Mil mesetas. Capitalismo y esquizofrenia - Patricio Lepe Carrión
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468 MIL MESETAS<br />
constituye una "recuperación". Pero este concepto desencantado no es un buen<br />
concepto. Las modificaciones constantes de la axiomática capitalista, es deck, las<br />
adjunciones (enimciación de nuevos axiomas) y las sustracciones (creación de<br />
axiomas exclusivos), son objeto de luchas que no están en modo alguno reservadas<br />
a la tecnocracia. En todas partes, en efecto las luchas obreras desbordan el<br />
marco de las empresas que imphcan sobre todo proposiciones derivadas. Las luchas<br />
tienen dkectamente por objeto los axiomas que dirigen los gastos púbücos de<br />
Estado, o incluso que conciemen a tal o tal organización internacional (por ejemplo,<br />
una firma mufiinacional puede planificar voluntariamente la fiquidación de<br />
una fábrica en un país). De ahí que el peUgro de una burocracia o de una tecnocracia<br />
obreras mundiales que se ocuparían de estos problemas sólo puede ser conjurado<br />
en la medida en que luchas locales tiene dkectamente como objetivo los<br />
axiomas nacionales e internacionales, precisamente en el punto de su inserción en<br />
el campo de mmanencia (potenciaüdad del mundo rural a este respecto). Siempre<br />
hay una diferencia fundamental entre los flujos vivientes y los axiomas que los subordman<br />
a centros de control y de decisión, que hacen que les corresponda tal o<br />
tal segmento, que miden sus cuanta. Pero la presión de los flujos vivientes, y de los<br />
problemas que plantean e knponen, debe ejercerse dentro de la axiomática, tanto<br />
para luchar contra las reducciones totaUtarías como para prevenk y precipitar las<br />
adjunciones, orientarlas, e impedk su perversión tecnocritica.<br />
3. Modelos, isomorfía. —En principio, todos los Estados son isomorfos, es deck,<br />
son dóminos de reaUzación del capkal en función de un solo y mismo mercado<br />
mimdial exterior. Ahora bien, un primer problema sería saber si la isomorñ'a knphca<br />
una homogeneidad o incluso una homogeneización de los Estados. Así ocurre,<br />
como se ve en la Europa actual, en lo relativo a la justicia y a la politía, al<br />
código de ckculación, a la ckculación de mercancías, a los costes de producción,<br />
etc. Pero sólo es cierto en la medida en que se tiende hacia un mercado interíor<br />
único integrado. De lo contrarío, el isomorfismo no knphca en modo alguno homogeneidad:<br />
hay isomorfi'a, pero heterogeneidad, entre Estados totaütaríos y socialdemócratas,<br />
siempre que el modo de producción es el mismo. Las reglas generales<br />
a este respecto son la siguientes: la consistencia, el conjunto o la unidad de la<br />
axiomática son defmidos por el capital como "derecho" o relación de producción<br />
(para el mercado); la independencia respectiva de los axiomas no contradice en<br />
modo alguno este conjunto, smo que procede de las divisiones y sectores del<br />
modo de producción capkahsta; la isomorfía de los modelos, con los dos polos de<br />
adjunción y de sustracción, equivale a la distribución en cada caso del mercado ulterior<br />
y del mercado exterior. —Ahora bien, ésta sólo es una primera bipolaridad<br />
que es váüda para los Estados del centro, y bajo el modo de producción capitahsta.<br />
Pero el centro ha visto cómo se le impoma una segunda bipolaridad Oeste-<br />
Este, entre los Estados capitahstas y los Estados sociahstas burocráticos. Pues<br />
bien, aunque esta nueva distinción pueda repetk ciertos rasgos de la predecente<br />
(al ser asmúlados los Estados llamados sociahstas a Estados totahtarios), el problema<br />
se plantea de otro modo. Las numerosas teorías de "convergencia", que intentan,<br />
demostrar una cierta homogeneización de los Estados del Este y del Oeste,<br />
APARATO DE CAPTURA 469<br />
son poco convincentes. Ni siquiera el isomorfismo conviene: hay heteromorfía<br />
real, no sólo porque el modo de producción no es capitahsta, smo porque la relación<br />
de producción no es el Capkal (sert'a más bien el Plan). No obstante, si los<br />
Estados sociaüstas siguen siendo modelos de realización de la axiomática capitaüsta<br />
es en función de la existencia de un solo y único mercado mundial exteríor<br />
que sigue siendo aquí el factor decisivo, por encima incluso de las relaciones de<br />
producción de las que deriva, fiicluso puede suceder que el plan burocrático socialista<br />
tenga como una función paraskaria con relación al plan del capital, que pone<br />
de manifiesto una creatividad mayor, del tipo "vkus". —Por últkno, la tercera bipolaridad<br />
fundamental es la del centro y de la periferia (Norte-Sur). En vktud de<br />
la independencia respectiva de los axiomas, se puede deck con Samk Anún que<br />
los axiomas de la periferia no son los mismos que los del centro Y, una vez<br />
más, la diferencia y la mdependencia de los axiomas no comprometen en modo<br />
alguno la consistencia de la axiomática de conjunto. Al contrario, el capkafismo<br />
central tiene necesidad de esta periferia constituida por el Tercer Mimdo, en la<br />
que instala una gran parte de su kidustria más moderna, donde no se contenta con<br />
invertk capkales, sino que le proporciona capital. Por supuesto, el problema de la<br />
dependencia de los Estados del Tercer Mundo es evidente, pero no es el más knportante<br />
(es una herencia del antiguo coloniaüsmo). Es evidente que mcluso la independencia<br />
de los axiomas nunca ha garantizado la independencia de los Estados,<br />
sino que más bien asegura una división internacional del trabajo. Una vez<br />
más, el problema fundamental es el de la isomorfía con relación a la axiomática<br />
mundial. Pues bien, en gran medida, hay isomorfía entre los Estados Unidos y las<br />
tiranías más sanguinarias de América del Sur (o bien entre Francia, fiiglaterta, la<br />
R.F.A. y ciertos Estados africanos). Sin embargo, por más que la bipolaridad centro-periferia,<br />
Estados del centro y del Tercer Mundo, repita a su vez rasgos distmtivos<br />
de las dos bipolaridades precedentes, también escapa a eUas y plantea otros<br />
problemas. Pues, en ima gran parte del Tercer Mundo, la relación de producción<br />
general puede ser el capkal, e mcluso en todo el Tercer Mundo, en el sentido de<br />
que el sector socializado puede utilizar esa relación, y en ese caso continuarla por<br />
su cuenta. Pero el modo de producción no es necesariamente capkahsta, no sólo<br />
en las llamadas formas arcaicas o de transición, skio en los sectores más productivos<br />
y de alta industriahzación. Se trata, pues, de un tercer caso, incluido en la<br />
axiomática mundial: cuando el capkal actúa como relación de producción, pero<br />
en modos de producción no capkalistas. Se hablará entonces de una pofimorfía de<br />
los estados del Tercer Mundo con relación a los Estados del centro. Y es una dimensión<br />
de la axiomática tan necesaria como las otras: incluso mucho mas necesaria,<br />
puesto que la heteromorfi'a de los Uamados Estados sociafistas le ha sido knpuesta<br />
al capkafismo que la digiere a duras penas, mientras que la poümorfi'a de<br />
los Estados del Tercer Mundo es parcialmente organizada por el centro, como<br />
axioma de sustitución de la colonización. —Siempre encontramos el problema filerai<br />
de los modelos de reaUzación de una axiomática mundial: la isomorfía de los<br />
modelos, en principio en los Estados del centro; la heteromorfía knpuesta por el<br />
Estado sociafista burocrático; la polimorfía organizada de los Estados del Tercer<br />
Mundo. Una vez más, sería absurdo creer que la mserción de los movknientos po-