guía de trabajo para la planeación - Vicaría de Pastoral

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Índice
Introducción 1
I. Pastoral de Conjunto 4
II. Organización 5
III. Planeación pastoral 7
IV. Evaluación 8
V. Misión permanente 9
VI. Formación de ministros ordenados 10
VII. Diáconos permanentes 12
VIII. Formación de laicos 13
IX. Pastoral profética 15
X. Pastoral litúrgica. Piedad Popular 17
XI. Pastoral socio caritativa 19
XII. Pastoral juvenil. Misión juvenil 21
XIII. Pastoral familiar 23
XIV. Comunicación 25
XV. Generalidades 26

Introducción
Un significativo número de agentes de pastoral de la Arquidiócesis hemos
venido participando en la evaluación del año 2012, a partir de la XVII
Asamblea Diocesana. Mediante las actividades que para este fin se
realizaron (foros, consultas, estudio, diálogo, reflexión), se han venido
expresando algunas constantes que forman parte importante de lo
cotidiano de nuestro quehacer pastoral, de las características de nuestra
condición como discípulos y misioneros, y de la percepción que tenemos
acerca de las situaciones culturales, intra y extraeclesiales, en las que
debemos desempeñar nuestra misión evangelizadora.
En cada uno de los momentos de la secuencia de esta evaluación se ha
tenido la compilación correspondiente, de tal manera que los resultados
pudieran valorarse suficientemente. En dichos resultados no se ha
encontrado algo muy diferente a lo que en otras ocasiones similares ya se
había visto, pero sí se ha llegado a identificar la propia realidad con un
buen nivel de objetividad y, así se ha tomado conciencia del grado en que
se encuentran tales o cuales avances, así como de las carencias que los
están frenando.
El material suficientemente codificado resultante de cada una de las
etapas de evaluación, está a disposición en la página web de la Vicaría de
Pastoral, con la posibilidad de ser consultado.
En este folleto se han recopilado las propuestas que se sometieron a
consideración de los participantes en la XVIII Asamblea, mismas que se
habían tomado fundamentalmente, como se dijo arriba, del conjunto del
proceso de evaluación y que en esta ocasión se presentaron para ser
sancionadas por la Asamblea en la medida que los participantes lo
juzgaran conveniente. También se intentó que la Asamblea jerarquizara la
importancia de tales propuestas, pero el resultado de esta valoración no
fue necesario detallarlo ya que prácticamente todas la propuestas fueron
aceptadas con un alto grado de calificación.
1

Desde que a la Asamblea se le presentaron las propuestas en forma de
líneas de acción y de metas con las cuales se pudieran llevar a efecto
tales líneas, se tenía ya un criterio preponderantemente operativo y, por
eso, se eliminaron otros elementos, como las carencias o debilidades, que
ya se habían considerado en otros momentos.
Ese criterio de operatividad se quiere tener ahora al estructurar
sintéticamente los resultados de la Asamblea en este folleto, ya no por los
cuatro ejes temáticos del Sínodo, sino en catorce temas, que pretenden
cubrir la mayor parte de los ámbitos en los que se desarrolla
habitualmente la vida de los agentes y el quehacer de las estructuras
pastorales. Es necesario advertir que hablar de resultados de la
Asamblea, es una forma de decir, porque ahora más que otras veces
detrás de todas esas reflexiones están otros muchos más agentes de
pastoral que participaron a lo largo del proceso de consulta y evaluación
antes de la Asamblea.
La síntesis de resultados que ahora se entrega a la comunidad
arquidiocesana, especialmente a quienes dentro de ella tienen el servicio
de conducción y de animación pastoral, tiene la intención de ser un
instrumento para la elaboración, el seguimiento y la evaluación de los
planes pastorales y, más aún, para la instrumentación de programas.
Lo aquí expresado resulta ser un muy buen marco de referencia para lo
que deben hacer las instancias claves de la pastoral en la Arquidiócesis:
las parroquias, los decanatos y las vicarías territoriales. También son
indicadores de lo que deben hacer algunas comisiones diocesanas y de
vicaría para cumplir su cometido de ser subsidiarias por medio de la
animación y las propuestas en relación con las mencionadas instancias,
es por eso que se le ha llamado “Guía de trabajo…”
En esta línea, es necesario que nos esforcemos en dar la debida
importancia al conjunto de indicaciones que nos vienen de la evaluación,
ya que es fruto de una participación eminentemente comunitaria y, por lo
mismo, esto le dará coherencia a nuestro trabajo pastoral y será una
experiencia de aprendizaje en la evaluación misma.
2

El contenido está presentado en dos columnas: la primera –del lado
izquierdo– se refiere a los ámbitos territoriales: Vicarías, Decanatos y
Parroquias, en algunos casos en relación con ciertas instancias
diocesanas; la segunda –en un recuadro–, está destinada a los
Organismos Diocesanos: Vicarías funcionales, Secretariados y
Comisiones Arquidiocesanas.
Pidamos al Señor, Buen Pastor, que nos conduzca por el camino que nos
haga sus fieles discípulos-misioneros al servicio de la Nueva
Evangelización en la Ciudad.
México, D. F. a 21 de Diciembre de 2012.
3
La Vicaría de Pastoral

I. Pastoral de conjunto
Promover el sentido de comunión en nuestra Iglesia Diocesana por medio de
una pastoral orgánica y de conjunto de las distintas acciones pastorales al
servicio de la Misión y, fortalecer el sentido de unidad de la Arquidiócesis en
torno al Ministerio episcopal del Señor Cardenal, como signo e instrumento de
comunión, con la plena conciencia de que somos una sola Iglesia.
1. Los señores Obispos auxiliares, como vicarios episcopales
territoriales, mediante el funcionamiento del propio consejo de
pastoral y, particularmente, del servicio del delegado de pastoral,
cuiden de que en los planes de su propia vicaría se apliquen las
orientaciones pastorales del señor Cardenal, adaptándolas a la
peculiaridad de sus propias realidades. Esta será una forma
importante de hacer efectiva la comunión dentro de una pluralidad
pastoral.
2. La vicarías territoriales favorecerán el encuentro con las comisiones
arquidiocesanas, invitándolas a participar en algunas reuniones de
trabajo. Para ello las comisiones se organizarán por grupos
homogéneos, por ejemplo por secretariados, y de esta forma darán a
conocer y promoverán su funcionamiento, ofreciendo servicios de
asesoría y poniendo a disposición subsidios.
3. El consejo de vicaría en sus evaluaciones valore qué tanto estos
criterios, estas líneas de acción y estas metas aquí descritas
encaminadas a fortalecer la pastoral de conjunto, se cumplen en sus
decanatos.
4. En las Parroquias, Decanatos y Vicarias los presbíteros tengan una
actitud de aceptación, respeto y apoyo mutuo con los laicos, evitando
todo clericalismo, dando libertad y acompañamiento, promoviendo la
pastoral de conjunto. Los frutos obtenidos por el cumplimiento de este
compromiso formarán parte de las evaluaciones pastorales.
5. En las Parroquias y Decanatos se anime e impulse la interacción y
complementación de tareas pastorales entre pastores y laicos en una
actitud de corresponsabilidad, para que la evangelización sea más
sólida y mediante ello también se dé un testimonio de comunión.
6. Que los Consejos de pastoral: arquidiocesano, vicariales, decanales y
parroquiales, promuevan programas de acción pastoral que integren
las distintas dimensiones de la acción de la Iglesia al servicio del
Reino de Dios.
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II. Organización
Revisar la organización y planeación en cada
una de las vicarías territoriales para que, de
forma efectiva y verificable, esté al servicio de la
Comunión con toda la Arquidiócesis e
igualmente, para que sea instrumento de
comunión para sus decanatos y parroquias.
7. La estructuración de la Vicaría tendrá
como criterio fundamental el que sea
capaz de generar y sostener una relación
orgánica con la Arquidiócesis, así como
con los decanatos y parroquias,
propiciando de esta forma la
corresponsabilidad.
8. Un medio necesario para llevar a efecto la
pastoral orgánica en las vicarías, será el
buen funcionamiento de sus comisiones,
las cuales deberán estar debidamente
relacionadas con sus corresponsales a
nivel diocesano y con los respectivos
decanatos y parroquias, con un criterio de
subsidiariedad.
9. En las Vicarías, Decanatos y Parroquias
asegúrese la representatividad de la vida
consagrada en las instancias de
coordinación y de gobierno para que,
desde su carisma, apoyen y den sus
aportaciones a los proyectos pastorales.
10. En las Vicarías, Decanatos y Parroquias,
téngase una organización pastoral que
propicie la delegación de funciones y la
corresponsabilidad entre todos los agentes
de pastoral.
11. Revisar la organización y funcionamiento
de los decanatos para lograr que, en su
condición de centros de comunión y
participación en el ámbito que les
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Organismos Diocesanos
OD1. La Vicaría de
Laicos con la ayuda de la
comisión de los
ministerios laicales
identifique en qué campos
de la pastoral conviene la
institución de los
ministerios laicales como
expresión de crecimiento
personal y comunitario y,
así, las comisiones a las
que les corresponda den
los pasos conducentes.
OD2. La Vicaría para la
vida consagrada, con la
ayuda de un equipo de
religiosos en coordinación
con la Vicaría de Pastoral,
haga llegar sugerencias a
las parroquias en las que
haya casas e institutos de
religiosas, sobre las áreas
de pastoral en que las
religiosas podrían
participar.
OD3. La Vicaría para la
Vida Consagrada
organice encuentros con
las Vicarías y Decanatos
para dar a conocer los
diferentes carismas que
hay en nuestra
Arquidiócesis e informar
de sus actividades, su
quehacer misionero y su
quehacer apostólico.

corresponde, sean la unidad operativa del
plan pastoral arquidiocesano,
particularmente mediante el apoyo entre
las parroquias para la formación de
agentes y para llevar a cabo algunos
programas comunes de pastoral; de esta
forma serán un espacio muy propicio para
la puesta en común de experiencias
pastorales.
12. Para apoyar la atención debida a cada uno
de los sectores de agentes que lo integran,
además de las reuniones de trabajo
necesarias para el cumplimiento de las
metas anteriores, en el decanato se
deberán organizar encuentros particulares
de presbíteros, religiosas y laicos. Por
OD4. El vicario episcopal
de pastoral integre
formalmente al Consejo
Pastoral Arquidiocesano
“una Comisión Técnica de
Estudios de Pastoral
Urbana”, que ofrezca
asesorías y propuestas
como resultado de sus
investigaciones propias,
tomando en cuenta
también las de otros
organismos similares
competentes en la
materia.
tanto, cuidar de que, dentro de esa variedad de Organismos reuniones, no falten
las de los solos presbíteros que les favorezcan Diocesanosmateria.
su mutua integración
y, si es necesario, el tratamiento de asuntos propios.
13. En los Decanatos y Parroquias promover un espíritu de
corresponsabilidad y comunión entre Presbíteros y Laicos propiciando
espacios de participación, asignando tareas de acuerdo a sus
carismas y aptitudes, en una Iglesia donde todos vivan de manera
responsable su compromiso cristiano. Conviene revisar entre los
servicios y cargos en estos niveles (Decanatos y Vicarías), cuántos
están en manos de laicos.
14. Que con la organización de los sectores y la vida de las comunidades
menores, la parroquia lleve a cabo obras testimoniales y de
convivencia o culturales para crear cercanía con el resto de la
comunidad.
15. El Consejo de Pastoral Parroquial programará acciones de
sensibilización para todos los involucrados en la evangelización
(agentes de pastoral, grupos, movimientos) sobre la importancia del
cambio de actitud, de testimonio, de tolerancia y de aceptación de
todos aquellos que en alguna forma son o piensen diferente. En
donde el dialogo sea el camino para el acercamiento con los no
creyentes, respetando sus derechos.
6

III. Planeación pastoral
16. El Consejo Pastoral de Vicaría, bajo la
dirección inmediata del Vicario Episcopal,
y con la participación de las personas que
éste juzgue necesarias, en primer lugar del
delegado de pastoral, elabore el plan que
responda a las situaciones propias de la
vicaría, tanto de índole social como
eclesiástico, y al mismo tiempo, sea
expresión de las orientaciones pastorales
del señor Cardenal. Hecho el plan
pastoral, requerirá una revisión y
evaluación periódica, al menos anual.
17. El plan pastoral del decanato expresará
con claridad las acciones y demás
implicaciones necesarias para ser
aplicación de las orientaciones
arquidiocesanas y del plan de la vicaría.
Con este criterio deberá ser evaluado, por
los mismos responsables de elaborarlo, al
menos una vez al año.
18. En los compromisos del plan pastoral del
decanato deberá haber algunas acciones
que atiendan la pastoral ambiental.
19. Para el presente trienio el plan pastoral del
decanato deberá incluir un programa de
acciones misioneras “al encuentro de las
nuevas generaciones”, para responder a lo
que pide la misión juvenil.
20. El decano y su equipo, con la posible
asesoría de quien se júzgue pertinente,
coordinarán la elaboración del plan
pastoral del decanato, con la participación
de los presbíteros, una representación de
religiosas, si es el caso, y los laicos y
laicas necesarios para que estén
debidamente representadas las
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Organismos Diocesanos
OD5. En todas las instancias
pastorales, el laico sea
tenido muy en cuenta con
un espíritu de comunión y
participación, considerarlos
como animadores,
promotores y
corresponsables en la
elaboración y no sólo en la
ejecución de los planes de
pastoral orgánica.
OD6. La Vicaría para los
Laicos mediante la
Comisión para los
Movimientos y
Organizaciones Laicales
precise la participación de
los movimientos y grupos
laicales, de acuerdo a sus
carismas, para integrarlos
en los proyectos y planes
pastorales.
OD7. La Vicaría para la
Vida Consagrada propicie
encuentros entre las
comunidades religiosas
femeninas con el fin de que
se conozcan y compartan
sus experiencias pastorales,
poniendo énfasis en el
trabajo con jóvenes y
alejados, para incluirlas en
el proceso misionero
arquidiocesano e incidan en
los planes pastorales de los
decanatos y parroquias.

parroquias, así como quienes tienen un cargo a ese nivel.
21. En los Decanatos y Parroquias se favorezca la participación activa y
creativa de los laicos en la elaboración y ejecución de proyectos
pastorales a favor de la comunidad. Esto exige, de parte de los
pastores, una mayor apertura de mentalidad para que valoren y
acojan el ser y el quehacer del laico en la Iglesia, es necesario que el
laico sea tenido muy en cuenta con un espíritu de comunión y
colaboración.
22. El párroco junto con el Consejo de Pastoral Parroquial y el equipo
misionero parroquial realizarán un buen análisis de la realidad
pastoral dentro de la planeación, que ubique de manera clara a los
distintos grupos de alejados de la comunidad y sus características
culturales.
IV. Evaluación
23. Que la cultura de la evaluación se convierta en una práctica ordinaria
en los distintos niveles pastorales de nuestra Arquidiócesis, que
evalúe qué tanto estamos todos al servicio de un mismo proyecto:
hacer presente el Reino de Dios en nuestras distintas realidades.
24. El Consejo Episcopal, Consejo Pastoral Arquidiocesano y la
Coordinación Permanente de Pastoral Arquidiocesana evalúen
periódicamente la marcha de la pastoral orgánica en el conjunto de la
Arquidiócesis.
8

V. Misión permanente
Retomar el Proceso Misionero, con todas sus etapas
definidas en nuestro proceso evangelizador, como
la opción de vida pastoral de nuestra Arquidiócesis
con el espíritu de la Nueva Evangelización.
25. El Vicario de pastoral Arquidiocesano y los
delegados de pastoral tengan la
encomienda para evaluar y corregir las
formas en que sus distintas instancias
están al servicio de la Misión permanente
arquidiocesana.
26. Las vicarías, los decanatos y las
parroquias crearán, revitalizarán o
reestructurarán, según sea el caso, los
equipos misioneros.
27. El párroco, el Consejo de Pastoral
Parroquial y el equipo misionero diseñarán
una cuidadosa sectorización y planearán
el trabajo evangelizador, para realizar el
visiteo y obtener mejores resultados.
28. El párroco, el Consejo de Pastoral
Parroquial y el equipo misionero parroquial
buscarán asesoría en diversos aspectos,
para llegar a los alejados y lograr así un
mejor acompañamiento.
29. Los equipos misioneros parroquiales, a
través de sus visitas, ubicarán, motivarán y
acompañarán a los pobres en su proceso
de conversión personal.
30. Que la organización parroquial dé cabida y
sea un estímulo para que los movimientos
y organizaciones supraparroquiales
participen en la acción pastoral de cada
parroquia en la que se encuentran,
especialmente en los planes de la misión.
31. Que el párroco con el consejo pastoral y el
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Organismos Diocesanos
OD8. La Vicaría de Pastoral
reeditará la Guía para los
equipos misioneros,
enriquecida con
experiencias significativas,
donde se identifique su
naturaleza y finalidad, tanto
vicarial, decanal y
parroquial.
OD9. Que la Comisión de
Pastoral Misionera
ofrezca, mediante cursos y
talleres para capacitar a
facilitadores de vicarías que
a su vez puedan ayudar en
la conformación y formación
de los equipos misioneros
decanales y parroquiales.
OD10. Que se conforme un
equipo propuesto por la
Comisión de Pastoral
Misionera, para revisar y
renovar los subsidios ya
existentes y en su caso
crear otros.
OD11. Que los Consejos
Arquidiocesanos, cuyos
aportes se refieren más
directamente a las acciones
evangelizadoras: Senado
Presbiteral, Consejo
Pastoral y Consejo de
Laicos, a partir de las
orientaciones del Señor
Cardenal, coordinen mejor
la línea de sus consultas
para que todas repercutan
de forma explícita en la
Misión Permanente.

equipo misionero procuren el cultivo de las
comunidades menores, para que ellas,
sostenidas por la reflexión catequética y
expresiones de pastoral socio-caritativa,
sean medio de presencia evangelizadora
en sus propios ambientes.
32. El Consejo de Pastoral Parroquial
programará, tanto en la sede parroquial
como en los espacios de los sectores,
eventos culturales, talleres, actividades
diversas y otras, en diferentes momentos
del año, con el fin de atraer a los alejados,
permitiendo que se sientan incluidos en la
comunidad.
VI. Formación de ministros
ordenados
Favorecer la formación permanente de los ministros
ordenados, para que las acciones pastorales que
realicen respondan a las necesidades de las
comunidades a las que acompañan.
33. Los encargados del clero de cada Vicaría
con el apoyo del Obispo organicen
ejercicios espirituales, con un enfoque de
espiritualidad tal que los renueve en su
entrega permanente y con la mística de la
encarnación, del testimonio y del dialogo
con la cultura.
34. En las Vicarías, propicien los Obispos la
integración de un equipo de sacerdotes
para promover la unidad y fraternidad
entre los presbíteros que redunde en el
trato cercano con los feligreses,
OD12. La Comisión para los
Organismos y Ministerios
Laicales proponga
programas de articulación
con los diferentes
movimientos y
organizaciones laicales para
que desde su carisma
apoyen en la evangelización
a partir del Proceso
Misionero.
Organismos Diocesanos
OD13. La Vicaría de Pastoral en
colaboración con la Comisión
para el Presbiterio, instrumente
un programa de formación
permanente del clero, en la
vertiente pastoral, para
profundizar la eclesiología del
Concilio Vaticano II y la misión
evangelizadora expresada en
la Evangelii Nuntiandi y en el
documento de Puebla, que son
la base del programa pastoral
del II Sínodo Diocesano, con la
finalidad de actualizar sus
aplicaciones en nuestra Iglesia
local, a la luz de las
orientaciones más recientes de
la Nueva Evangelización.
OD14. Los sacerdotes (obispos,
presbíteros y diáconos)
manifiesten su disponibilidad
como pastores, y no como
simples administradores.
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especialmente con los agentes de
pastoral.
35. En la vicarías se programen cursos de
actualización para sacerdotes y diáconos,
que profundicen en la estructura y
naturaleza de la celebración para que ésta
sea dignamente realizada, espiritualmente
vivida y activamente participada por la
comunidad.
36. El encargado del clero en las Vicarías,
ayudado por otros Sacerdotes, se
mantenga en diálogo con la comisión
arquidiocesana para dar sugerencias
sobre los enfoques y contenidos de
formación y encontrar formas concretas
para aplicar los programas logrados.
Presbiteral con un criterio de
formación que abarque las
dimensiones: humanacomunitaria,espiritualintelectual,
pastoral-misionera;
que les ayude a que,
insertándose en la realidad
social y cultural respondan a
las necesidades pastorales de
esta Arquidiócesis.
OD17. Con el criterio de la meta
anterior, la Comisión para el
Presbiterio elabore los
subsidios necesarios para la
formación y actualización del
presbiterio de la Arquidiócesis.
OD18. El equipo formador en el
Seminario Conciliar garantice
que en el conjunto de la
formación sacerdotal se
11
atienda la importancia de los
programas de formación
pastoral, tanto por el tiempo
que se les asigna como por los
demás elementos que los
integran, de tal manera que
esto contribuya a imprimir en la
personalidad de los candidatos
la profunda huella de Jesús el
buen pastor.
OD19. El equipo formador en el
Seminario asegure que las
experiencias de apostolado
que ya viven los seminaristas
sean más cuidadas, tanto por
la elección de las comunidades
a los que son asignados, como
por la atención que se les dé
mediante una asesoría
especial, en la que participen
conjuntamente los superiores
del seminario y algunos
OD15. Los encargados de la
formación de los sacerdotes
sensibilizarán a éstos través de
retiros y otros encuentros en
todos los niveles, que ayuden
a entender más el sentido de
las aportaciones económicas
que hacen los fieles para los
servicios de la vicaría, del
decanato y de la parroquia.
OD16. La Comisión para el
Presbiterio desarrolle
programas a corto y mediano
plazo para la formación integral
y permanente de los
Sacerdotes, tomando en
cuenta las propuestas de las
Vicarías y las del Senado
presbíteros con
experiencia pastoral.
OD20. El equipo formador
en el Seminario y la
instancia diocesana
conveniente instrumenten
un medio de evaluación
abierta respecto a la vida
y misión del seminario,
por el cual, tanto
sacerdotes como
religiosos, religiosas y
laicos puedan expresar
sus expectativas y
sugerencias. Esto debe
estar pensado de forma
prudente y constructiva de
tal manera, que sirva de
reflexión y estímulo para
los superiores y
seminaristas.

VII. Diáconos permanentes
Favorecer entre los presbíteros un mejor
conocimiento del ser y quehacer del Diaconado
Permanente, de tal manera que sean promotores de
esta vocación y, dado el caso, ayuden a introducirlos
y orientarlos en su inserción pastoral.
37. Las Vicarías, Decanatos y Parroquias
hagan más activa la participación de los
Diáconos Permanentes, evitando
clericalismos y no limitando su apostolado
a aspectos cultuales únicamente, sino más
bien promuevan su servicio en otras áreas
de Pastoral, principalmente en el servicio a
los más necesitados.
38. En las Vicarías se les proporcione a los
diáconos permanentes una formación
humana, espiritual, doctrinal y pastoral con
programas adecuados, que tengan en
cuenta —en el caso de los que están
casados— a la esposa y su familia.
Organismos Diocesanos
OD21. La Comisión para el
Diaconado Permanente
promueva material de
información sobre este
Ministerio para que en los
decanatos se dé a
conocer entre los
Presbíteros, su ser y
quehacer y se generen
más vocaciones, al tiempo
que se aproveche y
oriente mejor su
ministerio.
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VIII. Formación de laicos
Continuar con el proceso de formación indicado en el
Marco General para la Formación de los Agentes de
Pastoral en la Arquidiócesis, poniéndo énfasis en la
etapa de la formación específica, dando importancia a
los CEFALAE’s para unificar criterios de formación y
lograr la pastoral orgánica y de conjunto.
13
39. Que las Vicarías, Decanatos y Parroquias
apoyen una cierta profesionalización de los
agentes laicos, mediante una formación
académica de aquellos que tengan
posibilidades y capacidades, mediante una
asesoría pastoral especial y una formación
espiritual esmerada.
40. Que el responsable vicarial o decanal de la
formación de las secretarias y sacristanes,
además de la capacitación técnica y
humana, incluya el aspecto evangelizador.
41. Que las comisiones vicariales y decanales
se vinculen con sus correspondientes a nivel
diócesis y soliciten de ellas los subsidios
para que sean utilizados en sus distintos
ámbitos de formación de agentes,
especialmente laicos.
42. Que en los Decanatos con apoyo de las
Parroquias, se establezca un fondo
económico para invertir en la formación de
los laicos, de tal manera que estos puedan
participar en cursos profesionales de
acuerdo a las necesidades pastorales de
sus comunidades parroquiales.
43. Cada Decanato consolide el proceso de
formación del Facilitador encomendándolo a
un equipo en relación directa con el equipo
diocesano.
44. Para los centros de formación Decanal, el
Decano apoyado por el CPD establezca un
Organismos Diocesanos
OD22. Las distintas instancias
formativas arquidiocesanas
tengan presente en sus
programas y planes de
estudio la dimensión social
de la fe.
OD23. Las instancias de
formación arquidiocesanas
integrarán en sus planes y
programas de estudio el
tema de los alejados a fin
de sensibilizar a los agentes
sobre esta realidad.
OD24. La Vicaría de Laicos
desarrolle una estrategia
para que obispos, decanos
y párrocos conozcan mejor,
comprendan, valoren y
promuevan los programas
de formación de los laicos.
OD25. La Comisión de
Movimientos Laicales
cuide que éstos,
contemplen en su itinerario
de formación y trabajo
pastoral, los procesos de
inspiración catecumenal.
OD26. La Comisión
Diocesana de Cefalae
procure la utilización de los
medios electrónicos para la
formación “en línea”.
OD27. El equipo de Ediciones
Pastorales proporcione los
subsidios adecuados para la
formación integral y
permanente de los Agentes
en todos los niveles.

equipo que coordine, organice, administre y reúna un grupo de
facilitadores (laicos) capacitados, que apoyen en la formación integral
y permanente de otros agentes de pastoral.
45. El Párroco cuidará de que el personal administrativo parroquial brinde
un servicio adecuado y con buenos modales, evitando todo acto de
discriminación y maltrato a los fieles.
46. Los párrocos y el consejo de pastoral parroquial promoverán y
apoyarán la formación de agentes específicos para que se integren a
los equipos parroquiales de la pastoral socio caritativa.
47. Que los párrocos y los organismos parroquiales procuren la formación
inicial de todos los bautizados, principalmente de sus agentes de
pastoral para que después continuen con la formación básica en los
CEFALAEs.
14

IX. Pastoral profética
Retomar las orientaciones del Directorio Pastoral
para los Sacramentos de Iniciación Cristiana
(DIPSIC), para que siga unificando los criterios en
torno a la Iniciación Cristiana, los Sacramentos del
Bautismo, Confirmación y Eucaristía y, la
Reiniciciación Cristiana; hacer de la catequesis con
adultos el prototipo y modelo para las distintas
formas de catequesis en nuestra Arquidiócesis e
impulsar una catequesis con niños de inspiración
catecumenal que provoque procesos que den
continuidad a la catequesis en otras etapas de la
vida.
48. El animador de Pastoral Profética vicarial,
apoyará y acompañará la creación y
consolidación de los equipos misioneros
Vicarial, Decanal y Parroquial para
organizar momentos de misión intensiva,
tanto en el territorio como en los
ambientes en donde se encuentran
nuestros hermanos alejados.
49. Que las instancias vicariales de pastoral
se comprometan a estudiar y a dar a
conocer las orientaciones del DIPSIC, para
que se vayan asimilando y se reflejen en
sus planes pastorales que desciendan a
las parroquias.
50. El Decano promueva y coordine junto con
el animador de Pastoral Profética que en
las comunidades parroquiales, se dé un
giro a las llamadas pláticas prebautismales
presentándolas como
momentos de encuentro kerigmático.
Además de formar a los “platicadores”
como verdaderos evangelizadores que
conozcan profundamente el conjunto de la
Iniciación Cristiana.
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Organismos Diocesanos
OD28. La Vicaría de Pastoral
organizará cursos y talleres
para que se evalúe el
camino recorrido desde la
aparición del DIPSIC en el
2003 y continué animando
su puesta en práctica.
OD29. El Secretariado de
Pastoral Profética
Arquidiocesano, en
colaboración con las
instancias de formación
arquidiocesanas, elaborarán
un programa de formación
específica sobre el tema de
los alejados que ofrecerán
en cursos, seminarios,
diplomados.
OD30. El Secretariado de
Pastoral Profética apoyará
con sus diferentes
comisiones a realizar
programas que conduzcan a
crear y reforzar la
conciencia de que la
“Animación Bíblica de la
Pastoral” en nuestra
Arquidiócesis sea el alma
de las distintas acciones
pastorales.
OD31. En coordinación con la
Comisión Arquidiocesana
de Biblia y las vicarías se
sigan promoviendo las
escuelas bíblicas
enfatizando el aspecto
pastoral, para que sea la
Palabra de Dios la que
anime todas las acciones
eclesiales.

Organismos Diocesanos
OD32. Que en todas las reuniones eclesiales, diocesanas, de vicaría y decanato se
fomente la práctica de la Lectio divina, como una forma habitual de acercarse a la
Palabra de Dios, enfatizando la acción y el compromiso cristiano.
OD33. Que se estudien las experiencias pastorales en donde se han puesto en práctica
las directrices del DIPSIC, para valorarlas y reconocer las bondades de esta visión
de la Iniciación cristiana, en relación estrecha con la Catequesis.
OD34. Que la Catequesis presacramental con la visión del DIPSIC sirva como impulso
para la Reiniciación Cristiana de adultos, desde el itinerario del Proceso
evangelizador, la Misión Permanente y la Nueva Evangelización.
OD35. Las Comisiones de Misiones, Catequesis y Liturgia promuevan en las
distintas instancias arquidiocesanas el estudio del RICA para que el sentido
catecumenal se aplique en la catequesis de adultos tanto en la Iniciación como en
la Reiniciación Cristiana.
OD36. Promover a través de las Comisiones de Misiones y Catequesis, la puesta en
práctica con adultos, apoyados en los subsidios arquidiocesanos y de la
Catequesis nacional, procesos de Reiniciación Cristiana de los alejados de la fe.
OD37. Que la formación de catequistas con niños, se haga a la luz de los principios del
RICA y el DIPSIC para que desde el inicio se viva esa Catequesis con espíritu
catecumenal.
OD38. Que se hagan talleres de estudio para que se conozcan los criterios del DIPSIC,
para que sea puesto en práctica en la Catequesis con niños y éstos sean
asumidos por todas las vicarías.
OD39. Que la Catequesis con niños cuando es pre-sacramental se convierta en una
catequesis de Iniciación Cristiana, que incluya a los padres de familia y padrinos.
Téngase cuidado que esta norma se aplique también en la parroquia de
Capuchinas y Sagrario Metropolitano.
OD40. En coordinación con la Comisión Arquidiocesana de Promoción Vocacional y
la Vicaría para la Vida Consagrada, apoyen mutuamente las tareas de
promoción de vocaciones que se realizan en las diferentes Vicarías Territoriales y
en los Decanatos.
16

X. Pastoral litúrgica. Piedad
Popular.
Dar una importancia central en la vida
ordinaria de las comunidades, a la liturgia y,
particularmente a la celebración de la misa
dominical, ya que es un espacio privilegiado
para quienes se sienten formalmente
vinculados a la Iglesia, alimenten su fe
puedan crecer en ella. Valorar y aprovechar
la Piedad y Religiosidad Popular como un
medio de evangelización, que ayuda a
recorrer el camino de fe tanto a los agentes
de pastoral, como a toda la comunidad,
especialmente en la etapa kerigmática.
51. Apoyados por la Comisión de
Pastoral Litúrgica, se organice en
las vicarías jornadas de formación
litúrgica para los equipos de
animación litúrgica, especialmente
de las parroquias.
52. Que en la vicarías territoriales, en
los decanatos y en las mismas
parroquias, así como en grupos más
espontáneos, de ser posible con la
participación de laicos, se practique
el ejercicio de la preparación de la
homilía, remarcando el esfuerzo de
encontrar formas para que a partir
de ese ministerio se ayude a los
fieles a iluminar, desde la Palabra
de Dios, la vida cotidiana y los
importantes acontecimientos
sociales.
53. El equipo de liturgia en la parroquia,
además de otros servicios, organice
al grupo de personas que presten el
servicio de “bienvenida” en las
celebraciones.
17
Organismos Diocesanos
OD41. La Comisión de Pastoral
Juvenil en colaboración con la
Comisión de Pastoral Litúrgica,
con el apoyo de las vicarias
funcionales respectivas, incluirán en
los cursos de liturgia las sugerencias
convenientes, considerando la
presencia de los jóvenes en las
celebraciones o para la realización
de celebraciones eucarísticas
específicamente para ellos.
OD42. La Comisión de Liturgia, con la
colaboración de las otras instancias
diocesanas que se vea pertinente,
organicen encuentros entre
presbíteros, en los que también
participen laicos, para buscar cómo
la liturgia pueda ser enriquecida con
la ayuda de la catequesis, de la
cultura, de la piedad popular y otros
medios, de tal manera que podamos
tener una liturgia inculturada.
OD43. La Comisión de Piedad y
Religiosidad Popular promueva el
estudio necesario que ayude a los
agentes de pastoral, principalmente
a los pastores, a descubrir con
mayor claridad la relación que existe
entre esta expresión de fe del pueblo
de Dios y lo que hoy nos pide la
Nueva Evangelización.
OD44. La Comisión de Piedad y
Religiosidad Popular apoye en la
formación tanto de agentes de
pastoral, como de todos los fieles en
el sentido del símbolo, lenguaje,
expresión corporal... para que esto
lleve a una mayor conciencia y

54. El Consejo de Pastoral Parroquial
en coordinación con el equipo
parroquial de liturgia, diseñarán
acciones para aprovechar los
tiempos litúrgicos fuertes para
acercar a la comunidad a los más
alejados de ella.
55. Que los equipos litúrgicos y de
pastoral litúrgica parroquiales
aprovechen los distintos tiempos
litúrgicos, llamados fuertes
(Adviento Navidad, Cuaresma
Pascua) para favorecer en el pueblo
de Dios, el lenguaje de los símbolos
y signos que hacen vivir mejor la fe
de los creyentes.
56. Que se cree y revitalice en cada
Parroquia, el equipo de liturgia,
incorporando miembros
capacitados, promoviendo los
servicios de lectores, monitores,
cantores y acólitos, favoreciendo la
participación de los distintos
ministerios litúrgicos.
conocimiento de los símbolos
cristianos.
OD45. En ambientes de pastoral
“semiurbano”, capacitar a los
distintos agentes (sacerdotes y
laicos) para que puedan aprovechar
mejor las distintas manifestaciones
de Piedad y Religiosidad Popular.
OD46. La Comisión de Piedad y
Religiosidad Popular, forme un
equipo para que elabore un
Directorio Diocesano de Piedad y
Religiosidad Popular que proponga
algunos criterios pastorales para los
animadores litúrgicos, pastores y
laicos, para que valoren y apoyen
algunas expresiones de Piedad y
Religiosidad popular en nuestra
Arquidiócesis.
OD47. La Comisión de Piedad y
Religiosidad Popular, en
coordinación con las Comisiones de
Cultura, Catequesis y Misiones,
favorezca la formación de agentes
específicos para este ámbito de la
evangelización, definiendo para ello
la identidad de esta formación y su
itinerario, de acuerdo a los campos
concretos de compromiso en las
variadas realidades y expresiones
populares.
18

XI. Pastoral Socio Caritativa
Organizar la Pastoral Socio Caritativa como
una manifestación de nuestro compromiso
con los más pobres y como opción pastoral
de nuestra Arquidiócesis, e impulsar y
animar, a través de la Doctrina Social
Cristiana, los diferentes procesos
evangelizadores, así como los de formación,
para ayudar a valorar en todos los agentes de
pastoral e interlocutores la dimensión social
de la fe y sus repercusiones en sus
ambientes culturales.
57. El encargado vicarial de la Pastoral
Socio Caritativa junto con los
responsables decanales de esta
pastoral, promoverán y
acompañarán la creación y/o
fortalecimiento de los equipos
parroquiales de pastoral socio
caritativa.
58. El responsable vicarial de la Pastoral
Socio Caritativa, con la asesoría de
Cáritas arquidiocesana y los
representantes de esa pastoral en
cada decanato, evaluarán las
acciones sociales existentes en los
decanatos y, diseñarán acciones que
las dinamicen y mejoren su servicio.
59. El equipo de Pastoral Socio
Caritativa vicarial, organizará un
Directorio de instituciones
gubernamentales y no
gubernamentales que respondan a
las diferentes necesidades de los
más desprotegidos, para que
puedan ser canalizados a donde
corresponda. Este directorio lo
19
Organismos Diocesanos
OD48. La Pastoral Social
Arquidiocesana y Cáritas
promuevan el estudio de la Doctrina
Social Cristiana en todas las
instancias pastorales y en diálogo,
con las instancias vicariales,
decanales y parroquiales, se ayude
a su reflexión y puesta en práctica.
OD49. Las instancias que ya tienen un
camino recorrido en esta reflexión,
como son la Pastoral Social y
Cáritas ofrezcan sus talleres y
cursos que miran a sensibilizar en
esta dimensión (a través de la DSC
y dimensión social de la fe).
OD50. El Secretariado de Pastoral
Socio Caritativa en colaboración
con las instancias de formación
arquidiocesanas, elaborarán
programas de formación específica
de pastoral social para los equipos
vicariales, decanales y parroquiales.
OD51. El Secretariado de Pastoral
Socio Caritativa, recurra al proceso
de formación específica para
permitir a los agentes de dicha
pastoral, realizar su apostolado al
servicio de los más pobres a
imagen del buen samaritano.

proporcionará a cada equipo parroquial de pastoral caritativa.
60. El equipo vicarial de Pastoral Socio Caritativa en colaboración con los
equipos decanales de pastoral socio caritativa, creará una comisión
interdisciplinaria que tenga como objetivo generar una bolsa de
trabajo para la gente que más lo necesite.
61. El equipo de pastoral socio caritativa decanal organizará centros de
capacitación e instrucción laboral en favor de la población de escasos
recursos.
62. El párroco junto con el Consejo de Pastoral Parroquial y el equipo de
Pastoral Socio Caritativa, diseñarán un programa acorde a la realidad,
para la atención de los más pobres de su territorio parroquial.
63. El equipo de Pastoral Socio Caritativa parroquial realizará el registro y
censo de los grupos vulnerables de la comunidad, visitando e
identificando sus necesidades; canalizará y dará seguimiento a las
situaciones que asuma.
64. El equipo parroquial de Pastoral Socio Caritativa establecerá contacto
y comunicación con las instancias delegacionales para una mejor
promoción humana y espiritual.
65. El equipo de Pastoral Socio Caritativa en colaboración con el Consejo
de Asuntos Económicos, sensibilizarán, promoverán y comprometerán
a las comunidades parroquiales para generar ingresos o recaudar
fondos en beneficio de obras de asistencia social y promoción
humana en las parroquias y decanatos.
66. El párroco y el Consejo de Pastoral Parroquial promoverán, crearán y
apoyarán al Equipo de Pastoral Socio Caritativa Parroquial, integrado
por el párroco, médicos, trabajadoras sociales, psicólogos,
enfermeras, otros profesionales y voluntarios en general; que de
manera corresponsable trabajarán como una red de apoyo al interno
de la comunidad.
20

XII. Pastoral Juvenil. Misión
juvenil.
Organizar y promover adecuadamente, acorde
con los cambios socioculturales de nuestros
tiempos, la atención pastoral de las nuevas
generaciones, haciendo efectiva la opción
pastoral por los jóvenes; fortaleciendo la
pastoral de conjunto y la espiritualidad de
comunión en las actividades pastorales que
buscan dar un fuerte impulso a la Pastoral
Juvenil.
67. Los Vicarios episcopales territoriales
nombren responsables de la Pastoral
Juvenil que estén realmente
capacitados e interesados en esta
pastoral, procurando que su
nombramiento sea por un tiempo
adecuado.
68. Formar a nivel de vicaría un solo
equipo para atender y asumir la Misión
Juvenil 2013, en donde estén
involucrados corresponsablemente los
encargados y su equipo de Pastoral
Juvenil decanal, con la colaboración y
la asesoría de la comisión
arquidiocesana de Pastoral Juvenil.
69. El Decano junto con su equipo de
Pastoral Juvenil realizarán foros,
conferencias, pláticas, que sensibilicen
a todos los agentes evangelizadores,
sobre la cultura juvenil actual, que
favorezca una actitud de acercamiento,
comprensión y escucha a los jóvenes.
70. El responsable de la Pastoral Juvenil
de cada Decanato convocará, creará,
acompañará y apoyará a un grupo de
jóvenes evangelizadores.
21
Organismos Diocesanos
OD52. La Comisión de Pastoral
Juvenil y la Pastoral Socio
Caritativa organicen
experiencias de voluntariado
entre los jóvenes, como una
expresión de la fe y la
solidaridad y como un cauce de
la convicción de servicio de los
jóvenes; de esta manera
profundizar en el encuentro con
Cristo.
OD53. El equipo de Pastoral
Juvenil, en colaboración con el
responsable de Pastoral de la
Cultura, establecerá vínculos
con instituciones educativas,
universitarias, civiles y privadas
dedicadas a la promoción de la
cultura y el arte, y elaborará un
catálogo bimestral que
distribuirá a los decanatos, a fin
de enriquecer la formación
integral del joven, disponiéndolo
a los valores evangélicos.
OD54. Los encargados de la
Pastoral Juvenil elaborarán
programas, de acuerdo a las
expectativas de las nuevas
generaciones, con procesos
para capacitar a asesores de la
juventud y líderes juveniles, a
través de talleres, retiros, foros,
cursos de formación.
OD55. El encargado de la Pastoral
Juvenil, presentará
periódicamente un avance y
resultados del caminar de la
Misión Juvenil 2013 a la CoPPA,
para garantizar la efectividad de

71. En las comunidades parroquiales se
desarrollen programas de crecimiento
humano y cristiano, en donde las
nuevas generaciones atraídas por la
promoción de los valores que dan
sentido a la vida, preparen su
encuentro con Cristo.
72. El párroco y su equipo de Pastoral
Juvenil, acompañarán de manera
directa a los grupos parroquiales de
adolescentes y jóvenes existentes,
detectando y canalizando las
necesidades de asesoría y formación,
promoviendo a los jóvenes e
integrándolos a la vida de la
comunidad.
73. El equipo sacerdotal en la Parroquia y
su equipo de Pastoral Juvenil,
buscarán el contacto con los ambientes
en donde se encuentran los jóvenes,
como por ejemplo los centros
educativos, sus lugares de encuentro
(deporte, diversión, etc.)
74. El equipo de Pastoral Juvenil parroquial
en colaboración con el Consejo de
Pastoral, realizará diversas actividades
de interés para los adolescentes y
jóvenes, como deportes, música,
lecturas, teatro, convivencias, etc. para
escucharlos, interesarse en sus
actividades, inquietudes y
preocupaciones, para ofrecerles un
espacio de participación en la
comunidad y propiciar que vivan un
encuentro personal con Cristo.
las acciones programadas y
para mantener una actitud de
evaluación que permita
aprovechar las experiencias
exitosas y modificar aquellas
que no estén dando resultados.
OD56. Todos los involucrados en la
Pastoral Juvenil utilizarán las
redes sociales y los medios
electrónicos para llamar e
integrar a los jóvenes a la
propuesta de la Misión Juvenil.
OD57. La CAFAP, apoye a la
Comisión de Pastoral Juvenil,
para que ésta ofrezca formación
para jóvenes a través de medios
electrónicos y para ello elaboren
programas de formación integral.
OD58. Desde la Vicaria para los
Laicos integrar un equipo
responsable de elaborar
subsidios y materiales para
formar y capacitar a nuevos
agentes de pastoral
acompañantes de las nuevas
generaciones.
22

XIII. Pastoral Familiar
Impulsar una Pastoral Familiar que promueva a
las familias, desde su formación hasta su
madurez, para llegar a ser formadoras de
personas, educadoras en la fe y promotoras del
desarrollo en la sociedad.
23
75. El responsable de Pastoral Familiar
vicarial en colaboración con los
equipos decanales, promoverá y
acompañará la creación, capacitación
y consolidación de equipos de Pastoral
Familiar parroquiales, desde el
Proceso Misionero hacia una
formación específica.
76. El equipo de Pastoral Familiar Decanal
y Parroquial en colaboración con el
Consejo de Pastoral respectivo,
elaborarán un programa de Pastoral
Familiar de acuerdo a la realidad de
cada Parroquia o Decanato.
77. Que en las rectorías y parroquias el
equipo de Pastoral Familiar, organice,
promueva y acompañe una escuela
para padres según las necesidades de
cada comunidad, incluyendo aspectos
que responden a diversos pasos del
Proceso Evangelizador.
Organismos Diocesanos
OD59. La Comisión de Pastoral
Familiar, con la coordinación de
la Vicaría de Laicos revise y, si
es necesario, re-elabore su plan
de pastoral, tomando en cuenta
los aportes de los equipos de las
vicarías territoriales y de los
movimientos que trabajen en esa
pastoral.
OD60. Que los responsables
arquidiocesanos de los
movimientos que trabajen en
Pastoral Familiar, en
colaboración con las instancias
de formación arquidiocesanas,
elaboren cursos y/o talleres para
la formación y actualización
adecuada de sus miembros,
principalmente de los
responsables de la formación en
cada uno de ellos.
OD61. La Comisión de Pastoral
Familiar organice encuentros de
reflexión y estudio, con la ayuda
de especialistas, para ahondar
en la problemática familiar,
según las distintas situaciones
que se encuentran en la ciudad
de México, y así favorezca una
pastoral más incluyente.
OD62. La Comisión de Pastoral
Familiar, elabore el material que
sea fermento de unidad y
unificación de criterios para las
pláticas pre-matrimoniales y
otros ambientes de formación
familiar, teniendo en cuenta los
ordenamientos del Directorio

Pastoral para el Sacramento del Matrimonio de la Arquidiócesis.
OD63. El equipo de Pastoral Familiar arquidiocesano diseñe y difunda talleres
para fortalecer a las familias en sus diferentes situaciones de vida, como
matrimonios, unión libre, madres solteras, abuelos que están al cuidado de
los nietos, con búsqueda de valores y principios.
OD64. La Comisión de Pastoral Familiar convoque a las diferentes instancias y
movimientos que ofrecen formación de agentes de pastoral específicamente
familiar para conocer sus experiencias formativas y crear un marco general
de formación para la pastoral familiar.
OD65. Con la ayuda de la CAFAP la Comisión de Pastoral Familiar diseñará y
elaborará un plan de formación específica, sus programas y subsidios, para
responder a los distintos tipos y situaciones de las familias en la Ciudad de
México.
OD66. La Comisión de Pastoral Familiar favorecerá la colaboración con las
comisiones de Pastoral Misionera, Catequesis, Litúrgia, Social y Juventud, y
con ellas elaborará sus programas de formación específica.
24

XIV. Comunicación
Emplear con creatividad e inteligencia los procesos
de comunicación entre las instancias pastorales y,
hacer uso de las nuevas tecnologías, sobre todo de
las redes sociales, para lograr que se conviertan en
herramientas al servicio de la Nueva Evangelización.
78. Que las Vicarías, Decanatos y Parroquias
promuevan la creación y buen
funcionamiento de sus páginas web, para
difundir mensajes, convocatorias, cápsulas
informativas y otros. Que incluya un
micrositio en el que se dé a conocer la
información de las actividades pastorales
más importantes de cada ámbito.
79. El Equipo de Comunicación de la vicaría, a
través de su página web dará a conocer
las iniciativas emprendidas en el campo de
la asistencia social y promoción humana.
Organismos Diocesanos
OD67. Todas las instancias
eclesiales harán uso de
medios electrónicos y redes
sociales para la
evangelización, tratando de
llegar con ellos a los más
alejados.
OD68. La Vicaría de Pastoral
coordine la capacitación
para que los agentes de
pastoral sepan utilizar las
nuevas tecnologías
(facebook, twitter, internet).
80. Que las páginas web de las instancias eclesiales, principalmente las
de las Vicarías Territoriales incluyan en sus objetivos la “formación de
opinión”, que proporcione a los fieles laicos una opinión católica,
informada y científica, sobre la cultura, la sociedad, la Iglesia y el
mundo; divulgada por medio de “cápsulas”, en su modalidad de
podcast, de vídeos, de carteles, de mensajes en Twitter, de correo
electrónico, de Facebook. Esta experiencia deberá estar encaminada
a formalizar la creación de un Instituto de Comunicación y Manejo de
Medios.
81. Las Vicarías, Decanatos y Parroquias identifiquen en su propio nivel,
otros medios alternativos que siguen siendo útiles para la
Comunicación Pastoral.
82. Bajo la coordinación del Decano se nombre un laico encargado de
transmitir la información de la Arquidiócesis y de la Vicaría y busque
un corresponsal en cada parroquia.
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XV. Generalidades
83. Los sacerdotes, religiosas y laicos darán testimonio de vida y de fe,
siendo más sensibles al mundo de los pobres, con actitudes de
entrega, profesionales en la caridad y capaces de hacer comunidad
con los demás.
84. Recurrir a profesionistas para que apoyen la elaboración de
programas de formación humana para sacerdotes, laicos y religiosos
y después, las respectivas comisiones diocesanas y vicariales
promuevan su impartición mediante asesorías, cursos y talleres.
85. Que las comisiones arquidiocesanas de: Bíblia, Misiones, Catequesis,
Liturgia, Educación, Pastoral Vocacional, Piedad y Religiosidad
Popular, Pastoral Social…, ofrezcan subsidios de formación
específica para los distintos agentes que trabajan en los campos que
les corresponden.
86. Hacer de las comunidades parroquiales verdaderos centros de
encuentro con Cristo, de comunión fraterna y de solidadridad, en
donde las nuevas generaciones encuentren una comunidad confiable
de amigos.
87. Ir al encuentro de los bautizados alejados, de manera organizada,
como opción prioritaria de la Iglesia Arquidiocesana, reconociendo en
ellos las Gracias de Dios, para ofrecerles una propuesta de vida
comunitaria en la fe.
88. La formación de los agentes es una tarea fundamental para la Nueva
Evangelización, por ello, tiene que ser un imperativo para realizar y
poner en marcha el Proceso Evangelizador Arquidiocesano entre los
alejados.
89. Promover que toda acción eclesial esté marcada por un espíritu de
caridad y hospitalidad.
90. Fortalecer la Pastoral de Conjunto en las acciones misioneras, en bien
de la atención de los alejados y como testimonio creíble para provocar
simpatía.
91. Toda acción pastoral, y en particular la socio caritativa, debe ser una
acción eclesial que dialoga y se encarna con la realidad en la que se
desarrolla para dar testimonio cristiano mediante acciones concretas.
26

92. Favorecer y fomentar en todos los ámbitos y niveles arquidiocesanos
un espíritu de pobreza, entrega y desprendimiento en la vida y acción
de los agentes de Pastoral Socio Caritativa para hacerla más
testimonial.
93. Intensificar la Pastoral Socio Caritativa con el espíritu de la Pastoral
Orgánica en los diferentes niveles, donde brindemos un verdadero
servicio de asistencia y promoción humana.
94. Dar a conocer el trabajo de las Comisiones de las distintas áreas de
pastoral a nivel arquidiocesano, de tal manera que sea mejor utilizado
por las Vicarías, Decanatos y Parroquias y a su vez, todas estas
instancias territoriales puedan enriquecer el trabajo de aquéllas con su
experiencia y aportaciones, en una actitud de diálogo funcional.
95. Activar la Misión que tiene el Decanato de ser centro de comunión,
mediante servicios específicos en cuanto a la Comunicación Pastoral.
96. Articular la Pastoral de las Parroquias con una organización más
decididamente misionera.
97. Promover la “profesionalización” de los Agentes Laicos para lograr
una mejor evangelización en las diferentes Áreas de la Pastoral.
98. Promover la franca participación de los Religiosos y Religiosas en los
programas y actividades de las Vicarías y los Decanatos.
99. Apoyar a los movimientos y agrupaciones laicales para que sus
integrantes logren una buena formación y su acción apostólica se
integre en el proceso evangelizador y de esta forma colaboren en la
atención pastoral a las diferentes realidades de la Arquidiócesis.
100. Para cumplir su misión con responsabilidad los laicos necesitan
apoyo y acompañamiento de los Presbíteros para hacer efectiva la
Pastoral Orgánica y de conjunto, la diversidad de funciones asegurará
mayor vitalidad misionera para dar testimonio de Cristo y de los
valores del Reino en el ámbito de la vida social, económica, política y
cultural.
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