Apuntes biográficos y profesionales - I La estadística de las corridas toreadas en los años posteriores a la temporada de 1951, fueron: cuarenta y ocho en 1952; treinta y cinco, en 1953; veintinueve, en 1954, y treinta y nueve, en 1955. En la del 52 de nuevo el triunfo en Madrid, la Puerta del Príncipe en Sevilla en el día del Pilar y su confirmación en la «Plaza México». 1952: Agosto: 03:: Tres diestros salieron a hombros por la Puerta Grande de la Plaza Real de El Puerto de Santa María la tarde del (03-08- 1952): Luis Miguel González Lucas (Luis Miguel Dominguín), <strong>Rafael</strong> <strong>Ortega</strong> Domínguez (El Torero de la Isla) y Antonio Ordóñez, que lidiaron astados de seis señores ganaderos, cuales fueron: José Manuel Domecq, Antonio Urquijo, marqués de Villamaría, Fermín Bohórquez Gómez, José Luis Osborne Vázquez (5) y Juan de Dios Pareja Obregón. Se cortaron en total 7 orejas y un rabo, destacando en la famosa terna Luis Miguel que cortó tres orejas y el único rabo. Y es que Luis Miguel Dominguín sacó a relucir aquellas grandes facultades que le caracterizaron y sus increíbles conocimientos de los toros y sus terrenos, cualidades que le hicieron brillar intensamente, propias de un astro de primera magnitud. Calando en los espectadores sus variadas temeridades y sus ortodoxas maneras de dirigir la lidia. Sus formas de pasar de muleta a su segundo de 44 <strong>Rafael</strong> <strong>Ortega</strong> Domínguez D. Fermín Bohórquez, corriéndole lenta y cadenciosamente las manos, fueron guirnaldas del más puro arte, para configurar una extraordinaria faena, con clara inteligencia y del más puro dominio, que coronó con una gran estocada descomponiendo «los mismísimos rubios.» Ya antes había cortado una oreja a su primero, al que colocó tres pares de banderillas de poder a poder, que fueron muy aplaudidos. Era la primera vez que Luis Miguel salía por la Puerta Grande en El Puerto, de las tres que la cruzó en triunfo, habiendo toreado en El Puerto en siete ocasiones, logrando 13 orejas y 3 rabos <strong>Rafael</strong> <strong>Ortega</strong>, por su parte y como todos lo esperaban, brilló con su excelsa valentía y el pundonor al que tenía a toda la afición acostumbrados. Su toreo de capa iluminó la plaza, y el aroma de su rancia escuela provocó los más sentidos aplausos. Para él era la segunda vez, de las 8, que volvió a cruzar la Puerta Grande, logrando en la Plaza Real un total 24 orejas y 3 rabos. Y es que <strong>Ortega</strong> ejecutó magníficos naturales a su primero, «provocando cada arrancada con golpecitos de estoque en el hocico, para terminar realizando una faena perfectamente ligada y con su habitual dominio, copulándola con dos pinchazos y media estocada, para pasear con la oreja de cada uno de sus enemigos, ya que también le realizó una buena a su segundo. Fueron, pues dos orejas, y no tres, como cita el cronista. Antonio Ordóñez toreó con fino y elegante estilo por verónica al de Villamaría, Pasa a la página nº 46. (2) De El Puerto de Santa María, con divisa verde y blanca, y señal, hoja de higuera en la derecha y rajada a izquierda, tiene el mismo historial que la vacada de don Juan Pedro Domecq y Díez. Al dividirse la vacada de los «Hijos de don Juan Pedro Domecq», correspondió una parte a don Pedro Domecq y Díez, quien la vendió en el año1946 a don Luis de la Calle Ruiz, pasando de éste a don Antonio Jiménez Jiménez, quien la enajenó en 1952 a don José Luis Osborne Vázquez. Éste debutó en la Plaza de Toros de Madrid el día (19-03-1959), en que se lidiaron cinco bravos novillos, junto a otro de D. Juan Antonio Álvarez, destacándose notablemente el llamado Flequillero, de pelaje negro, corrido en tercer lugar y que resultó de bandera. Se le dio la vuelta al ruedo. Esa temporada lidió D. José Luis Osborne Vázquez ocho corridas. El PUERTO de SANTA MARÍA
<strong>Rafael</strong> <strong>Ortega</strong> Domínguez El PUERTO de SANTA MARÍA Apuntes biográficos y profesionales - I 45