Despiertos en la lluvia ED01_11287.indd - Aula Avatares
Despiertos en la lluvia ED01_11287.indd - Aula Avatares
Despiertos en la lluvia ED01_11287.indd - Aula Avatares
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
DESPIERTOS EN LA LLUVIA<br />
LIMPIEZA GENERAL<br />
133<br />
La loca de <strong>la</strong> limpieza, le decían sus hijos. No había puerta <strong>en</strong> <strong>la</strong> casa que<br />
no tuviera un felpudo. Las mesas estaban cubiertas por nylon y había prohibido<br />
andar por el parquet del living sin los patines de <strong>la</strong>na.<br />
El<strong>la</strong> era delgada, sus manos jamás estaban quietas. Cada cosa t<strong>en</strong>ía un<br />
exacto lugar <strong>en</strong> <strong>la</strong> casa.<br />
Repasaba minuciosam<strong>en</strong>te con una gamuza seca todos los muñequitos de<br />
porce<strong>la</strong>na Imposible dejar un camino con los dedos sobre alguno de los muebles.<br />
Todos los sábados abría el garaje y acomodaba su batallón de ayudantes:<br />
escobas, escobillones, trapos, plumero. Infaltable el lustra muebles para pasarle<br />
a <strong>la</strong> impecable madera del portón barnizado por <strong>en</strong>ésima vez. No quedaban<br />
rastros de <strong>la</strong>s intrusas que por <strong>la</strong> noche ocupaban su tiempo teji<strong>en</strong>do <strong>en</strong>tre los<br />
barrotes. T<strong>en</strong>ía un pañuelo para cada actividad. Con ellos, <strong>en</strong>volvía su cabeza<br />
para esquivar el polvillo.<br />
Con sumo cuidado para no mojar a los feriantes que armaban sus puestos<br />
bi<strong>en</strong> temprano <strong>en</strong> <strong>la</strong> mañana, deslizaba el agua jabonosa hasta el cordón.<br />
Terminaba horas después secando el pavim<strong>en</strong>to para no dejar huel<strong>la</strong>s de su<br />
temprana actividad.<br />
El nuevo puesto de <strong>la</strong> feria se había insta<strong>la</strong>do fr<strong>en</strong>te a su casa. Botel<strong>la</strong>s<br />
plásticas multicolores, escoltaban infi nidad de frasquitos con etiquetas.<br />
–Bu<strong>en</strong> día, ¿nuevo aquí?<br />
–Sí, señora. ¿Puedo ayudar<strong>la</strong>?<br />
–Quisiera saber qué uso le da a todos esos líquidos de colores y los frascos<br />
que ti<strong>en</strong>e detrás.<br />
–Ah, ¿no los conoce? Bi<strong>en</strong>, le com<strong>en</strong>to que son multilimpiadores de suma<br />
utilidad. Cada uno de ellos está especialm<strong>en</strong>te preparado para difer<strong>en</strong>tes usos.<br />
El azul, es para pisos de cerámica, el amarillo para azulejos, el b<strong>la</strong>nco para<br />
madera. ¿usted qué necesita?<br />
–Se s<strong>en</strong>tía como n<strong>en</strong>e <strong>en</strong> una juguetería. Le <strong>en</strong>cantaría t<strong>en</strong>er <strong>en</strong> el mueble<br />
del <strong>la</strong>vadero todas esas botel<strong>la</strong>s de colores.<br />
–Mire, como yo quiero que mi casa luzca espectacu<strong>la</strong>r, voy a comprarle<br />
una de cada una. Eso sí, me hace precio, seguram<strong>en</strong>te volveré a buscar más.<br />
El v<strong>en</strong>dedor <strong>la</strong> llevó a un costado y le dijo:<br />
–Mire, yo no t<strong>en</strong>go problemas <strong>en</strong> v<strong>en</strong>derle todas, pero t<strong>en</strong>ga cuidado, ni se<br />
le ocurra mezc<strong>la</strong>r<strong>la</strong>s. Sería peligroso no solo para usted, sino para el resto de <strong>la</strong>