Simeon Bar Joyai - Zohar 3de5 - Comunidad Israelita Bet Or

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temblar violentamente y se llenó de fisuras. El árbol fue desarraigado y cayó al suelo, y el hombre de debajo del árbol despertó y gritó con voz fuerte: ¡Oh Judío, oh Judío, llora y lamenta con aflicción y voces de pesar! Pues en este mismo momento es designado en el cielo un gran príncipe superior de los Gentiles, el cual causará terrible infortunio a Israel. Este temblor de tierra tiene el significado de un portento y una advertencia para ti. En esto R. Isaac sintió un temblor, y dijo: Verdaderamente, está escrito “Por tres cosas la tierra se inquieta... por un servidor cuando él reina,...”, es decir, cuando el principado supramundano, que antes estaba bajo otro gobernante, reina, especialmente sobre Israel. R. Jama bar Guria dijo: Cuando Dios consiente que Israel caiga bajo la opresión de los Gentiles, él llora, como está escrito, “Mi alma llora en lugares secretos” 153 . Una vez R. Judá visitó a R. Eleazar. Lo encontró sumergido en pensamientos, su mano oprimida sobre su boca, en tristeza. Le preguntó: ¿Qué estás pensando? R. Eleazar respondió: Está dicho “En la luz del rostro del rey hay vida” 154 , pero si nuestro Amo está triste y más aún clamando y en llanto, ¿qué pueden hacer sus ayudantes si no seguir Su ejemplo? Por eso está escrito: “Ved, sus valientes (ángeles) claman afuera, los ángeles de paz lloran amargamente” 155 . ¿Por qué claman? Porque su Señor se halla adentro y ellos están afuera; porque su Señor está en las cámaras interiores y ellos se encuentran en los atrios exteriores. ¿Por qué se los llama “ángeles de paz”? ¿Hay ángeles que no sean de paz? Sí, he aquí que los hay. Porque hay a la vez emisarios del juicio severo y del juicio menos severo, y los hay cuyo atributo es la justicia mezclada con misericordia y hay algunos que representan únicamente la misericordia. Es a estos últimos a quienes se llama “Angeles de paz”. Del grado más bajo de seres celestiales está escrito “Yo visto los cielos de negro y hago de arpillera su cubierta” 156 . Pero, ¿con qué fin los principados de las naciones Gentiles hacen sufrir a los hijos de Dios, viendo que ello aflige a su Amo? Ellos solamente llevan a cabo su oficio y deben hacer la voluntad de su Señor. R. Dostai dijo: cuando los hijos del Santo son librados a los gobernantes de los Gentiles, se reúnen juntos doce tribunales celestiales y se precipitan al gran abismo y todos los ángeles ayudantes con todos los servidores lloran en agonía. Entonces caen dos lágrimas en el abismo. Los seres angelicales más elevados ruedan hacia abajo, y los de abajo son llevados aun más abajo a la medida de doscientos y cuarenta grados, porque “el león ha rugido, ¿quién no temerá?” 157 , Hemos aprendido que cuando el Santo, Bendito Sea, entregó a los hijos de Israel a la mano del capitan de Egipto, El decretó que los egipcios les impusieran siete p;nas. Aparecen enumeradas en el versículo que dice: E hicieron amargas sus vidas con servicio duro, etc.” En correspondencia, El les otorgó siete favores, como los enumera el versículo: “Y los hijos de Israel fueron fructíferos, y crecieron abundantemente y se multiplicaron y se hicieron poderosos, muy poderosos, extremadamente poderosos de modo que el país se llenó con ellos”. Vamos, pues, portémonos astutamente con ellos, no sea que se multiplique 158 . R. Judá dijo en nombre de R. Isaac: ¿Por qué los egipcios deseaban tanto evitar que Israel se multiplicara y qué motivo indujo a su representante superior a poner tal deseo en sus corazones? Porque él conocía y les hizo conocer a ellos que a los israelitas les nacería un hijo 153 Jeremías XIII, 17. 154 Proverbios XVI, 15. 155 Isaías XXXIII, 7. 156 Isaías L, 3. 157 Amos III, 8. 158 Éxodo I, 10. 32

por el cual serían juzgados los dioses de Egipto. Porque, según R. Iojanan, cuando Moisés dijo que Dios “ejercerá juicio contra todos los dioses del Egipto” 159 , Duma, el príncipe celestial del Egipto, se apartó corriendo cuatrocientas parasangas, y el Santo le dijo: “¡Es mi decreto!” En esa hora su poder y su dominio le fueron retirados y, en cambio, se lo expulsó a las regiones inferiores y se lo designó sobre los reinos de la Guehena, como juez de las almas de los inicuos. R. Judá dijo que fue designado sobre los muertos. R. Janna dijo: Está escrito: “También sobre sus dioses el Señor ejecutó juicios” 160 . ¿Podemos hablar de juicios que se ejecutan sobre dioses hechos de plata u oro, de madera o piedra? R. Yose respondió: Los hechos de plata y oro se derritieron solos, y los de madera se pudrieron. R. Eleazar dijo: El dios de Egipto era la oveja y así el Santo, Bendito Sea, ordenó quemarla en fuego, de modo que saliera su mal olor; y que fuese quemada con “su cabeza con sus patas y las entrañas” 161 . Y además, sus huesos fueron arrojados al lugar del mercado, cosa que afligió sobremanera a los egipcios. Este fue el “juicio” implicado en el versículo citado. R. Judá dijo: “Contra sus dioses” se refiere en sentido literal a sus Capitanes, en cumplimiento de la profecía: “El Señor castigará en lo alto la hueste del cielo alto” 162 . Los hombres sabios entre los egipcios conocían todo esto, y más aún lo conocía su Capitán. De ahí que dijeran: “Vamos, pues, portémonos astutamente con ellos”. R. Iójanan dijo: Ellos tenían muchos ídolos, pero su dios jefe era el Nilo, y el Señor ejecutó juicios sobre todos ellos. R. Abba dijo: la exposición de R. Iójanan es la correcta y evidente por sí misma. Pues sabemos que primero son castigados los dioses de una nación y luego es castigada la nación misma. Así, aquí, primero fueron golpeados el Nilo y maderas y piedras, según dice la Escritura: “Y habrá sangre por el país de Egipto, a la vez en La madera y en la piedra” 163 ; la madera y la piedra son los dioses que los egipcios adoraban. R. Isaac observó: pero está escrito “la hueste del cielo alto en lo alto”, mientras que el Nilo no estaba en lo alto. R. Iójanan dijo: La mayor parte de sus aguas se asemejan a su prototipo en lo alto. D. Isaac dijo: Primero fue golpeado su Capitán y luego el resto de sus dioses. R. Simeón, el hijo de R. Yose, dijo: el castigo de la nación egipcia propiamente tuvo lugar en el mar acerca de lo cual está escrito: “No quedó de ellos ni siquiera uno” 164 , y antes de eso se ejecutaron juicios contra sus dioses. De ahí las palabras de Faraón, cuando dijo: “vamos, pues, portémonos astutamente con ellos, no sea que se multipliquen y ocurra que cuando nos ataque alguna guerra,...”. Hubo aquí una premonición de lo que realmente aconteció, “ellos también se unieron a nuestros enemigos”, una premonición de los ejércitos celestiales que apoyaron a los israelitas, “y lucharon contra nosotros”, una predicción de lo que declaró Moisés al decir: “El Señor luchará por vosotros” 165 . “Y mantenedlos fuera del país”, como efectivamente leemos: “perqué los hijos de Israel salieron con mano elevada” 166 . Y fue un hombre de la casa de Leví y tomó por mujer a una hija de Levi. R. Eleazar disertó sobre el versículo, “El Cantar de los Cantares de Salomón” 167 . Dijo: Hemos aprendido que cuando el Santo, Bendito Sea, estuvo por crear el mundo, le placía crear el cielo con Su mano derecha, y la tierra con Su Izquierda. También le placía hacer una división del día y la noche, y creó ángeles designados por Su gracia para cantar himnos de alabanza en el día, y otros en la noche para los guardianes nocturnos. Así está dicho: “El Señor ordenó su gracia durante el día, y en la noche su canto conmigo” 168 . Los primeros están a la mano derecha, y 159 Éxodo XII, 12. 160 Números XXXIII, 4. 161 Éxodo XII. 9. 162 Isaías XXIV, 21. 163 Éxodo XII, 19. 164 Éxodo XIV, 28. 165 Éxodo XIV, 14. 166 Éxodo XIV, 8. 167 Cantar de los Cantares, I, 1. 168 Salmos XLII, 9. 33

por el cual serían juzgados los dioses de Egipto. Porque, según R. Iojanan, cuando Moisés<br />

dijo que Dios “ejercerá juicio contra todos los dioses del Egipto” 159 , Duma, el príncipe<br />

celestial del Egipto, se apartó corriendo cuatrocientas parasangas, y el Santo le dijo: “¡Es mi<br />

decreto!” En esa hora su poder y su dominio le fueron retirados y, en cambio, se lo expulsó a<br />

las regiones inferiores y se lo designó sobre los reinos de la Guehena, como juez de las almas<br />

de los inicuos. R. Judá dijo que fue designado sobre los muertos. R. Janna dijo: Está escrito:<br />

“También sobre sus dioses el Señor ejecutó juicios” 160 . ¿Podemos hablar de juicios que se<br />

ejecutan sobre dioses hechos de plata u oro, de madera o piedra? R. Yose respondió: Los<br />

hechos de plata y oro se derritieron solos, y los de madera se pudrieron. R. Eleazar dijo: El<br />

dios de Egipto era la oveja y así el Santo, Bendito Sea, ordenó quemarla en fuego, de modo<br />

que saliera su mal olor; y que fuese quemada con “su cabeza con sus patas y las entrañas” 161 .<br />

Y además, sus huesos fueron arrojados al lugar del mercado, cosa que afligió sobremanera a<br />

los egipcios. Este fue el “juicio” implicado en el versículo citado. R. Judá dijo: “Contra sus<br />

dioses” se refiere en sentido literal a sus Capitanes, en cumplimiento de la profecía: “El Señor<br />

castigará en lo alto la hueste del cielo alto” 162 . Los hombres sabios entre los egipcios<br />

conocían todo esto, y más aún lo conocía su Capitán. De ahí que dijeran: “Vamos, pues,<br />

portémonos astutamente con ellos”. R. Iójanan dijo: Ellos tenían muchos ídolos, pero su dios<br />

jefe era el Nilo, y el Señor ejecutó juicios sobre todos ellos. R. Abba dijo: la exposición de R.<br />

Iójanan es la correcta y evidente por sí misma. Pues sabemos que primero son castigados los<br />

dioses de una nación y luego es castigada la nación misma. Así, aquí, primero fueron<br />

golpeados el Nilo y maderas y piedras, según dice la Escritura: “Y habrá sangre por el país de<br />

Egipto, a la vez en La madera y en la piedra” 163 ; la madera y la piedra son los dioses que los<br />

egipcios adoraban. R. Isaac observó: pero está escrito “la hueste del cielo alto en lo alto”,<br />

mientras que el Nilo no estaba en lo alto. R. Iójanan dijo: La mayor parte de sus aguas se<br />

asemejan a su prototipo en lo alto. D. Isaac dijo: Primero fue golpeado su Capitán y luego el<br />

resto de sus dioses. R. Simeón, el hijo de R. Yose, dijo: el castigo de la nación egipcia<br />

propiamente tuvo lugar en el mar acerca de lo cual está escrito: “No quedó de ellos ni siquiera<br />

uno” 164 , y antes de eso se ejecutaron juicios contra sus dioses. De ahí las palabras de Faraón,<br />

cuando dijo: “vamos, pues, portémonos astutamente con ellos, no sea que se multipliquen y<br />

ocurra que cuando nos ataque alguna guerra,...”. Hubo aquí una premonición de lo que<br />

realmente aconteció, “ellos también se unieron a nuestros enemigos”, una premonición de los<br />

ejércitos celestiales que apoyaron a los israelitas, “y lucharon contra nosotros”, una predicción<br />

de lo que declaró Moisés al decir: “El Señor luchará por vosotros” 165 . “Y mantenedlos fuera<br />

del país”, como efectivamente leemos: “perqué los hijos de Israel salieron con mano elevada”<br />

166 . Y fue un hombre de la casa de Leví y tomó por mujer a una hija de Levi. R. Eleazar<br />

disertó sobre el versículo, “El Cantar de los Cantares de Salomón” 167 . Dijo: Hemos aprendido<br />

que cuando el Santo, Bendito Sea, estuvo por crear el mundo, le placía crear el cielo con Su<br />

mano derecha, y la tierra con Su Izquierda. También le placía hacer una división del día y la<br />

noche, y creó ángeles designados por Su gracia para cantar himnos de alabanza en el día, y<br />

otros en la noche para los guardianes nocturnos. Así está dicho: “El Señor ordenó su gracia<br />

durante el día, y en la noche su canto conmigo” 168 . Los primeros están a la mano derecha, y<br />

159 Éxodo XII, 12.<br />

160 Números XXXIII, 4.<br />

161 Éxodo XII. 9.<br />

162 Isaías XXIV, 21.<br />

163 Éxodo XII, 19.<br />

164 Éxodo XIV, 28.<br />

165 Éxodo XIV, 14.<br />

166 Éxodo XIV, 8.<br />

167 Cantar de los Cantares, I, 1.<br />

168 Salmos XLII, 9.<br />

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