La superación del dogmatismo surrealista en los ... - Cybertesis
La superación del dogmatismo surrealista en los ... - Cybertesis
La superación del dogmatismo surrealista en los ... - Cybertesis
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
CXL. Nuestra idea de espíritu. En s<strong>en</strong>tido lato, podemos decir<br />
que t<strong>en</strong>emos idea, o más bi<strong>en</strong> noción de espíritu, 1) <strong>en</strong> cuanto<br />
<strong>en</strong>t<strong>en</strong>demos lo que esta palabra significa, pues si no, nada<br />
podríamos afirmar ni negar de ella; y además 2) <strong>en</strong> cuanto<br />
concebimos las ideas que exist<strong>en</strong> <strong>en</strong> otras m<strong>en</strong>tes o espíritus<br />
mediante las nuestras propias, que suponemos semejantes a las<br />
de el<strong>los</strong>. (…) (Berkeley, G.1984: 175)<br />
El autor m<strong>en</strong>ciona conceptos básicos de la psicología, la conci<strong>en</strong>cia y la<br />
empatía: el individuo y el <strong>en</strong>torno que lo condiciona. El espíritu p<strong>en</strong>sado<br />
por el autor, es de un individuo sano, instruido y occid<strong>en</strong>tal. Este mo<strong>del</strong>o de<br />
las categorías de la m<strong>en</strong>te humana, ¿ti<strong>en</strong>e valor universal? De no ser así,<br />
¿es correcto el realizar una adaptación o reinterpretación <strong>del</strong> aporte<br />
berkeleyano, coher<strong>en</strong>te con una doctrina diverg<strong>en</strong>te cual el surrealismo? 31<br />
CXLII. (…) En rigor no podemos decir que t<strong>en</strong>gamos idea de un<br />
ser activo o de una acción, aunque si puede afirmarse que<br />
t<strong>en</strong>emos noción de el<strong>los</strong>. (…) Es de notar también que<br />
propiam<strong>en</strong>te no podemos decir que t<strong>en</strong>gamos idea de las<br />
relaciones que <strong>en</strong>vuelv<strong>en</strong> un acto de la m<strong>en</strong>te, sino más bi<strong>en</strong> una<br />
noción de las relaciones que hay <strong>en</strong>tre las cosas. Y si algunos<br />
hoy día toman la palabra idea para designar al espíritu, las<br />
relaciones y las acciones, ello se reduce a una mera cuestión de<br />
palabras.(Berkeley, 1984: 176)<br />
En uno de sus seminarios 32 , Jacques <strong>La</strong>can, señala que lo real es lo que se<br />
resiste a ser simbolizado. En Berkeley, lo real es el espíritu y el símbolo es<br />
la idea. 33 <strong>La</strong> teología cristiana anglicana, de modo similar a la católica,<br />
podemos evitar recordar a Levi Strauss, cuando afirma que las personas religiosas pose<strong>en</strong><br />
s<strong>en</strong>tido <strong>del</strong> misterio, algo que no ocurre a muchos ci<strong>en</strong>tíficos.<br />
31<br />
Consideremos que estas cuestiones han sido revisadas por ci<strong>en</strong>cias específicas como la<br />
antropología, la sociología, la psicología, la psiquiatría, etc. Y que nuestra investigación se<br />
deti<strong>en</strong>e <strong>en</strong> el meta texto de las humanidades.<br />
32<br />
<strong>La</strong>can, Jacques: 1984, Seminario 11. Los cuatro conceptos fundam<strong>en</strong>tales <strong>del</strong><br />
psicoanálisis<br />
33<br />
Pero, <strong>en</strong>tre el inmaterialismo de Berkeley y el materialismo de <strong>La</strong>can, está el idealismo<br />
objetivo de Hegel, autor de una concepción peculiar sobre el espíritu. <strong>La</strong> distinción de<br />
Berkeley, <strong>en</strong>tre idea y espíritu, obedecería a una distinción (que se da también <strong>en</strong> la cultura<br />
judía, Cf. B<strong>en</strong>jamín 33 , <strong>en</strong>tre ci<strong>en</strong>cia y fi<strong>los</strong>ofía y las relaciones de ésta con la teología o<br />
53