Núm. 102-107 - Fábrica Nacional de Moneda y Timbre

J A I M E L L U I S 1' N A V A S
los documentos valencianos y sardos que reproducen literalmente la legislación
barcelonesa, interesa contraponer un documento sobre la ceca de Monpeller que
publicamos con el numero 10 de nuestro apéndice.
Probablemente la extensión a Monpeller del sistema legal catalán, se veria
influida por ser el sistema conocido del Rey, y porque los privilegios de los mone-
deros peninsulares serían un incentivo para que los de Monpeller solicitaran igual
trato: era un ejemplo de hasta dónde se podía llegar e incluso un argumento
para posibles reivindicaciones en nombre de la justicia igualitaria (sin que sea
éste el momento para medir el verdadero alcance de los imperativos de la jus-
ticia (1).
El documento que nos ocupa es más breve que los de Valencia y Cerdeña.
Es decir, no extiende en todos sus detalles el sistema catalán, pero si coincide
con el mismo en muchos puntos esenciales.
Se dirigía a los acuñadores de moneda millarense y establecia que en caso de
que ((aliquis vestrum aliquam falsificatem corniteret in facto dicte monete ... quod
vos simil cum magistro ... puniatis et possitis peonire illum quod dictum comiserit
falsitatemo. Asimismo les otorgaba diversos privilegios en materia de exigencia
de deudas, reconociéndoles el derecho de huelga si el maestre intentaba vulnerar
sus derechos (todo ello implica unos privilegios de protección de los intereses per-
sonales de los monederos, sin duda en atención a los servicios que prestaban a
la Corona). También les excluia de las obligaciones de (tire in exercitu val caval-
catam)) y de pago de lezda. Asimismo aparece el derecho a que sólo se empleen en
la monedería a los (mepotes et filios vestros et filios sororum vestrarum)).
Es decir, aunque no se trate de una extensión general del derecho peninsular
a la lejana Rlonpeller, la relación entre este privilegio y el sistema desarrollado
en la Peninsula es demasiado evidente para que no pensemos en la influencia del
uno sobre el otro.
V. EL REINO DE MALLORCA
Señala Luisa Simón (2) que el sistema monetario propio de Mallorca surge con
los reyes autóctonos, pues la moneda anterior es valenciana. Ahora bien, en las
propias Baleares, por la diferencia de valor, desde 1300 se apreciaba más el real
valenciano que el isleño, intentando Pedro IV, aunque sin conseguirlo, igualar
el real mallorquín al barcelonés, y procediendo en todo caso a rebajar la talla del
menut balear; si bien Alfonso V, que hizo muchas emisiones en Mallorca, logró
(1 Tratamos de esta cuestibn en nuestro trabajo Las bases de la sociedad y el problema social, Barcelona,
1964, phg. 125 y siguientes.
(2) MAR~A LUISA SIMÓN CIANCAS: Aporiacidn a la numismática mallorquina. eNumario HispBsico#,
niimero 6 (1954), phg. 211.