RE Inframundo - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio
RE Inframundo - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio
RE Inframundo - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
S.D. PERRY <strong>RE</strong>SIDENT EVIL 4 INFRAMUNDO<br />
era, ¿cómo saber si era el instinto o sólo estás acojonada? Ella no lo sabía. Lo<br />
que sabía era que no se sentía bien en su incursión nocturna. Tenía frío y estaba<br />
nerviosa, su estómago le dolía, y no podía sacarse <strong>de</strong> encima la sensación <strong>de</strong><br />
que algo malo iba a ocurrir.<br />
Por otro lado, <strong>de</strong>bería tener miedo… todos <strong>de</strong>berían estarlo. Lo que<br />
estaban haciendo era peligroso. Algo malo podría ocurrir realmente,<br />
reconocerlo no era paranoia, era ser realista.<br />
—Hola. ¿Qué es eso?<br />
Justo a la <strong>de</strong>recha <strong>de</strong> la máquina OGO había algo que parecía un<br />
calentador <strong>de</strong> agua, un aparato alto y redon<strong>de</strong>ado con una ventanilla <strong><strong>de</strong>l</strong>ante.<br />
Tras el pequeño cuadrado <strong>de</strong> cristal había una bobina <strong>de</strong> papel cuadriculado,<br />
cubierta con unas hileras negras, nada que hubiese reconocido, lo que había<br />
captado su atención era el polvo en el cristal. Era el mismo polvo que parecía<br />
haber por toda la habitación… pero había algo más. Había un borrón a través<br />
<strong>de</strong> la suciedad, una línea húmeda que podría haber sido causada por el <strong>de</strong>do <strong>de</strong><br />
alguien.<br />
¿Un borrón en el polvo?<br />
Si alguien hubiese pasado la mano sobre el polvoriento cristal, habría<br />
<strong>de</strong>jado algo más. Rebecca lo tocó frunciendo el ceño… y sintió la irregular<br />
superficie <strong><strong>de</strong>l</strong> polvo, las diminutas crestas y espirales como papel <strong>de</strong> lija bajo<br />
sus <strong>de</strong>dos. Lo habían espolvoreado o pulverizado encima… así pues, falso.<br />
—Creo que tengo algo —susurró, y tocó el cristal don<strong>de</strong> se encontraba el<br />
borrón. <strong>La</strong> ventana se abrió, balanceándose y mostró un brillante cuadro<br />
metálico tras ella, un equipamiento <strong>de</strong> diez teclas en un panel limpio <strong>de</strong> polvo.<br />
El papel cuadriculado también era falso, tan solo parte <strong><strong>de</strong>l</strong> cristal.<br />
—Bingo —musitó John tras ella, y Rebecca dio un paso atrás sintiendo un<br />
arrebato <strong>de</strong> emoción mientras los <strong>de</strong>más se les unían, sintiendo la tensión que<br />
provenía <strong>de</strong> ellos. Sus respiraciones combinaciones formaron una nubecilla en<br />
la helada habitación, recordándola lo aterida que estaba.<br />
Demasiado frío… <strong>de</strong>beríamos volver a la furgoneta, volver al hotel para darnos un<br />
baño caliente. Ella podía captar la <strong>de</strong>sesperación en su voz interior. No era el frío,<br />
era el lugar.<br />
—Brillante —dijo David con suavidad y dio un paso al frente, sosteniendo<br />
su linterna en alto. Había memorizado los códigos <strong>de</strong> Trent, once en total, cada<br />
uno <strong>de</strong> ocho dígitos.<br />
—Va ser el último, ya veréis —le susurró John. Rebecca habría lanzado<br />
una carcajada si no hubiera sido porque sentía tanto miedo.<br />
John se quedó callado cuando le vio empezar a teclear el primero <strong>de</strong> los<br />
números. Rebecca pensó que si ninguno <strong>de</strong> ellos funcionaba, tampoco se<br />
sentiría <strong>de</strong>masiado <strong>de</strong>cepcionada.<br />
Jackson había llamado y había informado a Reston con su voz tranquila y<br />
educada que dos equipos <strong>de</strong> cuatro hombres cada uno se hallaban en camino<br />
tras partir en helicóptero <strong>de</strong> Salt <strong>La</strong>ke City.<br />
45