15.05.2013 Views

mercancía, gentes pacíficas y plaga - D-Scholarship@Pitt ...

mercancía, gentes pacíficas y plaga - D-Scholarship@Pitt ...

mercancía, gentes pacíficas y plaga - D-Scholarship@Pitt ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

más arriba, esta presentación de Las Casas como humanista surge principalmente dentro del<br />

debate ilustrado que hay alrededor de él al final del siglo XVIII. Pérez Fernández, no obstante<br />

hacer constantes reparos al juicio que algunos ilustrados hacen de Las Casas, se mantiene en el<br />

mismo tipo de categorización que hace de Las Casas un defensor a ultranza de la humanidad de<br />

los indios y los negros. Como lo ha mostrado Foucault en su conocido texto de Las palabras y las<br />

cosas (1966), esta proyección de los ideales de humanidad hacia el Renacimiento es una mirada<br />

retrospectivista que simplifica el complejo proceso de recomposición del saber que tuvo lugar<br />

durante el siglo XVI. Este proceso no estuvo articulado en torno a la figura del hombre sino<br />

alrededor de la transformación en las técnicas de interpretación que regían el saber hasta ese<br />

momento (Foucault, Las palabras y las cosas 26-52). En el caso de Las Casas, podemos<br />

reconocer que en los tratados que publica en 1552, y que recogen las disputas fundamentales de<br />

su doctrina, su preocupación principal no es la definición de lo humano sino la definición del<br />

infiel y del bárbaro como conceptos que permiten legitimar e implementar el proyecto de una<br />

evangelización pacífica de los no-europeos. Problablemente, son estos conceptos, más que el<br />

concepto de ‘lo humano’, los que nos ayuden a entender las transformaciones de Las Casas con<br />

respecto a sus representaciones de los africanos esclavizados.<br />

Ahora bien, estos conceptos, no sólo señalan posibilidades de inclusión dentro de un<br />

mismo conjunto, sino que además enfatizan las diferencias que Las Casas establece entre los<br />

europeos cristianos y quienes no lo son. La inserción que propone Las Casas supone el<br />

reconocimiento previo de unas diferencias que son borradas posteriormente por la apelación a<br />

una condición común que existe entre los que son europeos y los que no lo son. Como esperamos<br />

poder mostrarlo, esta condición no es la expresión ‘mundo humano total’ sino la posibilidad de<br />

una evangelización pacífica o, si se quiere una expresión más sucinta, ‘lo cristianizable’. No<br />

51

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!