RE Inframundo - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio
RE Inframundo - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio
RE Inframundo - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
S.D. PERRY <strong>RE</strong>SIDENT EVIL 4 INFRAMUNDO<br />
—Así que… cazadores —dijo, y León se dio cuenta <strong>de</strong> repente que aquello<br />
era casi tan enfermizo como los edificios sin vida que se alineaban <strong><strong>de</strong>l</strong>ante <strong>de</strong><br />
ellos.<br />
—Todos los sobrenombres son <strong>de</strong>scriptivos —dijo mientras sacaba el<br />
cargador <strong>de</strong> su semiautomática para contar las balas que le quedaban. Cinco, y<br />
sólo tenía otro cargador, aunque a John le quedaban un par… No, sólo le<br />
quedaba uno, Cole tenía el otro. Y a menos que se equivocase, León sabía que a<br />
John sólo le quedaba otro cargador para el M-16 treinta proyectiles, más lo que<br />
le quedara en el rifle. Ya no quedan granadas, apenas tenemos munición…<br />
—Entonces, ¿qué? —preguntó Cole.<br />
Fue John quien le contestó, entrecerrando los ojos mientras hablaba, y su<br />
expresión se hizo aún más vigilante mientras observaba las <strong>de</strong>nsas sombras <strong>de</strong><br />
cada esquina, <strong>de</strong> cada ventana.<br />
—Piensa un poco —le dijo—. Pterodáctilos, escorpiones, animales que<br />
escupen… cazadores.<br />
—Yo… ah —Cole parpa<strong>de</strong>ó y miró a su alre<strong>de</strong>dor con un temor<br />
renovado—. Esto no pinta bien.<br />
—¿Dices que la última puerta está cerrada con cerrojo? —le preguntó<br />
León.<br />
Cole asintió, y John meneó la cabeza al verle.<br />
—Y yo, como un idiota, voy y utilizo la última granada —dijo en voz<br />
baja—. No podremos echar la puerta abajo.<br />
—Si no lo hubieras hecho, estaríamos muertos —le contestó León—. Y<br />
probablemente no hubiera servido <strong>de</strong> nada si tiene el mismo tipo <strong>de</strong> montaje<br />
que la <strong>de</strong> la primera entrada.<br />
John <strong>de</strong>jó escapar un gran suspiro, pero asintió.<br />
—Supongo que nos podremos encargar <strong>de</strong> ese problema cuando se<br />
presente.<br />
Los tres se quedaron callados unos instantes, en un silencio<br />
tremendamente incómodo que Cole rompió por fin.<br />
—Entonces… mantenemos los ojos y los oídos bien abiertos, y<br />
permanecemos juntos, ¿no? —dijo dubitativamente, más como una pregunta<br />
que como una afirmación.<br />
John alzó las cejas y sonrió.<br />
—No está mal, ¿eh? ¿Qué vas a hacer en la vida si logramos salir <strong>de</strong> aquí?<br />
¿Quieres unirte a la causa, darle un palo a Umbrella?<br />
Cole sonrió con nerviosismo.<br />
—Pregúntamelo otra vez si logramos salir <strong>de</strong> aquí.<br />
Estaban todo lo preparados que podían estar, así que se dirigieron al sur<br />
caminando lentamente por el centro <strong>de</strong> la calle, con los oscuros edificios<br />
observándolos con sus ojos <strong>de</strong> cristal sin expresión. Aunque intentaron avanzar<br />
en silencio, el eco <strong><strong>de</strong>l</strong> pueblo vacío parecía <strong>de</strong>volver los leves ruidos <strong>de</strong> sus<br />
pisadas en el asfalto, incluso el sonido <strong>de</strong> sus respiraciones.<br />
Ninguno <strong>de</strong> los edificios mostraba carteles o <strong>de</strong>coración alguna, y por lo<br />
que León pudo percibir, tampoco había luces en su interior. <strong>La</strong> sensación<br />
opresiva y como sin vida le trajo <strong>de</strong>sagradables recuerdos <strong>de</strong> la noche que había<br />
117