Núm. 102-107 - Fábrica Nacional de Moneda y Timbre
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Fuera <strong>de</strong>l Cusco -ciudad <strong>de</strong>nsamente poblada- y algunas pocas ciuda<strong>de</strong>s,<br />
el pueblo <strong>de</strong>l Imperio vivia <strong>de</strong>sparramado, como correspondía a un pueblo agricul-<br />
tor, en numerosísimos pueblos y caseríos, con tierras <strong>de</strong> cultivo aledañas.<br />
El sistema social incaico estaba inspirado en un sentimiento <strong>de</strong> adoración al<br />
Sol, <strong>de</strong> don<strong>de</strong> los incas, «Hijos <strong>de</strong>l Sol)), venían a ser por <strong>de</strong>recho los dueños <strong>de</strong> la<br />
Tierra. En la práctica, la orgariizaci0n <strong>de</strong> la propiedad agraria radicaba en la Co-<br />
munidad <strong>de</strong> al<strong>de</strong>a o aAyllus U), estando las tierras repartidas en porciones para el<br />
.4yIlu, para el Inca y para el Sol.<br />
El Ayllu repartía por sorteo parcelas a todas las familias (puric o jefe <strong>de</strong> fa-<br />
niilia), reservánclose algunas para las necesida<strong>de</strong>s comunes, para socorrer viejos y<br />
enfermos, etc. Los sorteos o adjudicaciones -por ((Tupus)) (2)- eran anuales, según<br />
Acosta, Cobo, Santillana, Garcilaso; lo que se explica por la práctica <strong>de</strong> <strong>de</strong>jar<br />
terrenos en barbeclio. Los lotes adjudicados a una misma familia podían ser juntos<br />
o separados liasta alcanzar la superficie que se le adjudicaba. Cada familia -los<br />
hijos trabajaban con y para el padre- labra para sí su respectiva parcela, reservándose<br />
para el I-iogar doméstico todos los frutos: usufructo familiar precario.<br />
Se les daba los frutos <strong>de</strong> la tierra, pero se les negaba la propiedad <strong>de</strong>l suelo. Las<br />
casas anexas no entraban en los sorteos anuales, y se reputaban propiedad particular<br />
e indivisible <strong>de</strong> la familia, así como los animales domésticos pequeños (cuyes),<br />
utensilios caseros, herramientas, etc.<br />
Faenas comunes o (cmingaa eran obligatorias; los componentes <strong>de</strong>l Ayllu estaban<br />
obligados a prestar sil servicio pcrsonal en las obras <strong>de</strong> bien común: obras <strong>de</strong> riego,<br />
caminos, an<strong>de</strong>nes, así como en las tierras <strong>de</strong> miembros ausentes <strong>de</strong>l Ayllu; éste es<br />
uno <strong>de</strong> los principales niotivos <strong>de</strong> la propiedad colectiva: el Ayllu representa un<br />
cuerpo solidario para las labores, tributo y servicio militar.<br />
Al lado <strong>de</strong> las tierras <strong>de</strong> cultivo repartidas por sorteo entre los ((puric,) miembros<br />
<strong>de</strong> la Comunidad, existían también tierras <strong>de</strong>dicadas al Curaca local, con trabajo<br />
obligatorio <strong>de</strong> los comuneros y también trabajadas por (cyanacunas)) (3) o esclavos<br />
personales <strong>de</strong>l Curaca, pues éstos, al igual que la nobleza incaica (incas <strong>de</strong> sangre o<br />
<strong>de</strong> privilegio), podían tener esclavos, mujeres a su servicio y objetos suntuarios<br />
(1) Aparte <strong>de</strong> la familia, r6lula social <strong>de</strong>l Imperio, la unidad orghnica <strong>de</strong>l Tawantisuyo era el Ayllu,<br />
que no viene a ser m85 qiir la propagaciún y expansión <strong>de</strong> la organización familiar. El Ayllu, espontánea-<br />
mente formado -antes <strong>de</strong> los incas- en la sierra central peruana, por la necesidad <strong>de</strong> convivir en las áreas<br />
pr6xinias a los cultivos, era autónotno, local y regido por la costumbre. Estaba constituido por grupos <strong>de</strong><br />
familias que se consi<strong>de</strong>raban emparcntadas entre sl y tlcscendicntes <strong>de</strong> un antecesor común, con territorio<br />
propio don<strong>de</strong> residían, con tierras <strong>de</strong> labor cultivadas en conjunto, con dioses y huacas propias y con par-<br />
ticulares fiestas rrli@oso-faniiliarcs. Econóinicamente el Ayllu cubrid sus necesida<strong>de</strong>s, sin necesitar inter-<br />
cambios con los A>llus vecinoi; eran autosuflrirntes para subsistir, constituyendo una unidad económica<br />
territorial.<br />
(2) Un topo o rtupun, era entregado a cada pareja casada; un topo adicional se les entregaba por<br />
cada Iiijo y medio topo por cada hija. Se tien<strong>de</strong> a dar así solución al problema <strong>de</strong> la relación hombre-tierra.<br />
Ganancia <strong>de</strong> nuevas tierras <strong>de</strong> cultivo o <strong>de</strong>splazamiento <strong>de</strong> habitantes (mitimaes), tratan <strong>de</strong> resolver esta<br />
ecuaciún, cuando la población local aumenta. El atupur era una superficie variable (L. Baudin), <strong>de</strong> alli la<br />
gran variedad <strong>de</strong> extensiún que los cronistas atribuyen a esta medida; estaba constituida en realidad por<br />
la cantidad <strong>de</strong> tierra necesaria para el mantenimiento <strong>de</strong> un matrimonio sin hijos, y esto era variable según<br />
la región, naturaleza <strong>de</strong>l suelo, cultivos, etc.<br />
(3) Los eyanacunasr, sirvientes perpetuos o tdom6sticos hereditarios* (Cieza), eran verda<strong>de</strong>ros escla-<br />
vos, propiedad directa drl amo; no pertenecían a ningún organismo local, no siendo así consi<strong>de</strong>rados como<br />
tributarios <strong>de</strong>l Imperio.