Vigilia de Adoración-Símbolo del Santuario: Luz ... - Liga Familias

Liga de Familias
Vigilia de Adoración
Símbolo: Luz Perpetua del Sagrario
Grupo 35 ‐ 13 Junio 2012
Luz perpetua del sagrario
En esta noche nos acercamos a este Santuario a descansar en Jesús, a disfrutar de su presencia real y
cercana. Es el Dios vivo que sale a nuestro encuentro para que podamos adorarle, rezarle, cantarle y
estar con Él durante la siguiente hora.
Como hilo conductor de esta adoración utilizaremos la luz perpetua del sagrario, escucharemos
partes de la biblia, cantos y textos que nos motivaran a encontrarnos con Cristo desde una
perspectiva quizás nueva. Os invitamos a empezar esta adoración con la exposición del Santísimo.
Señor,
Venimos a tu presencia después de nuestra larga jornada de trabajo.
Queremos estar siempre como esa luz que te acompaña, cerca de Ti, constantes, siempre ahí. Para
eso te pedimos ayuda, te pedimos que nos ayudes a no alejarnos de Ti, que sepamos seguir el
ejemplo de María que nunca te abandonó y te siguió hasta el pie de la Cruz. Debemos aprender a
descubrir que Tú siempre estás a nuestro lado y que tenemos que permanecer con el corazón abierto
a Ti.
También necesitamos que nos enseñes a ser humildes, a pasar inadvertidos a tu lado para que Tú
destaques en nuestras vidas, como la luz del Sagrario, cuya presencia “prudente” te deja a Ti el
protagonismo. Necesitamos aprender a hacer lo mismo, como lo hizo María.
Esa luz, debería ser el ejemplo de nuestra fe, que nunca debería apagarse. Tu presencia y cercanía es
la que la hace permanecer encendida. Ayúdanos a alimentar nuestra fe acercándonos a Ti,
especialmente en los momentos de debilidad. Señor, auméntanos la fe.
Y esa luz da testimonio, un testimonio sencillo, pero siempre nos indica que Tú estás presente, que
no nos has abandonado. Necesitamos ser luz del mundo, necesitamos poder contarle al mundo que
Tú estás presente en nuestras vidas. Cuando María llegó a visitar a Isabel, Isabel vio la luz en su
rostro. Haz que nuestros rostros sean la luz que testimonia que Tú estás en nuestro interior, que
sean radiantes como la luz del Sagrario.
Esto es lo que con nuestra pobreza, venimos a pedirte hoy: constancia, humildad, fe y ayuda para ser
testigos tuyos.

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Símbolo: Luz Perpetua del Sagrario
Grupo 35 ‐ 13 Junio 2012
¿Cómo estoy en relación a mi constancia, humildad y fe?
¿En qué tengo que mejorar para ser testigo de Cristo en el mundo?
La Biblia tiene pasajes que nos ayudan a entender la luz desde distintas perspectivas
Es por ejemplo en el Apocalipsis, donde la Luz se nos presenta como alegoría de la nueva Jerusalén,
la tierra nueva que como cristianos debemos fundar.
“Y la Ciudad no necesita la luz del sol ni de la luna, ya que la gloria de Dios la ilumina, y su lámpara es
el Cordero.
Las naciones caminarán a su luz y los reyes de la tierra le ofrecerán sus tesoros.
Sus puertas no se cerrarán durante el día y no existirá la noche en ella.”
“El pueblo que se hallaba en tinieblas vio una gran luz; sobre los que vivían en las oscuras regiones de
la muerte, se levantó una luz”
La fe es luz, como la lámpara del sagrario. Cristo es luz en nuestra vida, luz en nuestra
inteligencia, luz que ilumina nuestro camino.
La fe no es "ciega". Para el que es ciego, la confianza en quien le lleva de la mano no es la
causa de su ceguera, sino el remedio. La fe no ciega, es luz, es luminosa.
La fe no es una venda que nos tapa los ojos. Al contrario, la fe nos ayuda a "ver" lo que no
podemos ver sólo con los ojos.
¿Qué cosas o qué prácticas me ayudan a aumentar mi cercanía a Dios?
¿Cómo puedo proponerme mejorar estos aspectos para que el Espíritu Santo aumente mi
fe?

El beato Juan Pablo II nos dijo:
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Símbolo: Luz Perpetua del Sagrario
Grupo 35 ‐ 13 Junio 2012
"Vosotros sois la luz del mundo....". Para todos aquellos que al principio escucharon a Jesús, al igual
que para nosotros, el símbolo de la luz evoca el deseo de verdad y la sed de llegar a la plenitud del
conocimiento que están impresos en lo más íntimo de cada ser humano.
Cuando la luz va menguando o desaparece completamente, ya no se consigue distinguir la realidad
que nos rodea. En el corazón de la noche podemos sentir temor e inseguridad, esperando sólo con
impaciencia la llegada de la luz de la aurora. Queridos jóvenes, ¡a vosotros os corresponde ser los
centinela de la mañana (cf. Is 21, 11‐12) que anuncian la llegada del sol que es Cristo resucitado!
La luz de la cual Jesús nos habla en el Evangelio es la de la fe, don gratuito de Dios, que viene a
iluminar el corazón y a dar claridad a la inteligencia: "Pues el mismo Dios que dijo: 'De las tinieblas
brille la luz', ha hecho brillar la luz en nuestros corazones, para irradiar el conocimiento de la gloria de
Dios que está en la faz de Cristo" (2 Co 4, 6). Por eso adquieren un relieve especial las palabras de
Jesús cuando explica su identidad y su misión: "Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará
en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida" (Jn 8, 12).
No lo olvidéis: ¡"No se enciende una lámpara para ponerla debajo del celemín" (cf. Mt 5,15).
¿Cómo puedo ser luz en el mundo? en mi mundo mas cercano, mi trabajo, familia etc…
¿Dejo humildemente que la Mater actúe sobre mí con su Gracia del envío apostólico?
Al costado del retablo del santuario arde una pequeña llama. Es símbolo de nuestra fe y de nuestro
amor ardiente. Da testimonio de la presencia del Señor sacramentado en el tabernáculo, como
amigo y alimento, silencioso y cercano, en toda circunstancia. La llama
está contenida dentro de una esfera que representa el mundo, expresando con ello que queremos
encender el mundo en Cristo y no sólo guardar su luz en nuestro corazón

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Símbolo: Luz Perpetua del Sagrario
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Fijémonos en el vaso de cristal rojo que protege la luz y nos trasluce sus destellos. Es de cristal, y para
hacer su función debe estar limpio y dejar pasar tanta Luz de Cristo como sea posible. Nos podemos
asemejar a ese vaso cada uno de nosotros. Cuanto más limpios estemos, esto es, limpios de corazón,
de costumbres, de pensamientos, de obras, etc, mejor podremos ser transmisores de la Luz de Cristo
a los demás.
Las misioneras y misioneros de la Caridad rezan a diario una oración que expresa exactamente esto y
que os invitamos a rezar todos en voz alta.
Amado Señor,
Ayúdame a esparcir tu fragancia donde quiera que vaya.
Inunda mi alma de espíritu y vida.
Penetra y posee todo mi ser hasta tal punto que toda mi vida solo sea una emanación de la tuya.
Brilla a través de mí, y mora en mi de tal manera que todas las almas que entren en contacto
conmigo puedan sentir tu presencia en mi alma.
Haz que me miren y ya no me vean a mí sino solamente a ti, oh Señor.
Quédate conmigo y entonces comenzaré a brillar como brillas Tú; a brillar para servir de luz a los
demás a través de mí.
La luz, oh Señor, irradiará toda de Ti; no de mí; serás Tu, quien ilumine a los demás a través de mí.
Permíteme pues alabarte de la manera que más te gusta, brillando para quienes me rodean.
Haz que predique sin predicar, no con palabras sino con mi ejemplo, por la fuerza contagiosa, por la
influencia de lo que hago, por la evidente plenitud del amor que te tiene mi corazón. Amén.
Recemos cada uno, en voz baja, otra vez esta oración de forma personal a Dios. Ya que:
Reza, espera y no te preocupes. La preocupación es inútil.
Dios es misericordioso y escuchará nuestra oración.
La oración es la mejor arma que tenemos, es la llave al corazón de Dios.
Debemos hablar a Jesús no solo con los labios, sino con el corazón.
En realidad en algunas ocasiones debemos hablarle solo con el corazón.

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Símbolo: Luz Perpetua del Sagrario
Grupo 35 ‐ 13 Junio 2012
El Padre Kentenich desde el campo de concentración de Dachau, en medio de una terrible epidemia
de tifus en el invierno de 1943, cuando los prisioneros mueren a centenares, escribió esta oración
llamada cantico al terruño.
¿ Conoces aquella tierra abundante y pura,
reflejo de la Belleza eterna:
donde las almas nobles y fuertes
se desposan con el Cordero de Dios;
donde ojos transparentes irradian calor
y manos bondadosas alivian los dolores;
donde esas manos sin mancha
continuamente se juntan en oración
para conjurar los poderes demoniacos?
Yo conozco esa maravillosa tierra:
es la pradera asoleada
con los resplandores del Tabor,
donde reina nuestra Señora tres veces Admirable
en la porción de sus hijos escogidos,
donde retribuye fielmente los dones de amor
manifestando su gloria
y regalando una fecundidad ilimitada.
¡ Es mi terruño, es mi tierra de Schoenstatt!

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Símbolo: Luz Perpetua del Sagrario
Grupo 35 ‐ 13 Junio 2012
Desde lo más oscuro de la noche de Dachau el P Kentenich fue capaz de ser luz de Cristo para los
demás presos.
Entreguemos a la Mater todos los anhelos, inquietudes y propósitos que tengamos en nuestro
corazón aquí en el Santuario de Schoenstatt. Imploremos de ella la Gracia de la transformación
interior, para poder convertirnos poco a poco en reflejos de la belleza eterna.
Os invitamos a que el que quiera se acerque en silencio al altar y dejando una vela encendida
simbolice el anhelo y compromiso de ser pequeñas luces de Cristo en el mundo.