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Adiós a la
luz del sol…
Toñi Ruiz
En 1985, un tal Atsumu Ohmura,
se dedicaba a medir los niveles de luz solar
registrados en toda Europa cuando realizó
un descubrimiento que le dejó perplejo:
estaba oscureciendo. En comparación con
mediciones semejantes registradas por
otros investigadores en la década de los
60, los resultados obtenidos por Ohmura
daban a entender que los niveles de radiación
solar que alcanzaban la superficie del
planeta se habían reducido en más de un
10% en el curso de tres décadas. Al parecer,
la luz del sol llevaba camino de extinguirse.
El descubrimiento iba en dirección
contraria de todo el pensamiento científico.
A mediados de los años 80, existían
pruebas incontestables de que nuestro planeta
estaba sufriendo un calentamiento,
por lo que la idea de que la radiación solar
se estuviera reduciendo simplemente no
parecía de recibo. Los datos demuestran
que, a lo largo de los últimos 50 años, se
ha reducido a un ritmo de casi un 3% por
década la cantidad de luz solar que por
término medio ha llegado a la Tierra.
Los medios de comunicación no
han tratado el tema y ni siquiera aparece
mencionado en los informes del IPCC
(Grupo Intergubernamental de Expertos en
Cambio Climático). Esto no quiere decir
que el efecto haya pasado desapercibido.
¿Cuál es la causa del oscurecimiento
global? Lo primero que hay que decir es
que no tiene nada que ver con los cambios
en la cantidad de radiación proveniente del
Sol. Aunque esa cantidad varía en función
de los aumentos y descensos de actividad
del Sol y del movimiento de la Tierra, más
cerca o más lejos del Sol, el efecto de oscurecimiento
global es mucho mayor. Ha
debido de ocurrir algo en la atmósfera que
ha impedido la penetración de la luz proveniente
del Sol. Los pocos expertos que
han estudiado el efecto creen que es atribuible
a la contaminación atmosférica.
Minúsculas partículas de residuos o de
componentes químicos, como los sulfatos,
reflejan la luz del Sol y originan además la
formación de nubes más oscuras, grandes
y duraderas.
Si el cielo está cubierto, se pone
más negro, pero tampoco es que las cosas
cambien mucho cuando hace sol.
Ensalada de frases
¿Os atrevéis a reflexionar sobre
ellas?
"Consulta el ojo de tu enemigo,
porque es el primero que
ve tus defectos". Antístenes de
Atenas (filósofo griego, discípulo
de Gorgias y Sócrates, fundador
de la escuela cínica, 455-
360 a.C.).
"La verdadera medicina de la
mente es la filosofía". Cicerón
(Marco Tulio. Escritor, orador y
político latino).
"Cada cosa tiene su belleza,
pero no todos pueden verla".
Confucio (Kung-Fu-Tsé, filósofo,
legislador y estadista chino).
"Cuando estoy entre locos, me
hago el loco". Diógenes de
Sinope, alias El cínico (filósofo
griego, famoso representante de
la escuela cínica) .
"Pienso, luego existo". René
Descartes (filósofo y matemático
francés, 1596- 1650).
"La imaginación es más importante
que el conocimiento".
Albert Einstein (físico)
"¿Quieres ser rico? Pues no te
afanes en aumentar tus bienes,
sino en disminuir tu codicia".
Epicuro de Samos
(filósofo griego).
"La violencia es miedo de las
ideas de los demás y poca fe
en las propias". Antonio Fraguas
Forges (dibujante humorístico
español).
"Como no me he preocupado
de nacer, no me preocupo de
morir". Federico García Lorca
(poeta y dramaturgo español).
RASES CÉLEBRES
Maria Losada Pulido
(1°Bach. B)
"Hemos aprendido a volar
como los pájaros y a nadar
como los peces, pero no hemos
aprendido el sencillo arte de
vivir juntos como hermanos".
Martin Luther King (dirigente
negro estadounidense).
"Debes respetar a todas las
criaturas, desde la pequeña
hormiga hasta el veloz antílope".
Mufasa (Rey León).
"Si el enemigo se está equivocando,
no lo distraigamos"
N a p o l e ó n I B o n a p a r te
(Emperador francés y estratega
-el mejor quizás-).
"Servicio militar, secuestro
legal". Pintada en la calle de S.
Millán (Málaga).
"Algún día la humanidad será
juzgada por haber encerrado
a los primates en zoológicos" .
Jordi Sabater Pi (etólogo y primatólogo
español).
"Es mucho más difícil juzgarse
a sí mismo que a los demás.
Si logras juzgarte bien a ti
mismo eres un verdadero sabio".
El rey de El Principito
(capítulo X), de Antoine de
Saint-Exupéry (aviador y escritor
francés, Lyon 1900desaparecido
en una misión aérea
en 1944) .
"No llores por haber perdido
el Sol, pues las lágrimas te
impedirán ver las estrellas".
Rabindranath Tagore (filósofo y
escritor indio).
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