15.05.2013 Views

mercancía, gentes pacíficas y plaga - D-Scholarship@Pitt ...

mercancía, gentes pacíficas y plaga - D-Scholarship@Pitt ...

mercancía, gentes pacíficas y plaga - D-Scholarship@Pitt ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

introduciendo un segundo elemento que será decisivo posteriormente en la colonización de<br />

Indias, a saber, la aparición de los ingenios de azúcar en el Atlántico (Vieira 2004).<br />

En el capítulo 23, Las Casas relata el descubrimiento de la costa de África más allá del<br />

Cabo de Bojador. El capítulo comienza narrando las murmuraciones que comienzan a darse<br />

contra el infante en Portugal por el despilfarro que hace en expediciones que sólo traen costos y<br />

pérdidas de vidas por estar dirigidas a tierras “que Dios no había criado sino para bestias”<br />

(Barros 20 y Las Casas 125). Sin embargo, entre 1418 y 1432, el infante persiste en su propósito<br />

arguyendo que no será por su industria sino por su voluntad y la ayuda divina que podrán tener<br />

éxito en estas expediciones. Sigue enviando expediciones que, si bien no tienen éxito al no poder<br />

traspasar el cabo de Bojador, se dedican a tomar esclavos de entre los moros y los canarios lo<br />

mismo que en las costas de Granada.<br />

En 1433, el infante manda armar una barca al mando de un escudero suyo llamado<br />

Gilianes quien va hasta las islas Canarias para asaltarlas y tomar algunos cautivos, lo cual no le<br />

gusta al infante (Barros 22 y Las Casas 125). Al parecer, debido a este descontento el tal Gilianes<br />

decide embarcarse en una nueva expedición en 1434 (Barros 22, Zurara 56-59 y Las Casas 125).<br />

El infante le promete grandes recompensas si logra ir más allá del cabo de Bojador. Ayudado por<br />

el buen tiempo pero con muchos trabajos, Gilianes logra pasar el cabo y descubre que, a<br />

diferencia de lo que suelen decir los marinos portugueses hasta ese momento, hay tierras, todas<br />

ellas muy fértiles y despobladas, después de dicho punto. Regresa a Portugal con algunas de las<br />

hierbas de dicha región lo cual produce gran gozo en tanto en el infante como en el rey de<br />

Portugal quien entrega las rentas de las islas de Madera y Puerto Santo a Gilianes y da al infante<br />

jurisdicción civil y criminal sobre ellas.<br />

283

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!