Rosa Chillante, mujeres y performance en México - Nodo 50
Rosa Chillante, mujeres y performance en México - Nodo 50
Rosa Chillante, mujeres y performance en México - Nodo 50
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
<strong>Rosa</strong> <strong>Rosa</strong> chillante chillante. chillante Mujeres Mujeres y y <strong>performance</strong><br />
<strong>performance</strong><br />
<strong>performance</strong><br />
Los os años años set<strong>en</strong>tas<br />
set<strong>en</strong>tas<br />
Esta historia empieza <strong>en</strong> la Academia de San Carlos, <strong>en</strong> el hermoso<br />
edificio colonial <strong>en</strong> la esquina de Academia y Moneda <strong>en</strong> el C<strong>en</strong>tro<br />
Histórico de la Ciudad de <strong>México</strong>. Era 1972. Mis padres habían accedido<br />
a que estudiara <strong>en</strong> San Carlos con la condición de que jamás<br />
asistiera a sus famosos bailes porque a un conocido le habían asestado<br />
32 puñaladas a la salida de una de esas fiestas.<br />
Desde <strong>en</strong>tonces se hablaba de que la Escuela Nacional de Artes<br />
Plásticas (ENAP) de la UNAM se transladaría a su actual y feo plantel<br />
<strong>en</strong> Xochimilco, pero <strong>en</strong> aquel mom<strong>en</strong>to eran planes lejanos. Para estudiar<br />
arte había que meterse <strong>en</strong> el corazón de la ciudad. Como todavía<br />
no estaba saturado de ambulantes se podía llegar <strong>en</strong> coche o por la<br />
flamante línea Uno del Metro estr<strong>en</strong>ada <strong>en</strong> 1970.<br />
Yo acababa de regresar de estudiar la preparatoria <strong>en</strong> Gales <strong>en</strong> la<br />
Gran Bretaña. Recuerdo que cuando les escribía a mis amigos les contaba<br />
que t<strong>en</strong>ía la s<strong>en</strong>sación de que la revolución estaba a punto de<br />
estallar <strong>en</strong> <strong>México</strong>. Había problemas muy severos de desigualdad,<br />
autoritarismo y c<strong>en</strong>sura, pero s<strong>en</strong>tía que el cambio era factible y que<br />
nuestra participación como estudiantes, como artistas, era importante.<br />
El mundo era nuestro: había fisuras <strong>en</strong> el sistema político y <strong>en</strong> el artístico<br />
que podíamos aprovechar.<br />
La ebullición artística set<strong>en</strong>tera no surgió sólo <strong>en</strong> San Carlos,<br />
pero como ahí estudié fue lo que vi de cerca. Obviam<strong>en</strong>te éramos<br />
parte de un contexto político más amplio. Basta m<strong>en</strong>cionar el año<br />
1968 para remitirnos a un movimi<strong>en</strong>to estudiantil que se desbordaba<br />
9