14.05.2013 Views

relatos premiados - Ayuntamiento de Albalate de Zorita

relatos premiados - Ayuntamiento de Albalate de Zorita

relatos premiados - Ayuntamiento de Albalate de Zorita

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Veo sus ojos, lacrimosos, in<strong>de</strong>cisos, atravesándome con su mirada. Por un<br />

instante tuve la sensación que quería confiarme algo. Compartir algún secreto<br />

conmigo. Pero no fue así. De improviso <strong>de</strong>jó caer el vaso vacío sobre la barra.<br />

Últimamente se había aficionado <strong>de</strong>masiado a la bebida. Tal vez pretendía ahogar<br />

sus problemas en el alcohol. Fue rápidamente al baño y a su salida <strong>de</strong>dicó una<br />

última mirada a su alre<strong>de</strong>dor. Luego se marchó. Sin pronunciar palabra. La última<br />

imagen que tengo <strong>de</strong> él grabada en mi retina es la <strong>de</strong> su espalda ligeramente<br />

encorvada, como si acabase <strong>de</strong> envejecer diez años <strong>de</strong> golpe.<br />

Al día siguiente Andrés no apareció por el bar. Es más, pasó toda una larga<br />

semana sin que diese señales <strong>de</strong> vida. Intenté llamarle en repetidas ocasiones pero<br />

siempre tenía el teléfono <strong>de</strong>scolgado por lo que no hubo manera <strong>de</strong> contactar con<br />

él. Pese a todo no me alarmé. Pensé que seguiría bajo los efectos <strong>de</strong> la <strong>de</strong>presión y<br />

que en ese estado <strong>de</strong> ánimo simplemente no le apetecía ver a nadie, que<br />

necesitaba un tiempo para poner sus i<strong>de</strong>as en or<strong>de</strong>n y reflexionar.<br />

Hace un rato acabo <strong>de</strong> enterarme <strong>de</strong> los motivos <strong>de</strong> ese mutismo. Su padre<br />

con la voz embargada por la emoción me ha facilitado toda la información <strong>de</strong> la<br />

que disponen. Sospechan que todo sucedió <strong>de</strong> manera rápida e inesperada incluso<br />

para el propio Andrés. Al parecer la muerte le ha sorprendido recostado en el sofá<br />

con la tele puesta, bebiendo un último trago. Se baraja la posibilidad <strong>de</strong> que se<br />

tratase <strong>de</strong> un paro cardíaco, tal vez acelerado por el abuso <strong>de</strong> alcohol y tabaco.<br />

Una ola <strong>de</strong> sentimientos confusos me inva<strong>de</strong>. Estoy aturdido. Por un lado, como<br />

es lógico, me siento apenado por el fallecimiento <strong>de</strong> mi socio. No es justo que<br />

alguien tan joven como él se muera así sin más. Tenía toda una vida por <strong>de</strong>lante,<br />

mucho por lo que luchar. O eso al menos era que lo hubiésemos <strong>de</strong>seado quienes le<br />

conocíamos y le apreciábamos. Por otro lado se me viene a la mente la cláusula <strong>de</strong>l<br />

seguro, y como aún no había vencido el plazo para renovar el contrato, <strong>de</strong> repente<br />

me doy cuenta que voy a recibir una gran cantidad <strong>de</strong> dinero como recompensa<br />

por la muerte <strong>de</strong> mi socio. O dicho con otras palabras: la muerte <strong>de</strong> Andrés me va a<br />

salvar el pellejo. No sé si reír o llorar. La cabeza parece que me va a estallar. Siento<br />

nauseas. Pienso que para atajar estos síntomas <strong>de</strong> <strong>de</strong>bilidad <strong>de</strong>bería tomarme un<br />

analgésico y me dirijo al baño don<strong>de</strong> guardamos un botiquín relativamente bien<br />

surtido.<br />

Para mi sorpresa me encuentro con los envoltorios vacíos. No queda ni un solo<br />

comprimido <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> los envoltorios. Tan solo un frasco solitario <strong>de</strong> agua oxigenada<br />

y unas cuantas tiritas dan fe <strong>de</strong> que allí alguna vez se han guardado medicamentos<br />

<strong>de</strong> primeros auxilios.<br />

Ahora lo veo todo claro. La última visita <strong>de</strong> Andrés al baño no fue precisamente<br />

para aliviar su vejiga, si no para aprovisionarse <strong>de</strong> calmantes y analgésicos, que más<br />

tar<strong>de</strong> <strong>de</strong>bió ingerir en la intimidad <strong>de</strong> su hogar. Al parecer mis palabras acerca <strong>de</strong> la<br />

cláusula <strong>de</strong>l seguro habían calado hondo en su mente. Toda mi vida estaré en<br />

<strong>de</strong>uda con Andrés por la manera altruista, completamente <strong>de</strong>sinteresada, que<br />

<strong>de</strong>mostró al entregar su vida <strong>de</strong> forma voluntaria a cambio <strong>de</strong> que nuestro negocio<br />

no se perdiera.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!