Inaugura Medicina el mejor centro de enseñanza en AL - UNAM

Entre los grandes violonchelistas
que han tocado y grabado
las Seis suites para
violonchelo solo, de Bach, el
holandés Pieter Wispelwey ocupa
un lugar privilegiado en virtud
de la técnica impecable y la
enorme musicalidad que ha impartido
a estas singulares obras.
En esta ocasión, la Dirección
General de Música de la UNAM
ofrece la posibilidad de escucharlas
en un concierto que
tendrá lugar el miércoles 5 de
octubre, a las 19 horas, en la
Sala Nezahualcóyotl del Centro
Cultural Universitario.
Originario de Haarlem, Holanda,
Pieter Wispelwey es capaz
de interpretar el repertorio
barroco del violonchelo y el
moderno con la misma habilidad.
Esto le permite ejecutar
obras de compositores que van
desde Johann Sebastian Bach
hasta Elliott Carter. Su activa
carrera de solista y recitalista lo
ha llevado a actuar en importantes
escenarios de Amsterdam,
Londres, París, Buenos Aires,
Los Ángeles, Nueva York y
México, entre otras ciudades.
La discografía de Pieter Wispelwey
consta de más de 20
grabaciones, seis de las cuales
han obtenido importantes premios
internacionales. Entre sus
más recientes lanzamientos destacan
un disco con Dejan Lazic
que contiene sonatas de Britten
y Prokofiev, uno que incluye
Cántico del Sol, Preludios e In
croce, de Sofía Gubaidulina, y
la obra completa para violonchelo
y piano de Beethoven,
también con Dejan Lazic. Pieter
Wispelwey utiliza un violonchelo
de Giovanni Battista Guadagnini,
fechado en 1760.
Las obras más importantes
Las Seis suites para violonchelo
solo, de Bach, datan del periodo
en que el músico pasó al servicio
del príncipe Leopoldo de
Köthen como su kapellmeister
(1717 a 1723). Durante ese
tiempo –uno de los más productivos
de su vida en el campo de
Las Seis suites para
violonchelo solo, de
Bach, con Wispelwey
El músico holandés interpreta estas singulares
obras con técnica impecable y enorme
musicalidad
Foto: DC.
la música instrumental y orquestal–
compuso las sonatas para flauta y
violín, los conciertos para violín, las
sonatas y partitas para violín solo y
suites para violonchelo solo.
Mientras algunos predecesores
de Bach ya habían compuesto obras
para violín solo (entre ellos Biber,
Walther y Westhoff), las Seis
suites... son las primeras de su
tipo compuestas en Alemania. A la
fecha sirven de parámetro indiscutible
frente al cual se comparan
todas las obras similares compuestas
en fechas posteriores.
No hay datos fidedignos
sobre la posible presencia de un
virtuoso en particular a quien
estas suites hubieran podido ser
dedicadas. Sin embargo la calidad
y dificultad de la música parecen
indicar que el nivel de
ejecución del violonchelo en tiempos
de Bach era alto, a menos
que el compositor hubiera concebido
estas hermosas suites en
un plano puramente especulativo
y teórico.
Las Seis suites... tienen una
estructura similar, ya que todas
constan de un preludio y una
secuencia de cinco danzas
estilizadas, sin embargo, la sexta
debe ser adaptada al violonchelo
moderno, ya que Bach la concibió
para un instrumento de cinco
cuerdas que hoy es obsoleto.
Hasta la fecha, los musicólogos
especulan sobre la verdadera
naturaleza de este misterioso
instrumento; mientras algunos
afirman que se trataba de la llamada
viola pomposa, otros dicen
que la sexta suite fue concebida
para un violonchelo piccolo,
y otros más suponen que se trató
simplemente de un violonchelo
especial al que se había añadido
una quinta cuerda para ampliar
su rango y resolver ciertas dificultades
técnicas. De cualquier
forma, las Seis suites... son, hoy
día, las obras más importantes
de su género. Pocos son los
violonchelistas que en la actualidad
se atreven a presentar el
ciclo completo en un solo recital.
Los boletos para el concierto
tienen un costo de 300 y 200
pesos; están disponibles en las
taquillas de la sala, con 50 por
ciento de descuento para profesores
y estudiantes en general;
trabajadores de la UNAM y jubilados
del ISSSTE, IMSS e Inapam
con credencial actualizada.
26 de septiembre de 2005
DC
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