Despiertos en la lluvia ED01_11287.indd - Aula Avatares
Despiertos en la lluvia ED01_11287.indd - Aula Avatares
Despiertos en la lluvia ED01_11287.indd - Aula Avatares
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
136<br />
SILVIA MABEL VÁZQUEZ<br />
–Vamos, no se quede ahí, suba al auto que ya es tarde. Quiero llegar antes<br />
del amanecer.<br />
La barrera de <strong>la</strong> salida se abrió y salieron a <strong>la</strong> calle. Dobló por <strong>la</strong> colectora.<br />
El sonido del teléfono lo sobresaltó. Unas cuadras más ade<strong>la</strong>nte, tuvo que<br />
bajarse del auto para secar <strong>la</strong> sangre que chorreaba del baúl. Seguram<strong>en</strong>te,<br />
Piedad, no había <strong>en</strong>vuelto y atado como corresponde los dos cuerpos.<br />
VOLAR<br />
La autopista soportaba el peso de camiones cargados de autos y autos que<br />
pasaban como aviones. Él, parado sobre el a<strong>la</strong>mbrado de <strong>la</strong> fábrica, esperaba<br />
su turno para poder cruzar vo<strong>la</strong>ndo bajo, para que esa noche, al llegar a su<br />
nido, no tuviera que tomar otra vez <strong>la</strong>s pastil<strong>la</strong>s para los nervios.<br />
POESÍA<br />
PROPUESTA<br />
Asomaba <strong>la</strong> tarde <strong>en</strong>tre los pinos<br />
del patio de baldosas rojas.<br />
El olor a peperina, inundaba el aire,<br />
los recuerdos si<strong>la</strong>beaban <strong>en</strong> <strong>la</strong> conci<strong>en</strong>cia.<br />
El sol, resignado,<br />
espiaba <strong>en</strong>tre los algodones tibios del cielo<br />
y los pájaros de espuma<br />
bajaban a comer <strong>la</strong>s manzanas con cane<strong>la</strong><br />
apoyadas sobre <strong>la</strong> mesa.<br />
Y de pronto, se abrió <strong>la</strong> puerta del fr<strong>en</strong>te:<br />
el <strong>en</strong>tró, como lo hacía siempre,<br />
con <strong>la</strong> sonrisa c<strong>la</strong>vada <strong>en</strong> mi mirada,<br />
un ramo de jazmines <strong>en</strong> una mano,<br />
y el libro de Neruda bajo el brazo.<br />
Nos s<strong>en</strong>tamos, bajo <strong>la</strong> sombra