16.05.2013 Views

Dibitonto,Giorgio,Angeles en astronaves(2009).pdf

Dibitonto,Giorgio,Angeles en astronaves(2009).pdf

Dibitonto,Giorgio,Angeles en astronaves(2009).pdf

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

a expresar sus cont<strong>en</strong>idos. La m<strong>en</strong>te se vuelve una trampa cuando deforma y reprime estos<br />

cont<strong>en</strong>idos. Ya t<strong>en</strong>emos <strong>en</strong>tonces a corazón y m<strong>en</strong>te <strong>en</strong>emistados, mi<strong>en</strong>tras la infelicidad y<br />

la <strong>en</strong>fermedad p<strong>en</strong>etran para expresar mucho dolor <strong>en</strong> vuestra exist<strong>en</strong>cia".<br />

"La m<strong>en</strong>te, os lo repito, puede volverse <strong>en</strong>emiga del Amor Universal y de las Leyes del<br />

Padre Dios y <strong>en</strong>tonces puede matar el Amor <strong>en</strong> el corazón del hombre. El camino que se os<br />

indicó es éste, lo repetimos, de la s<strong>en</strong>cillez, de la humildad y de la bondad. Desead estas<br />

cosas para que el Padre os las conceda. Pedidlo y veréis llegar la salvación."<br />

Ilmuth prosiguió: "Para qui<strong>en</strong> ama el bi<strong>en</strong>, no existe la muerte, <strong>en</strong> ninguno de sus aspectos.<br />

P<strong>en</strong>sar que con la muerte del cuerpo material todo acabo es un gran error, fruto<br />

de ceguedad interior y de ignorancia. Morir es nacer <strong>en</strong> otros planetas con un nuevo cuerpo;<br />

es realizar nuevas formas de vida ya pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> vosotros pot<strong>en</strong>cialm<strong>en</strong>te. Nacer<br />

<strong>en</strong> nuevos mundos es realizar una conci<strong>en</strong>cia más evolucionada, ser más felices con<br />

un conocimi<strong>en</strong>to mayor y con mayor posibilidad de vida".<br />

"Jesús puso <strong>en</strong> guardia a los hombres de la Tierra para que no matas<strong>en</strong> al Amor <strong>en</strong> su<br />

corazón con la soberbia y con la hipocresia de su m<strong>en</strong>te; porque esto significa retroceder<br />

hasta el punto de no poder nacer <strong>en</strong> planetas más evolucionados, sino con el riesgo<br />

de <strong>en</strong>contrarse <strong>en</strong> situaciones tan involucionadas que se pued<strong>en</strong> comparar al estado<br />

de muerte. El dolor del Padre por estos hijos que se pierd<strong>en</strong> es tan grande que ellos<br />

lo si<strong>en</strong>t<strong>en</strong>, y su sufrimi<strong>en</strong>to aum<strong>en</strong>ta con la imposiblidad de su voluntad para salir del cepo<br />

del mal que les aprisiona. Para algunos hermanos obstinados que hac<strong>en</strong> cosas tan<br />

absurdas <strong>en</strong> perjuicio propio y de los hermanos, convirti<strong>en</strong>dose <strong>en</strong> verdaderos demonios,<br />

¿ cómo no hablar de muerte ?. Siempre hay esperanza y salvación, pero no es justo<br />

aprovecharse de la libertad y de la magnánima bondad de un Padre tan adorable. Esto<br />

puede costar un gran sufrimi<strong>en</strong>to, porque El es también justo. ¡ Ay de nosotros si no fuese<br />

así !".<br />

Se hizo un sil<strong>en</strong>cio que me pareció una amonestación. El sol estaba ya traspuesto y las<br />

montañas se habían coloreado de un azul oscuro. El valle mostraba una dim<strong>en</strong>sión más<br />

íntima.<br />

Rafael dijo que era hora de marchar, pero nos prometió también que pronto nos<br />

<strong>en</strong>contraríamos otra vez.<br />

"Todavía t<strong>en</strong>emos que deciros muchas cosas", dijo. La tarde avanzaba hacia el crepúsculo<br />

sobre todo el paisaje.<br />

Nos saludamos como viejos amigos disgustados por t<strong>en</strong>erse que dejar.<br />

Rafael nos invitó a que nos alejáramos unas dec<strong>en</strong>as de metros. Vimos abrirse la puertecilla<br />

del disco y una luz blanquísima salió de él iluminando la vegetación circundante. Entraron<br />

todos saludando afablem<strong>en</strong>te con la mano. Luego la puertecilla se cerró sil<strong>en</strong>ciosam<strong>en</strong>te, y<br />

el disco se elevó de rep<strong>en</strong>te a una velocidad increible. Poco después desapareció. La hierba<br />

del prado había quedado aplastada y era levem<strong>en</strong>te acariciada por el vi<strong>en</strong>to.<br />

ANGELES EN ASTRONAVE 40<br />

www.angeles-luz.es

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!