />

antes de nuestra era. Parece que había tiempo para estar


— 55 —<br />

muy adelantado su cultivo, pero desgraciadamente, (salvo<br />

honrosas, pero pocas excepciones) se observa un descuido<br />

y abandono dignos de la más severa censura. Este árbol<br />

necesita mucho tiempo para dar un producto regular, es<br />

costoso, de cosecha muy eventual, y lo que más detiene á<br />

nuestros agricultores para la plantación de olivares, es un<br />

refrán muy común que dice: «.Olivos, de mi abuelo.)-)<br />

La higuera que crece expontáneamente en todos los<br />

países cálidos de Europa, en Asia, de donde es oriunda,<br />

y en el Norte de África, y cuyo cultivo se halla muy generalizado<br />

en Mallorca é Ibiza, es un árbol de vida secular<br />

que cuesta poco, pues apenas exige cuidados, es el más<br />

constante en su producción, su fruto es estimado de los<br />

ricos, es el pan de los pobres y el cebo de los animales,<br />

al propio teimpo que constituye un ramo de exportación<br />

muy importante, ya sea trasformado en carne de cerdo,<br />

ya simplemente como fruto seco, que en algunos puntos<br />

compite ventajosamente con el tan celebrado de Smirna.<br />

Pero nuestras frecuentes sequías son para la higuera, como<br />

para los demás árboles, un enemigo difícil de vencer, y<br />

además, hay en estas Islas muchísimos puntos donde no<br />

prospera tan precioso árbol.<br />

El almendro originario del Asia y del Norte de África,<br />

ha tomado ya carta de naturaleza en nuestra isla, sobre<br />

todo en Ibiza en donde podemos afirmar sin temor de ser<br />

desmentidos que se producen los mejores almendros del<br />

mundo. Este árbol será más productivo cuando nuestros<br />

agricultores no tengan la inmodesta pretensión de exigir<br />

doble cosecha á un terreno pobre y aun sin abonarlo,<br />

cuando no cometan el disparate mayúsculo de exigir á una<br />

tierra ligera cosecha de cereales, de sí muy esquilmadora,<br />

y otra del fruto del árbol, sin devolver al suelo, por medio<br />

de abonos bien indicados, los elementos que le quitaron las<br />

cosechas.<br />

Pero este precioso árbol tiene un enemigo poderoso en<br />

los vientos fríos del último cuadrante y también en las<br />

escarchas de primavera, que en una sola noche suelen destruir<br />

una cosecha.


— 56 —<br />

La morera, oriunda de la China, en los puntos apropiados<br />

sería de mucha utilidad; la sericultura en Mallorca<br />

tiene su historia importante, y tiene también su porvenir.<br />

Es muy probable que esté destinada en un día, no lejano,<br />

á constituir uno de los principales ramos de riqueza en<br />

varios puntos de esta isla.<br />

El algarrobo, este árbol dioico originario del centro de<br />

África, pero que hoy crece expontáneamente en Italia, en<br />

España y aun en los puntos más calientes de la Francia<br />

meridional, es también expontáneo en Mallorca, donde consiente<br />

por lo mismo un cultivo descuidado; prospera casi<br />

en cualquier punto de la Isla dando abundantísimo fruto,<br />

que hoy día alcanza un precio tan elevado que se le distrae<br />

de su uso natural, cual es la alimentación del ganado,<br />

y se prefiere entregarlo á la exportación, que ofrece á sus<br />

cultivadores más pingües rendimientos.<br />

Pero ¿cómo hemos de creer que el algarrobo reemplace<br />

las viñas si vemos posesiones inmensas, dominios casi sin<br />

fin, que desde el centro forman horizonte por todas partes,<br />

en donde el algarrobo sería una riqueza incalculable, y<br />

sin embargo se ven completamente despoblados? Respondan<br />

por nosotros las extensas marinas de Llummayor,<br />

Campos, Santañy, etc., que son la ruina de los que las<br />

cultivan, y pobladas de algarrobos producirían muchos millones<br />

de duros anuales.<br />

En terrenos sustanciosos, húmedos y frescos, ó bien<br />

susceptibles de ser regados, pudieran hacerse plantaciones<br />

de varios frutales que se avienen muy bien con nuestro<br />

clima. Pero estos árboles exigen más condiciones y cuidados,<br />

para cultivarse en grande escala, délas que el genio de<br />

nuestros agricultores sabe dispensar.<br />

¿Serán reemplazadas las viñas en algunos puntos por<br />

plantaciones forestales, que son las únicas que admitirían<br />

ciertos terrenos? Con gusto nos extenderíamos sobre este<br />

punto si no fuera separarnos demasiado de la cuestión,<br />

así nos limitaremos á decir que por desgracia, pero desgracia<br />

grande, casi irreparable, en esta isla se observa


desde mucho tiempo la tendencia á destruir los bosques,<br />

hasta tal punto, que no hemos vacilado en otras ocasiones<br />

en calificarla de vandalismo forestal; todos los bosques se<br />

destruyen y ni uno solo se replanta, experimentándose,<br />

cada día más, las funestas consecuencias que de tal destrucción<br />

se originan.


— 58 —<br />

¿PUEDE CREERSE<br />

QUE LA FILOXERA ES DEBIDA<br />

Á LA DEGENERACIÓN DE LA VID?<br />

El deseo de descubrir siempre una causa para todos<br />

los efectos, es lo que ha hecho suscitar esta cuestión, que,<br />

á nuestro juicio, no merece ser refutada en serio; pero habiéndose<br />

tratado por cuantos se han ocupado en los estudios<br />

sobre la Filoxera, nos parece oportuno decir sobre<br />

ella algunas palabras.<br />

No puede ponerse en duda que la vid no presenta hoy<br />

ejemplos de aquel primitivo vigor de vegetación, no se<br />

conocen aquellas vides extraordinarias de que hablan los<br />

autores antiguos, y de cuyos troncos, utilizados en las<br />

artes, se conservan aún objetos importantes. Plinio habla<br />

de una colosal estatua de Júpiter hecha de una sola pieza<br />

y de un tronco de vid. La armazón del templo de Diana<br />

de Efeso está construida de troncos de vid de Chipre. Las<br />

grandes puertas de la catedral de Granada son también<br />

de vid que es la madera más indestructible que se conoce.<br />

En África se han visto cepas cuyos tallos tenían más de<br />

cuatro metros de circunferencia, pero ésto depende de crecer<br />

casi en completa libertad durante muchos siglos, pues que<br />

la vid es una planta de las que tienen más longevidad.<br />

Si aun dejásemos crecer durante siglos sus tallos sarmentosos,<br />

permitiendo á sus vigorosos vastagos trepar sobre<br />

los árboles ó edificios, adquirirían dimensiones coló-


- 5 9 -<br />

sales, pues vemos las que adquieren en pocos años cuando<br />

se crían en tales condiciones; es verdad que entonces los<br />

vinos son de muy inferior calidad porque los frutos no<br />

reciben más que el calor difuso del aire y no la reverberación<br />

de la tierra, razón porque maduran con más dificultad<br />

y dan vinos inferiores y poco alcohólicos.<br />

El cultivo de la vid asociada á los grandes árboles, del<br />

que se ocupa ya Virgilio en sus Geórgicas, es, como puede<br />

deducirse, antiquísimo, pero de él existen bastantes ejemplos<br />

todavía en algunos puntos de Mallorca. A pesar de<br />

ser este cultivo tan común no era conocido en Grecia,<br />

como lo prueba el siguiente hecho curioso: El embajador<br />

Cineas sorprendido de la elevación de las vides de Aricia,<br />

pero gustándole muy poco el vino que producían, dijo,chanceándose,<br />

que habían hecho muy bien en colgar de<br />

una cruz tari alta á la madre de un vino tan malo.<br />

Las viñas enlazadas con los árboles, de cuyo cultivo son<br />

una reminiscencia nuestros rodrigones, cuando se cultivaban<br />

con esmero daban abundantísimo fruto, se recogían<br />

hasta diez cullei (más de cincuenta hectolitros) por jugera<br />

(veinticinco áreas) pero á pesar de esto, hoy se prefiere<br />

criar la viña baja, como un pequeño arbusto, pudiendo de<br />

este modo estar espesa y sostenerse por sí sola.<br />

No dudamos de que si hoy se dejase crecer una cepa en<br />

buenas condiciones, adquiriría con el trascurso de los años<br />

las dimensiones que ahora nos asombran.<br />

La viña pues no ha degenerado, y caso de que así fuese,<br />

es muy extraño que la degeneración haya sido tan repentina,<br />

y que se observe en todos los viñedos en cuanto<br />

están íiloxerados, sea cual fuere la calidad de la cepa, el<br />

terreno en que vive, y el cultivo que se le da, y que se<br />

regenere como por encanto, si por cualquier medio se<br />

consigue librarla del parásito.<br />

¿En tan poco tiempo hubieran degenerado todas las<br />

vides de Europa y simultáneamente las más vigorosas y<br />

las más débiles, las que vegetan en terrenos buenos y sustanciosos,<br />

y las que viven en los suelos más pobres, lo


— 6o —<br />

mismo las que reciben un cultivo esmerado y escogidos<br />

abonos que las que están sugetas al mayor abandono?<br />

Las mismas ideas se emitieron ya cuando nuestros<br />

viñedos fueron atacados por el oidiwn, la verdadera degeneración<br />

está en la presencia del insecto, y donde quiera<br />

que él aparece allí degenera y muere la viña.<br />

Cuantos esfuerzos se han hecho para aclimatar las<br />

vides europeas en la parte oriental de los Estados-Unidos<br />

han sido infructuosos; al poco tiempo perecían todas las<br />

cepas, y la causa se ha descubierto cuando se ha conocido<br />

la Filoxera atacando las raices. Las mismas variedades<br />

europeas no perecían en la California, ni en toda la parte<br />

occidental de la América del Norte, hasta que, habiéndose<br />

importado cepas del otro lado de la cordillera que separa<br />

ambas regiones, fué importada la Filoxera, se extendió<br />

con la rapidez que sabe hacerlo, y en muy poco tiempo<br />

desaparecieron todas las variedades europeo-asiáticas.<br />

Esta es á nuestro entender una cuestión pueril, un<br />

modo raro que tienen de estudiar las cosas aun á veces<br />

los hombres más pensadores, pero que depende casi siempre<br />

de consideraciones preconcebidas, que, obrando sobre<br />

su imaginación, les hacen ver causas que realmente no<br />

existen.


— 6I —<br />

MODO DE RECONOCER<br />

Y DESCUBRIR LA FILOXERA.<br />

Para poder combatir el terrible pulgón, caso que se<br />

presente en nuestros viñedos, importa, ante todo, saberlo<br />

descubrir y reconocer con oportunidad, esto es, en los<br />

primeros momentos de la invasión, pues por poco que se<br />

tarde nos servirá sólo para saber anticipadamente la sentencia<br />

de muerte pronunciada contra todas nuestras viñas.<br />

Aunque la Filoxera es un insecto de los más conocidos<br />

por los naturalistas y agricultores científicos, que<br />

está perfectamente representado por láminas y descripciones<br />

detalladas, minuciosas y precisas, sin embargo es<br />

mucho mejor conocerlo prácticamente, lo mismo que las<br />

lesiones patológicas que produce en las varias partes del<br />

arbusto.<br />

Este conocimiento tan importante lo tienen todas las<br />

provincias vitícolas de España menos la nuestra, porque<br />

todas, menos ella, tuvieron sus representantes en Madrid<br />

ó en Málaga para oir de labios tan autorizados como los<br />

del Sr. Graells cuanto podía interesarles con respecto á la<br />

Filoxera y á las lesiones que produce en las cepas, habiendo<br />

podido ver una y otra en sus diferentes estados y<br />

períodos. Algunas provincias como Tarragona han tenido<br />

personas tan distinguidas como el Sr. Miret, ( :<br />

) que han<br />

(') Los Sres. Graells y Miret, cuyos nombres salen á cada momento de nuestra<br />

pluma, al escribir una simple carta filoxérica, nos han auxiliado no sólo con sus<br />

propias luces, sino con notas importantes de varias notabilidades europeas; tienen<br />

justo derecho á nuestro reconocimiento, y nosotros un placer muy singular en tener<br />

8


ecorrido todos los principales puntos filoxerados de Europa<br />

recogiendo infinitas observaciones.<br />

Volviendo á la cuestión de reconocer y descubrir el<br />

insecto en un viñedo atacado, diremos que ésto es fácil ó<br />

difícil según las circunstancias; cuando se presenta en las<br />

hojas naturalmente es más fácil de descubrir que en las<br />

raices, y cuando el mal está ya desarrollado es naturalmente<br />

más fácil que en un principio.<br />

Cuando el pulgón se presenta en una viña que estaba<br />

libre, apenas se conoce, pues no se traduce al exterior<br />

por síntomas aparentes; fijo en las raices más finas y<br />

someras, no chupa en un principio los jugos en cantidad<br />

suficiente para marchitar una planta vigorosa, pues ésta<br />

se nutre por las raicillas más profundas y reproduce algunas<br />

de las superficiales.<br />

Para poder descubrir el mal en este caso, es preciso<br />

que sospechándose por cualquier motivo la presencia del<br />

insecto, se pase á examinar con escrupulosa detención<br />

todas las cepas; para ello se arrancan con cuidado algunas<br />

de las raicillas más finas y superficiales, y si realmente<br />

están atacadas, se observarán en ellas las hinchazones ó hipertrofias<br />

de que hemos hecho mención en otro punto. En<br />

un principio estas hinchazones son pequeñísimas y están<br />

sólo en la punta de las raicillas más finas, son tan insignificantes<br />

que un ojo poco versado puede casi confundirlas<br />

con las espongiolas de las barbillas radicales.<br />

A medida que adelanta el mal, que nuevas generaciones<br />

se producen, las hipertrofias aumentan de volumen y<br />

se hacen más inferiores ó profundas; entonces ya se manifiestan<br />

bien á simple vista, pues llegan á ser como granos<br />

de cebada y aun mayores, se presentan rígidas y retorcidas,<br />

con frecuencia ofrecen un aspecto moniliforme ó<br />

arrosariado, es decir, que presentan de trecho en trecho<br />

ocasión de dirigirles la expresión de nuestro homenage y asegurarles que no es<br />

pequeña la satisfacción de nuestro amor propio cuando vemos casi siempre un<br />

perfecto acuerdo de sus ideas con las nuestras.


— 63 —<br />

estrangulaciones, que separan la habitación de las varias<br />

familias filoxéricas.<br />

A medida que el insecto se multiplica y que por consiguiente<br />

se hacen mayores las hipertrofias, las raicillas se<br />

pudren, y entonces, guiado el animal por su instinto de<br />

voracidad, se dirige á las más gruesas y á las finas que se<br />

hallan á mayor profundidad, continuando en unas y en<br />

otras su obra de destrucción.<br />

Muertas y podridas las barbillas, por falta de jugo y<br />

por continuidad mueren las de orden superior y así sucesivamente;<br />

hasta que, faltando á la cepa sus principales<br />

órganos de nutrición, no tarda en sucumbir á la falta de<br />

alimento.<br />

La Filoxera alada que ataca las hojas es un poderoso<br />

auxiliar de la radicícola, pues al propio tiempo que esta<br />

destruye las raíces la otra ataca y marchita las hojas, que<br />

son también órganos muy importantes, pues si aquellas<br />

absorben los jugos, estas absorben los gases, son los órganos<br />

respiratorios de la planta, los encargados de efectuar<br />

el cambio de moléculas entre ella y la atmósfera.<br />

Pero, como las hojas no se destruyen por completo con la<br />

formación de las agallas, y cuando se marchitan y caen<br />

se han producido ya otras nuevas; y como todas las partes<br />

verdes son para la respiración auxiliares de las hojas, resulta<br />

que el daño que en ellas se produce nunca es.de consecuencias<br />

tan fatales para la cepa como el de las raíces.<br />

Las cepas americanas son atacadas sólo en las hojas, y<br />

por esto es que resisten mucho más á la Filoxera que las<br />

variedades europeo-asiáticas.<br />

Con los datos consignados puede venirse en conocimiento<br />

de que al principio de la invasión el mal es muy<br />

difícil de descubrir.<br />

Cuando el insecto alado hace sus escursiones para fundar<br />

nuevas colonias, ó cuando es importado el germen por<br />

la vía comercial, puede pasarse mucho tiempo sin que el<br />

mal se descubra. El huevo de invierno puede estar depositado<br />

bajo las cortezas de los sarmientos durante mu-


- 6 4 -<br />

chos meses, pues que no se aviva hasta que obra sobre él<br />

la influencia del sol vivificador de la primavera; la larva<br />

necesita luego el tiempo preciso para su desarrollo, busca<br />

las raíces que más le convienen, y en ellas se multiplica;<br />

en una misma barbilla pueden tener lugar varias generaciones<br />

y alojarse en ella millares de individuos, pero como<br />

hay otras raíces libres absorben con más actividad para<br />

suplir las atacadas, y la planta no se resiente.<br />

Desde que se depositó el germen en Setiembre ú Octubre<br />

se pasan meses y se pasa todo el año sin que se manifieste<br />

al exterior por señal alguna. Regularmente los primeros<br />

síntomas que se observan suelen ser algunas agallas<br />

en las hojas, lo cual supone ya que han pasado todas las<br />

generaciones ápteras y radicícolas, y que se ha producido<br />

la generación alada, en cuyo caso el mal ha debido extenderse<br />

á grandes distancias.<br />

En el año siguiente la planta que ya había sufrido<br />

algo, pero que si se viera libre del mal vegetaría vigorosa<br />

y lozana, se ve atacada por nuevas y más numerosas colonias,<br />

presentando ya al exterior todos los síntomas característicos<br />

de una falta de nutrición. Estos síntomas que<br />

se presentan con más ó menos intensidad en las cepas de<br />

una porción de terreno mayor ó menor, se conocen con<br />

el nombre de manchas ó rodales.<br />

A medida que adelanta el tiempo, los síntomas indicados<br />

se marcan con más intensidad, la planta languidece,<br />

los pámpanos se desarrollan poco, ostentando un color<br />

amarillento, y rojizo en sus bordes, los sarmientos se<br />

quedan cortos, muchos racimos abortan, y los que sobreviven<br />

se quedan raquíticos; en una palabra, todo indica<br />

la próxima é inevitable muerte de la cepa, que tal es el<br />

fin de todas las que invade tan diminuto como voraz<br />

enemigo.<br />

Examinando las raíces se ve que también han adelantado<br />

las lesiones que ya podían deducirse del aspecto<br />

exterior de la planta.<br />

Lo dicho es suficiente para comprender que el descu-


— 65 —<br />

brimiento de la Filoxera en un viñedo, como no vaya á<br />

buscarse por personas muy inteligentes y versadas, que<br />

procedan á una exploración minuciosa como se ha hecho<br />

en Suiza y hoy se hace en Cataluña, es de todo punto<br />

imposible; no se conoce el mal hasta que no hay remedio,<br />

pues cuando se presentan los rodales ó manchas, la viña<br />

está destruida. Estas manchas ó rodales se han comparado<br />

á una verdadera mancha de aceite, pues en ellas va<br />

disminuyendo la intensidad del mal desde el centro á la<br />

circunferencia; el centro lo forman cepas ya muertas, la<br />

zona inmediata está constituida por otras agonizantes,<br />

forman la siguiente cepas gravemente enfermas, y otras<br />

las que sólo manifiestan alguna alteración en su salud.<br />

No nos detendremos en explicar las alteraciones que<br />

sufren los tallos y todas las demás partes de la planta<br />

muerta por la Filoxera, porque los detalles tan prolijos, á<br />

más de hacer demasiado extenso este trabajo, serían de<br />

poca utilidad á la mayor parte de personas para quienes<br />

escribimos.


— 66 —<br />

REMEDIOS PARA COMBATIR<br />

LA FILOXERA.<br />

Siempre la parte más débil de todos los tratados sobre<br />

insectos dañinos es la que se refiere á los medios de su<br />

destrucción; y cuando se trata de insectos microscópicos,<br />

de una fecundidad que no tiene ejemplo, y que viven debajo<br />

de la tierra, la empresa es aún más ardua.<br />

Nada puede apenas la mano del hombre contra esas<br />

innumerables colonias que no vé, nada podrían nuestros<br />

más grandes capitanes contra un ejército tan numeroso,<br />

toda su táctica y estrategia serían impotentes: ante un enemigo<br />

invisible, invulnerable, y sobre todo insensible al<br />

metal corruptor.<br />

Apesar de todas las dificultades que ofrece el combatir<br />

la Filoxera, se han propuesto remedios infinitos; pero su<br />

número está en razón inversa de su eficacia, y aquí la<br />

cuestión no es de número, sino de virtud insecticida.<br />

Apenas el Gobierno de la vecina República ofreció un<br />

premio de 3oo,ooo francos al que descubriese un remedio<br />

fácil, eficaz y económico para destruir el funesto parásito<br />

ó á lo menos minorar sus estragos, se presentaron millares<br />

de aspirantes al premio de 60,000 duros; pero la mayor<br />

parte eran extraños á la ciencia, casi todos eran empíricos<br />

y charlatanes, y muchos de ellos propusieron disparates<br />

mayúsculos, que á no tratarse de un asunto tan grave y<br />

que tan importantes intereses tiene comprometidos, hubieran<br />

servido para excitar la hilaridad.<br />

No sólo no nos detendremos en hacer una refutación<br />

seria de todos estos remedios, sino que creemos prudente


_ 67 -<br />

no mentarlos siquiera, limitándonos á tratar de aquellos<br />

que pueden calificarse de racionales, que son los que han<br />

propuesto algunas personas científicas, y que han merecido<br />

crédito á los ojos de los sabios que vienen desde<br />

mucho tiempo ocupándose en la materia.<br />

El Sr. Miret clasifica los remedios en mecánicos, químicos<br />

y naturales; nosotros siguiendo esta misma clasificación,<br />

trataremos de los principales que á cada clase pertenecen,<br />

dando á cada uno la extensión proporcional á su<br />

importancia.<br />

MECÁNICOS.—Entre estos remedios merecen particular<br />

mención el enarenamiento y la submersion de las-viñas.<br />

El primero consiste en rodear las raices de las cepas de<br />

arena fina que dificulta las evoluciones del insecto, y se<br />

opone á su marcha, porque el terreno arenoso es el más<br />

difícil de perforar para el pulgón. Este medio ha sido<br />

abandonado porque ademas de ser costosísimo y de difícil<br />

aplicación es perjudicial á la viña.<br />

La inundación es el medio que ha dado mejores resultados,<br />

pero por seguro y económico que fuera, para nosotros<br />

es inútil, puesto que no tenemos las condiciones<br />

necesarias para su aplicación. Se necesita que las viñas no<br />

estén en terreno pendiente, que estén cercadas de buenos<br />

muros, que tengan un subsuelo impermeable, y, finalmente,<br />

que puedan recibir una cantidad de agua, nada<br />

menos que de 700 á 1,000 m. cúbicos por hectárea cada<br />

24 horas y por espacio de 40 ó más días.<br />

Esta provincia está sugeta á sequías tan repetidas que<br />

con sobrada frecuencia carecemos del agua suficiente para<br />

satisfacer las necesidades de la vida; no podemos por lo<br />

mismo pensar en tal medio, aun cuando nuestras viñas<br />

estuvieran en las demás condiciones necesarias para su<br />

aplicación.<br />

Pero prescindiendo de los inconvenientes indicados,<br />

este remedio no es radical, no es más que paliativo, porque<br />

nunca falta un Noé filoxérico que se libre de aquel<br />

diluvio, y por consiguiente en muy poco tiempo vuelve á


— 68 —<br />

estar la viña poblada de nuevas colonias destructoras.<br />

Hay mas: aun cuando fuera radical este remedio es muy<br />

anti-económico, porque ademas del gasto necesario para<br />

la inundación, estando la tierra cubierta de agua por espacio<br />

de tantos días, todas las sales solubles que contiene<br />

pasan al subsuelo, y entonces se hace preciso acudir con<br />

fuertes estercoladuras y abonos químicos apropiados para<br />

reparar la pérdida de todas las sustancias que han pasado<br />

al fondo.<br />

La persecución del huevo de invierno por medio del<br />

escaldamiento y el descortezado, puede considerarse también<br />

como medio mecánico, pero asimismo, si no del todo<br />

inútil, á lo menos tan costoso como ineficaz.<br />

El arranque de las cepas enfermas, acompañado de un<br />

buen espurgo por medio del fuego y de los insecticidas,<br />

es útilísimo y está prevenido por la Ley. Pero debieran<br />

arrancarse en un gran radio partiendo del centro de invasión,<br />

es decir, cortar por lo sano, establecer la zona de<br />

defensa, que tal vez hubiera sido el único medio de librarse<br />

en el continente de una plaga que ha de ocasionar<br />

la ruina de todas las comarcas vitícolas. Pero este medio<br />

tropieza con los inconvenientes gravísimos de la resistencia<br />

de los particulares y de las indemnizaciones. En Suiza<br />

se han arrancado con felicísimo éxito grandes extensiones<br />

de viña, pero el Gobierno, los Municipios y los particulares<br />

han tenido sus arcas abiertas para atender á tanto<br />

gasto.<br />

En España se han consignado 5oo,ooo pesetas para<br />

atender á todas las provincias filoxeradas y para todo<br />

gasto; las Corporaciones provinciales como las municipales<br />

están exhaustas, y los particulares ocultan su riqueza<br />

cuando se trata de imponerles un real por hectárea... no<br />

queremos hablar más de este asunto.<br />

MEDIOS QUÍMICOS Ó INSECTICIDAS. — Al ocuparnos de<br />

estos medios también trataremos únicamente de los que<br />

merecen alguna atención, y prescindiremos del mayor<br />

número. Los ensayos de los hombres eminentes, verifi-


- 6 9 -<br />

cados en la Estación enológica de Cognac y en la Escuela<br />

Práctica de Mompeller, han manifestado que los pocos<br />

que tienen algún valor son los siguientes: el polisulfuro<br />

de calcio, el sulfuro de carbono, el cianuro de potasio,<br />

el alquitrán de hulla, los sulfo-carbonatos alcalinos, y la<br />

neolina.<br />

Estos agentes han dado todos muy buenos resultados,<br />

cuando en la Estación enológica de Cognac se han hecho<br />

los ensayos en el laboratorio en pequeños recipientes,<br />

pero la cosa ha cambiado completamente de aspecto<br />

cuando se han ensayado en las viñas.<br />

Se comprende bien que cuanto más en pequeño se<br />

hace el ensayo, más seguro ha de ser el resultado; hechos<br />

los esperimentos en el campo por personas tan competentes<br />

como los Profesores de Agricultura de Mompeller,<br />

y como Mr. Cornu y Mouillefert en Cognac, han obtenido<br />

resultados que prueban, unas veces la ineficacia del<br />

remedio, otras el peligro que hay en usarlo, y otras que<br />

su uso es muy antieconómico.<br />

El polisulfuro de calcio no sirve por su poca energía,<br />

el cianuro de potasio es costoso y su acción mortífera,<br />

poco eficaz á cierta profundidad, perjudica las cepas y<br />

hasta puede matarlas; el alquitrán de hulla tiene también<br />

poca eficacia, se difunde poco y por consiguiente queda<br />

inútil á una pequeña distancia del punto de aplicación.<br />

Quedan pues como sustancias hasta cierto punto admisibles<br />

el sulfuro de carbono, los sulfo-carbonatos alcalinos<br />

y la neolina de los que vamos á tratar.<br />

El sulfuro de carbono empleado en corta cantidad es<br />

poco activo, en cantidad mayor mata las cepas, y hasta<br />

puede ser de funestísimas consecuencias para los que respiran<br />

sus vapores. Este es, sin embargo, el insecticida que<br />

hoy cuenta más partidarios, especialmente en Francia ^<br />

habiéndose hecho muchos estudios para poderlo aplicar<br />

sin peligro de las personas y de las cepas. Al efecto<br />

Mr. Rhoart tuvo la idea de encerrar la sustancia, en una<br />

especie de prismas de madera, y luego prefirió hacer uno s<br />

9


tubos gelatinosos como pequeños cartuchos, que se introducen<br />

en la tierra abriendo previamente unos agujeros de<br />

inyección.<br />

La compañía de ferro-carriles Paris-Lyon-Mediterranée,<br />

que tiene mucho interés en salvar la riqueza vinícola de<br />

su país, tanto por patriotismo como por interés propio, ha<br />

facilitado á los viticultores todos los medios para el empleo<br />

del sulfuro de carbono, proporcionándoles instrucciones<br />

de todo género para poder emplear bien la sustancia;<br />

les ha dado explicaciones claras, ilustradas por<br />

láminas que reparte con profusión, enseñándoles el modo<br />

de abrir los agujeros de inyección, según el sistema por<br />

que está plantada la viña, si es en cuadrados mayores ó<br />

menores, en líneas simples más ó menos espaciadas, en<br />

líneas dobles, ó en plantaciones quincunciales, fundándose<br />

siempre en la mejor distribución de los vapores, que debe<br />

ser todo lo uniforme posible, puesto que las raíces se<br />

extienden también por todo el terreno, y es preciso disponer<br />

los agujeros y las cantidades de sulfuro calculando<br />

que 25 gramos de esta sustancia se han de distribuir en<br />

cada metro cúbico de tierra, y que no se han de aplicar<br />

al pié de la planta porque la harían perecer. Para todo<br />

ésto, ha repartido unas tablas con figuras que indican,<br />

para cada sistema de plantación y cultivo, el modo de repartir<br />

los agujeros de inyección, á fin de que sea fácil<br />

obtener una difusión regular y uniforme.<br />

A pesar de ser este el insecticida más acreditado, Mouillefert<br />

lo eliminó también por su ineficacia en corta dosis<br />

y por matar la viña cuando se administra en cantidad<br />

mayor.<br />

Miret asegura que ha recibido los informes más contradictorios<br />

sobre los efectos del sulfuro de carbono, y<br />

cita el que le dio uno de los secretarios de agricultura<br />

de la Gironda, quien le aseguró que habiendo aplicado<br />

el sulfuro de carbono á 20,000 cepas, la mitad de ellas<br />

murieron y la otra mitad se quedaron con la Filoxera.<br />

Esto es muy posible y aun probable que dependa de no


haberse conocido aún los procedimientos para la buena<br />

aplicación del insecticida.<br />

A pesar de los inconvenientes citados el sulfuro de<br />

carbono es el que monopoliza la fama entre los remedios<br />

propuestos, y al que los hombres de ciencia dan<br />

verdadera importancia, si no como remedio radical, á<br />

lo menos como un buen paliativo. En Francia se hace<br />

de él un consumo extraordinario, y se ha conseguido que<br />

el mal no progrese tan rápidamente; sin embargo sigue<br />

su marcha invasora con una velocidad de 85,ooo hectáreas<br />

por año.<br />

Han merecido aceptación los sulfo-carbonatos alcalinos,<br />

sobre todo el de potasa, al que Mouillefert dá la<br />

preferencia, porque á su acción insecticida, tan poderosa<br />

como la del sulfuro de carbono, reúne la circunstancia<br />

de que en vez de matar las cepas, las beneficia, siendo<br />

un abono muy superior.<br />

Pero como esta sustancia debe emplearse disuelta en<br />

el agua, para nosotros está también demás, porque carecemos<br />

de este vehículo en la cantidad que se necesita;<br />

es muy caro y no destruye por completo el insecto.<br />

La neolina es otro de los remedios últimamente preconizados,<br />

sobre todo en Suiza, que es el punto en donde<br />

se ha hecho mayor número de ensayos, y en Gerona,<br />

donde hoy se emplea en abundancia bajo la dirección de<br />

Mr. Monnier de Ginebra; parece que la neolina mata la<br />

Filoxera, pero también mata muchas cepas, 3^ hasta es muy<br />

peligrosa para el hombre, en razón de ser una sustancia<br />

extraordinariamente explosible. Tal vez estos inconvenientes<br />

puedan desaparecer á beneficio de nuevos procedimientos.<br />

Como desinfectante de un terreno parece que<br />

lleva ventaja á todos los demás; pero como los ensayos<br />

son recientes, es menester esperar la próxima canícula para<br />

ver si la Filoxera se reproduce en los puntos que hayan<br />

sido expurgados por este medio.<br />

REMEDIOS NATURALES.—Vamos ahora á examinar estos<br />

medios, alguno de los cuales pudiera llamarse mixto ó


androfísico, porque en él la naturaleza es auxiliada por el<br />

hombre.<br />

REGENERACIÓN DE LA VIÑA.—Uno de estos medios es la<br />

regeneración de la viña por medio de la semilla. Para<br />

discutir siquiera la conveniencia de este medio, es preciso<br />

partir de la base de que la viña ha degenerado, y, como<br />

antes hemos tratado este punto, casi pudiéramos abstenernos<br />

de ocuparnos de él, sin embargo consideramos<br />

oportuno dedicarle algunas líneas.<br />

La multiplicación de las plantas por semilla, sobre todo<br />

tratándose de árboles, es muy útil cuando nos proponemos<br />

buscar nuevas variedades, y, como podemos contentarnos<br />

con nuestras cepas, consideramos innecesario el mudarlas.<br />

Pero prescindiendo de las razones que haya en<br />

contra de este medio, ha sido muy fácil someterlo á la<br />

prueba de los hechos, pasarlo por el crisol de la experiencia,<br />

y ésta, fielmente interrogada, ha suministrado las respuestas<br />

más categóricas y severas. En la Gironda se nombró<br />

una comisión para estudiar la resistencia que ofrece á<br />

la Filoxera la vid multiplicada por semilla, y dio por resultado<br />

que todas las plantas habían sido completamente<br />

destruidas por el pulgón.<br />

Los mismos ensayos se repitieron en Mompeller bajo<br />

la dirección de M. Saint Pierre, director de aquella escuela;<br />

de los resultados obtenidos, se tuvo en conclusión,<br />

que todas las vides europeo-asiáticas y la mayor parte de<br />

las americanas, multiplicadas por semillas, son devastadas<br />

por el insecto. Mr. Planchón ha visto perecer hasta<br />

la labrusca víctima de la Filoxera.<br />

El resultado de buscar una medida salvadora pretendiendo<br />

regenerar por la semilla una planta que no<br />

ha degenerado, sería gastar muchísimo, renunciar á Lina<br />

serie de cosechas y malear las condiciones de nuestro<br />

vino; todo, por una esperanza infundada y remota de que<br />

en el espacio de muchísimos años la vid recobraría mayor<br />

resistencia.<br />

REMPLAZO DE LAS VARIEDADES EUROPEO-ASIÁTICAS POR


- 73 -<br />

LAS AMERICANAS.—¿Las vides americanas, reemplazando á<br />

nuestras variedades, pueden ofrecernos completa garantía<br />

de no ser atacadas por la Filoxera? Esta, puede decirse<br />

que verdaderamente es hoy la cuestión batallona; tiene<br />

muchos apóstoles, especialmente en Francia y España, y<br />

tiene también sus enemigos. En uno y otro bando se cuentan<br />

hombres justamente célebres, más esta cuestión es<br />

tratada á nuestro juicio por unos y otros con tal apasionamiento<br />

que no podemos esplicarnos su causa.<br />

Nosotros, que tenemos la misión de hacer llegar la verdad,<br />

tan pura como posible sea, á nuestros viticultores,<br />

careciendo de observaciones propias sobre tan controvertido<br />

asunto, exentos de todo espíritu de prevención, procuraremos<br />

tratarlo con toda imparcialidad, teniendo siempre<br />

presentes los principios más fundamentales de la agrologia<br />

y de la botánica.<br />

Las vides americanas nos han traído la Filoxera, ellas<br />

nos han de proporcionar el medio de librarnos del mal,<br />

similia similibus curantur, es decir, como si se aconsejara<br />

curar la enfermedad por el sistema homeopático. No queremos<br />

considerar la cuestión bajo tal aspecto, pues inmediatamente<br />

sentaríamos plaza en las filas de sus enemigos<br />

más encarnizados, porque consideramos la doctrina homeopática<br />

como la concepción más monstruosa que el<br />

bastardo consorcio de la presunción con la charlatanería<br />

humanas hayan podido engendrar. No miraremos la cuestión'bajo<br />

tal aspecto porque no queremos pronunciarnos<br />

en contra de las vides americanas, nada más lejos de<br />

nosotros que semejante idea; pero tampoco podemos aceptar,<br />

sin una prudente reserva y hasta con cierta desconfianza,<br />

un medio que, siendo verdaderamente empírico,<br />

necesita una experiencia mucho más larga, para deducir<br />

en, consecuencia, que ha de ser duradera la inmunidad que<br />

han demostrado algunas especies.<br />

La resistencia de las plantas americanas á la Filoxera,<br />

es debida, según unos, á que las raíces son más fuertes y<br />

resinosas; otros creen que tienen un sabor particular re-


pugnante para el insecto; otros le atribuyen un mayor<br />

grado de lignificación, pero todo no pasa de simple conjetura.<br />

Sea ó no una ó varias de las circunstancias indicadas<br />

la causa de la resistencia de las cepas americanas á la<br />

Filoxera, es no solo posible, sino hasta muy probable<br />

que la diferencia de terreno, de clima y de cultivo cambien<br />

estas circunstancias. Así como vemos que el insecto<br />

ha variado algo con el clima, es muy posible que á la<br />

planta, que es de organización más sencilla, le suceda<br />

también lo mismo.<br />

La agrología ha erigido en principio que las plantas,<br />

no pudiendo sacar más que del suelo las sales minerales<br />

necesarias á su vegetación, han de tener infaliblemente<br />

caracteres propios del suelo en que vegetan. Las condiciones<br />

climatológicas, lo mismo que las de cultivo, tienen<br />

influencia innegable en las condiciones de las plantas.<br />

¿No sembramos nosotros el rico garbanzo del saúco y<br />

al cabo de dos años nos dá garbanzos que después de<br />

tres días de cocción servirían muy bien para proyectiles?<br />

Hemos sembrado el famoso pimiento riojano del<br />

cristal, y al segundo año daba unos productos completamente<br />

desconocidos. Sembramos las pepitas de aquellas<br />

colosales y azucaradas sandías de Ibiza, y si en el<br />

primer año obtenemos alguna mejora en el fruto, el segundo<br />

ya es raquítico y poco dulce; y si en Ibiza se<br />

siembran pepitas de nuestras sandías, se obtiene un fruto<br />

de muchas mejores condiciones. Pero buscando ejemplos<br />

que puedan ofrecer el mayor grado de analogía posible,<br />

diremos que cierta variedad de vid (fogoneu) que no se<br />

cultivaba en Valldemosa, introducida allí, ofrece caracteres<br />

tan diferentes de la misma variedad cultivada en<br />

otros distritos de la Isla, que los prácticos más versados<br />

la creerían diferente. Y si de un distrito á otro, de una<br />

isla tan pequeña, se observan estos cambios ¿qué no ha<br />

de suceder cuando se trata de una planta importada del<br />

nuevo al antiguo mundo?


- 75 -<br />

Muy poco tiempo há que se hacen observaciones sobre<br />

las vides americanas para poder deducir consecuencias<br />

tan importantes y decisivas. Vemos ya algunas decepciones<br />

sufridas por hombres eminentes y entusiastas, quienes,<br />

dominados por el respeto á la verdad, han sido<br />

bastante ingenuos para declarar que no pueden dar una<br />

garantía de duración á la resistencia de las cepas americanas<br />

á la Filoxera. Esperemos pues que una más larga<br />

experiencia haya pronunciado su fallo decisivo.<br />

A pesar de lo dicho, creemos muy conveniente prepararnos<br />

con tiempo, y formar buenos semilleros, para poder,<br />

en caso necesario, redoblar nuestros viñedos con<br />

cepas americanas de las que mayor resistencia han demostrado.<br />

Estas se encuentran en los grupos de la V. rotundifolia,<br />

de la V. cor difolia y V. cvstivalis, buscando, de<br />

cada uno de los grupos, las variedades más apropósito.<br />

Pero esto debiera hacerse enseguida, porque el adelantar<br />

un año es mucho, y teniendo los majuelos, mientras fuera<br />

de aquí se hacen ensayos de otro género, nosotros pudiéramos<br />

ensayar los ingertos con nuestras mejores castas.<br />

No podemos menos de advertir á nuestros viticultores<br />

que si bien hemos creído oportuno aconsejarles el establecimiento<br />

de semilleros de vides americanas, se abstengan<br />

á todo trance de la importación de barbados, que con<br />

toda probabilidad nos traerían la Filoxera.


¿LA FILOXERA DESAPARECERÁ<br />

ALGÚN DÍA<br />

COMO HAN DESAPARECIDO OTROS INSECTOS?<br />

Este sería el remedio más cómodo, aunque no es verdadero<br />

remedio sino una esperanza fundada más en los<br />

buenos deseos que en las leyes naturales. No hay duda<br />

que se observa un cambio continuo en las especies animales,<br />

que pueblan nuestro globo, la Paleontología nos pone<br />

de manifiesto especies que hoy no existen, como el Megaterio;<br />

el Perezoso está á punto de desaparecer; otras especies<br />

degeneran ó reforman sus caracteres naturales, pero<br />

en cambio aparecen otras nuevas, sea por reforma de las<br />

antiguas, sea porque la urna de la generación, derramando<br />

sin cesar nuevas existencias, muestra su fecundidad<br />

inagotable, su potencia maravillosa y creadora.<br />

Pero las especies que hemos visto desaparecer sólo lo<br />

han verificado después de muchos siglos de existencia, y<br />

si la Filoxera ha de morir de vejez, hay para más de un<br />

verano. El clima no influye en ella; aun cuando la<br />

región de la vid se extendiera á los países más septentrionales,<br />

en ellos la Filoxera sería esporádica, pues se ha<br />

demostrado que al propio tiempo que apetece las grandes<br />

temperaturas resiste la de—20. 0<br />

No hay tampoco que esperar resultados de cambios<br />

ó trastornos atmosféricos, ni de los varios meteoros que


— 77 —<br />

se suceden, porque el estar la Filoxera debajo de la tierra<br />

la pone al abrigo de estos accidentes.<br />

El sabio Congreso de Laussana, al resolver esta cuestión<br />

con el aplomo que caracteriza todos sus fallos, ha dicho<br />

terminantemente: «.Nadapermite esperar que la enfermedad<br />

pierda su fuerza actual por el trascurso del tiempo.-»<br />

10


- 73 -<br />

¿ PODRA ESPERARSE<br />

QUE SE PRESENTE ALGÚN INSECTO ENEMIGO<br />

Y DESTRUYA LA FILOXERA COMO HA SUCEDIDO Y SUCEDE<br />

CADA DÍA CON OTRAS ESPECIES?<br />

Muchos hombres eminentes creen que es poco lo que<br />

puede esperarse de este medio, atendido á lo innumerable<br />

y pequeño del ejército filoxérico, y á que vive en<br />

condiciones en las que no es fácil que otro insecto pueda<br />

darle caza en provecho del hombre.<br />

Nosotros sin embargo hemos creído siempre que ésto<br />

era no sólo fácil, sino muy probable, y en ello hemos<br />

fundado las más lisonjeras esperanzas; pues si bien las condiciones<br />

en que vive el implacable hemíptero, parece que<br />

lo ponen á cubierto de todos los enemigos, la naturaleza<br />

dispone de medios muy superiores á los del hombre,<br />

medios grandes, á veces inconcebibles, de los que se vale<br />

para mantener el equilibrio entre todos los seres que<br />

pueblan nuestro globo. Es una ley suprema de la naturaleza<br />

que la vida se mantenga á expensas de la muerte,<br />

que la existencia de unos seres se alimente con la destrucción<br />

de los otros.<br />

Nada viene de la nada, y es preciso, para que la materia<br />

organizada recorra sus fases sin interrupción, que sea á<br />

expensas de algo; la vida es á un tiempo fin y medio,


efecto y causa, y todos los seres organizados, sin excepción,<br />

han nacido para servirse de pasto los unos á los otros.<br />

Basta abrir los ojos y fijarlos en el espectáculo de la<br />

creación para descubrir á cada paso maravillosas armonías<br />

que nos demuestran las leyes sabias é inmutables<br />

dictadas desde el origen de los tiempos por el Supremo<br />

Legislador.<br />

Sin duda, una de las más admirables entre estas leyes<br />

es la del equilibrio mantenido siempre entre todos los<br />

seres de la naturaleza.<br />

La tierra sujeta á esas colonias innumerables de insectos<br />

que todo lo destruyen, en pocos años sería inhabitable,<br />

y no cabrían en el mundo los infinitos descendientes<br />

de una sola de las especies, si Dios no hubiera<br />

puesto un límite á su multiplicación, como puso un dique<br />

á las aguas del mar. El que ha tenido el poder de crearlo<br />

todo, lo tiene también de mantenerlo todo ordenado. Al<br />

lado de las especies dañinas ha puesto legiones de seres<br />

útiles que se mantienen á expensas de los malhechores.<br />

Ha creado las aves insectívoras, sobre todo las de pico<br />

fino, útilísimas porque dan caza sin tregua ni descanso<br />

á los insectos, persiguiéndolos en sus diferentes estados,<br />

y descubriéndolos aún en sus más retirados escondrijos.<br />

Aquí no podemos menos de lamentarnos de la persecución<br />

sin tregua ni cuartel de que son objeto estos graciosos<br />

bienhechores.<br />

Estas islas, pobladas un tiempo de infinidad de esos<br />

cantores aéreos cuyos melodiosos acordes alternativamente<br />

tiernos, alegres y melancólicos no podían oirse sin<br />

placer y aun sin emoción, están hoy en completo silencio.<br />

Apenas se dejan o ir los inimitables acentos de filomela<br />

que oculta entre arbustos y malezas nos cantaba su infortunio;<br />

ni se oyen tampoco las alegres armonías de<br />

otros alados cantores, que reunidos á millares entonaban<br />

dulce coro en salutación al astro del día.<br />

Esta alegre melodía ha sido reemplazada por el más<br />

triste silencio ó por el ingrato piar de algunos gorriones.


— 8o —<br />

Los hombres pensadores convienen en la necesidad<br />

de una ley que prohiba tratar á las aves que son tan<br />

útiles aliados del agricultor como pudiera tratarse á nuestros<br />

más encarnizados enemigos. Convenimos en la utilidad<br />

de esta ley, pero, antes que ella, debieran evitar tan<br />

cruel como pernicioso abuso las madres de familia y los<br />

maestros de escuela, que son los que forman el corazón<br />

de la juventud.<br />

Esto bastaría para evitar que nuestras islas fuesen<br />

para las aves una verdadera tierra de proscripción, en la<br />

cual las que pueden escapar á las brutales asechanzas<br />

de sus enemigos huyen para buscar una nueva patria,<br />

que sea para ellas menos ingrata ó más hospitalaria.<br />

Las aves no bastarían para destruir los insectos, pero<br />

para conseguir este efecto, la Providencia ha establecido<br />

el parasitismo, sobre el cual creemos también útil decir<br />

algo, mayormente cuando en él ciframos nuestras mejores<br />

esperanzas para la destrucción de la Filoxera.<br />

El animal grande devora al pequeño, según nos dice<br />

un refrán, pero con mucha frecuencia el grande sirve de<br />

pasto á los pequeños, y así todos se devoran los unos á<br />

los otros. La planta brota más vigorosa cuando sus raíces<br />

pueden absorber las sustancias que le proporcionan los<br />

despojos de animales, un infecto cadáver mañana formará<br />

parte de una rosa aromática, ó se convertirá en la sabrosa<br />

carne de una pera. Con ésto se ve que la destrucción se<br />

observa no sólo en los animales, sino en todo el reino<br />

organizado.<br />

El animal vive de vegetales ó bien de carnes que ha de<br />

destruir, y él servirá también de presa y alimento á otras<br />

especies. Guiado por el instinto que la naturaleza previsora<br />

ha puesto en él, cada ser organizado trabaja para<br />

conservar el puesto que se le ha confiado en la policía del<br />

universo, y trabaja inconscientemente para asegurar el<br />

orden admirable que se observa en el mundo. De aquí<br />

nacen esas luchas encarnizadas y combates incesantes que<br />

se observan siempre en todos los puntos de la tierra, y que


— 8i —<br />

parece habían de acabar por el exterminio de razas enteras;<br />

pero al lado de esta destrucción se halla la fecundidad<br />

inagotable de la naturaleza, siempre dispuesta á reparar<br />

todas las pérdidas.<br />

Obsérvense si no los árboles más robustos, los pinos,<br />

los robles, las encinas: todos estos gigantes de los bosques<br />

no están libres de los ataques de los seres muy diminutos.<br />

La ¡tesina del pino, lo mismo que su larva, abren<br />

numerosas galerías en el líber de este árbol, y la larva de<br />

la saperda populnea la abre también en los troncos de los<br />

álamos y sauces de los que destruye la médula. La de los<br />

Capricornios negros, especialmente el grande, agujerean el<br />

tronco de las encinas y sauces. Las crisomclas viven sobre<br />

las hojas; los escólitos destructores abren galerías bajo las<br />

cortezas. Las larvas de muchas mariposas, de estos pequeños<br />

insectos que parecen emblema del placer, causan también<br />

grandes destrozos; la pirala de los pinos roe las<br />

yemas terminales, el bombix destruye las hojas, la oruga<br />

de la pirala verde arrolla y destruye las de casi todos los<br />

árboles forestales, lo mismo que varias /aleñas destruyen<br />

las yemas. Entre los coleópteros hay una porción de enemigos<br />

de los árboles: las larvas de los hylobies abietis como<br />

las de los pisodes pini destruyen los pinares, las del<br />

tucano destruyen las más robustas encinas.<br />

Lo mismo que los vegetales, están sujetos á destrucción<br />

todos los animales grandes y pequeños: el hombre mismo,<br />

el más soberbio de todos los creados y que se figura que<br />

nada ha de temer de sus enemigos, á cada momento se ve<br />

obligado á disputar su existencia á los seres más diminutos;<br />

está sujeto á infinidad de parásitos que le deben su<br />

existencia y se nutren de sus humores; así tiene las pulgas<br />

y las niguas, los piojos y las chinches, las ladillas y garrapatas,<br />

los mosquitos y las moscas, el arador de la sarna,<br />

las lombrices intestinales, la trichina spiralis, etc., etc....<br />

Tiene ademas muchas plantas también parásitas: hongos<br />

que se desarrollan en varias partes de su cuerpo, hongos<br />

de una organización sencillísima, pero suficientes para<br />

destruir la organización más perfecta.


Nada hay pues que se sustraiga á estas leyes inmutables<br />

de la naturaleza, donde todo está ligado por los lazos<br />

más indisolubles. Es preciso estar afectados de una incurable<br />

ceguera, ó á lo menos de un extrabismo sistemático<br />

de la inteligencia, para no descubrir un principio activo<br />

de previsión y omniscencia, un poder eminentemente soberano,<br />

una eterna voluntad que todo lo gobierna tranquilamente,<br />

y desde el centro invisible del universo dirige<br />

todas las existencias, y á cuyo poder supremo, nada ni<br />

nadie puede sustraerse.<br />

Por poco que meditemos sobre estas leyes naturales,<br />

no podremos dudar de que se presentarán enemigos encarnizados<br />

de la Filoxera y le darán caza en nuestro provecho.<br />

Nada importa que viva en condiciones para el hombre<br />

imposibles ó difíciles de vencer, nada importa que sus<br />

posiciones nos parezcan inexpugnables; la naturaleza dispone<br />

de medios muy superiores á los humanos y consigue<br />

siempre su fin, que es destruirlo todo para crearlo todo<br />

nuevo sin cesar.<br />

Nosotros no podríamos penetrar en el interior de la<br />

tierra y destruir uno por uno todos los insectos que forman<br />

el pueblo filoxérico, pero la naturaleza tiene medios<br />

infinitos que tarde ó temprano acabarán con esta plaga;<br />

tal vez será algo tarde para la generación actual, que acaso<br />

haya perdido antes sus viñedos.<br />

La viña está destinada á perecer, á lo menos en su<br />

mayor parte; pero también perecerá la Filoxera, como<br />

han perecido otras plagas. Vendrán enjambres de insectos<br />

carniceros con la útil misión de exterminarla.<br />

Esto parece imposible por lo numerosas que se presentan<br />

las colonias filoxéricas, y en razón á su fecundidad<br />

extraordinaria, pero no nos parecerá tan difícil si examinamos<br />

las leyes naturales. Si bien una de ellas nos enseña<br />

que los animales se multiplican en razón inversa de su<br />

volumen y de la duración de su vida, compensándose de<br />

este modo por el número la falta de fuerza individual,<br />

existe sin embargo otra ley por la cual todos los seres


— 83 —<br />

creados se sirven de pasto los unos á los otros; y si bien,<br />

para disminuir el número de insectos, las aves, según hemos<br />

visto, desempeñan un papel importante, son aun<br />

superiores los servicios que prestan los insectos carniceros,<br />

que debemos mirar como los principales moderadores<br />

de su clase.<br />

Observamos con frecuencia que algunos insectos dañinos<br />

se presentan tan numerosos que todo induce á creer<br />

una gran destrucción en las cosechas del año siguiente, y<br />

sucede todo lo contrario, desaparecen casi por completo,<br />

pues al lado de cada especie herbívora se presentan una ó<br />

más especies carniceras, que cuentan con todos los medios<br />

para destruir el parásito. Unos lo destruyen por instinto<br />

de conservación, pues se alimentan de ellos, otros por el<br />

de perpetuar la especie, como sucede por ejemplo con los<br />

icneumones; así vemos que cuando se presenta cualquier<br />

insecto dañino que se multiplica excesivamente, aparecen<br />

también muy pronto los carniceros que lo destruyen.<br />

Pudiéramos aducir muchos ejemplos de insectos dañinos<br />

que son devorados por los de su clase, pero nos limitaremos<br />

á citar algunos de los que atacan la vid, y ademas<br />

varios pulgones, por la analogía que tienen con la Filoxera.<br />

El galinsecto de la vid Lecanium vitis tiene como enemigos<br />

que lo atacan despiadadamente hasta acabar con él el<br />

Ccelia troglodites y el Eueyrtus Swederi. Las abispas Vespa<br />

vulgavis y Polistes gálica tienen varias volucelas, especialmente<br />

el V. lonaria y V. inanis.<br />

La Pyrala de la vid, que llegó á comprometer la existencia<br />

de las viñas casi tanto como hoy la compromete la<br />

Filoxera, causando la desesperación de los viticultores,<br />

acabó por desaparecer bajo la persecución que le dieron<br />

varios carniceros, tales son: el Anomalon jlaveolatuní<br />

(Grav.) el Bethylusformicarius (Lat.) elCampoplex maialis<br />

(Grav.) el Diplolepis cuprea (Spin.) D. absoleta (Spin.) Enlophus<br />

pyralidicun el Ichneumon melanogemes (Grav.) el<br />

Pimpla alternans (Grav.) y una porción del género Pteromalus<br />

tales como los Pt. comunis, Pt. cupreus, Pt. ovatus,


- 8 4 -<br />

Pt. larvarum, y el Pt. deplanatus. Todos estos insectos se<br />

cebaron hasta tal punto en la Pyrala que hoy difícilmente<br />

se encuentra un sólo individuo de esta especie.<br />

También los numerosos pulgones que destruyen nuestros<br />

frutales tienen sus enemigos que anulan, ó á lo menos<br />

moderan su acción destructora; á no ser así ni una sola<br />

fruta salvaría el hombre de la voracidad de estos pequeños<br />

parásitos.<br />

Los Aphis laniger.<br />

A. persicce.<br />

y> amigdali.<br />

» pyri.<br />

» pruni.<br />

y> malí.<br />

» cerasi, etc., tienen como enemigos y muy<br />

declarados, entre otros, los siguientes: Coccinella bipunctata,<br />

C. septempunctata, Cynips fulviceps, C. queráis inferus,<br />

C. crytocephala, Hemerobius chrysops, H. bipunctata,<br />

H. perla, etc., etc.<br />

Pudiéramos citar una lista muy larga de insectos carniceros<br />

enemigos de los fitófagos, y cuyas costumbres,<br />

curiosas en gran parte de ellos, son bien conocidas; pero<br />

no nos lo permiten ni el tiempo ni los límites en que debemos<br />

encerrar este trabajo.<br />

Aunque es mucho lo que falta estudiar en esta importante<br />

materia, sin embargo podremos dar alguna regla<br />

general para que nuestros viticultores que tengan alguna<br />

noción de entomología sepan cuáles son los insectos que<br />

podrán prestarles auxilio para combatir la Filoxera.<br />

Hasta aquí la mayor parte de carniceros que se conocen<br />

pertenecen, en el orden de los himenópteros, á la<br />

familia de los pupívoros, sobre todo, á los géneros ichneumon<br />

y chaléis, entre los dípteros los sirfos, que tienen<br />

mucha analogía con los abejones y avispas, entre los neurópteros<br />

las larvas de varios hemerobes, á las que Reaumur<br />

denomina leones de los pulgones, y finalmente algunos<br />

carábicos pertenecientes al orden de los coleópteros.


— 85 —<br />

La naturaleza siempre próvida é inagotable empieza á<br />

mandar sus emisarios para destruir la Filoxera, emisarios<br />

que si bien hoy tienen poca importancia la irán tomando<br />

cada dia mayor. En Alemania se alimenta mucho esta<br />

esperanza fundada en las leyes naturales que hemos citado<br />

y en la experiencia de ejemplos análogos. En los Estados-<br />

Unidos el infatigable Garlos Ryleí va estudiando también<br />

los insectos que persiguen la Filoxera.<br />

Blankenhorn profesor de Carlsruhe opina que ya son<br />

muchos los insectos que moderan y hasta hacen desaparecer<br />

las invasiones filoxéricas, asegurando que sus observaciones<br />

le han probado que existen insectos que en determinados<br />

casos pueden extirparlas completamente. Ha<br />

visto desaparecer el insecto de sus aparatos después de introducir<br />

en ellos el Tyrogliphus phyloxerce, y afirma que<br />

hechas las mismas observaciones en el campo, le dieron<br />

por resultado que en una viña muy filoxerada y en la<br />

que había muy pocos tyrogliphus, al año siguiente había<br />

desaparecido completamente la Filoxera, y sus enemigos<br />

se habían multiplicado extraordinariamente.<br />

Estos resultados los confirman también Schrader y<br />

Obelin, añadiendo el mismo Blankenhorn que después de<br />

colocar en un aparato una raíz muy filoxerada, introdujo<br />

en él diez individuos del Polyxenus lagurus, y pasados catorce<br />

días no había una sola filoxera y los diez polyxenus<br />

estaban vivos.<br />

Se ve con lo dicho, que son varios ya los enemigos de<br />

la Filoxera: ademas de los indicados se citan algunos<br />

Scymus, las larvas de algunas Coccinellas, algunos Afidifagos<br />

y también Arácnidos que enredan á las Filoxeras aladas<br />

en sus telas y disminuyen de este modo la propagación.<br />

La Filoxera, pues, no se exceptúa de la ley general que<br />

exige que todos los seres organizados se destruyan los<br />

unos á los otros. Los enemigos de la Filoxera tendrán<br />

abundante pasto, por consiguiente se multiplicarán mucho,<br />

y de este modo se harán superiores y restablecerán el<br />

equilibrio.<br />

i r


¿DEBE Y PUEDE FÁCILMENTE<br />

EVITARSE EN ESTA PROVINCIA<br />

LA INVASIÓN DE LA PLAGA FILOXERICA?<br />

Aun cuando se conociera un remedio pronto, eficaz,<br />

seguro y económico para acabar con el implacable insecto,<br />

siempre es mejor precaver que tener que remediar; así<br />

nos lo dice.un refrán ó mejor una muy sabia y filosófica<br />

sentencia que no debemos olvidar. A precavernos pues<br />

por todos los medios imaginables, y si no podemos evitar<br />

el mal luchemos entonces heroicamente; más, preparémonos<br />

desde luego.<br />

El evitar la importación de la Filoxera nos es más<br />

fácil que á las provincias del continente. Hay condiciones<br />

especiales reservadas á ciertas localidades, que si bien en<br />

muchas ocasiones les son de gran perjuicio, llegan momentos<br />

en que estos perjuicios son compensados por ventajas<br />

inapreciables.<br />

En tales circunstancias se encuentra hoy esta provincia<br />

por la dificultad que tiene en comunicarse con el resto<br />

del mundo. Pero esta misma dificultad que tantos perjuicios<br />

nos causa, nos ofrece también ventajas de inestimable<br />

valor; por ella, nos libramos con más facilidad que<br />

nuestros hermanos del continente de la importación de<br />

enfermedades epidémicas y contagiosas, como podemos<br />

librarnos hoy de la epidemia filoxérica.<br />

Si la Providencia nos tuviera reservado tan inmenso<br />

beneficio sería la riqueza y el bienestar de toda la pro-


_ 8 7 -<br />

vincia, nos aseguraría un verdadero monopolio con la<br />

exportación de caldos al continente, al extrangero y á<br />

América, caldos que obtendrían precios fabulosos, como<br />

los tienen ya en el día; sería, en fin, un manantial de riqueza<br />

incalculable para los viticultores y para el país en<br />

general.<br />

Estas islas, llamadas con razón perlas del Mediterráneo,<br />

son fértiles, pintorescas y saludables, colman de<br />

mercedes á los que saben solicitarlas, llenan de esperanzas<br />

á los que saben comprenderlas, y pudieran ser hoy<br />

perlas engarzadas en oro, porque situadas en medio de la<br />

región de la vid, poseen vastos terrenos que contienen en<br />

abundancia las sales que el precioso arbusto reclama para<br />

su vegetación.<br />

Esto debiera despertar' en nuestros grandes propietarios<br />

una mayor actividad, que no dudamos tendrían, si<br />

se tomaran la molestia de reflexionarlo un poco; verían<br />

que la fortuna llama á sus puertas, y que aprovechando<br />

esta crisis solemne, que ha de durar aún bastantes años,<br />

realizarían, sin ningún género de duda, beneficios tan inmensos<br />

que no hay posibilidad de exagerarlos.<br />

Los desastres que vemos en todas partes y las buenas<br />

condiciones en que nos hallamos, deberían ser la señal<br />

de una revolución agrícola en las grandes propiedades.<br />

Nosotros consideramos de nuestro deber llamar la<br />

atención sobre un asunto tan vital, excitar á la mayoría de<br />

los grandes propietarios á que abandonen los erróneos<br />

sistemas de cultivo, ruinosos para ellos, para sus colonos<br />

y para el país en general, que sigan los consejos que diariamente<br />

prodigan los maestros en la ciencia, y los que<br />

ya ponen en práctica muchos pequeños y medianos agricultores.<br />

Los sistemas de cultivo se han de adoptar siempre<br />

por su verdadera piedra de toque, que es el beneficio'<br />

sostenido.<br />

Si nos hemos detenido, quizá demasiado, en esta digresión<br />

es porque nos complacemos en considerar su importancia,<br />

pues encierra la historia del martirologio de los


— 88 —<br />

pobres agricultores, y al mismo tiempo una indicación<br />

clara, precisa y evidente de los medios de acrecentar la<br />

riqueza del país y poner término á la miseria de los más<br />

pobres. Vemos claramente en esta cuestión uno de los<br />

gérmenes más fecundos de un próximo porvenir que había<br />

de traer una grande y general prosperidad á estas islas.<br />

Abandonemos empero este asunto para ocuparnos otra<br />

vez de las medidas de precaución contra nuestro terrible<br />

enemigo.<br />

No dudamos que dadas las circunstancias indicadas<br />

nos libraríamos del funesto contagio, si fuésemos franceses,<br />

suizos,.catalanes, etc.; siendo baleares, es posible que<br />

no nos libremos. ¿Será que en todas partes tienen mayor<br />

dosis de inteligencia, actividad y abnegación que nosotros?<br />

El patriotismo no nos consiente resolver esta cuestión por<br />

la afirmativa, y si se nos arguye que el mal ha penetrado<br />

en Francia, Suiza, Cataluña y en tantos otros puntos, contestaremos<br />

que ha sido importado inconscientemente cuando<br />

no se conocía el insecto, ni menos sus funestos extragos;<br />

hoy, que no sólo es conocido de los entomólogos,<br />

sino de la generalidad, es seguro que no lo traerían.<br />

Teníamos la más completa confianza en la actitud<br />

resuelta y enérgica que la Comisión provincial había<br />

tomado, la que desempeñaba su importante cometido<br />

con celo extraordinario y nunca indiscreto. Hoy tenemos<br />

que lamentar la muerte de esta comisión, pues si vive es<br />

en una especie de estado latente, por causas que no queremos<br />

mencionar, porque ciertas consideraciones detienen<br />

nuestra pluma.<br />

Hay otra junta magna compuesta de ochenta á cien<br />

personas, que verdaderamente representan la riqueza territorial;<br />

en ella vemos con satisfacción figurar los nombres<br />

de algunas individualidades muy respetables, y que<br />

tienen ya todos los títulos á la gratitud de sus conciudadanos,<br />

pues han sabido portarse siempre cual cumple á<br />

la distinguida posición que ocupan; se les ha visto, con<br />

la mayor abnegación, prodigar sus servicios, su peculio


- 8 9 -<br />

y su garantía, en cuantas ocasiones ha pesado alguna calamidad<br />

sobre el país. Es muy sensible que en dicha junta<br />

no ocupen el puesto que la opinión pública les señala.<br />

Vemos con satisfacción que la prensa de esta ciudad<br />

le prodiga diariamente nubes de incienso; nosotros nos<br />

asociamos á la prensa enviando á la junta magna nuestro<br />

más cordial parabién, y pedimos al cielo le conceda todo<br />

el acierto y aplomo que necesita.<br />

Bueno es que exista, pero es muy necesario que la<br />

Comisión provincial salga de su letargo, y cumpla su<br />

importante cometido. Es la encargada por la Ley de defender<br />

al país de una invasión filoxérica, y durante mucho<br />

tiempo ha probado su aptitud, y ha merecido aplausos,<br />

pero necesita del concurso de todos, lo mismo de la<br />

Diputación que de los viticultores y comerciantes, y sólo<br />

con esta triple alianza es como la defensa y la lucha, en<br />

su caso, son posibles y eficaces. ( :<br />

)<br />

(•) Afortunadamente las circunstancias han variado, la nueva organización de<br />

la Junta de iniciativa particular, y su perfecto acuerdo con la Comisión oficial que<br />

hoy trabaja con actividad, hacen presagiar buenos resultados, mayormente cuando<br />

hasta la fecha no ha habido un sólo comerciante tan falto de patriotismo que haya<br />

desatendido las disposiciones emanadas de la comisión.


MEDIDAS DE PRECAUCIÓN.<br />

Las medidas mas eficaces para librar esta provincia de<br />

una invasión filoxérica son las que aconseja la ciencia, y<br />

las que prescribe la Ley, interpretada en su sentido más<br />

lato. Dejarse guiar por el capricho, y por un temor excesivo,<br />

extremar las medidas hasta hacerlas tocar en lo ridículo,<br />

es obtener un efecto contrario al que se desea.<br />

Siempre que por las precauciones se haya de afectar<br />

algún artículo de subsistencias ó de interés grande para el<br />

país, es preciso antes tener bien asegurado el abastecimiento<br />

de las clases más numerosas y atendibles, que si<br />

ven encarecer los artículos de primera necesidad, sin razones<br />

poderosísimas que lo motiven, sufriendo por ello<br />

perjuicios injustificables, se verán obligadas por la necesidad<br />

á reclamar de las Autoridades y del Gobierno toda<br />

la protección y apoyo á que tienen legítimo derecho.<br />

La prohibición absoluta de introducir raíces y tubérculos<br />

es exagerada, innecesaria y hasta perjudicial á todas<br />

las clases. En la Argelia, que es donde las precauciones<br />

se toman con más vigor, se admite la patata procedente<br />

de puntos filoxerados, con tal que se la sujete<br />

previamente á un lavado escrupuloso; pero los gastos que<br />

ocasiona esta operación no pueden ser de cargo de las<br />

expediciones, si no de los viticultores que son los primeros<br />

interesados, y á los que debería importar poco desprenderse<br />

de una pequeñísima parte de las ganancias fabulosas<br />

que realizan vendiendo sus caldos á triple precio del ordinario.<br />

En nuestro puerto las patatas no se lavan, algunas se


mojan y nada más; es decir se hace lo suficiente para<br />

perjudicar la mercancía y encarecerla con gastos y trabas<br />

fiscales, pero nada se consigue para librar al país de la<br />

filoxera. Es lo mismo que sucede con las medidas sanitarias<br />

que se cumplen á medias; es como la cuarentena ú<br />

observación en un lazareto poco escrupuloso, que irroga<br />

perjuicios al comercio y no proporciona ventajas á la<br />

salud pública.<br />

La patata, que tanto temor infunde á los viticultores,<br />

que tanto ha dado que decir y que hacer, quedaría indirectamente<br />

prohibida, si los propietarios, consultando sus<br />

intereses, la cultivaran con la extensión que nuestras tierras<br />

reclaman. De este modo arrojarían al mercado grandes<br />

cantidades de esta mercancía á un precio módico,<br />

pero remunerador para los cultivadores, y es bien seguro<br />

que no se importaría un sólo tubérculo.<br />

Esto, que sería lo útil y equitativo, es pedir peras al<br />

olmo, pero la prohibición absoluta, sin atender previamente<br />

al abastecimiento, es absurda é imposible, hiere la<br />

ley de la justicia, vulnera los más respetables y sagrados<br />

derechos.<br />

Otra prohibición de las marcadas en la Ley cual es la<br />

de importar árboles, arbustos y plantas vivas, no puede<br />

ser más útil ni estar más justificada, pero tiene también<br />

inconvenientes de trascendentales consecuencias. En un<br />

país como el nuestro, en que todo el beneficio agrícola<br />

debe esperarse del arbolado, dejan de plantarse anualmente<br />

muchos millares de pies, que venían de fuera, lo<br />

cual, sin la menor duda, causa perjuicios inmensos, mayores<br />

de los que generalmente se cree.<br />

La prohibición está bien justificada, pero es preciso<br />

atender á todo, y cuando se cierra una puerta, es necesario<br />

abrir otra; cuando estamos tan propensos á destruir<br />

es preciso que pensemos también en reedificar.<br />

El establecimiento de grandes viveros que proporcionarían<br />

al país abundancia de árboles, frutales, forestales<br />

y de adorno, sería un gran beneficio, así para la provin-


cia como para el que emprendiera el negocio. En este<br />

caso pudiera seguir la prohibición sin inconvenientes, sin<br />

que el país se resintiera de ella. (/)<br />

Para llevar á efecto un buen plan de defensa que no<br />

se reduce á prohibiciones más ó menos oportunas, sino<br />

también á medidas de otro género, se necesitan recursos,<br />

y la Comisión provincial carece de ellos.<br />

La comisión de defensa hubiera establecido un vivero<br />

de vides americanas, más careció de fondos para procurarse<br />

la semilla.<br />

Hubiera proporcionado á los pueblos varias preparaciones<br />

del insecto, buenas láminas, y microscopios, para<br />

facilitarles los conocimientos más indispensables. Ha carecido<br />

de fondos para conseguirlo.<br />

Hoy mandaría á Gerona comisiones de personas científicas<br />

y prácticas para que conocieran los medios de destruir<br />

el enemigo en el caso de ser invadidos. No puede<br />

hacerlo por falta de recursos.<br />

Publicaría una pequeña Revista ó Boletín filoxérico, á<br />

fin de que cuanto se refiere á tan vital asunto se difundiera<br />

todo lo posible por los pueblos vitícolas. No puede<br />

hacerlo por falta de recursos.<br />

En fin, se ve que la principal dificultad estriba en la<br />

(') En 1869 tuvimos la honra de llamar la atención de la Junta de Agricultura,<br />

Industria y Comercio, sobre la cuestión filoxérica, pronosticando la importancia<br />

y gravedad que en breve tiempo debía alcanzar, y propusimos algunas<br />

medidas de precaución, pero sin desatender los medios más indicados para evitar<br />

los perjuicios inherentes á toda prohibición. En 1872 se formó una Junta protectora<br />

de la viña balear, y se pidió autorización al Gobierno para prohibir la importación<br />

de sarmientos y plantas vivas, y esa petición fué desatendida. Se apeló luego<br />

al medio indirecto de suplicar á los navieros, capitanes y patrones de buques que<br />

no admitieran tales efectos á bordo y se consiguió bastante. Llegó un comerciante<br />

en plantas trayendo sarmientos de variedades escogidas, se le compraron y fueron<br />

arrojados al fuego, lo mismo que otros de diferente procedencia, prestándose su<br />

dueño á que sufrieran igual operación.<br />

Al proponer la prohibición de introducir árboles, se propuso también el establecimiento<br />

de un gran vivero, para que el país no sufriera el menor perjuicio, cuya<br />

proposición fué aceptada, y hasta tuvimos la comisión de buscar un terreno de<br />

buenas condiciones para llenar el objeto; pero luego, por causas agenas á la voluntad<br />

de los socios, la junta se disolvió.


- 93 -<br />

falta de dinero, lo cual es hasta cierto punto humillante<br />

para una provincia como esta. El Estado no puede atender<br />

á todas partes, ni debe correr á su cargo el gasto que<br />

se haya de ocasionar en las provincias. La Diputación<br />

atraviesa una época financiera no muy alhagüeña, sin embargo,<br />

tenemos noticia de que la corporación provincial<br />

piensa consignar en el presupuesto la cantidad que le sea<br />

posible.<br />

Los viticultores son los que se hallan en el caso de<br />

hacer un pequeño sacrificio pecuniario, para salvar su<br />

riqueza y la del país. No desconocemos que están abrumados<br />

por las contribuciones, que el tesoro se halla convertido<br />

en expoliador casi insaciable, que el genio fiscal<br />

persigue sin tregua ni descanso todas las materias imponibles,<br />

y las contribuciones, multiplicadas y diversificadas<br />

de mil modos diferentes, vienen todas á pesar sobre la<br />

producción agrícola, como si un pacto irrevocable hubiese<br />

condenado á los agricultores á llenar con su sudor<br />

el tonel sin fondo de las hijas de Danao.<br />

Todo esto es muy cierto, pero no lo es menos que el<br />

sacrificio que hoy se les exige es el más insignificante y el<br />

de más utilidad para ellos. Con harta frecuencia se ven<br />

en la necesidad de hacer esfuerzos que no están en armonía<br />

con el beneficio que han de obtener, pero en el<br />

presente caso la proporción es inversa, el sacrificio es insignificante,<br />

y el provecho incalculable.<br />

Nunca se les presentará una ocasión de emplear mejor<br />

su dinero; lo que se les pide, y sólo temporalmente,<br />

no es más que un óbolo despreciable, como una prima<br />

para asegurarles casi á perpetuidad su producción casi<br />

fabulosa; y no sólo para esto, sino también para conjurar<br />

el pauperismo, la miseria, la ruina de todas las clases, y<br />

la más completa decadencia en el orden moral y material.<br />

No, nuestros viticultores no permanecerán sordos á<br />

estas leales excitaciones; si no acuden en tropel á depositar<br />

el pequeñísimo tributo en las arcas salvadoras de su<br />

riqueza, es porque no se les ha hecho aún comprender


— 94 —<br />

bien el peligro grave en que se hallan, y la facilidad con<br />

que puede conjurarse contando con su cooperación. Los<br />

pobres agricultores que verdaderamente comen el pan<br />

amasado con el sudor de su rostro, son sobrios y económicos;<br />

pero nunca avaros, ni miserables. ¿Cómo han de<br />

negarse á un pequeño tributo si se les hace conocer que la<br />

riqueza ó la miseria propia y de todo el país reposa únicamente<br />

sobre su generosidad?


CALENDARIO FILOXÉRICO.<br />

El Doctor D. Mariano de la Paz Graells, naturalista<br />

distinguido, y que tantos estudios ha hecho sobre la Filoxera,<br />

á imitación de otra notabilidad europea, cual es el<br />

Dr. Fatio de Ginebra, ha estampado en su prontuario filoxérico<br />

un pronóstico, con la indicación de la triste suerte<br />

que ha de caber á nuestros viñedos filoxerados, y en él<br />

marca, por meses, el estado biológico del insecto, las investigaciones<br />

que deberán hacerse y los procedimientos<br />

que habrán de practicarse, á fin de dar una pauta, no sólo<br />

á los viticultores, sino á los peritos y á cuantas personas<br />

hayan de intervenir en las operaciones antifiloxéricas.<br />

Conociendo toda la importancia que tienen los calendarios<br />

agrícolas hemos creído también útil que acompañara<br />

esta memoria un estracto del pronóstico del referido-<br />

Sr. Graells.<br />

NOVIEMBRE, DICIEMBRE Y ENERO.<br />

Durante estos meses el insecto está ivernando, y se<br />

le puede ver fijo en las raíces; si la viña está filoxerada<br />

de años anteriores, se le encuentra á mayor profundidad,<br />

pues alcanza las raicillas que se hallan á treinta ó más<br />

centímetros de la superficie.<br />

Durante esta época puede buscarse el huevo de invierno,<br />

para destruirlo en cuanto sea posible; y al podarse<br />

las viñas, se reconocerán las cepas muertas, para<br />

descubrir la causa que haya podido matarlas.


— 96 —<br />

También puede precederse al arranque de las filoxeradas,<br />

operación que debe practicarse con el mayor esmero,<br />

á fin de no dejar, en cuanto sea posible, raicillas<br />

infestadas, ni en la superficie ni bajo la tierra. Las cepas<br />

arrancadas, lo mismo que la superficie del terreno,<br />

se incinerarán, durante cuya operación la tierra se removerá<br />

varias veces, terminando el espurgo por la aplicación<br />

de los mejores insecticidas en las capas subterráneas.<br />

FEBRERO Y MARZO.<br />

Durante estos meses siguen aún invernando las filoxeras,<br />

como no sea en climas muy cálidos, ó por una elevación<br />

accidental de temperatura, que á últimos de Marzo<br />

empieza ya á avivar algún huevo de invierno, dando<br />

lugar á la salida de las madres fundadoras, pero esto no<br />

es lo regular; la verdadera época de empezar sus evoluciones<br />

la Filoxera coincide siempre con la brotadura de<br />

la vid.<br />

Durante estos dos meses podrá continuarse buscando<br />

el huevo de invierno, procurando su destrucción por medio<br />

del escaldado ó bien del embadurnamiento.<br />

ABRIL Y MAYO.<br />

En estos meses empieza ya la brotadura de las viñas,<br />

acaban de avivarse los huevos de invierno, y las larvas<br />

bajan á buscar su subsistencia en las raíces, cambian la<br />

piel, crecen, y en Mayo empiezan ya la postura, para propagar<br />

las generaciones radicícolas.<br />

Durante esta época podrán buscarse las larvas en los<br />

brotes y partes verdes, en donde pueden encontrarse,<br />

aunque con dificultad,, mientras buscan el camino para<br />

pasar á las raíces. La investigación al final de esta época,<br />

puede ya dirigirse á las barbillas de las raíces más


'— 97 —<br />

superficiales, las que se arrancarán y quemarán si se encontrase<br />

en ellas alguna hipertrofia ó señal de la existencia<br />

del insecto, haciéndose igual operación con las hojas<br />

que presenten agallas, lo cual es más frecuente en las<br />

vides americanas.<br />

JUNIO, JULIO Y AGOSTO.<br />

Este trimestre es el más favorable para la Filoxera; la<br />

viña en todo el vigor de su vegetación, y una temperatura<br />

elevada, proporcionan al insecto las mejores condiciones<br />

de actividad; es la época de su reproducción asombrosa,<br />

por consiguiente es cuando se forman las numerosas<br />

hipertrofias en las raíces. Los individuos que han de<br />

pasar al estado de insecto alado empiezan sus metamorfosis,<br />

se transforman en ninfas, y terminan sus evoluciones<br />

presentándose con sus alas sobre la tierra, para producir<br />

la generación sexuada.<br />

Durante esta época hace el insecto sus escursiones ausiliado<br />

por el viento, y es por consiguiente el tiempo en<br />

que el mal se propaga á grandes distancias, pues en las<br />

viñas más ó menos apartadas queda depositado el germen,<br />

que al año siguiente se convertirá en nuevo foco.<br />

Aparecen igualmente las manchas ó rodales, caracterizándose<br />

bien los que en el año anterior no lo estaban,<br />

en una palabra, durante la canícula es cuando el mal<br />

presenta un aspecto verdaderamente aterrador.<br />

Este es el momento de reconocer bien el límite de los<br />

rodales, por medio de una inspección inteligente y escrupulosa<br />

de las últimas zonas, de las viñas y parrales inmediatos;<br />

y dónde se descubran nuevas salpicaduras, arrancar,<br />

quemar, y acudir con los insecticidas más acreditados.


- 98 -<br />

SETIEMBRE Y OCTUBRE.<br />

En estos dos meses sigue aún la reproducción Filoxérica,<br />

si bien con menor actividad que en los anteriores,<br />

observándose empero mayor número de ninfas que han<br />

de favorecer la multiplicación de los individuos sexuados,<br />

garantía de perpetuidad para la especie. Como al final de<br />

esta época se marchitan y caen las hojas, las colonias<br />

galícolas, si existen, bajan á reforzar las radicicolas, con<br />

las cuales pasan el invierno, y penetran hasta las raíces<br />

más profundas.<br />

En las viñas filoxeradas, la caida natural de los pámpanos,<br />

á medida que adelanta el otoño, es más precoz<br />

que en las sanas, fenómeno que se observa bien en los<br />

rodales, pues se despojan mucho antes los del centro,<br />

luego los de la zona inmediata y así sucesivamente.<br />

Durante la vendimia, los operarios encargados de ella<br />

deberán observar, con mucho cuidado, cualquier síntoma»<br />

morboso que noten en las cepas, señalando con cal ó<br />

almagre las que hubiesen llamado su atención, para que<br />

sean luego objeto de más escrupulosas é inteligentes pesquisas.


— 99 —<br />

LEY DE 30 DE JULIO DE 1878<br />

DICTADA<br />

PARA EVITAR LA DIFUSIÓN Y PROPAGACIÓN<br />

DE LA<br />

PHYLLOXERA VASTATRIX.<br />

DON ALFONSO XII,<br />

Por la gracia de Dios Rey constitucional de España.<br />

A todos los que las presentes vieren y entendieren, sabed: que las<br />

Cortes han decretado y Nos sancionado lo siguiente:<br />

Artículo i.° Se creará en Madrid una Comisión central de defensa<br />

contra la phylloxera sobre la base de la Comisión permanente que entiende<br />

en este asunto en el Consejo superior de Agricultura, Industria y<br />

Comercio, y de la cual será Presidente nato el Ministro de Fomento, y<br />

por delegación el Director general de Instrucción pública. Agricultura<br />

é Industria, con quienes se comunicará directamente la citada Comisión.<br />

Compondrán además ésta, representantes de la propiedad vitícola y de<br />

las corporaciones y Sociedades científicas y agrícolas más importantes<br />

de España, así como de aquellas personas que por la posición oficial que<br />

ocupen y por la especialidad de sus conocimientos puedan, á juicio del<br />

Gobierno, contribuir á la más acertada realización de los fines que comprende<br />

la presente ley.<br />

Art. 2.° En todas las provincias vitícolas del Reino se establecerán<br />

Comisiones provinciales de defensa contra la phylloxera, compuestas del<br />

Gobernador, á quien corr jspo.tderá la presidencia, tres viticultores elegidos<br />

por el Gobierno entre los 5o primeros contribuyentes, un Diputado<br />

provincial, un Vocal de la Junta de Agricultura, nombrado por la<br />

misma, el Jefe de Fomento, el Jefe económico, el Ingeniero Jefe de<br />

Montes, los profesores de Agricultura é Historia natural del Instituto<br />

provincial, y el Ingeniero agrónomo Secretario de la Junta de Agricultura,<br />

que lo será también de la Comisión.


— . I00 —<br />

Art. 3.° Estas Comisiones, así la central como las provinciales dependientes<br />

de ella, auxiliarán en sus respectivas esferas de acción al Gobierno,<br />

examinando y discutiendo cuantas medidas y disposiciones se le<br />

consulten por el Ministerio de Fomento, relativas al objeto de esta ley;<br />

y proponiendo, de conformidad con la misma, los medios en su juicio<br />

más acertados para llevarla á cumplido efecto, así como para resolver<br />

equitativamente y en justicia las cuestiones que se relacionen con tan<br />

terrible plaga, y á que pueda dar lugar la aplicación de las disposiciones<br />

legales que rijan en la materia. Un reglamento especial determinará el<br />

régimen interior de dichas Comisiones, así como las facultades que,<br />

aparte de las consignadas expresamente en esta ley, les correspondan en<br />

sus relaciones oficiales con el Gobierno, y en las que deben asistir entre<br />

ellas mismas para el mejor cumplimiento de la importante misión que<br />

tendrán á su cargo.<br />

Art. 4. 0<br />

Se autoriza al Gobierno para que, de acuerdo con la Comisión<br />

central, pueda prohibir en la medida y por el tiempo que las<br />

circunstancias aconsejen la introducción en el territorio de España y sus<br />

islas adyacentes de sarmientos, barbados y púas de todos los residuos de<br />

la vid, como los troncos, raíces, hojas, tutores y cuanto ha servido para<br />

el cultivo de este arbusto, aunque se importare como leña ó combustible,<br />

así como de todo género de árboles, arbustos y cualesquiera otras plantas<br />

vivas, sea cual fuere su procedencia. Las semillas y las plantas desecadas<br />

y convenientemente preparadas para los herbarios estarán en todo<br />

caso exentas de la prohibición que comprende el párrafo anterior.<br />

Art. 5.° En el caso de presentarse la phylloxera en cualquier punto<br />

del territorio español, se entenderá desde aquel momento prohibida la<br />

exportación á las demás comarcas de las cepas, sarmientos y demás objetos<br />

comprendidos en el párrafo primero del art. 4. 0<br />

, procedentes de las<br />

viñas infestadas.<br />

Art. 6." Para plantar viñas en España y en sus islas adyacentes<br />

deberá preceder aviso escrito ó verbal al Alcalde respectivo, acompañando<br />

certificación de que los sarmientos ó barbados no proceden de<br />

país extranjero ni de comarca infestada por la phylloxera dentro del<br />

territorio español. No será necesario este requisito cuando los sarmientos<br />

ó barbados procedan de las mismas tierras del plantador, y estas no<br />

se hallen infestadas. En las Secretarías de los Ayuntamientos se llevará<br />

un libro-registro de la plantación de vides, y en él se anotará el lugar<br />

de la plantación, número y procedencia de las cepas, si no fueren de la<br />

misma finca del interesado, y nombre del dueño, aparcero ó arrendatario.<br />

Art. 7. 0<br />

Todo propietario de viña ó quien le represente estará obligado<br />

á dar aviso al Alcalde respectivo de cualquier síntoma que notase<br />

en las vides y pueda hacer presumir la presencia de la phylloxera. El<br />

Alcalde á su vez dará cuenta en el acto de este hecho al Gobernador y á<br />

la Comisión provincial de defensa, la cual, previo reconocimiento facul-


102<br />

Art. i3. Todos los gastos que ocasionare el arranque de cepas, desinfección<br />

y demás operaciones confiadas á las Comisiones provinciales<br />

de defensa, así como las indemnizaciones que procediesen con arreglo<br />

al art. 10, serán costeados de un fondo que estará depositado en las<br />

sucursales del Banco de España y á disposición de la Comisión provincial<br />

de la phylloxera.<br />

Se formará este fondo con un recargo de 25 céntimos de peseta anuales<br />

por hectárea de viña, que todas las Diputaciones provinciales consignarán<br />

desde luego en sus respectivos presupuestos por dos años, á<br />

contar desde el actual ejercicio, si bien sólo se hará efectivo en las provincias<br />

invadidas y sus limítrofes que sean vinícolas.<br />

Si á juicio de la Comisión central hubiese necesidad de continuar<br />

imponiendo este recargo, el Gobierno presentará á las Cortes el oportuno<br />

provecto de ley.<br />

Para atender á los gastos indispensables de estudio, ensayos y medios<br />

de defensa generales contra la phylloxera, se abre un crédito permanente<br />

de 5oo,ooo pesetas á favor del Ministerio de Fomento.<br />

Art. 14. Las Comisiones provinciales de defensa deberán inspeccionar<br />

frecuentemente por delegados facultativos todos los criaderos de<br />

cepas, semilleros v viveros de cualquier clase que existan en sus provincias,<br />

y el Gobierno, á petición de la Comisión central de la phylloxera<br />

y bajo su inspección especial, podrá establecer donde y cuando lo estime<br />

oportuno semillero de vides americanas, ó de castas que no sean susceptibles<br />

de ser atacadas por la phylloxera.<br />

Art. i5. Los Alcaldes y demás funcionarios á que se refiere el artículo<br />

8.°, que mostraren morosidad punible en el cumplimiento de la<br />

obligación que por dicho artículo se les impone, incurrirán en la multa<br />

de 20 á 3oo pesetas, la cual, según los casos y la distinta categoría de<br />

tales funcionarios, impondrá gubernativamente la Comisión central previo<br />

informe de la provincial de defensa.<br />

Art. 16. Cuando en las Aduanas y fronteras se presentasen cualesquiera<br />

de los efectos comprendidos en el art. 4.°, y cuya importación<br />

estuviere prohibida, serán inmediatamente quemados. Lo mismo se<br />

ejecutará con los embalajes y camas de ganados procedentes de restos ó<br />

despojos de cepas. Cuando dichos efectos sean asimismo descubiertos en<br />

las Aduanas y fronteras sin haberse verificado la debida presentación de<br />

los mismos, se impondrá al contraventor, además del tanto por 100 que<br />

prevengan las Ordenanzas de Aduanas para hechos análogos, una multa<br />

de 5o á 5oo pesetas, según la gravedad del caso. Cuando verificada la<br />

introducción fraudulenta de los]efectos mencionados sean estos aprehendidos<br />

en el interior del Reino, deberá aplicarse al caso la ley de delitos<br />

de contrabando con la penalidad pecuniaria ó personal correspondiente,<br />

calculando la defraudación por lo menos en el máximum de la multa.<br />

Por tanto:


— io3 —<br />

Mandamos á todos los Tribunales, Justicias, Jefes, Gobernadores y<br />

demás autoridades, así civiles como militares y eclesiásticas, de cualquier<br />

clase y dignidad, que guarden y hagan guardar, cumplir y ejecutar<br />

la presente ley en todas sus partes.<br />

Dado en Palacio á treinta de Julio de mil ochocientos setenta y ocho.<br />

—YO EL REY.—El Ministro de Fomento, C. FRANCISCO QUEIPO DE<br />

LLANO.


— IO-j —<br />

COMENTARIOS SOBRE LA LEY<br />

DE 3o DE JULIO DE 1878.<br />

Con todo el profundo respeto que nos inspiran las<br />

leyes, nos permitiremos comentar brevemente la de 3o de<br />

Julio, empezando por lamentarnos de que no se hayan<br />

aún publicado todas las aclaraciones y reglamentos necesarios<br />

para su fructuosa aplicación.<br />

Es muy difícil, casi imposible, que en un reducido<br />

número de artículos pueda una Ley atender á las muchas<br />

y heterogéneas necesidades de un país; cada provincia,<br />

tiene sus condiciones diferentes, su fisonomía especial, y<br />

un traje (dispénsese la comparación vulgar) debe hacerse<br />

ajustado al talle de cada uno.<br />

Cuando se promulgó la Ley de que nos ocupamos,<br />

España estaba libre de la plaga filoxérica, y el mal se<br />

cebaba en algunos puntos del extrangero, pero la Ley<br />

prohibió en seguida la introducción de los sarmientos,<br />

barbados, etc., en España y sus islas adyacentes, y no<br />

sólo de los que procediesen de puntos filoxerados, sino<br />

del extranjero.<br />

Dispone también en su art. 5." que en el caso de presentarse<br />

la filoxera en cualquiera punto de España, se<br />

entenderá desde aquel momento, prohibida la exportación,<br />

de cepas, barbados y demás efectos detallados en el artículo<br />

4." á las demás comarcas. La provincia filoxerada<br />

no tiene interés en librar de su mal á las demás provin-


cias; estas son las que deben guardarse de la filoxerada.<br />

Nuestra provincia está en un caso muy escepcional,<br />

porque la filoxera no puede invadirla, no siendo importada,<br />

y se encuentra hoy con respecto al continente en<br />

idénticas condiciones que la península con respecto al<br />

extranjero cuando se promulgó la Ley; creemos por lo<br />

mismo que no se faltaría al espíritu de ella, dejando de<br />

admitir todos los objetos que marca el art. 4. 0<br />

, siempre<br />

que procedieran de punto filoxerado ó notoriamente comprometido.<br />

El asunto es tan grave y trascendental, que, si no pueden<br />

librarse todas las provincias, debe decirse ya, Sálvese<br />

el que -pueda. La persona más autorizada que hay en<br />

España, el Sr. Graells, dice: «que se han librado, hasta<br />

el día, de la plaga, aquellos que como en Italia y en Argelia<br />

han llevado al extremo las prohibiciones de importar<br />

plantas vivas, y aun productos de la horticultura.»<br />

La legislación extranjera nos da el saludable ejemplo<br />

de dictar disposiciones especiales, para las localidades<br />

cuyas circunstancias, también especiales, las reclaman.<br />

Para esta provincia, una Ley como la de la Argelia sería<br />

una garantía de inmunidad, y nos atrevemos á esperar<br />

que nuestra voz no será desatendida.<br />

El artículo i3 dispone que todos los gastos que ocasione<br />

el arranque de cepas, desinfección de terrenos, é<br />

indemnizaciones sean costeados del fondo producto del<br />

recargo de o'25 pesetas por hectárea de viña; y para los<br />

gastos de estudio, ensayos y medios de defensa generales,<br />

el Ministerio de Fomento tendrá abierto á su favor un<br />

crédito de 5oo,ooo pesetas. Con estas cantidades se ha de<br />

atender á todos los gastos que ocasione el cumplimiento<br />

de los artículos 10, 11, 12 y 14.<br />

Sobre este particular diremos tan solo que, por insuficientes,<br />

son ineficaces estos recursos, y es muy sensible<br />

que en la generosa España las liberalidades ruinosas tengan<br />

su término cuando se trata de las cosas más útiles.<br />

La invasión filoxérica en España se ha presentado


— io6 —<br />

con caracteres fulminantes, y con sentimiento auguramos<br />

que en un brevísimo plazo el mal habrá tomado ya todas<br />

las proporciones de una calamidad invencible. Hoy,,<br />

muchos puntos que se creen libres acaso no lo estén,<br />

pues el mal no se demuestra muchas veces hasta el tercer<br />

año, y en el primero ya puede contagiar cualquier otro<br />

terreno por medio del germen oculto en las pequeñas<br />

porciones de tierra, que suelen pegarse á los productos de<br />

arboricultura y de horticultura.<br />

Consideramos muy útil, antes de terminar este punto,<br />

dirigir una súplica á los Sres. Senadores y Diputados por<br />

esta provincia, para que presenten un proyecto de Ley<br />

bien estudiado, y especial para estas islas; y si no consideran<br />

oportuno darle tanta importancia, a lo menos conseguir<br />

del Gobierno una autorización para que la Comisión<br />

provincial de defensa adopte medidas que, siendo<br />

insignificantes por los perjuicios que hayan de ocasionar,<br />

sean con toda probabilidad la salvación de nuestra riqueza<br />

vitícola.


CONCLUSIONES.<br />

La Filoxera vastatrix es un insecto destructor de la<br />

viña, y constituye hoy la plaga más desastrosa de cuantas<br />

han azotado el precioso arbusto vinífero.<br />

No sólo pone á contribución las cosechas, sino que<br />

acaba por matar las cepas.<br />

Los Estados-Unidos, patria del referido insecto, estuvieron<br />

en posesión exclusiva de él hasta el año i863, en<br />

que fué importado por el comercio de plantas á las estufas<br />

de Inglaterra y Alemania, luego á Francia, desde cuyos<br />

puntos se ha extendido por toda la Europa vitícola, y<br />

habiendo tomado ya carta de naturaleza, es hoy compatriota<br />

de todos los insectos dañinos de Europa.<br />

Se multiplica de un modo asombroso, poseyendo la<br />

facultad de reproducirse por partenogénesis, que equivale<br />

á decir generación doncella, pues fecundada una hembra,<br />

pone huevos, de los que nacen otras hembras fecundas<br />

también, de éstas, otras, y así sucesivamente, de modo<br />

que una sola hembra al final del ciclo ha dado por resultado<br />

una descendencia de muchos millares de millones<br />

de individuos.<br />

Todas las hembras á que nos hemos referido hasta<br />

ahora son ápteras, es decir sin alas, pero de ellas nace<br />

últimamente una generación de hembras aladas, que da<br />

lugar á otra, en la que existen machos, encargados de fecundar<br />

á las hembras para todas las generaciones del año.<br />

La Filoxera se propaga de una cepa á otra por los<br />

intersticios de la tierra, pero por este medio adelanta poco;<br />

á mayores distancias se extiende cuando es insecto alado;


— ioS —<br />

sin embargo, no hubiera podido cruzar el atlántico, para<br />

invadir toda la Europa si no hubiese contado con otro<br />

medio de propagación, cual es el de la vía comercial, por<br />

la que el hombre ha sido el encargado de importarla y<br />

extenderla por todas partes.<br />

La Filoxera causa perjuicios inmensos á la Agricultura,<br />

Industria, Comercio y á las clases trabajadoras.<br />

La muerte de la viña es la ruina de un país vitícola,<br />

en donde la miseria, la emigración y la decadencia más<br />

completa reemplazan el bienestar y la prosperidad.<br />

En esta provincia, en la que está muy extendido el<br />

cultivo de la vid, y aumenta considerablemente cada día,<br />

los males que traería una invasión íiloxérica son tales y<br />

tan graves que no hay términos hábiles para hacerlos<br />

comprender.<br />

La Filoxera no es debida á la degeneración de la vid,<br />

ni á los malos cultivos, sino única y exclusivamente á la<br />

importación del insecto.<br />

Se han ensayado remedios en número casi infinito<br />

para combatir la plaga, pero todos han sido inútiles, y la<br />

Filoxera se extiende por todas partes con espantosa rapidez,<br />

apesar de todos los esfuerzos que hace el hombre<br />

para detenerla.<br />

Los medios mecánicos son difíciles, tratándose de un<br />

insecto microscópico como la Filoxera, y sólo la inundación<br />

anti-económica é inaplicable, en la inmensa mayoría<br />

de las viñas, ha dado algún resultado.<br />

La mayor parte de los insecticidas han tenido que<br />

abandonarse, unos por ineficaces, otros por matar la viña,,<br />

otros por ser peligrosos para el hombre, y muchos también<br />

por anti-económicos.<br />

Los únicos que son aceptados hoy día por las principales<br />

notabilidades europeas son: el sulfuro de carbono,,<br />

los sulfo-carbonatos alcalinos, el ácido sulfuroso y la neolina.<br />

Se ha pretendido que renovando la viña por medio de<br />

la semilla, podría desaparecer el mal; prescindiremos de


— 100 —<br />

los muchos y graves inconvenientes de este medio, que ha<br />

sido ya desechado en todas partes.<br />

El reemplazo de las vides europeo-asiáticas por las<br />

castas americanas es el medio que, especialmente en Francia<br />

y en España, acarician muchas celebridades, como<br />

única medida salvadora.<br />

No sólo no lo combatimos, por el respeto que nos impone<br />

la autoridad de muchos agrónomos distinguidos y<br />

sabios naturalistas, sino que creemos debe aceptarse, pero<br />

con una prudente reserva, hasta que una experiencia más<br />

larga confirme las ventajas que de las leyes de agrología<br />

no pueden deducirse.<br />

Como este medio no ofrece grandes inconvenientes es<br />

muy útil establecer viveros para tener buenos patrones<br />

que, ingertados de nuestras mejores variedades, puedan<br />

reemplazar los viñedos destruidos por una invasión filoxérica.<br />

En esta provincia, libre hasta hoy de la plaga, debe<br />

hacerse la plantación de vides americanas por medio de<br />

semilla, de ningún modo importar sarmientos, los cuales<br />

con toda probabilidad importarían la Filoxera.<br />

No debe olvidarse un momento que la introducción de<br />

tales sarmientos sería la mayor de las imprudencias:<br />

guardémonos de creerla insignificante.<br />

Puede fundarse alguna esperanza en los enemigos que<br />

entre los insectos carniceros tenga la Filoxera, pues ella,<br />

no puede sustraerse á las leyes generales, por las que todos<br />

los seres se sirven de pasto los unos á los otros.<br />

En Alemania, en Francia, y aun en los Estados-Unidos,<br />

se han hecho y siguen haciéndose observaciones que<br />

permiten esperar que la Filoxera será pasto de otros insectos<br />

y miríapodos, encargados de restablecer el equilibrio<br />

entre los seres que componen el reino organizado.<br />

Finalmente esta provincia, por sus condiciones de aislamiento,<br />

con un buen plan de medidas de precaución,,<br />

que sean pocas, buenas, y fidelísimamente observadas,<br />

puede librarse de la plaga; pero se necesita el concurso


de todos, que todos obedezcan y secunden los buenos<br />

consejos que emanan de la celosa y activa Comisión provincial<br />

de defensa.<br />

Si estas islas se libran del azote, el monopolio que<br />

podrán disfrutar, la exportación de sus caldos al extrangero,<br />

y los precios elevadísimos que ya hoy alcanzan, les<br />

aseguran una prosperidad mayor de lo que pueden calcular.<br />

La riqueza para los viticultores, grandes beneficios<br />

para los demás ramos de la agricultura, así como para la<br />

industria y el comercio, un aumento de trabajo para los<br />

braceros, en una palabra, el bienestar general.<br />

No hay colores bastante sombríos para pintar el cuadro<br />

desgarrador que estas islas ofrecerían á nuestros ojos,<br />

si desgraciadamente apareciera en ellas el terrible pulgón:<br />

la ruina de los viticultores, depreciación grandísima en el<br />

valor de las tierras, grandes menoscabos en todos los ramos<br />

de la agricultura, inmenso quebranto en la industria,<br />

falta casi absoluta de trabajo para los jornaleros, y por<br />

consiguiente la miseria, el hambre y la ruina más completas,<br />

la decadencia moral y material, el vicio y pero<br />

basta, la pluma se resiste á continuar un catálogo de miserias<br />

que no tiene fin. Concluiremos pues recordando á<br />

estos isleños que de ellos depende la salvación ó la ruina<br />

de la provincia, que en su mano tienen la prosperidad ó<br />

la miseria.<br />

Evitad pues, queridos compatricios, todo fraude,<br />

muchas veces caprichoso; no queráis por un ramo de<br />

flores exponer vuestro país al mayor de los desastres; la<br />

conducta que debéis seguir trazada está por la Ley y por<br />

los consejos prudentes de la Comisión provincial, prestadles<br />

voluntaria obediencia y nos salvaremos.<br />

Si así lo hiciereis, que Dios os lo premie y si no os lo<br />

demande.


— Ili —<br />

JUSTO TRIBUTO.<br />

La gratitud no nos permite cerrar estas páginas sin dedicar<br />

algunas líneas, como sincera expresión de homenaje<br />

al limo. Sr. Director general de Agricultura, digno por<br />

tantos títulos de la estima y consideración de sus conciudadanos.<br />

Inspirándonos en su celo y patriotismo dimos<br />

repetidas conferencias filoxéricas, de las que es un simple<br />

extracto esta memoria, honrada con un premio por la<br />

Real Sociedad Económica Mallorquína; debérnosle pues<br />

en gran parte tan señalada distinción, y, como una débil<br />

muestra de reconocimiento, nos limitaremos á reproducir<br />

lo que con respecto á él dijimos en nuestra primera<br />

conferencia.<br />

«Afortunadamente tenemos un Director general, el<br />

Sr. D. José de Cárdenas, quien desde la escena tempestuosa<br />

de las funciones políticas, donde fermentan las más<br />

ardientes pasiones, dedica todo su afán al fomento de<br />

los varios ramos que tiene á su cargo, y el defender al<br />

país de la invasión filoxérica ocupa con preferencia su<br />

atención<br />

Y, puesto que los hombres de ciencia y verdadero patriotismo<br />

no suelen tener panegiristas, permitid que mientras<br />

la mayoría guarda su incienso para quemarlo ante las<br />

aras de la hipocresía y la farsa, yo, que nunca he manchado<br />

mis labios con la lisonja, consigne aquí que son<br />

dignos de la mayor honra y prez los hombres que como<br />

nuestro Director general consagran su existencia á la<br />

prosperidad de su patria, al mismo tiempo que esparcen<br />

una atmósfera de probidad y de virtudes entre sus conciudadanos.»


locks ks Rúuros que representen el insecto en<br />

sm diferentes estados son consideré/emente<br />

aumentados.<br />

Raicillas presentando Jupertróñas Ли% muy ШохегаАа cuyas escrescencías<br />

alojan infinidad de generaciones.


VOCABULARIO ENTOMOLÓGICO.<br />

A.<br />

ABDOMEN.—Sinónimo de vientre, es la<br />

última de las tres grandes divisiones<br />

de un insecto; se extiende desde el<br />

coselete hasta la extremidad posterior<br />

del cuerpo; está formada por varios<br />

segmentos ó anillos que salen uno de<br />

dentro del otro, ó bien separados por<br />

una membrana. Se usa esta palabra<br />

lo mismo para designar las paredes<br />

que forman la cavidad, que los órganos<br />

contenidos en ella.<br />

AFIDIFAGO.—Que se alimenta de pulgones.<br />

AFIDIOS, APHIDIA. — Voz tomada de<br />

aphis que significa pulgón, porque<br />

este género forma la principal parte<br />

de la familia, á la que ha dado el<br />

nombre. Pertenece al orden de los hemípteros,<br />

sub-órden homópteros.<br />

AGUIJÓN.—Apéndice anal, retráctil,<br />

oculto en el vientre cuando el animal<br />

está quieto, pero cuando se pone en<br />

acción lo proyecta y retira á voluntad<br />

con asombrosa rapidez, pudiéndolo<br />

dirigir contra el objeto de sus ataques.<br />

Se compone de una base, un<br />

estuche ó vaina, y en el interior dos<br />

estiletes cuya reunión forma el dardo.<br />

El aguijón es un instrumento vulnerante<br />

que vierte en la herida un<br />

[ líquido venenoso que produce viví-<br />

¡ simo dolor é inflamación. Esta arma,<br />

que solo poseen las hembras y los<br />

neutros, no tiene por objeto único la<br />

defensa, si no que es un complemento<br />

de los órganos reproductores.<br />

ALA.—Es el órgano que sirve para el<br />

vuelo y en los insectos está formado<br />

por dos membranas superpuestas, entre<br />

las cuales se distribuyen nerviaciones<br />

ó venas que por sus intersecciones<br />

forman varias figuras llamadas<br />

células ó celdas. Las alas tienen una<br />

base que es la estremidad articulada<br />

con el coselete y una estremidad ó<br />

punta que es la parte opuesta.<br />

AMPELÓFAGO.—Significa, por su etimología,<br />

que se nutre de la vid.<br />

ANTENAS. — Estos órganos, llamados<br />

vulgarmente cuernos, son unos filetes<br />

móviles compuestos de varios artejos<br />

articulados, tienen una forma muy<br />

variada, y están insertos en la cabeza<br />

de los insectos y crustáceos.<br />

ÁPTERO.—Insecto sin alas.<br />

ARTEJOS.—Pequeñas piezas que forman<br />

por su unión una parte del cuerpo<br />

de los insectos: los artejos de las<br />

antenas, los artejos de los tarsos.<br />

ATERICEROS.—Familia de insectos de<br />

la cual las moscas, los estros y los sirios<br />

son los géneros principales.<br />

B.<br />

BÓMBICE, BOMBIX.—Género de lepidópteros<br />

ó mariposas, familia de los nocturnos<br />

del que varias especies son muy<br />

conocidas, así el Bombix de la morera<br />

ó gusano de seda, el de la encina, el<br />

del trébol, el procesionario, etc.<br />

C.<br />

CALCIDITAS.—Tribu de insectos himenópteros,<br />

que ostentan todos colores<br />

muy brillantes, y prestan grandes servicios<br />

al agricultor, oponiéndose á la


multiplicación excesiva de otros insectos<br />

dañinos. El instinto de estos animales<br />

para buscar la cuna en donde<br />

han de desarrollarse sus descendientes,<br />

es admirable; las hembras buscan,<br />

una oruga, ninfa, insecto, un pulgón,<br />

ó un huevo; lo taladran con su aguijón,<br />

y allí depositan uno ó más huevos,<br />

que avivados, la larva que de ellos<br />

sale se alimenta á expensas de la sustancia<br />

que tiene á su alcance, que es la<br />

más apropiada para ella. Experimenta<br />

sus metamorfosis, y sale de su refectorio<br />

para ir á desempeñar las mismas<br />

funciones que sus ascendientes. Esta<br />

tribu está formada por numerosas especies<br />

, Walker en su monografía de<br />

los Calciditas describe unas 1,200 y<br />

M. Andouin, en sus investigaciones<br />

sobre los insectos enemigos de la vid,<br />

cuenta diez especies que viven parásitas<br />

sobre la pirala. Algunas atacan<br />

indistintamente varias especies, y otras<br />

parece que persiguen un insecto determinado.<br />

CAPRICORNIO, CERAMBIX.—El nombre<br />

de Capricornio se aplica á un gran<br />

número de coleópteros, de la familia<br />

de los longicornios; comprende multitud<br />

de especies, todas dañinas; las<br />

hembras tienen el abdomen terminado<br />

por un eviducto compuesto de varias<br />

piezas retráctiles, y les sirve para introducir<br />

el huevo bajo de la corteza de<br />

los árboles. Al principio la oruga que<br />

nace del huevo, se alimenta de la albura,<br />

pero á medida que crece penetra<br />

en el interior del tronco que perfora<br />

en todos sentidos, ocasionando de este<br />

modo inmensos perjuicios.<br />

CARÁBICOS, CARABICI.—Tribu de los<br />

coleópteros familia de los carniceros,<br />

sección de los pentámeros; son útilísimos<br />

por los muchos insectos dañinos<br />

y larvas que destruyen.<br />

CÁRABO.—Género de coleópteros que<br />

ha dado nombre á la tribu de los carabicos<br />

ó carniceros, comprende un gran<br />

número de especies, cuya mayor parte<br />

ostentan vistosos colores, son esencialmente<br />

carniceros, y, aunque impropios<br />

para el vuelo, tienen mucha<br />

agilidad en las piernas para perseguir<br />

su presa, y limpian los jardines y los<br />

campos de infinidad de orugas, caracoles<br />

y limacos. Son de talla mediana<br />

y cuando se les coje exhala su cuerpo<br />

un hedor insoportable, y su boca un<br />

líquido negruzco también muy repugnante.<br />

CARNICEROS, CARNÍVORA.—Familia de<br />

los coleópteros pentámeros, que tienen<br />

la boca provista de seis palpos,<br />

las mandíbulas terminadas en puntas<br />

agudas, y guarnecidas de pelos rígidos;<br />

son hábiles y valientes cazadores,<br />

y se mantienen de presas vivas.<br />

CHUPADORES.—Se da este nombre á<br />

los insectos que tienen los órganos bucales<br />

dispuestos para la succión y no<br />

para la masticación.<br />

CÍNIFES, CVNIPS.—Género de himenópteros,<br />

familia pupívoros; las hembras<br />

tienen un taladro á manera de tirabuzón,<br />

con una canal para conducir los<br />

huevos dentro del agujero que ha<br />

abierto, para cuya operación tiene el<br />

extremo armado de pequeñas de melladuras<br />

como una sierra que produce<br />

en las plantas las excrescencias conocidas<br />

con el nombre de agallas. Entre<br />

sus especies figuran el de la agalla de<br />

tintes, el del escaramujo, etc.<br />

COCC1DOS.—Familia de insectos que ha<br />

tomado nombre del género coecus.<br />

COCCINELLA.—Género de coleópteros,<br />

sección de los trímeros, familia de los<br />

afidífagos, cuyos caracteres son cuerpo<br />

esférico ó semilunar, cabeza descubierta<br />

, antenas claviformcs de once<br />

artejos. Sus larvas son muy carniceras<br />

y habitan los sitios en donde abundan<br />

los pulgones, á los que dan caza sin<br />

tregua ni descanso. Son insectos muy<br />

conocidos del vulgo que les distingue<br />

con los nombres de escarabajos hemisféricos<br />

, mariquitas, caballos de<br />

Dios, muías de la Virgen, escarabajos<br />

tortugas, etc.<br />

COCCUS.—Género de insectos hemípteros,<br />

cuyos caracteres son: abdomen<br />

terminado por dos cerdas, tarsos de<br />

un solo artejo monungulado, machos<br />

alados, hembras ápteras, anteras filiformes<br />

ó setáceas. Comprenden las<br />

cochinillas.


COLEÓPTEROS. — Orden de insectos<br />

caractizado por tener su primer par<br />

de alas coriáceas sirviendo de estuche<br />

. á las segundas, que son membranosas<br />

y están plegadas transversalmente. La<br />

palabra coleóptero por su etimología<br />

significa alas en estuche. Son mascadores,<br />

y son insectos muy abundantes<br />

y conocidos del vulgo que los designa<br />

con el nombre de escarabajos.<br />

COSELETE, THORAX.—Segunda de las<br />

tres grandes divisiones del cuerpo de<br />

los insectos; comprendida entre la cabeza<br />

y el abdomen, sostiene las alas y<br />

las patas.<br />

D.<br />

DÍPTEROS.—Orden de insectos que tienen<br />

dos alas, según su etimología lo<br />

indica. Su boca sin maxilas ni mandíbulas<br />

está representada por una trompa<br />

ó chupador. Este orden comprende<br />

las moscas.<br />

E.<br />

ÉLITROS.—Especie de alas duras coriáceas<br />

que cubren las membranosas; se<br />

les da también el nombre de estuches,<br />

porque forman con el dermis escamoso<br />

del vientre un verdadero estuche para<br />

cubrir las alas.<br />

ENTOMOLOGÍA.—Parte de la historia<br />

natural que trata de los insectos.<br />

ENTOMÓLOGO.—El que se ocupa de la<br />

ciencia entomológica.<br />

EPIGEO.—Que está sobre la tierra,<br />

ESCARABAJO, SCARABEUS.—Género del<br />

orden de los coleópteros. El vulgo da<br />

el nombre de escarabajos á todos los<br />

insectos pertenecientes á dicho orden.<br />

ESCARABEIDOS, SCARABEIDES. —Tribu<br />

de los coleópteros, familia de los lamelicornios,<br />

sección de los pentámeros,<br />

que corresponde al vasto gínero scarabens.<br />

ESCÓLITOS, SCOLYTUS.— Género de los<br />

coleópteros, sección de los pentámeros,<br />

familia de los xilófagos; viven en los<br />

leños, donde pasan sus metamorfosis,<br />

causando grandes daños en los árboles.<br />

. La especie más abundante y más cono­<br />

cida, ha recibido el nombre de Escólito<br />

destructor Scolytus destructor.<br />

ESTIGMAS.—-Aberturas, por las cuales<br />

el aire penetra en el interior del cuerpo<br />

de los insectos ó sea en las traqueas<br />

que son sus órganos respiratorios.<br />

EULOFO, EULOPHUS.—Género de himcnópteros,<br />

de la familia de los pupívoros.<br />

Destruyen muchas larvas, y la<br />

especie E. larvarum, es común y abunda<br />

en todas partes.<br />

EUMOLPO, EUMOLPUS.—Género de coleópteros<br />

sección de los tetrámeros,<br />

cuya especie más común y extendida<br />

es el E. vitis que tanto daño causa en<br />

en los viñedos.<br />

F.<br />

FILOXERA, PIIYLLOXERA.—Género de<br />

hemípteros, cuya especie vastatrix<br />

destruye los viñedos.<br />

FOLICOLA.—Que vive sobre las hojas.<br />

G.<br />

GALICOLA.—Que vive en agallas.<br />

H.<br />

HEMEROBIO, HEMEROBIUS.—Género de<br />

neurópteros, formado por insectos<br />

muy hermosos, pero que al cogerlos<br />

exhalan un excremento fétido cuyo<br />

olor tarda mucho en desaparecer. Sus<br />

larvas que Reamur llamó leones de<br />

los pulgones, hacen de estos un consumo<br />

extraordinario, por cuya razón<br />

son útilísimos; es tal su voracidad que<br />

los más débiles sirven de pasto á los<br />

más robustos de su misma especie.<br />

HEMÍPTEROS, HEMIPTERA.—Orden de<br />

insectos caracterizados por tener ordinariamente<br />

cuatro alas, y con frecuencia<br />

las superiores semicoriáceas, órganos<br />

bucales dispuestos para la suecion,<br />

cuya trompa no está arrollada en<br />

espiral.<br />

HERBÍVOROS, HERBÍVORA. — Animales<br />

que se nutren de vegetales.<br />

HETERÓMEROS. —Sección de los coleópteros,<br />

cuyo carácter consiste en<br />

tener cinco artejos en los dos pares de


patas anteriores, y sólo cuatro en las<br />

posteriores.<br />

HETERÓPTEROS.—Sección de los hemípteros,<br />

cuyo carácter consiste en tener<br />

las alas inferiores membranosas, y<br />

las superiores semicoriáceas.<br />

HIMENÓPTEROS. — Orden de insectos<br />

cuyo carácter, que les ha dado nombre,<br />

consiste en poseer cuatro alas<br />

membranosas y trasparentes, venadas<br />

longitudinalmente. Además tienen las<br />

mandíbulas cortas, pero las máxilas<br />

prolongadas constituyendo un chupador,<br />

y las hembras están provistas de<br />

un aguijón abdominal. Comprenden<br />

especies muy importantes, ya por su<br />

instinto y costumbres, ya por su utilidad,<br />

pues proporcionan al hombre la<br />

miel, la cera y las agallas, y además<br />

prestan servicios indirectos, destruyendo<br />

infinidad de larvas que aniquilan<br />

las cosechas.<br />

HIPOGEOS.—Por su etimología, se ve<br />

que son los insectos que están debajo<br />

de la tierra.<br />

HOMÓPTEROS.—Sección de los hemípteros,<br />

cuyo carácter consiste en tener<br />

las cuatro alas homogéneas, ya sean<br />

todas membranosas, ya coriáceas.<br />

I.<br />

ICNEUMÓN.—Género de himenópteros,<br />

perteneciente á la familia de los pupívoros,<br />

tribu de los icneumónidos y<br />

que comprende más de 1,200 especies,<br />

que el vulgo llama moscas vibrantes.<br />

Son útilísimos al agricultor por la<br />

gran destrucción de larvas, ninfas é<br />

insectos que sacrifican en provecho de<br />

su progenitura. Cuando las hembras<br />

quieren poner sus huevos, se agitan<br />

con inquietud buscando por todas partes<br />

larvas ó ninfas, cuya piel agujerean<br />

y depositan allí los huevos. La carne<br />

de las larvas que sirven de cuna á los<br />

jóvenes icneumones, constituye su<br />

único alimento, de modo que dichas<br />

larvas están condenadas á una muerte<br />

segura.<br />

INSECTO.—Animal invertebrado de cubierta<br />

exterior más ó menos sólida,<br />

compuesto de anillos, tres pares de<br />

patas, cuyo carácter les vale el nombre<br />

de hexápodos, ordinariamente cuatro<br />

alas, y también dos antenas, respiran<br />

por traqueas, y se desarrollan por medio<br />

de varias metamorfosis.<br />

L.<br />

LABIO SUPERIOR, LABRO.—Pieza escamosa<br />

situada sóbrelas mandíbulas,<br />

y forma la parte superior de la boca.<br />

Labio inferior. Pieza opuesta, formada<br />

por la lengüeta y la barba, y constituye<br />

la parte inferior de la boca.<br />

LARVA.—Es el estado del insecto desde<br />

que sale del huevo, hasta su prin_..-a<br />

metamorfosis.<br />

LEPIDÓPTEROS. —Orden de insectos<br />

caracterizado por tener ordinariamente<br />

cuatro alas membranosas, cubiertas de<br />

vina escama microscópica. Poseen una<br />

trompa más ó menos larga arrollada<br />

en espiral entre los palpos labiales. Se<br />

conocen vulgarmente con el nombre de<br />

mariposas.<br />

LIGEO, LYGEUS. — Género de hemípteros,<br />

sección heterópteros, cuyos caracteres<br />

son: cuerpo aplanado por su parte<br />

superior, coselete trapezoidal, rostro<br />

cuadriarticuladoy antenas de cuatro artejos.<br />

Comprende infinidad de especies<br />

que todas atacan á los pulgones destruyendo<br />

gran número de ellos.<br />

LUCANO, LUCANUS.—Género de coleópteros,<br />

cuyos caracteres son: cuerpo<br />

aplanado, mandíbulas extraordinariamente<br />

largas en los machos, maxilas y<br />

labio inferior terminado por pelos. Sus<br />

larvas viven en el interior del tronco de<br />

los árboles, y hasta en las raíces, causándoles<br />

tanto daño que los hacen perecer<br />

lentamente.<br />

M.<br />

MANDÍBULAS.— Piezas córneas colocadas<br />

á los lados de la boca de los insectos,<br />

bajo del labro, cubren casi completamente<br />

las maxilas. Su uso es coger,<br />

cortar y desgarrar los alimentos.<br />

MASCADORES. — Se da este nombre á<br />

todos los insectos, cuya boca está ar-


machi de mandíbulas y maxilas que<br />

sirven para mascar los alimentos.<br />

MAXILAS.—Piezas de menos consistencia<br />

que las mandíbulas, colocadas debajo<br />

de estas, y llevando cada una, uno<br />

ó dos palpos. Sirven para la masticación,<br />

y se mueven lateralmente.<br />

MESOTÓRAX.— Segundo segmento del<br />

tórax al que se articula el primer par<br />

de alas, y el segundo de patas.<br />

METAMORFOSIS. — Cambios ó transformaciones<br />

de los insectos cuando pasan<br />

por diferentes estados cuales son:<br />

larva, crisálida, ninfa ó pupa, é insecto<br />

perfecto.<br />

METATÓRAX.—Tercer segmento del<br />

tórax que lleva el segundo par de alas<br />

y el tercero de patas.<br />

MIRIÁPODOS. — Animales articulados,<br />

largos, vermiformes, ordinariamente<br />

compuestos de muchos anillos, y poseen<br />

un gran número de patas articuladas.<br />

MONÓFAGOS.—Se da este nombre á los<br />

insectos cuyo régimen consiste en una<br />

sola especie de alimento.<br />

N.<br />

NEURÓPTEROS. — Orden de insectos<br />

caracterizados por tener cuatro alas<br />

membranosas, con muchas nerviaciones<br />

que forman una especie de red,<br />

por lo que se llaman reticuladas. Tienen<br />

los órganos bucales dispuestos<br />

para la masticación.<br />

NINFA ó CRISÁLIDA.—Estado intermedio<br />

por el cual pasan muchos insectos<br />

antes de alcanzar el de insecto perfecto.<br />

O.<br />

OMNÍVORO.—Se da este nombre á los<br />

insectos cuyos régimen alimenticio les<br />

permite sustentarse indiferentemente<br />

de plantas, ó de otros animales.<br />

ÓRGANO.—Cualquiera parte de un animal,<br />

destinada á un trabajo ó acción.<br />

ORGANOGENÉSICO.—Facultad de producir<br />

órganos, es decir, facilidad de<br />

desarrollo en el organismo.<br />

ORUGAS.—Se da este nombre, especialmente<br />

á las larvas de los lepidópteros.<br />

7 —<br />

P.<br />

PALPOS.—Filetes móviles articulados<br />

que existen en la boca de los insectos.<br />

PARÁSITOS.—Con este nombre se designan<br />

los insectos, que viven á expensas<br />

de otros animales.<br />

PARTENOGÉNESIS. — Por su etimología,<br />

esta palabra significa generación<br />

doncella, y es la facultad que tienen<br />

ciertos insectos, sobre todo los pulgones,<br />

de poner huevos de los que salen<br />

hembras fecundas, que ponen huevos<br />

también fecundados, sin necesidad de<br />

concurso masculino en una serie consecutiva<br />

de generaciones.<br />

PATAS.—Son los miembros destinados á<br />

la progresión sobre la tierra ó el agua,<br />

y están compuestos de cadera ó trocánter,<br />

muslo ó fémur, pierna ó tibia, tarso<br />

y uñas.<br />

PENTÁMEROS.—Reciben este nombre<br />

los insectos que tienen cinco artejos en<br />

todos los tarsos.<br />

PICO.—Es el órgano bucal de los insectos<br />

chupadores, pero que no forma<br />

spiri-trompa.<br />

PIRALA.—Género de lepidópteros que<br />

tiene por principales caracteres: alas<br />

enteras, tectiformes, las superiores<br />

truncadas en la punta, y las inferiores,<br />

plegadas en forma de-abanico<br />

trompa muy corta ó rudimentaria, y á<br />

veces nula. Las especies pertenecientes<br />

á este género son muy dañinas y la de<br />

la vid, que hoy puede decirse que pertenece<br />

á la historia, tuvo una época<br />

que llegó á comprometer seriamente<br />

la existencia de los viñedos.<br />

PISODES. — Género de coleópteros del<br />

que algunas especies atacan varios árboles,<br />

es notable entre ellas el P. pini.<br />

POLÍFAGO. —Se aplica este calificativo<br />

al animal, cuyo régimen comprende<br />

muchas y varias clases de alimento.<br />

POLIFORME. — Que afecta varias formas.<br />

PROBOSCÍDEO. —El animal que tiene<br />

probóscide ó sea chupador ó trompa.<br />

PROTÓRAX.—La primera parte del tórax<br />

á la que va unido el primer par<br />

de patas.


PULGÓN. APHIS. — Género de insectos<br />

hemípteros, perteneciente á la sección<br />

ó sub-órden de los homópteros, tribu<br />

de los afídidos, tienen por caracteres:<br />

alas trasparentes ó nulas, antenas más<br />

largas que el cuerpo y dos tubos exretores<br />

en el vientre. Muchos de estos<br />

insectos viven en sociedad, y todos<br />

ellos sobre las plantas, de las que chupan<br />

el jugo; unos de las hojas, otros<br />

de los tallos y ramas, y otros de las<br />

raíces, ocasionando perjuicios incalculables.<br />

PUPÍPARO.—Se da este nombre á los insectos<br />

que se reproducen por medio de<br />

fetos ó pupas.<br />

PUPÍVORO. —Familia perteneciente al<br />

orden de los himenópteros. cuyos géneros<br />

principales son: Ichneumon, Cynips<br />

y Chaléis. Sus caracteres más notables<br />

son: abdomen pediculado, con el<br />

pedúnculo largo y estrecho, las hembras<br />

armadas de un taladro que les sirve<br />

también de oviducto. Generalmente<br />

todas las especies pertenecientes á esta<br />

familia son útilísimas por ser en su<br />

mayor parte carniceros ó parásitos de<br />

otros insectos.<br />

R.<br />

RADICÍCOLA.—Que vive sobre las raíces.<br />

RINQUITES. — Género de coleópteros,<br />

sección de los tetrámeros, familia rincóforos.<br />

Son insectos diminutos llamados<br />

también atelabos, y entre ellos<br />

figura el llamado cuquillo de la vid que<br />

tantos perjuicios causa á esta planta.<br />

S.<br />

SALTADORES. —Nombre dado á una<br />

familia perteneciente al orden de los<br />

ortópteros, caracterizada por la longitud<br />

y robustez de sus patas posteriores.<br />

SAPERDA. — Género de coleópteros tetrámeros,<br />

familia de los longicornios,<br />

cuyas especies causan grandes perjuicios<br />

en los troncos y ramas de los árboles.<br />

SIRFO.—Género perteneciente al orden<br />

de los dípteros. Las especies pertene­<br />

cientes á este género, son útilísimas,<br />

porque sus larvas, muy voraces y atídífagas<br />

impiden que los pulgones se<br />

multipliquen en número excesivo.<br />

T.<br />

TARSO.—Ultima parte de la pata de los<br />

insectos, está unida á la tibia, formada<br />

por varios artejos y terminada ordinariamente<br />

por una especie de ganchos<br />

en número de dos.<br />

TISANUROS.—Orden de insectos que<br />

por su analogía con los ortópteros<br />

forman hoy una sección de estos.<br />

TÓRAX.—Es la segunda de las tres partes<br />

en que se divide un insecto, está<br />

colocada entre la cabeza y el abdomen<br />

sirviendo de sosten á las alas y á las<br />

patas.<br />

TRAQUEAS.—Son dos tubos situados á<br />

cada lado del cuerpo de los insectos,<br />

están divididos en muchas ramificaciones,<br />

y les sirven para recibir el aire<br />

por los estigmas para efectuar la respiración.<br />

TRIQUINA, TRICI-IINA.—Gusano hoy tristemente<br />

célebre. T. spyralis, vive en<br />

las fibras musculares de varios mamíferos<br />

sobre todo de las ratas; es también<br />

muy común en el cerdo, en cuyas<br />

fibras se presenta arrollada en espiral,<br />

y envuelta en una especie de bolsa en<br />

la que permanece como en el limbo, es<br />

decir en un estado latente, hasta que<br />

el hombre ú otro mamífero come la<br />

carne triquinada; entonces se despoja<br />

de su envoltorio, se desarrollan los órganos<br />

sexuales, celebra sus bodas y se<br />

multiplica de un modo asombroso. La<br />

numerosa prole, sea circulando con los<br />

humores, sea atravesando las paredes<br />

del estómago, va á establecerse en las<br />

fibras musculares ocasionando la terrible<br />

enfermedad conocida con el nombre<br />

de triquinosis que es mortal en el<br />

hombre.<br />

TROMPA.—Es el órgano de succión de<br />

los insectos chupadores, y en los lepidópteros<br />

está arrollada en espiral.


V.<br />

VASTATRIX.—Devastadora, calificativo<br />

aplicado muy justamente por M. Planchón<br />

á la Filoxera de la vid.<br />

VOLUCELLA.—Género de insectos perteneciente<br />

al orden de los dípteros, sus<br />

larvas causan grandes extragos en los<br />

himenóptcros sobre todo en sus nidos.<br />

X.<br />

XILÓFAGOS.—Familia de insectos per-<br />

LISTA BIBLIOFRÁFICA.<br />

teneciente al orden de los coleópteros<br />

tetrámeros. Las especies pertenecientes<br />

á esta familia, en sus diferentes estados,<br />

se nutren de la parte leñosa de los<br />

vegetales, ocasionando perjuicios en<br />

todo el arbolado, especialmente en los<br />

bosques, sobre todo en las coniferas.<br />

Z.<br />

ZEUZERA.—Género de lepidópteros, cuyas<br />

larvas, todas lignívoras causan mucho<br />

destrozo en los árboles.<br />

Los autores que hemos consultado para escribir esta<br />

memoria y á quienes enviamos la expresión de nuestro<br />

reconocimiento son los siguientes:<br />

MONOGRAFÍAS.<br />

Almenas (Conde de las).—La Filoxera.<br />

Escosura y Deleitio, ingenieros.—Descripción, vida y costumbres<br />

de la Filoxera.<br />

Fatio.'—Etat de la question filloxerique en Europpe.<br />

Graells.—Prontuario filoxérico.<br />

Miret.—Estudios sobre la filoxera vastatrix.<br />

OBRAS DE CIENCIAS AUXILIARES.<br />

Arce y Ayuso.—Agricultura.<br />

Courreau.—Les insectes invisibles.<br />

Gasparin.—Cours d'Agriculture.<br />

Moll et Gayot.—Encyclopédie practique de V agriculteur.<br />

Monlau.—Historia natural.<br />

Pouchet.—Histoire naturelle du règne animal.<br />

Rozier.—Cours complet d'Agriculture teorique et practique.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!